La velocidad del arma mágica era lenta, comparable a la de un palanquín llevado por una persona real.
Poco a poco salieron de la zona abarrotada de gente y por fin pudieron ver más del hermoso paisaje.
Diez millas de faroles, luces naranjas y seda roja resonaron juntas, si se alza la mirada se puede apreciar la talla de una bestia gigante, que ruge mostrando sus dientes y colmillos verdes, una vista majestuosa e imponente.
El territorio de la Secta Demoniaca está lleno de acantilados, y los edificios suelen estar construidos sobre ellos.
Las largas escaleras están talladas en la cara del acantilado, y cada edificio está perfectamente integrado en las montañas, con sus aleros extendidos. Los interiores están iluminados y de las escaleras cuelgan faroles que les dan una belleza peculiar en la noche.
Grandes áreas de la montaña están talladas con los Ocho Inmortales Oscuros [0].
Las legendarias armas mágicas de los Ocho Inmortales son: flauta, tablero de nubes, flor de loto, abanico, tambor de pescado, cesta de flores, calabaza y espada [1].
Las tallas en el cuerpo de la montaña incorporan estas armas mágicas y su disposición circular junto con sus minuciosos tallados, provocaba que Chi MuYao las mire una y otra vez, algo que siempre disfrutaba hacer.
Quizá porque ya no estaba rodeado de gente, Chi Muyao se sintió finalmente más tranquilo, y señalando en una dirección preguntó a Xi Huai: "Mira ahí, ¿es un Dragón Serpiente*?".
"No deberías haberlo visto antes".
"..." Chi Muyao lo había visto en la Formación Gran Cielo Nublado Tong... sólo podía fingir que no lo sabía: "¿Así que ese es su aspecto? "
Xi Huai lo siguió, miró con atención y después de un cuidadoso examen respondió: "La talla es más pequeña, y el Dragón Serpiente real es más feroz que el tallado".
"Oh..."
"¿Qué quieres hacer en la Conferencia de las Mil Sectas esta vez? No deberías venir a este tipo de ocasiones cuando me evitas así".
"Tengo algo que quiero comprar, y hay una subasta en la Conferencia, así que pensé en venir a ver si podía comprarlo".
"Oh, ¿qué día es la subasta?"
"Dos días después".
"Tsk".
Chi Muyao no sabía qué significaba el "tsk" de Xi Huai, e incluso pensó que Xi Huai no quería hablar más con él, así que se calló rápidamente y miró la escena nocturna solo.
Xi Huai en cambio se sentía frustrado, quería llevar a Chi Muyao de vuelta al clan QingZe de inmediato, pero todavía tenía que esperar dos días.
Después de un rato, Xi Huai preguntó: "¿Qué quieres comprar? Le pediré a Zong Sichen y a los otros que te lo traigan".
"Me temo que no puedo permitir eso, esa cosa es fácil de falsificar, necesito verla en persona, si no, no habría venido".
"Qué problemático".
"¿Puedes aflojar el agarre un momento?" Chi Muyao sacudió las manos de ambos pues estaban cogidos de la mano: "Tus manos están demasiado calientes, nos sudan las palmas".
"..." Xi Huai no estaba dispuesto.
Chi Muyao no tuvo más remedio que sacar su abanico de Secta y alzar las dos manos juntas para abanicarlas la una contra la otra para eliminar el sudor.
Xi Huai: "..."
Xi Huai volvió a mirar el abanico en la mano de Chi Muyao y luego vio el aspecto que tenía con la ropa de su secta, realmente, no se cansaba de mirarlo.
Era evidente que el rosa era el color que más le disgustaba, pero ahora le gustaba, y le gustaba más la persona que lo llevaba.
Chi Muyao movió de lado a lado su abanico sin prisa, sus ojos seguían mirando a su alrededor, Xi Huai sólo podía mirar el perfil de lado de su delicado rostro y la suave curva de la mandíbula que no estaba cubierta por la la máscara de flor de durazno, era perfecta.
La Marcha Nocturna de las Mil Sectas duraría una hora.
En la segunda mitad de la noche, Chi Muyao parecía estar cansado, sentado en el arma mágica, tambaleándose, con sus párpados luchando por no cerrarse.
Después de la repentina muerte de Chi Muyao por quedarse despierto toda la noche estudiando, él comenzó a cuidar de su salud después de venir a este mundo y se fue a dormir todos los días precisamente a la hora de la noche.
Ahora que la hora había llegado, además de que estuvo corriendo todo el día, estaba cansado y un poco soñoliento.
Cuando fue atrapado por Xi Huai, todavía estaba asustado, pero ahora descubrió que Xi Huai había perdido su mal temperamento y estaba tranquilo, además él y Xi Huai tenían la experiencia de vivir juntos en una cueva durante tres años, por lo que se sentía bastante cómodo cerca de Xi Huai. Realmente se quedó dormido después de un rato.
Xi Huai extendió su mano para sostener a Chi Muyao sobre sus hombros y dejarle dormir contra él.
Entonces colocó una barrera y la cortina de las cuatro vigas del arma mágica se bajó instantáneamente para que el viento no pudiera entrar.
Después de hacerlo, Xi Huai levantó la mano de Chi Muyao y le besó suavemente en la punta de los dedos, luego tomó el abanico de su otra mano y lo abanicó.
El viento de fuera era demasiado fuerte, y era fácil que Chi Muyao se resfriara.
Pero el ambiente estaba demasiado cargado después de colocar la barrera, así que Xi Huai sólo podía abanicarle él mismo, no fuera que Chi Muyao sintiera calor y no quisiera apoyarse en él.
Cuando el arma mágica llegó al final del recorrido, los cultivadores en sus respectivas armas de vuelo ya se habían marchado, y sólo Xi Huai y los otros detrás suyo permanecieron allí durante mucho tiempo.
El Maestro del Palacio Yue Mu se puso al lado del arma mágica y no habló, haciendo un gesto con sus ojos hacia el arma mágica en el que estaba Xi Huai.
Por su parte, el Maestro del Palacio Zun Yue suspiró, sin querer preocuparse por eso, ya estaba sufriendo de dolor de cabeza al pensar en como ayudaría a detener al furioso Maestro de Secta cuando se entere de esto y quiera golpear a su hijo.
Los dos Soberanos Celestiales de etapa YuanYing también tenían más de cien años, y en realidad les dolía ver la primera aventura amorosa de su joven Maestro.
Podría haberse enamorado de cualquiera, pero tuvo que enamorarse de alguien de la Secta Huan, e incluso era un discípulo masculino. Diciéndolo bien, eran de la Secta QingZe, pero diciendolo mal, entonces eran de la Secta Verde o Secta de la pradera verde [3].
En ese momento, el arma mágica en la que viajaba Xi Huai se movió por fin, dirigiéndose hacia la casa cueva en la que residía temporalmente Xi Huai, aparentemente dispuesto a enviar al hombre directamente allí.
Los dos intercambiaron una mirada, ambos se despreocuparon, y dejaron ir a Xi Huai.
Las cuevas en las que Xi Huai y los demás se alojaban temporalmente también estaban en las mejores condiciones y eran bastante tranquilas además de estar cerca.
Controló el arma mágica y se detuvo fuera de la cueva, luego llevó a Chi Muyao al interior y abrió la barrera de la misma.
Con esta barrera, sería difícil incluso para un Soberano Celestial de la etapa YuanYing espiar la escena dentro de la cueva.
Después de colocar a Chi Muyao en la cama de piedra, dudó por un momento en sacar su arma mágica de iluminación, al final no la sacó, en su lugar ordenó con cautela las cosas dentro de la cueva, y luego se quitó las vestiduras externas y las colocó a un lado.
Maye: OJO NO ESTÁ DESNUDO, está en túnicas interiores.
Volvió a la cama de piedra y se sentó con las piernas cruzadas, meditando y regulando su respiración.
Podía oír claramente el crujido de Chi MuYao mientras se daba la vuelta, como si sintiera que la cadena de mariposas en su cuello le asfixiaba, y luchaba por quitársela junto con la máscara de flor de durazno.
Después de otro momento, Chi Muyao volvió a rodar y sus pies comenzaron a estirarse hasta la parte inferior de las piernas de Xi Huai.
Abrió los ojos y se giró para mirar a Chi Muyao, aplicó su hechizo de control para traer sus propias vestimentas y se las puso encima a Chi Muyao.
Así el tiempo pasó, a primera hora de la mañana, Chi Muyao se despertó al fin sin ninguna prisa.
Cuando se despertó, no se levantó inmediatamente, sino que miró confusamente el entorno dentro de la cueva, entonces se sentó bruscamente después de recuperar sus sentidos, y miró a Xi Huai.
Xi Huai se giró para encontrarse con su mirada.
Primero levantó las vestiduras de Xi Huai y se miró a sí mismo, sintiéndose aliviado al confirmar que todavía llevaba ropa, parecía que Xi Huai aún no era tan bestia*.
*Una persona bárbara y brutal.
Dejó escapar un suspiro de alivio y se levantó para lavarse con la pequeña técnica de lavado, específicamente el tipo de pequeña técnica de lavado que le había enseñado Xi Huai.
Xi Huai habló de repente: "¿Qué hay de mí?"
Volvió a mirar a Xi Huai, y entonces la pequeña técnica de lavado también ayudó a Xi Huai a lavarse.
Este chico es muy irrazonable, al principio era inconveniente en la cueva, por lo que le ayudaba, pero ahora que tiene manos y pies libres, todavía tiene que ayudar, es obvio que estaba jugando con la gente.
Xi Huai se levantó, extendió la mano y enganchó la solapa de Chi Muyao, diciéndole por lo bajo: "Bien, ya puedes abrir tu solapa".
"¿Tiene que ser así?"
"Mn." Cuando estaba fuera, no quería que los demás miraran, pero ahora que estaba dentro de la cueva, todavía quería echar un vistazo.
Chi MuYao seguía pensando en sus compañeras, "¿Siguen a salvo, mis compañeras?"
"Quizás".
"En ese caso, si dejo abierta mi solapa, ¿puedes dejarlas ir?"
"Puedo".
Chi Muyao miró a Xi Huai, con los labios fruncidos, y finalmente apretó los dientes para aflojar su cinturón.
Siempre había llevado la ropa con pulcritud y es un poco difícil abrirla, así que cuando pudo sacar la faja y abrirla con facilidad, se dio por vencido y se giró para mostrársela a Xi Huai: "Está abierta".
"La túnica interior está limpia y ordenada, ¿qué sentido tiene abrir la túnica exterior?"
Sólo pudo seguir tirando de su ropa y abriendo un poco las solapas, pero cuando miró su pequeño cuerpo, realmente no le pareció bien mostrar mucha piel.
"¿Está bien?" Se dio la vuelta para mostrarle a Xi Huai, con una expresión agraviada.
Xi Huai levantó las comisuras de los labios tras mirarlo y preguntó: "¿Eso es todo?".
"¡Ya está bien!" Dijo, a punto de arreglar su ropa.
Pero Xi Huai no lo dejó pasar, se acercó a él, se agachó y lo besó de repente.
Estaba tan aturdido por el beso que inconscientemente retrocedió, pero fue atraído de nuevo por los brazos de Xi Huai.
Estaba tan controlado que sólo pudo levantar la cabeza, y la cortina de cuentas de su máscara de flor de durazno se separó a lo largo de sus mejillas, permitiendo que Xi Huai lo besara más suavemente.
Al parecer, le resultaba agotador permanecer agachado, por lo tanto Xi Huai simplemente lo levantó y lo colocó sobre la mesa de piedra, abrazándolo con fuerza.
El olor que pertenecía a Xi Huai, acompañado por el dominio único que este tenía, llegó con un impulso feroz.
Chi Muyao sin saber que hacer, sólo pudo tirar de las solapas de Xi Huai.
Intentó apartar a Xi Huai con sus rodillas, pero los brazos de este lo empujaban hacia adelante, dificultando aún más la huida.
Sólo pudo apartar la cara de Xi Huai y decir, como pidiendo clemencia, "Xi Huai, tú no..."
"Deberías saber que no voy a escuchar".
"Me enfadaré".
"A-Jiu". Xi Huai se inclinó y bajó la voz: "Llorabas muy fuerte dentro de la cueva, también me dijiste que deje de comportarme así, luego te apartaste de mí y no pude atraparte. Pero en realidad tu siempre te mantuviste a mi lado, te gusto, ¿No es así?"
Su cuerpo se puso rígido mientras escuchaba, sus orejas y mejillas enrojecidas por la vergüenza, como si estuvieran a punto de madurar cual apetitosa manzana.
Siempre había tenido buen carácter.
Pero era fácil irritarse tras una timidez extrema.
Por supuesto, también podía enfadarse cuando se cuestionaba algo que afectaba su dignidad.
En ese momento, Chi Muyao estaba tan enfadado que prácticamente daba golpecitos: "¡¿Por culpa de quién estuve en la cueva?!".
De repente, levantó la voz y rugió de forma tan agresiva que provocó que Xi Huai, que estaba jugando a ser pícaro, se quedara atónito y le mirara con asombro.
Continuó sermoneando a Xi Huai: "Me esforcé tanto con el fin de cultivarme hasta la etapa ZhuJi para ti, practiqué y sufrí por mi falta de habilidad, ¡e incluso me desmayé! ¿Cuándo fue la vez que no lloré de dolor? Perseveré durante tres años de esa manera, ¿pero a cambio me tratas así? Me negué por cortesía y porque no quería interrumpir tus esfuerzos, ¿por qué me acusas a cambio? ¡Es excesivo burlarse de alguien por algo así! ¡Eres realmente malo! ¡Gran! ¡Malvado!"
Xi Huai: "..."
Parpadeó sorprendido.
La última vez que Chi Muyao se enfadó tanto fue cuando Xi Huai cuestionó las escasas habilidades de Chi Muyao.
Xi Huai tosió ligeramente y trató de hablar, cuando Chi Muyao subió su tono nuevamente: "Xi Huai, ¡¿tienes conciencia?!".
Xi Huai, que siempre había sido capaz de asfixiar a la gente, en realidad no tenía ni idea de qué decir: "Yo..."
"¡No la tienes! Incluso pensaba en ti cuando me fui, temiendo que te ridiculizaran por haber sido un Horno Ding, e incluso te ayudé a ocultarlo. Mírate ahora, haciendo un gran espectáculo al capturarme y ahora reteniendo a mis compañeras de secta, ¡¿Acaso no tienes miedo de que la gente sepa lo que pasó entre nosotros dos?!"
"Así es".
"Uh... ¿de verdad?" Chi Muyao maldijo hasta que se quedó atascado.
"Quiero que la gente sepa lo que pasa entre nosotros".
"T- tú, no crees que..."
"No lo creo. Quiero que todos sepan que eres mi salvador, ¿qué hay de malo en eso?"
La respiración de Chi Muyao se contuvo de nuevo.
¿Cómo te salve, no lo sabes bien?
¿No sabes quien soy?
¿Sabe tu padre que estás tan orgulloso de ser un horno ding?
Chi Muyao no le dio importancia, apartó a Xi Huai y se bajó de la mesa de piedra, dándole la espalda a Xi Huai para arreglarse la ropa.
Xi Huai se colocó detrás de él y lo observó, sin prisa, pero con ganas de reír incontroladamente, pensando que la mirada molesta de Chi Muyao era bastante linda.
Tan pronto como Chi Muyao terminó de arreglar su ropa, saltó como un conejo y le dijo a Xi Huai ferozmente: "¿Puedes dejarlas ir ya?".
"Oh, fueron liberadas ayer".
"..."
"No teníamos un lugar para que se queden, así que las dejamos ir anoche, de lo único que me preguntaste fue si estaban a salvo, yo creo que deberían estar a salvo".
"..."
Chi Muyao apretó el puño con furia, sus ya rojas mejillas se pusieron aún más rojas, de modo que terminó caminando hacia Xi Huai y le dio una patada.
Tenía miedo de que Xi Huai le diera una paliza a cambio, así que usó la técnica "sprint" de la secta Huan para esconderse lejos.
Como resultado Xi Huai ni se inmutó, se puso la túnica exterior de su vestimenta y le preguntó: "¿Quieres salir a dar un paseo hoy?"
"¡No!" No quería seguir a Xi Huai para lucirse, ayer estaba tan rodeado de gente que tenía los cabellos de punta.
"¿Entonces nos quedamos en la cueva, tú y yo, y hacemos algo?"
"¡Salgamos!" Cambió de opinión en un instante.
Xi Huai condujo a Chi Muyao fuera de la cueva, esta vez Xi Huai fue muy moderado, y los dos sólo llevaban una manga de pato mandarín.
Mientras Chi Muyao caminaba por las calles del mercado, miró hacia un lugar donde un cultivador se había metido de repente en una pelea, y otros cultivadores lo observaban alegremente, mientras otros lanzaban piedras espirituales para animar y vitorear.
Luego mirando en diagonal, parecía que un cultivador masculino miraba fijamente la figura de una cultivadora y la contemplaba con ojos lascivos, para luego ser golpeado por la multitud de cultivadores y llorar, pidiendo clemencia de rodillas.
"Fiu-" El panorama era realmente diferente en este mercado donde se reunían los cultivadores de la Secta Demoníaca, el taller a donde fue en esos años cuando acababa de salir de la cueva para esconderse ni siquiera era tan caótico como este lugar.
A solo unos pasos de distancia, se produjeron dos disputas, en tales circunstancias, los comerciantes todavía estaban haciendo negocios, y los cultivadores que pasaban por allí no le prestaban demasiada atención a esos asuntos.
Sin embargo, el solo hecho que Xi Huai y Chi Muyao caminaran uno al lado del otro provocó que mucha gente los mirara de reojo.
Miraron a los dos chicos, a las mangas de pato mandarín en sus mangas, y todos hablaron como si entendieran lo que estaba pasando entre los dos.
La marcha nocturna de ayer ya había causado una conmoción, y hoy volvían a caminar juntos, por lo que la relación de este dúo debía ser realmente extraordinaria.
Chi Muyao tenía ganas de ir de compras.
Ya era suficiente con estar rodeados de espectadores, pero detrás de ellos había dos Soberanos Celestiales de etapa YuanYing que parecían estar comprando en el mercado y los seguían sin prisa.
El Joven Maestro de la Secta Qingze era simplemente dominante, siendo las dos personas de etapa YuanYing sus guardaespaldas.
Chi Muyao preguntó a Xi Huai en voz baja: "¿No está mal molestar tanto a los dos Soberanos Celestiales?".
"Después de todo, eres capaz de correr demasiado lejos, me temo que no podré alcanzarte solo".
"..."
Chi Muyao se sintió culpable por haber comprado en el mercado por primera vez, sintiendo que había molestado a mucha gente.
La intención de Xi Huai era realmente comprar algo, cuando llegaron a una tienda, entró y dijo: "Deme un arma mágica voladora, una que sea adecuada para él".
Dijo señalando a Chi Muyao.
Chi Muyao acababa de entrar en la tienda cuando escuchó esta frase, e inmediatamente negó con la cabeza: "No hace falta, no hace falta".
Xi Huai dijo con naturalidad: "¿Qué hay de malo en comprarlo para mi salvador?"
"En realidad nada solo que..."
"¿Cómo puede ser nada? Trabajaste tan duro en cultivar para que yo-"
"¡Lo quiero!" Chi Muyao se apresuró a interrumpirle, temiendo que dijera alguna tontería.
El comerciante miró a Xi Huai e inmediatamente sonrió brillantemente.
En el mundo del cultivo, la Secta Qingze podría equipararse a otras pocas palabras: rica e imponente.
Mientras el Joven Maestro de la Secta Qingze estuviera contento, era una cuestión casual comprar todo en su tienda.
Xi Huai se sentó en una silla a un lado, apoyó perezosamente la barbilla y le hizo un gesto a Chi Muyao: "Dile lo que quieres".
Chi Muyao sólo pudo pensar un momento y preguntó: "¿Tiene una nube de salto mortal [2]?".
"¿Del Gran Sabio?"
"Mn-mn, así es".
"La tengo, pero no es así de rápida, y el rango también puede alcanzar el grado Diji".
"El grado Xuan está bien..." El aura de Chi Muyao era un poco débil, además el grado Diji era algo que no podía permitirse pagar.
En ese momento Xi Huai dijo de repente como si estuviera disgustado: "Si quieres un arma de grado celestial, dime qué materiales necesitas, el clan QingZe te lo preparará todo".
Chi Muyao se apresuró a agitar la mano y se negó: "No es bueno ir demasiado rápido, es fácil causar accidentes de tráfico aéreo. A mayor velocidad mayor será la fuerza de impacto, es como el método de la variable controlada, suponiendo factores constantes, a mayor aceleración y mayor fuerza, las mismas condiciones sujetas a..."
Xi Huai: "..."
Chi Muyao terminó de explicar y preguntó seriamente, "¿puedes entender lo que quiero decir?"
Xi Huai asintió y luego le dijo al comerciante: "De grado celestial y aumente los atributos defensivos".
Chi Muyao: "..."
Puede considerarse comprensión, pero la solución no siguió su línea de pensamiento.
El comerciante tomó nota rápidamente y volvió a preguntar: "¿Hay algún otro requisito?".
Chi Muyao sólo pudo continuar: "Una nube de color blanco estaría bien".
Xi Huai volvió a hablar: "Debe ser rosa".
A él, concretamente, no le hizo ninguna gracia: "¿Qué haría un hombre adulto como yo con un arma mágica rosa?".
"Puede coincidir con el traje de tu secta".
"También voy a cambiar de ropa ah, sería extraño pisar una nube rosa en este momento, es mejor una blanca".
Xi Huai no insistió y le dijo al comerciante: "Entonces haz dos, una rosa y otra blanca".
A Chi Muyao le dolió más la billetera: "¿Qué sentido tiene hacer tantas?".
"Uno para ti, otro para mí, y el rosa es para mí, ¿está bien?"
"¿No tienes ya muchas armas mágicas de vuelo?"
"No tengo una de color rosa".
"..."
El comerciante estaba aún más contento, con un pellizco de sus dedos y una mirada furtiva a Xi Huai, procedió a citar: "Costará 400.000 piedras espirituales, ¿cómo pagará?"
"¡¿Cuatrocientos mil?!" Chi Muyao se inquietó inmediatamente y le dijo al comerciante: "Deme una lista de los materiales que se necesitan para fabricarlas".
El comerciante se quedó atónito, pero los enumeró disciplinadamente.
Después de tomar la lista y mirarla, Chi Muyao dijo: "Conozco todos los precios de estos materiales, suman menos del 20% de lo que usted citó, incluso si el refinamiento y el procesamiento requieren una tarifa, este precio suyo está demasiado elevado."
"Este..." ¿Quién habría pensado que el Joven Maestro de la Secta Qingze se preocuparía por el precio?
Chi MuYao tomó la iniciativa de cotizar el precio: "¿Puedes dejarlas por 150.000? Si no puedes, iremos a otro sitio".
El comerciante miró de nuevo a Xi Huai y se encontró con que éste sólo estaba sentado a un lado mirando y sin decir nada, dejando que Chi Muyao hiciera los arreglos, el tendero sólo pudo señalar con rigidez: "Se las puedo dejar a ese precio".
Xi Huai sacó una pieza de jade espiritual de la Campana de los Diez Mil Tesoros y preguntó: "¿Es suficiente?".
En el mundo del cultivo, generalmente se usaban piedras espirituales para comerciar, si el monto de la transacción es relativamente grande se estimaba que había que mover una montaña de piedras espirituales, y normalmente se intercambiaba un artículo de igual valor.
Los ojos del comerciante se iluminaron al ver una pieza tan grande de jade espiritual, y estaba a punto de extender la mano y cogerla cuando Chi Muyao le detuvo: "Sólo paga por adelantado, para que luego no tengamos que venir a reclamar si el vuelto es incorrecto".
"Nuestro clan Qingze es diferente de su secta Huan cuando se trata de exigir el pago". Xi Huai lo dijo con sencillez, pero los que lo escucharon comprendieron que si su Clan Qingze viniera a reclamar el dinero restante, no sería tan simple como solo pagar la última cuota, sería tan sencillo como destrozar la tienda, o tan serio como quitarle la vida a tu perro.
Una palabra que hizo que el comerciante se estremeciera y se limpiara en secreto un puñado de sudor de la frente.
Chi MuYao lo ignoró, caminó al lado de Xi Huai, explorando con su sentido divino en la Campana de Los Mil Tesoros de Xi Huai para buscar algo, antes de preguntar: "¿Se puede usar este trozo de piedra de obsidiana?"
"Mn, sácalo".
Chi Muyao sacó la piedra de obsidiana y se la dio al comerciante: "Esto será la cuota, y el resto se pagará cuando se fabriquen las armas mágicas".
"De acuerdo".
Después de salir de la tienda, Chi Muyao aún seguía mirando la lista.
Xi Huai soltó una ligera risa y le preguntó sonriendo: "¿Estabas a cargo de este tipo de cosas cuando estabas en la Sala de logística de la Secta Huan?"
Chi Muyao asintió con la cabeza: "Bueno, a veces me encargaba de hacer las compras y siempre me topaba con algún comerciante corrupto, por lo tanto tenía que ser perspicaz".
"¿Y ahora estás a cargo de mí?"
"Ni siquiera sabes cuántas piedras espirituales te han robado, tienes una apariencia bastante inteligente, pero terminas siendo estafado con tu dinero".
"Oh... me equivoqué".
Chi Muyao finalmente se calmó.
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Después de ese día, todas las mil sectas de la Secta Demoniaca se enteraron del asunto.
Era como si a la noticia le hubieran crecido alas y hubiera volado a todos los rincones de la Conferencia de las Mil Sectas, y poco a poco no hubo persona que no supiera.
El que viajó toda la noche con el joven maestro del Clan Qingze era realmente un discípulo de la Secta Huan, ¡y en verdad era un hombre! ¡uno muy calculador para hacer negocios!
Lo más importante era que podía abrir la Campana de los Diez Mil Tesoros de Xi Huai.
Esto era algo que sólo puede hacerse entre parejas, ¿verdad?
Así que, el Joven Maestro es realmente...
Ni siquiera se atrevieron a pensar en ello.
No deben pensar en detalle, pero aún así piensan en secreto muy profundamente.
Quizás no pasará mucho tiempo antes de que los libros de estas dos personas salgan a la venta en silencio.
《La aventura secreta del joven maestro con el discípulo masculino de la secta Huan》
《El hombre de rosa besó suavemente el cuerno de dragón del malvado joven maestro》
Entre otros...
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❥ La autora tiene algo que decir:
[1] Se citan la flauta, el tablero de nubes, la flor de loto, el abanico, el tambor de pescado, el cesto de flores, la calabaza y la espada, porque estas armas mágicas pertenecen a los Ocho Inmortales, no son creaciones mías, o sea, que no hay que olvidar esto.
Tampoco te dejes engañar por mí, los Ocho Inmortales Oscuros se utilizaban a menudo en la antigüedad en la posición del suelo, yo los he utilizado aquí en una talla de pared.
❥ Glosario:
[0] Los Ocho Inmortales: son los ocho inmortales en el taoísmo , que representan ocho grupos diferentes de personas, hombres, mujeres, viejos y jóvenes, los pobres, los humildes, los ricos y los nobles.
[2] Nube de salto mortal: Se refiere a la nube mágica de Sun Wukong.
[3] Eran de la Secta Verde o Secta de la pradera verde:
ListO puse mi alma en estos tres caps, disfruten del azúcar mientras me recArgo de serotonina wu.