Devil: Hola a todos... se que ha pasado mucho tiempo desde la ultima actualización, pero digamos que he estado ocupado y... no estoy en mi mejor momento.
Intentare actualizar lo mas pronto posible, pero no quiero mentirles.
Puede que suba otra historia nueva, pero estas son mas que nada para calentar un poco los músculos y recordar mas claramente cuales eran mis habilidades de escritura.
espero que disfruten la historia.
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La respiración agitada de una pequeña persona era lo que se podía escuchar con facilidad a través de las ramas y troncos de este denso bosque húmedo por una reciente lluvia que había cesado hace poco.
Este ser, un infante que no supera los 7 años de edad estaba corriendo con todas sus fuerzas, huyendo de lo que sea que lo estuviera persiguiendo. su ropa apenas una chaqueta sobre una camiseta sin mangas de color blanco y pantalones negros algo sucios con zapatos en el mismo estado.
Cada poco tiempo miraba hacia atrás solo para ver un borrón que se movía de un lado a otro en las copas de los árboles con una habilidad inhumana, saltando de rama en rama haciendo que unas pocas hojas caigan en caída libre al suelo.
Esto solo hizo que el niño corriera con más fuerza al punto de que sentía que sus pulmones estaban por explotar y su garganta comenzaba a doler por el aire fresco de la noche que entraba a su sistema respiratorio con cada vez más rapidez.
Tan fuerte su determinación por correr que no notó la rama frente suyo.
BAM
El niño cayó de bruces contra el suelo rodando hasta 3 veces antes de detenerse boca arriba con un leve dolor en la cabeza y la cara, mirando el cielo nublado que poco a poco se abría revelando uno lleno de estrellas.
El sonido de algo cayendo a su lado lo hizo gemir, girando su cabeza vio agachada a una figura más alta que él que se acercaba poco a poco hasta que pudo verla claramente gracias a la luz de la luna.
De piel roja y ropas oscuras, dos cuernos puntiagudos escondidos entre su corto pelo de color carbón, sus brillantes ojos amarillos brillaban como los de un felino y un corazon de color negro en su hombro derecho.
Un demonio en pocas palabras.
Con un paso tranquilo se acercó al niño antes de poner una mano sobre su pecho y con un leve golpecito habló.
-Gané.
El niño gimió molesto por haber perdido 2 veces seguidas en el juego de las atrapadas, tenía que admitir que la demonio era increíblemente ágil.
-Vamos, levántate. - Dijo Millie ayudando al niño a ponerse de pie.- No queremos que pesques un resfriado por acostarte en el frío suelo.
-Me pregunto qué hará para cenar. - Dijo el niño rubio de nombre Denji mientras tomaba de la mano a la chica de piel roja.
Ambos comenzaron a caminar en medio de la oscuridad siendo guiado por la fémina, pues esta veia muy bien en la oscuridad a diferencia del humano. Esta puso una mano en su mentón pensativo antes de hablar.
-Estoy segura de que Mox hará algo fantástico. - Aseguró ella.
Con el pasar de los minutos y con un paso constante, una luz se hacía cada vez más presente al punto que iluminaba con facilidad un área del bosque, a lo lejos se disimulaba una figura agachada cerca de un fuego.
Los ojos del pequeño tardaron unos momentos en adaptarse a la nueva intensidad de luminiscencia de la fogata que daba calor a este improvisado campamento al que llamaba hogar.
-¡Woof!
El primero en alertar de la llegada del joven fue un pequeño ser que recordaba a un perro, de un color naranja y lo más curioso era la motosierra que nacía de su cabeza con su cola como un cordel.
Este fue rápidamente a los brazos del chico el cual lo abrazó con fuerza.
-¡Pochita! - Dijo el niño.
Millie por su parte fue al lado del otro demonio que estaba sentado en el suelo mientras movía el contenido de una pequeña olla con una cuchara improvisada de un palo tallado.
-¿Qué tal va la cena, Mox?
El demonio de pelo blanco conocido como Moxie. De una tonalidad de piel roja más clara que su novia, sonrió algo altanero, llegando incluso a ajustarse el moño de su corbata con orgullo, sentimiento que le llegaba hasta sus curvados cuernos.
-Pese a no tener buenos ingredientes, esto está bueno. - Dijo antes de servir la comida en 3 tazones, todos diferentes uno del otro.
La comida era un guisado básico, hecho con carne enlatada, unas papas, algunos vegetales varios y un puñado de arroz. De las comidas más básicas, ni siquiera tenía sal o alguna especia para poder darle sabor más allá de los propios ingredientes.
Las porciones fueron repartidas a cada uno de los presentes, pero el niño luego sacó otro plato y dividió su porción para Pochita.
-¡Muchas gracias!.- Dijo Denji antes de comenzar a comer la comida a toda velocidad.
-¡Woof!
Millie y Moxie se sentaron juntos viendo al chico devorar su comida sin ningún tipo de cuidado o modales de algún tipo.
La pareja de demonios lo habían conocido hace apenas unas horas, cuando un portal se abrió de repente detrás de la puerta que daba a su armario de limpieza. Dicho agujero dimensional daba a la casucha de un niño y su perro demonio motosierra.
Este, lejos de asustarse, los saludo como si fuera algo normal.
Los portales naturales al infierno eran algo que solía ocurrir de vez en cuando, esto permitía a muchos demonios poder ir y venir a la tierra sin problemas en la antigüedad, pero eran inestables y podrían cerrarse en cualquier momento.
Y quedar atrapados en la tierra hasta que tuvieran otra forma de volver o que muriesen en el intento.
Ha habido muchos a lo largo de la historia, los suficientes como para explicar las apariciones de seres sobrenaturales y misteriosas desapariciones. O por lo menos para que hubiera un registro para los locos de las conspiraciones o buscadores de ovnis.
-!Esta es la mejor comida que he probado!- Dijo el niño feliz comiendo con las manos.
A Moxie se le llenó el pecho de orgullo cuando su cocina fue alabada a tal punto, por su parte su novia se rió un poco. Pero pese a estar feliz por el cumplido había algo que lo estaba molestando.
-Dime... Denji, ¿no?- Preguntó nuevamente el nombre para asegurarse de que sea este.
El mencionado sacó su cara del tazón, revelando que toda el área de su boca y alrededores está llena de estofado..
-¿Dónde están tus padres?
El niño se limpió un poco la boca con el dorso de su mano y pareció apagarse un segundo antes de encogerse de hombros.
Esta vez fue el turno de Millie de preguntar esta vez algo preocupada.
-¿No sabes dónde están?- Preguntó retóricamente. - ¿Y quien suele cuidarte?
Ella sabía que a veces los padres estaban muy ocupados con sus trabajos y quizás un familiar o un hermano mayor era quien se encargaba de su cuidado.
-No se nada de Mamá.- Se encogió de hombros.- Y de Papá desde que fue con esas personas malas a las que le debía dinero.
Moxie hizo una mueca, muchos ya se lo habían repetido hasta el cansancio, pero era algo blando para ser un Imp. Para muchos eso era la muerte segura, pero esto también es lo que atrajo a su novia Millie llegando ahora a su primer año de noviazgo.
En este caso no pudo evitar sentir preocupación por el estado del niño y la clara naturalidad con la que hablaba de su claro estado de abandono por parte de sus padres.
Ni siquiera los animales abandonan a sus crías a la primera oportunidad, bueno la mayoría de los mamíferos al menos.
Se llevó una cucharada del estofado a la boca degustando el sabor de su creación, nada del otro mundo y sin embargo parecía la comida más sabrosa del mundo para el infante.
-¿Hay más?- Preguntó este.
Moxie salió de su estupor antes de tomar el cuenco del niño y responder.
-¡Eh, si!- Dijo recomponiendose.- Come todo lo que quieras.
Los ojos del niño brillaban con alegría pura.
-¿Oíste eso, Pochita?- Le habló al otro demonio.- ¡Podremos comer hasta llenarnos!
-!Woooo!
-!Esta es la mejor noche de mi vida!
Cuando el demonio de pelo blanco llenó el cuenco hasta el límite sintió como su corazón se estrujaba un poco al escuchar eso de la boca de un niño. Le entregó el plato y este nuevamente lo dividió con el otro demonio motosierra.
Ambos adultos compartieron una mirada de preocupación mutua al punto que perdieron el apetito y simplemente dejaron la comida nuevamente en la olla principal para más tarde.
No pasó mucho tiempo antes de que el sonido de masticar sea reemplazado por los bostezos del muchacho, el cual comenzaba a tallarse los ojos para mantenerse un poco más de tiempo despierto.
Ya que sentía que en el momento que fuera a dormir despertará de este sueño que fue tener a dos personas que se preocuparon aunque sea un poco por él, al punto de prepararle suficiente comida hasta que se llenara.
-Creo que es hora de irse a dormir.- Dijo Millie antes de ayudar al pequeño a meterse en su casucha.
Quizás esta fue la primera vez en que ambos se tomaron el tiempo suficiente de mirar la estructura, era pequeña. No superando los 2x2 metros en total, prácticamente un armario glorificado hecho de paneles de madera, algunas chapas y otros materiales varios.
Abrieron la puerta encontrándose con un ambiente deplorable y dejaron al chico donde Pochita indicó el lugar al que llamaba cama, si es que se puede llamarse así. Este se acurrucó antes de abrazar al perro como si fuera su peluche para dormir.
-Gracias.
Ambos salieron sin hacer ruido y cerraron la puerta con cuidado antes de alejarse un poco del campamento para tener una conversación de adultos.
Moxie no dejaba de frotarse las manos y el cuello, era una señal clara de que estaba incómodo y preocupado, pues no era menos.
-Esto no está bien.- Fueron las primeras palabras que salieron de sus labios.
Millie por su lado se abrazó a sí misma antes de frotarse sus brazos, ella al tener muchos hermanos sabía que algunas veces las cosas podían ponerse difíciles, pero esto...
-¿Que crees que deberíamos hacer, Mox?- Preguntó ella.- No podemos dejarlo asi.
-Supongo que deberíamos hablarlo con las autoridades.- Comentó inseguro.
Su novia pareció asentir a esa idea, ya que era lo mejor que se les había ocurrido.
-Yo no lo recomendaría.
Un nuevo sonido alertó a ambos y giraron para ver a Pochita acercarse a ambos haciendo que levanten sus cejas.
Pochita se levantó en sus patas traseras para terminar frente a ambos, antes de comenzar a hablar a la pareja en una voz profunda.
(Devil: Pochita tiene la voz de Juan carlos Tinoco)
-¿Por qué no?- Preguntó Moxie.
Pochita se acercó más a la pareja asegurándose de que solo ellos pudieran oírlo.
-El padre del niño era un borracho apostador, se endeudo hasta la coronilla llegando a deberle a la Yakuza.- Pochita suspiró antes de mirarlos a los ojos.- Con el padre muerto la deuda recaerá en los hombros de su hijo.
Moxie tragó.
-¿Tienes idea de lo que podrían hacerle si va a un orfanato?- Preguntó sabiendo de lo que eran capaces esos tipos.
-¿Y su madre?- Mencionó el peli blanco.
El ser de naranja negó con la cabeza.
-¿Entonces qué sugieres?- Preguntó Millie dando un paso al frente defendiendo a su novio.
Pochita parecía incluso que esperaba esa pregunta, pero eso no hizo que fuera más fácil decirlo.
-Yo... quisiera que le echaran un ojo de vez en cuando.
Millie fue la primera en parpadear sorprendida y responder con una pregunta.
-¿Qué?- Exclamó.
-Se que les pido mucho, pero son la mejor apuesta.
-¿Por qué no lo haces tú?- Preguntó Milie.- Eres un demonio Natural. ¿No podrías agitar los brazos y hacer que algo pasara?- Preguntó ella levantando los brazos para enfatizar su punto.
El infierno era habitado casi exclusivamente por demonios de todas las formas y colores, pero eran divididos en dos categorías principales independientemente de su rango jerárquico.
Los Humanoides y los Naturales.
Los primeros hacen referencia a los humanos que al morir son convertidos a demonios durante su muerte, esto también incluye a los nacidos en el infierno.
Pero por otro lado, el otro grupo está formado por aquellos seres nacidos por el miedo. Seres a los cuales las pesadillas de los humanos le dieron forma, vistiéndose con sus más profundos temores siendo casi como fuerzas de la naturaleza encarnadas.
Pochita parecía apenado.
-Si revelara mi verdadera forma, la vida de este niño estaría en un peligro mayor al que podrían imaginar, mucho más jodida de la que ya es. - Desvío la mirada.- Aún si lo protegiera, cambiaría terriblemente...
Millie no pudo evitar detectar que este niño estaba envuelto en algo más profundo.
-¿Qué tan malo es?- Pregunto.
El perro motosierra llevó sus patas delanteras hacia atrás de su espalda.
-La situación es tan delicada que me vi obligado a abrir un portal con la esperanza de que algo bueno saliera de ahí.
Esta vez la imp no dijo nada más, parecía comprender las implicaciones de lo que decía. No era una situación fácil para ninguno de los presentes y se reducía a ver quien estaba dispuesto a aceptar la responsabilidad.
-Yo lo haré.- Dijo Moxie dando un paso al frente.
Milie por su parte miró a su novio y lo tomó de la mano.
-¿Estás seguro de esto, Mox?
El respondió mostrando un semblante de determinación absoluta.
-Si. - Fue su respuesta corta y contundente.
Millie muy pocas veces había visto esa faceta de su novio. Era diferente al Mox cariñoso y algo torpe del usual que amaba, pero esta determinación no le quedaba mal.
-Si eso es lo que crees, voy a apoyarte. - Comentó su novia.
Pochita se inclinó un poco.
-Tienen mi más sincero agradecimiento.
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Los rayos del sol se filtraban por algunos de los agujeros de la casucha haciendo que el niño se agitara en su cama, esto provocó que el sueño abandonase su sistema siendo reemplazado por la molestia de un nuevo día.
Se agitó buscando a su amigo pero no lo encontró, miró y estaba completamente solo. Se obligó a levantarse hasta la puerta que daba afuera donde más luz lo esperaba.
Lo primero que sus ojos, que poco a poco se ajustaban a luz, vieron fueron a la pareja de demonios que sostenía varias bolsas con contenidos misteriosos.
-Buen día, dormilón.- Dijo Moxie.
Los ojos del niño brillaron con alegría al ver que no había sido una ilusión.
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Devil: Y CORTEN
Quisiera aclarar que los caps serán una combinación de la nueva infancia de Denji con los eventos actuales, que van desde el final de la parte 1.
lo cual vendrá desde el próximo capitulo.
nos vemos la siguiente.