Poesía, esa rama de la literatura que se encarga de expresar lo que el ser humano siente o ve, al menos esa es la definición que tengo o tenía, pero, ¿qué es realmente?
La vida es como la poesía, tiene ese toque melodramático y agridulce de ver las cosas al hablar sobre lo que sucede para usarlo como inspiración y después convertir lo que nos rodea en un bello poema no necesariamente con rimas o escrito en verso, porque viéndolo bien, la vida es poesía.
Cuando leo un poema está cargado de emociones y ¿Acaso existe un ser humano que no tenga emociones? La indiferencia inclusive es una o el producto de una.
La vida no es igual para todos, cada quien tiene una diferente y la ve con diferentes ojos, así que la vida es poesía, el existir es poesía, la filosofía es poesía que en vez de tener sentimientos genuinos adheridos a sus letras tiene razonamientos plagados de preguntas que cada quién con sus propios ojos trata de responder.
Veo cada hilo que teje la vida de cada persona y cómo estás personas se suman a otras y a otras hasta que cada cosa que existe en el planeta del ser humano, que podemos ver e imaginar, está plagado de sentir, ese sentir que viene desde el primer ser vivo que existió hasta el último que existirá.
Por ende, puedo decir con toda seguridad, que la vida, para mí, es poesía.