Antes de que comiencen a leer, aclaro que la musica que esta en el video es como se sentia en esos momentos Ester y yo 🥺
Bueno después de aquella declaración pueden leer.
Capitulo 11
La adolescencia es una etapa muy difícil y complicada. Tu cuerpo empieza a desarrollar, empieza a cambiar y así como tu cuerpo cambia también tu estado de ánimo. Yo siempre he tenido un carácter bastante gentil, pero eso cambio cuando Anthony me destruyo de cierta manera, llegue a crear un escudo en mi personalidad, siempre pensé que si trato con frialdad a las personas nadie me podría hacer daño, pero me doy cuenta que la única que se esta haciendo daño soy yo. No es que sea mala ni grosera, pero simplemente no puedo mostrarme tal y como en verdad soy.
Cuando era niña quería crecer rápido para poder salir con mis amigas, tener mi primer romance como en las películas, en fin, tener una vida como de película, pero ahora que tengo 15 años y estoy entrando en la etapa de la juventud me he dado cuenta que es totalmente distinto, solo tenía una amiga, problemas con mis padres y mi primer romance había sido un desastre. Así que la adolescencia es una etapa muy complicada.
Empiezas a crear inseguridades, ya sea de tu cuerpo, de tu forma de ser, de lo que opinas, te das cuenta que las personas pueden juzgarte fácilmente, incluso tu propia familia lo puede hacer aun que no se den cuenta.
~Estas muy flaquita debes comer más.
~ ¿Has estado comiendo mucho? Porque parece que si.
~ Ya debes saber que quieres estudiar.
~No te queda ese color de cabello.
~ Tu opinión no cuenta.
~Ella es más bonita que tu.
~Solo te utilice.
~Deja de ser una niñita.
En fin, muchos comentarios de ese tipo, en cierta manera esos comentarios como adolescente me afectaron y por todo lo que pase con Anthony es que cree ese escudo para hacerme fuerte, pero en el fondo era débil.
La única que podía entenderme como me sentía era Diana, creo que era porque teníamos la misma edad y ambas pasábamos por procesos parecidos. Y es que es muy difícil no escuchar la opinión de los demás, aunque eso deberíamos hacer no escuchar a los que solo quieren criticar.
En fin, la adolescencia es difícil, pero depende de nosotros si queremos que sea una etapa difícil pero bonita o una etapa difícil pero horrible.
Pero estoy segura que todos los que estén pasando este proceso son más fuertes de lo que creen.
Últimamente me sentía muy horrible conmigo misma, no había quien me aguante ni yo misma me soportaba.
Estaba en clases de filosofía esa era de las clases que mas me aburria, tenia que esforzarme mucho para prestar atención y hoy estaba en los días que no quería que me hablaran, sabia que mi regla esta a punto de llegar, por eso estaba así de insoportable, casi siempre me pasaba cuando estaba a punto de llegar.
—Evans podría repetir lo que acabo de decir—el profesor de filosofía me saco de mis pensamientos de un susto.
—Eh-eh—no sabia ni que estaba hablando.
—Sigo esperando—lo dijo en tono muy serio.
Mire a Diana en busca de ayuda, pero no entendía lo que ella me decía en voz baja
—Algo sobre Platón—contesté y por la cara que puso el profesor supe que la respuesta era incorrecta.
—Siéntese en el puesto del señor López—López era el apellido de Anthony y desde que terminamos apenas nos mirábamos.
Me dirigí con mis cosas al puesto de Anthony de mala gana, lo bueno es que después que se acabe estas dos horas podre regresar a mi lugar.
—Y todas las horas de mi clase la quiero ver ahí—protesto.
Ay no era horrible eso, tenia dos horas 3 veces a la semana no podría estar cerca de el y no porque sienta algo, si no por todo lo que me hizo.
—Parece que ahora quieres perseguirme—hablo Anthony en voz baja.
Lo ignore.
—Ahora vas a ignorarme.
—No me moleste—le puse mala cara.
—Pero si antes te encantaba que te molestara.
—Deja de hablar, trato de concentrarme.
—En filosofía—se burlo.
—Si.
—Eres muy mala para concéntrate en esta materia.
Cuando éramos novios le confesé que era muy mala concentrándome en filosofía no pensaba que aún se acordara.
—Déjame en paz.
—Teniéndote cerca será imposible.
Ya no respondí trate de concentrarme para no recibir más regaños.
Cundo termino la hora alisté mis cosas lo más rápido que pude estaba dispuesta a huir de él.
—Mira a quien tenemos por estos rumbos. —Hablo Cristian
—Déjame pasar ya me voy—Cristian era el mejor amigo de Anthony y cuando andaba con el también se hizo mi amigo y en verdad creí que lo era, pero cuando escuché lo de la apuesta simplemente me dio asco.
—Pero Ester antes éramos muy amigos.
—Eso fue antes.
—Pero podemos volverlo hacerlo, ahora que vas a pasar un tiempo con nosotros.
—No voy a pasar tiempo con ustedes—lo mire mal.
—Sigues dolida porque te deje—Anthony sé burlo y Cristian solo agacho la cabeza como arrepentido.
—No, estoy feliz que lo de nosotros haya terminado—pareció que le dolió.
Justo en el ego
—Ya lo veremos ahora que te vas a sentar conmigo.
—Tu solito te darás cuenta.
Les di la espalda y me fui, algo tenía claro no iba a dejar que me pisoteara eso puedo haber sucedido en el pasado, pero no ahora, yo era distinta.
—¿Quieres que vaya a golpearlo? —me pregunto Diana.
—No hace falta, ya le he bajado un poco el ego.
—Eso cariño, muy bien hecho, justo donde le duele— le sonreí.
—Que sepa que ya tienes a otro y uno mucho mejor que el en todos los aspectos.
—Dian, Yahir no es nada mío.
—Pero pronto lo será ya lo veraz.
—Eres necia.
—Y tú una terca—se rio.
Llegue a casa muy cansada, tenía unos cólicos horribles y estos días son los más terribles para una mujer.
En la tarde me la pase haciendo tareas estaba muy estresada por todo lo que me habían mandado hacer, pero así es la vida escolar.
Ya en la noche baje a cenar, la relación con mi padre no era lo mejor del mundo, mi madre era distinta, ella una vez me dijo a parte de tu madre quiero ser tu mejor amiga, ella quería tener mi confianza, pero yo no estaba dispuesta a confiar en ella. Me cerré tanto que no podía decirle que paso con mis sentimientos en el pasado.
Papá siempre fue un poco mas duro, a el no le tenia nada de confianza, lo respetaba como mi padre, pero no me imagino teniendo con él una conversación de chicos, él era muy serio y muchas veces me daba miedo.
—¿Cómo te fue en el colegio? —pregunto mi mamá, siempre lo hacia ella.
—Bien—conteste
—Y las calificaciones, ¿Cómo vas con eso? —era responsable siempre entregue todas las tareas, pero a veces estudiar era muy cansado.
—Bien.
—Me alegro cariño.
Le dedique una tierna sonrisa a mi mamá.
—Buenas noches—me despide de mis padres antes de irme acostar.
—Hasta mañana hija—respondieron los dos a la vez.
Ya en mi habitación revise mi celular y me di cuenta que tenía mensajes de Yahir últimamente habíamos estado hablando muy seguido, hoy no le conteste en todo el día porque estaba estresada.
Yahir B.
Hola Ester, ¿Qué tal va tu día?
Ester
Hola Yahir, disculpa por no responderte, estaba un poco cansada.
Yahir B.
No te preocupes, mejor cuéntame ¿como ha sido tu día?
—Me sorprendió con la rapidez que me respondió—
Ester.
Ha sido un poco cansado. ¿el tuyo como ha sido?
Yahir B.
Ha ido bastante bien, pero te noto triste ¿estas bien?
—Como puede saber que estoy triste sin ni siquiera verme—
Ester.
Me alegro por ti, no estoy triste me encuentro bien. —mentí
Yahir B.
¿Segura? Te puedo llamar para confirmar que estas bien.
Me sorprendió, nunca habíamos hablado por llamada y que me lo haya propuesto se me hizo la cosa mas linda del mundo, no niego que me hizo mucha ilusión poder escucharlo hoy.
Ester.
Está bien, puedes llamarme.
Al instante mi celular vibro y vi su nombre Yahir B. con mucha ilusión conteste.
—Hola
—Hola Ester, ¿dime que ha pasado? —se escuchó preocupado.
—No ha pasado nada, solo he tenido un día un poco difícil.
—Te escuchas triste, necesitas que te ayude en algo.
—No tranquilo estoy bien.
—Y ¿Qué paso que hoy, que fue un día difícil?
—No sé, me sentía cansada, un poco triste, tuve problemas en el colegio con un profesor y para rematar me veo horrible.
—Dudo mucho que te vas horrible, eres muy bonita y así te vea en tu peor situación dudo mucho que te llegue a ver horrible, lo de sentirte cansada lo entiendo, es algo que pasa muy común como jóvenes y lo del profesor seguramente el tuvo la culpa. Pero eso de que estes triste no tengo respuesta para eso.
Me quedé en silencio escuchando todo lo que me dijo y me di cuenta que estaba sonriendo.
Él puede hacer que cambiemos de animo muy rápido
—Si que eres un sabelotodo—casi pude ver su linda sonrisa.
—Ya lo sé, pero eso de que estas triste no me has dicho ¿por que es?
—Lo siento ni yo tengo respuesta para eso, creo que llegan esos días que tu estado de ánimo cambia drásticamente.
—Lo entiendo, no te preocupes si no quieres darme explicaciones.
—Gracias por entenderlo.
—De nada Ester, sabes que puedes contar conmigo pase lo que pase.
—Ya me has alegrado un poco.
—Y quiero hacerlo siempre.
—Gracias Yahir.
—Bueno mi querida Ester te dejo descansar y espero que mañana ya te encuentres mejor y si no te llegas a sentir mejor no dudes en llamarme.
—Espero no te molestes si llego a molestarte a cada momento.
—Contigo jamás me molestaría, para mi es un placer escuchar tu hermosa voz.
—Ya me siento mejor— sonreí con mis mejillas rojas.
—Buenas noches Ester.
—Buenas noches Yahir.
Después de colgar sí que me sentía mejor, esas lindas palabras que me decía era algo tan valioso para mí. Yahir sabia como hacer para que me sintiera mejor y me sorprendía como tenia esa habilidad de leerme tan bien sin estar presente.
Esa noche me sentía feliz y todo gracias a Yahir, él era el único que me hacia sentir así, por primera vez sentí las maripositas en mi estómago, estaba feliz Yahir me hacía sentir feliz.
Creo que este es el capitulo mas largo que he escrito hasta el momento, espero se puedan identificar un poco, pero recuerden que cada de uno de ustedes son valientes y mas fuerte de lo que creen.
Los quiero mucho, cuenten conmigo siempre. La canción me recuerda mucho a esos momentos difíciles que pasamos, pero no dejen nunca de luchar jamás.
No olvidemos que Dios tiene el control de todo.
Gracias por leer ❤
No olvidemos dar su ⭐
Sigan leyendo juju 🥰