puntos suspensivos #Wattys20...

By valeriafisa

18.4K 1.2K 229

#Wattys2016 "Emilia nunca podrá poner punto final a su historia. esta siempre se vera marcada por unos punt... More

Capítulo 1
Capítulo 2
capitulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
---
---
nueva portada
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capìtulo 13
Capítulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capitulo 24
Capitulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capitulo 37
Capitulo 38
Capitulo 39
Epílogo
¡NOTICIAS!
Historias de P.S
H.P.S

Capítulo 9

558 37 4
By valeriafisa

Capítulo 9

Nunca me hubiera imaginado ver a esas dos personas juntas hablando sobre mi persona. Era total y completamente desconcertante, jamás me hubiera dado cuenta de tal "relación", si es que así podría llamársele. Sebastian y Max estaban teniendo una conversación basada en susurros. Aun no estoy muy segura del tema en general, pero acabo de escuchar mi nombre claramente.

-pero Emilia...- decía sebasian.

- Emilia no tiene por qué saberlo.- replicaba Max.

- estas siendo un total imbécil, no te das cuenta.

- créeme querido amigo, se lo que hago. Quiero esto y no me rendiré hasta conseguirlo.- recalcó Max.

-yo no soy tu amigo, solo estoy aquí porque tú te encuentras empeñado con ella.

¿Acababa de decir "ella"?...

No puedo creer lo que estoy escuchando, ellos tienen asuntos relacionados conmigo. No sé qué es lo que traman pero lo descubriré.

-más te vale que no te atrevas a abrir tu gran boca, o te juro que te vas a arrepentir- amenazó Max- no estoy de humor para jueguitos, al final yo seré quien tenga a Emilia, y ella me rogara porque este junto a ella. No podrá resistirse por mucho.

- Te equivocas, Emilia no es como Emily.

Max bufó

-Emily no tiene nada que ver en esto

-Espero no hayas tenido nada que ver

-¡yo no tuve nada que ver! -gritó- Emily es pasado. Quiero a Emilia

-No lo permitiré

Estaba sorprendida, Max estaba totalmente desquiciado, no entiendo que es lo que quiere de mí, ni por que se empeña tanto en conseguirlo, pero sebastian tenía razón en tratar de alejarme de él. Lo que no entiendo es por qué no me lo ha contado. Hasta ha optado por alejarse de mí.

Estaban a punto de salir, podía sentir sus pasos acercarse a la puerta, lo zapatos de ambos sonaban contra la madera del suelo, aproximándose al pomo de la puerta. Salí corriendo lo más rápido que pude. Durante la huida, mi libro aterrizo en el suelo, pero cuando quise parar a recogerlo, ellos ya se acercaban demasiado. Con el dolor de mi alma tuve que abandonarlo, prometiéndome que luego regresaría por él. Dirigí mi mirada hacia atrás aun corriendo para visualizar cuanto me había alejado y cuanto me faltaba para llegar y evitar que me pillaran.

Recorrí la puerta que daba al patio principal, donde todos los demás estudiantes se encontraban tomando su descanso sobre el césped. Todos se veían muy tranquilos, algunos comiendo, otros realizando actividades extracurriculares, y otros pocos terminando tareas de última hora para las clases siguientes. Nadie podía siquiera imaginarse que mi corazón no paraba de latir con absoluto terror, es decir, mi mejor amigo estaba en cierto modo relacionado con un chico que decía que quería hacerme suya, ósea que demonios.

intenté arreglar mi cabello en un acto nervioso, mis pies se enredaban uno con el otro y me era imposible coordinarlos 

Estoy totalmente desesperada, ni siquiera puedo pensar con claridad... que hago, que hago. <<Calma Emilia tal vez estas siendo paranoica. >>

En un segundo, pude pensar en una idea. Al parecer mi cerebro había recobrado la cordura y estaba brindándome una salida, aunque quizá no sea una buena salida. No tenía idea de que se supone que haría pero era la única forma de saciar mi curiosidad y desenvolver todo este caos. Me senté tratando de relajarme en las raíces de un árbol, y sin pensarlo comencé a cortar tréboles que se hallaban en la capa verde bajo mi cuerpo.

Cuando Sebastian se asomó por el umbral de la puerta que daba hacia donde yo me encontraba, trate ser lo más convincente posible y me hice la desentendida. El, por su parte cuando me halló, rápidamente se acercó sin darme tiempo de reaccionar. Pegue un pequeño salto, mientras mis manos temblaban. ¿Desde cuándo me había vuelto así? Él se dio cuenta de mi reacción y se paró en seco.

Para no levantar sospechas sobre mi anterior descubrimiento, le sonreí de la mejor manera que pude. Llevaba el cabello un poco despeinado y sus ojos desprendían el brillo acostumbrado Descubrí que lo que podía hacer para sacarle información era que pensara que no estaba enojada, así que todo seguiría como si nada.

-hola lía-  sonrió como si esta mañana no me hubiera ignorado en lo absoluto, un con un convencimiento que me hacía dudar hasta de mi misma.

-hola- hice un gesto, entre sonrisa y ceño fruncido. Como si el sol de repente hubiera salido y estuviera obstaculizando mi visión hasta él.

- ¿qué haces?- pregunto curioso, al verme con las dos manos posadas sobre el césped cortando simples hojas en un acto nervioso.

Vacile un poco antes de darle mi respuesta, y como por regalo de los cielos llego Abigail a salvarme el trasero.

-¡hola!- grito contenta como era costumbre en ella. Llevaba puesto un jean negro y una blusa a cuadros que le llegaba más abajo de las caderas, su cabello negro  brillaba a la luz del sol, y su mirada destellaba alegría como siempre, llenando el espacio- no sabes lo que sucedió hoy lía, el profesor de álgebra me hizo una pregunta y por primera vez en la vida pude responderla. Me puso una nota de mas, ¿no es maravilloso?- de repente se detuvo y miro a sebastian quien se encontraba a mi lado y añadió- oh. Lo siento, no te había visto. Soy Abigail, la prima de Emilia.- extendió su mano por el medio del circulo que habíamos formado y Sebastian la recibió con gusto.

- tu eres la famosa Abigail. Debo decir que Emilia me ha hablado mucho de ti.

-  ¿enserio?- pregunto sorprendida y volteó a mirarme mientras yo me encogía de hombros con la misma expresión.

Abigaíl poso las manos sobre las caderas esperando que habláramos por fin

-Espero hallan sido cosas buenas

- muy buenas-Sonrió Sebastian- es bueno conocerte al fin

-oh, bueno pues, gracias- respondió ella y se sentó a nuestro lado

Mientras ellos empezaban a entablar una conversación, y se conocían mejor, sin darme cuenta me quede mirando un punto fijo al tiempo que miles de pensamientos y preguntas recorrían mi mente. las sombras de las personas pasaban de un lado para otro y yo continuaba en la misma posición. 

-lía, ¿te encuentras bien?- preguntó Abby, a lo que yo asentí saliendo de mi ensoñación. Sus cejas estaban fruncidas y sus ojos destilaban preocupación

- lo siento, solo estoy un poco distraída.

- ¡ja!- bramó sebastian- quien sabe en que estabas pensando, pervertida. Te vi mirando al chico que estaba allá.- hizo una seña con la cabeza indicando el lugar. Sabía que lo decía jugando, pero mi cabeza no estaba en condiciones.

-en realidad...- respondí, pero no terminé. Suspiré, pase un mechón de mi cabello suelto por detrás de mí oreja, me levanté y camine hacia la cafetería. Necesitaba comer algo frió para espabilarme de una vez.

Compre un helado que era de vainilla con chispas de chocolate por todas partes, esa, era la mejor forma de despejar mi mente, solo era cuestión de concentrarse en el sabor. Luego de que terminé voté el papel en la caneca de basura y sacudí mis manos para quitar los restos de boronas. 

Eché un vistazo alrededor y pude ver la cara de Max sentado en na de las mesas de la cafetería. Estaba distraído con su celular así que por suerte no me vió

Camine de nuevo hacia donde se encontraban Abby y sebastian, y me senté. Sebastian contaba algún chiste y Abigail soltaba carcajadas que intentaba ahogar tapándose la boca con la mano Ellos parecían estarse llevando muy bien y me alegraba, después de todo eran mi prima y mi mejor amigo.

-veo que disfrutaste tu helado- dijo Abby, mientras señalaba su barbilla y miraba la mía. Entonces caí en cuenta.

- ¡oh!- me reí- que vergüenza yo por ahí, toda sucia- me limpié rápidamente con la manga de mi suéter color salmón. Y así era Abigail, podía apartar todo mal pensamiento en un segundo haciéndote reír.

-Emilia- dijo de nuevo- hoy vi a Sara por fin, se sentó al frente de la clase, pero no hablo en absoluto. Vi que charlaba con una chica, pero solo fueron unos instantes. ¿Crees que la esté pasando mal, porque no estamos con ella?

-¿Quién es Sara?- intervino sebastian pasando una mano despreocupadamente por su cabello y mirándome con atención

-es una amiga de Abby, que se está quedando en casa igual que ella.- respondí. Aunque prefiero no hablar ahora del incidente con Max, de esta no te salvas sebastian Johnson, ni creas.

Abby bufó

- no es mi amiga, cuantas veces debo repetirlo- replicó- mi padre me obliga, y yo no puedo hacer nada al respecto.

-¿te cae mal?- añadió sebastian en tono burlesco.

- ni que lo digas, esa chica es de lo peor. Trato de quitarme a mi novio y luego quería hacerse pasar por mi amiga. Tras del hecho se hace la buena persona con todos. Tiene a mis padres embobados.

- está bien, ¿algún rasgo físico para yo poder identificarla?- habló sebastian de nuevo.

-bueno- empezó Abby- es rubia, relativamente alta, ojos marrones y...- mientras Abby pensaba más características, pude darme cuenta de que esa descripción era la misma que yo le había proporcionado a...- oh, no hace falta decir más, ahí viene.- y sin decir palabra todos volteamos a verla.

Su mirada de altivez recorría el lugar inspeccionando a cada uno de los estudiantes que allí se encontraban, llevaba varios libros entre los brazos, y se le veía muy relajada, como si fuera la persona más antigua y conociera el suelo que pisaba a la perfección. Su despampanante cabello rubio caía en cascada por sus hombros y terminaba un poco más debajo de sus pechos, los cuales le daban un toque de sensualidad absoluta. Toda su apariencia física hacia juego con su atuendo, el cual, aun sin ser del todo obsceno daba una idea de su forma de ser. Como es posible que no me fijara antes.

Sebastián me mira entre un toque de miedo y confusión mientras que yo no puedo quitarle los ojos de encima a aquella chica. Todos los recuerdos que me llevaban triste los primeros días de la mudanza habían vuelto a mí, y era inconcebible que ella estuviera pisando mi territorio. De ninguna manera lo permitiría, ella venia de nuevo a arruinarlo todo. Abby, como la mayoría de las veces tenía razón, ella era la desgracia en carne viva, la persona mejor reservada para engatusar hombres. Era como una diosa cohibida de sus propios instintos, dispuesta a llevarse a todo ser con su estruendoso cantico, hasta lo más profundo de alta mar y allí  quitarle la vida, zafándose de cualquier remordimiento.

<<estas exagerando Em>> repliqué para mi misma pero ya era tarde

***

Sencillamente no puedo creerlo Emilia, tú no eres de esa clase de chicas, que te sucedió.- replicaba la directora. Llevaba ahí enfrente de su escritorio más o menos una hora, y todavía no dejaba de replicarme que yo era una buena chica y no debí comportarme de ese modo.

Luego de que viéramos entrar a Sara al patio- jardín, donde nos encontrábamos, y que Abigail diera esa descripción tan capciosa de ella supe de inmediato que era ella con quien me había engañado jake mientras estábamos en los ángeles. Pero tampoco es que me hubiera agarrado del cabello con ella, ni mucho menos, solo quise vengarme haciéndole una pequeña zancadilla. Un pequeño puntapié que la llevo a caerse de bruces contra un árbol y hacer sangrar su perfecta nariz. Luego de eso, se hizo inmediatamente la ofendida, ya que se dio cuenta que fue a propósito, y se fue directo a informarle a un profesor cercano como una completa niña de kínder, haciendo su cara de inocente. Esto, como consecuencia me llevo directamente  a encararme con la directora, para que me diera todos los regaños posibles.

-no tomare represalias contra ti Emilia, ya que es tu primera infracción- dijo mirándome con firmeza- pero debo recordarte,  que en esta institución deben respetarse a todos y cada uno de nuestros compañeros. Tal vez cuando lo hiciste, pensaste que sería una buena broma, pero mira en lo que termino, Sara tuvo que irse a casa.

- si lo sé, no volverá a pasar. Fue un error- me disculpe, aunque ella se lo merecía, nunca pude vengarme, era mi única oportunidad. La directora rodeó su escritorio y miró hacia la ventana que tenía detrás mientras ponía sus manos entrelazadas sobre su estómago.

-tengo entendido- continuó y se giró hacia mí- que Sara se está quedando en tu casa, por ello asumo que serán problemas familiares o algo por el estilo.

-sí, si.- respondí lo más convincente que pude- es solo eso, además fue jugando, usted sabe. Nosotros de adolescentes solemos ser algo bruscos.- mis manos se movían inconscientemente, imagino que me veía como una completa tonta.

-está bien, pero que no se repita.- alzo un ceja y se dirigió de nuevo a  su escritorio.

- no se preocupe- solté una sonrisita de lado y me levante cuidadosamente de mi silla, como si todo movimiento que hiciera pudiera ser usado en mi contra para algo más.

Tome el pomo de la puerta entre mis manos y abrí la puerta no sin antes echar una última mirada hacia el escritorio de la directora y salí de allí soltando un gran suspiro. Dos minutos más tarde llegaron corriendo Abigail y sebastian, sé que estaban curiosos por saber que me habían hecho como penitencia por mi comportamiento, pero Abby no podía ocultar su gran sonrisa por lo que le había hecho a Sara.

-¡lía! ¿Qué te dijeron?- grito sebastian.

-cálmate- susurré yo por mi parte. Comenzamos a caminar hacia nuestro salón mientras recogía mi largo cabello en una coleta.- no me hicieron nada ya que es mi primera infracción y la verdad no puedo estar más agradecida.

-dime una cosa lía- pregunto Abigail- ¿lo hiciste apropósito?

Estaba a punto de responder, cuando la campana para entrar me interrumpió.

-te contare todo cuando estemos en casa.

-pero ella va a estar en la casa, y estoy segura que vas a tener que explicarle a tu madre porque lo hiciste.

Ese era un buen punto, no lo había pensado en lo absoluto. Me sentí fastidiada por un momento, no tenia ganas de darle explicaciones a mi madre sobre Sara, era obvio que la defendería

-entonces te lo diré de camino, ¿está bien?- hice un intento fallido de guiñar el ojo y entre al aula con sebastian pisándome los talones. Me senté en mi lugar correspondiente intentando ignorarlo, no quería hablar del tema y él lo sabía, aun así me preguntó.

-¿y bien?- movió la cabeza para mirarme a los ojos intentando que yo le respondiera de alguna manera. Solté un suspiro, últimamente esa acción se había vuelto una de mis mayores costumbres. Subí mis pies en la madera de la silla de al frente y saque mi celular. Sebastian inspeccionaba cada una de mis acciones, como absorbiendo mis movimientos con una sola mirada, puse los audífonos sobre mis oídos y le dije:

-no quiero hablar ¿ok?- cerré mis ojos y deje que la música me llevara lejos de ese lugar. Eran demasiadas emociones por un día y estaba exhausta, lo único que quería era que el suplicio terminara e ir a casa, aunque sé que esa tampoco es una buena elección ya que mi mamá me va a bombardear de preguntas apenas ponga un pie dentro de mi hogar a causa de lo ocurrido con Sara. Deduje como Sebastián se acomodaba de vuelta en su lugar, pero aun podía sentir su mirada sobre mí, esa mirada acosadora que siempre obtenía lo que quería.

-no va a funcionar esta vez- le dije al tiempo que chasqueaba mis dedos de la mano derecha aun con los ojos cerrados.

-algún día hablaras Valentine, algún día hablaras.- repitió.

-repetir las frases, no va a hacer que cambie de opinión.-abrí los ojos de sopetón y lo miré enojada, estaba usando su típico método de convencimiento, pero no me rendiría.

-lo se Emilia, lo sé- movió sus cejas de arriba hacia abajo repetidas veces y me puse roja de la furia.

Alce mis manos en un acto relajante y cruce una pierna. <<No desesperes>> me repetí en mi mente.

-¿eres muy buena en esto sabes?-continuó- querer ocultar cosas, porque sé que no es lo único que ocultas.- en ese instante algo en mi mente brilló, el sospechaba algo y no podía permitirlo. El beneficio de la duda era algo que no me correspondía de momento.

Decidí contarle lo de Sara con tal de que me dejara en paz y  poder seguir investigando sobre su muy extraña relación con Max.

-está bien, tu ganas.- empecé- no te contaré lo OBVIO, ya que tú lo sabes, estaba enojada, no siento la más mínima pizca de amor por jake, pero esa chica me las debía.- moví mi cabeza en un gesto de autosuficiencia y de nuevo chasquee mis dedos delante de su rostro. Estaba siendo algo infantil, pero qué más da, poco me importaba lo que esa rubia pensara.

-me alegra que lo superes, pero estas siendo algo infantil con tu método de venganza- y aquí viene el sebastian razonable, con su típica charla conmovedora y a veces fastidiosa, como si fuera un pensador de muchos años atrás, tal vez allí debió quedarse. Ahora solo voy a relajarme y a tratar de no pensar o más bien, pensar en cosas lindas y no en como retocarle el cuello a mi mejor amigo para que se callara de una vez por todas. Esto definitivamente llevaría tiempo.

***

hola de nuevo, espero les guste el capitulo, no olviden dar like si les gusta y comentar que les pareció

Val

Continue Reading

You'll Also Like

226M 6.9M 92
When billionaire bad boy Eros meets shy, nerdy Jade, he doesn't recognize her from his past. Will they be able to look past their secrets and fall in...
972K 86.5K 39
𝙏𝙪𝙣𝙚 𝙠𝙮𝙖 𝙠𝙖𝙧 𝙙𝙖𝙡𝙖 , 𝙈𝙖𝙧 𝙜𝙖𝙮𝙞 𝙢𝙖𝙞 𝙢𝙞𝙩 𝙜𝙖𝙮𝙞 𝙢𝙖𝙞 𝙃𝙤 𝙜𝙖𝙮𝙞 𝙢𝙖𝙞...... ♡ 𝙏𝙀𝙍𝙄 𝘿𝙀𝙀𝙒𝘼𝙉𝙄 ♡ Shashwat Rajva...
43.8M 1.3M 37
"You are mine," He murmured across my skin. He inhaled my scent deeply and kissed the mark he gave me. I shuddered as he lightly nipped it. "Danny, y...
95K 2.9K 30
[ONGOING 🔞] #8 insanity :- Wed, May 15, 2024. #2 yanderefanfic :- Sat, May 18, 2024. After y/n became an orphan, she had to do everything by herself...