"Romeo y Julieta..."
Changbin camina lentamente hacia la escuela, volteando hacia atrás de vez en cuando, intentando ver alguna cabellera rubia, pero está solo. Sin duda no quiere llegar a la escuela, lástima que no sea bueno inventando excusas para que su madre lo deje faltar.
Después de lo que paso ayer, no quiere tener que encontrarse con Felix, aunque sus ojos deseen verlo. Voltea nuevamente hacia atrás, nadie camina por ahí, regresa su vista al frente justo a tiempo para ver al poste de luz con el que casi se choca el día anterior. Se detiene junto a él.
Se imagina abrazado al poste y no puede evitar sonreír, en verdad debió dar risa, no culpa a Lix de reírse de él, también lo habría hecho si la situación hubiera sido diferente.
—Esto es tu culpa — le reclama al poste —. Si no te hubieras atravesado en mi camino no hubiera descubierto a Felix, él no me abría empujado, nunca se hubiera armado un espectáculo en la escuela y hoy no tendría que ir sin ganas a ese lugar.
Suspira terminando su discurso, deseando escuchar una voz burlándose de él, pero no hay nadie.
El día anterior no supo como reaccionar, solo fue un espectador más. Vio como Felix se fue enojado, y luego Momo, aunque a ella no la volvieron a ver en todo el día. Ni siquiera se puede imaginar lo que los alumnos deben estar diciendo sobre él.
—Bueno, creo que debo irme — se despide del poste —. Nos vemos cosa.
Suspira y comienza a caminar nuevamente, con la misma lentitud, sin importarle que pueda llegar tarde, dejando de voltea hacia atrás, ignorando la existencia de la rubia que a unos metros se está riendo de él.
—Changbin, saca la cabeza de la mochila — dice Hyunjin sacudiendo al chico.
—Mi cabeza está sobre la mochila — contesta sin ganas.
Hyunjin rueda los ojos. Desde que Changbin llegó no se ha movido de su lugar, ni siquiera le ha hablado. En otro momento le hubiera gustado su actitud, así podría aprovechar para por fin leer el libro que carga desde el primer día. Pero la concentración no llega a él, y piensa que toda la culpa la tiene el chico a su lado.
—Oye avestruz, debes salir de tu hoyo — insiste colocándose en pie.
Changbin lo observa sin levantar la cabeza. Hyunjin intenta pararlo, sin conseguirlo.
—Vamos Bin — ruega.
Changbin para sin ganas y Jin lo empuja hacia afuera. Caminan por los pasillos, lentamente, Chris camina viendo el suelo, sin ganas de levantar la mirada.
—¡Bueno ya!, dime que rayos te pasa — exige Hyunjin haciendo que su amigo lo vea.
—No lo sé, siento que lo que pasa es mi culpa — contesta el chico llegando al patio.
—¿Lo que pasa? Estás hablando de Felix y Momo. No es tu culpa Bin, Felix te empujo, a la loca de Momo no sé que le pasó y se fue a enfrentarla, agradece que Lix no la golpeó. Pero si buscas un culpable, yo diría que fue Momo... ¿o Felix?
Changbin sonríe ante el intento de su amigo para hacerlo sentir bien.
—No quiero que llegue la hora del club — suelta Bin.
Hyunjin se detiene y lo observa extrañado. Bin voltea al ver que su amigo no lo sigue, y cuando ve su expresión recae en lo que dijo.
—¿No que no ibas a entrar a un club? — pregunta Jin.
—No iba, pero...
—Déjame adivinar — pide Jin fingiendo pensar — Mmm... Club de teatro, y la razón por la que entraste tiene nombre y apellido, Lee Felix.
—No es como dices — justifica Bin volviendo a caminar.
—Si, claro. Pero al menos no lo negaste del todo — sonríe Hyunjin llegando a su lado.
—Si es el club de teatro, pero no entré por Lix, sí. La maestra me obligó.
—Los maestros no te obligan a entrar a los clubes.
—Esta sí...
—No amigo avestruz, yo sé que lo hiciste por cierto rubia y no me vas a convencer de lo contrario. Y hablando del rey de Roma, ahí está tu chico.
Changbin voltea hacia donde señala discretamente su amigo. En el mismo lugar del día anterior se encuentra sentado Felix, solo que esta vez hay algo distinto, dos chicos están con él. Uno está sentado a su lado derecho, con una libreta en sus piernas y sosteniendo un lápiz. El otro está a la izquierda sentado en el respaldo de la banca con sus pies descansando en el asiento.
—¿Y esos quienes son? ¿No se supone que nadie debe acercarse a Felix? — pregunta Bin sin apartar la vista de ellos.
—Deben estar haciendo algún trabajo, si tienes que hacer tarea con ella debes hablarle no crees. Pero eso solo aplica con personas de su salón — cometa Jin viendo a Bin —De su salón, o de su club — suelta sonriendo y comienza a caminar.
—Entonces...
—No, no puedes acercarte a ella Changbin — se adelanta a su amigo.
—No iba a decir eso — contesta Bin encogiéndose de hombros.
—Lo que tu digas amigo avestruz.
—Buenas tardes chicos, espero y hayan disfrutado un buen día de clases — saluda la maestra Dahyun entrando al salón.
—No maestra, nos dejaron mucha tarea — responde un chico en el fondo.
—Que mal, pero solo falta esta hora y podrán irse a casa — anuncia feliz la profesora.
Yo podría ya estar en casa, piensa Bin. La idea de salirse del club se cuela entre sus pensamientos, pero entonces sus ojos se giran instintivamente hacia un chico rubio del otro lado del aula. Sus ojos azules siguen atentos cada movimiento de la maestra.
—Seleccioné tres obras... — escucha que dice la maestra.
Menea levemente la cabeza sin saber de que están hablando. Mira discretamente a su alrededor, otros veinte alumnos miran atentos hacia el frente. Entre ellos descubre al chico que siempre anda con Momo, uno de los que le dieron la bienvenida en su primer día, también descubre a otra chica de su salón. Los demás son rostros apenas conocidos, excepto el de Felix.
—Ustedes decidan cual representar para el primer parcial — dice la maestra señalando el pizarrón.
Una lista de tres nombres se extienden en letras grandes y legibles. Romeo y Julieta de William Shakespeare, Fuenteovejuna (adaptación) de Lope de Vega y La Suegra de Octavi Franch.
—La próxima clase...
—Romeo y Julieta — interrumpe alguien.
No, ¿Qué?
—Deben acordarlo como grupo — contesta la maestra.
—¿Quienes apoyan Romeo y Julieta? — pregunta la misma voz femenina.
Changbin voltea para saber quien es la de la que hace semejante propuesta. Encuentra que la mayoría del aula está levantando la mano a favor de la chica pelinegra que va en su mismo salón.
—¿Alguna otra propuesta? — pregunta la maestra.
Todos guardan silencio, viéndose unos a otros.
—Bien, ya que nadie más quiere opinar no quedaremos con la propuesta de Kazuha. Romeo y Julieta será la obra que actuaremos. Por favor, Felix y Changbin repartan los libretos.
Bin suspira al saber que era solo eso, se coloca en pie y por alguna razón siente que está temblando, la idea de salirse del club suena muy tentadora para él. La maestra saca unos paquetes de hojas y se los da a ellos, quienes se encargan de repartirlos a los demás. Felix lo ignora mientras camina entre los alumnos.
—Bien, todos deben aprenderse para la próxima clase el guión, primer acto, escena tres. Haremos una pequeña audición, esta obra lleva varios personajes así que todos van a participar. Eso es todo chicos, nos vemos la próxima semana.
Todos comienzan a guardar sus cosas y a salir del salón. Changbin y Felix acomodan sus maletas sin prisa, cada uno espera que el otro se vaya primero. El aula se vacía rápidamente, dejándolos a ellos, la profesora Dahyun y Kazuha, la chica que propuso la obra.
—¿Maestra puedo hablar con usted? — pregunta la chica.
—Claro Kazuha, ¿que pasa?
—Me gustaría que el papel de Julieta se lo diera a Felix— contesta simplemente.
—¿A mí? — pregunta Lix acercándose a ellas.
—Sí, en cada obra te dan papeles protagónicos y nunca aceptas. Esta vez puede ser la excepción — menciona la chica sonriendo.
—Lo veremos en las audiciones chicas, no se preocupen por eso.
La maestra se despide y sale del salón, Kazuha hace lo mismo, dejando solo a Changbin y Felix. Bin se concentra en su celular, intentando ignorarla, pero la sensación de ser observado lo está matando.
—Nos vemos Bin — suelta después de unos segundos y sale del salón.
Changbin alza la mirada solo para comprobar que él no está. Sale del salón y observa hacia los lados, no hay señal de Felix por ninguna parte. Toma su mochila para irse a casa, sin darse cuenta de los ojos azules que lo observan ocultos por tercera vez en el día.
- 𝒎𝒐𝒄𝒉𝒊 🍡