Al final, para la inmensa mayoría, la felicidad consiste en obtener un millón, y no morir antes de gastarlo.
Para mí, la felicidad, sin embargo, es que tú abras con pereza un ojo a las cinco de la mañana. Titubees mi nombre como si fuese tu primera palabra y esperes con inquietud a que yo responda como si fuese la última.
Siendo eso tan siempre, a veces me pregunto, por qué ellos parecen más esperanzados en la felicidad, siendo su deseo mucho más complejo que el mío.
Supongo que porque, en este momento, es más probable que yo obtenga un millón, a que tú vuelvas a llamarme.
Co(n)razones
By IreeeneSM
No voy a cerrar el tarro del amor si se destapa. More