En el sobre habían algunos recortes de periódicos con el titular "pareja de mortifagos es ascesinada en una emboscada", una carta escrita por la abuela de Anne dirigida al ministro de magia dónde le explicaba de manera "anonima" que habían unos mortifagos merodeando a una familia muggle, diciendo que ella los había oído hablar de como los torturaria proporcionándole ubicación.
Cosa que definitivamente era falsa, ya que los padres de Anne se habían alejado de todo lo que tuviera que ver con los actos de tortura hacia muggles desde que su pequeña había nacido.
Regulus no los había influenciado en nada sobre alejarse de los mortifagos, de hecho el aún seguía con las mismas creencias, pero con menos fanatismo a voldemort.
En otra carta con fecha más pasada que la que tenia la carta al ministro, en esa le pedía la abuela de Anne a su padre que se separará de su madre, diciéndole que esa mujer solo lo había mal influenciado y que le había metido ideas en la cabeza sobre las artes oscuras.
Cosa que de nuevo eran falsas ya que el padre fue el que le habló a la madre sobre ellas, convenciendola de formar parte de los mortifagos junto con Regulus.
Antes de la muerte de sus padres, Anne no vivía con ella ni mucho menos la conocía, tal parece que ella se fue a vivir a su mansión después de que se quedara huérfana, así fue como Regulus se marchó, ya que el había decidido criar a Anne y tenía todo preparado, pero sabiendo que su abuela jamás lo aceptó y había tratado de separarlo de su amigo, pensó que era mejor alejarse antes de que lo matara.
Había incluso otra carta donde la abuela amenazaba a Valentine la madre de Anne, desafortunadamente sus padres solo creyeron que eran palabras vacías jamás se imaginaron que los traicionaria poniéndoles una trampa dónde los citaba para hacer las pases, ahí la señora mediante una maldición imperio controló a unos muggles para actuar en una situación que fingieran ser torturados, cuando llegaron unos aurores y sus padres, sin saber fueron atacados cruelmente, todo bajo una maldición imperius.
La anciana supo cómo realizar el acto sin ella ser descubierta, sabía que la única forma en que su hijo dejara a Valentine sería en muerte.
Todo eso relatado en puño y letra por la abuela, tal parecía que pretendía desahogarse por medio de cartas y un diario, jamás confesar su crimen y fingir todo ese tiempo que lamentaban la muerte de sus padres, cuando lo único que quería era que en un futuro hacer que Anne vea cómo los malos a sus padres, a los mortifagos y que estuviera del lado de la orden del fénix.
Un diario de cartas era en dónde estaban todas esas palabras con todo y fechas, al parecer un tiempo había sufrido de perdida de memoria por lo que para ella el plan de escribir todo era la mejor solución para recordar.
Lastima que la mujer muriera antes de poder esconder todas las pruebas, sin contar que había recibido la abuela una carta de Dumbledore invitándola a unirse a la orden del fénix que se volvería a reunir tras el regreso de voldemort a inicios del quinto año.
Pudiera sonar todo cómo cosas sin sentido, pero para Anne era una respuesta a tantas preguntas y dudas acumuladas a lo largo de los años.
Su abuela, la que fingió amistad con varias familias de mortifagos, la que a Anne le pedía que no entablará amistad con Draco, la que la hizo invitar a pasar un verano a Potter a la mansión, la que no dejaba que entrara a la habitación de sus padres, la que borró de su memoria los recuerdos con Regulus Black- descrito esto en el diario- y mil horrores más.
Su abuela, la que la había criado, y quién le aseguraba a ella que con amor y con aprecio.
Anne estaba desorientada, no había parado de llorar desde que leyó las primeras cartas, Cissy le había asignado una habitación de dónde no había querido salir en el resto de la tarde/noche.
Draco no fue capaz de insistirle en hablar, el sabía que en momentos como esos era mejor dar espacio.
El solía tocar la pulsera obsequiada por Anne para hacerle saber que la extrañaba, ella solo la observaba sin responder.
En la mañana del día siguiente fue que ella decidió contarle a Cissy sobre todo lo que había descubierto, logrando que Cissy recordará acciones y conversaciones con su abuela, como el nunca haber escuchado de ella de sus viejos amigos, el notar que no sabía casi nada sobre la vida de ellos y por la manera en que siempre quería dar a entender que ella tenía un futuro planeado para Anne.
Anne quería confirmar todo con Regulus pero el no aparecía, Cissy le dijo que el no había ido a la mansión como lo había dicho en la carta, que probablemente estuviera con su hermano o que talvez decidió irse de nuevo.
Otro peso más para Anne.
Lo peor de todo era que faltaba menos de un día para su cumpleaños número 16, otro cumpleaños más arruinado.
Todo era demasiado difícil de procesar para una menor, no sabía cómo manifestar su sentir; si ella expresaba de más la llamarían exagerada, pero si no mostraba mucho sería una incomprendida.
¿Cómo una chica de 16 años iba aanejar esa situación?
No se sabía, solo ella poco a poco iría entendiendo el porqué de las cosas y esperaba los demás no la juzgaran.
. ♡⃛ °
Un caluroso viernes 28 de junio el día se sentía en un ambiente apagado, Anne seguía sin salir de su habitación solo para comer, se había cansado de llorar; necesitaba a Regulus para entender más todo pero el seguía sin aparecer.
Draco decidió ir a tocar su puerta, en una mano sostenía su barita y en la otra un par de globos que en su interior tenían flores desprendiendo pétalos, Nott a su lado sosteniendo un pequeño pastel.
Ella sabía que día era, y sabía quien estaba del otro lado de la puerta.
Se colocó su bata, con desánimos abrió la puerta, y una pequeña sonrisa se asomó de sus labios.
—Feliz día — dijo sonriente Nott.
Anne les dió el paso hacia la recámara, los dos entraron y vieron que en un rincón habían una nube dejando caer copos y algunas mariposas negras volando en el lugar, significaba mucha tristeza.
—¿No piensas morderle?— preguntó Nott.
Anne los miró, vió sus rostros de ánimo y se acercó al pastel dándole una pequeña mordida para después los otros dos chicos hacer lo mismo.
—¿Quieres hacer algo hoy?— Malfoy la tomó de la mano— lo que quieras, estamos a tu disposición.
Dudó en responder, sabía que no podía pasar todas las vacaciones sumergiéndose en un mal que solo hará que pierda días buenos, así que para aliviar un poco su corazón pensó en que podía hacer.
—podemos ir al jardín.— propuso y los dos chicos se miraron en complicidad.
—Le diré a mi madre que prepare algo,— Draco salió del lugar.
Nott se quedó en la habitación de Anne, tomó asiento en la cama y segundos después Anne se acercó a el.
—¿Algún día seré feliz?— le preguntó con desánimo a su amigo.
—Lo serás, de eso nos encargaremos— pasó su brazo al rededor del cuello de Anne y ella recargó su cabeza en el hombro del joven.
No lloró, pues se sintió tranquila, talvez era lo que necesitaba para dejar de sentirse mal.
Luego de unos minutos llegó Malfoy, Anne ya se encontraba arreglada y con mejor semblante.
Les indicó que podían salir hacia el jardín, ya se encontraba una mesa con comida y algo de bebidas.
—¿Te dijo algo importante?— le preguntó Malfoy a Nott.
—No dijo nada amigo, tranquilo,— susurró.
Ya instalados en la mesa Anne solo se apresuró a comer la fruta, hacia mucho que no tomaba café pero ese día no sentía la necesidad de consumirlo, eso preocupó a Malfoy pues ella siempre que podía lo tomaba.
—Hoy se ve muy bien el cielo— habló Malfoy—¿Quisieras ver el atardecer hoy? Presiento que será mucho mejor que los anteriores.
—Si, está bien— dijo llevándose un trozo de manzana a la boca.
Nadie más Habló, y nadie quería preguntar o sacar un tema que la hiciera sentir incómoda.
La mañana se pasó observando a los pavorreales, haciéndola reír por un momento al ver cómo perseguía a Nott; lo que fue música para los oídos de Malfoy.
En lo que Nott trataba de ayudar a regar las flores de Cissy, Malfoy decidió acercarse más a Anne.
—Te hice algo, no supe que podría comprarte así que— sacó de bolso un paquete— Feliz día, bonita.
Anne lo observó sonreír, le gustaba eso de Malfoy, el que sonriera solo por y para ella.
Tomó el paquete, lo abrió con cuidado y notó que Malfoy esperaba ver su reacción.
Una libreta pequeña de forro color café con unas flores incrustadas.
—Tengo una igual— dijo— lo que yo escriba dirigido a ti en la mía aparecerá en la tuya y viceversa.
Anne la abrió, en la primer hoja habían unas palabras para Anne, unos te quiero en toda la hoja pusieron a Anne feliz.
—Eres muy cursi Draco, gracias.
—Oh calla, espero de verdad le demos un buen uso.
—Tenlo por seguro, tendrás dibujos míos— dijo tomándolo de la mano— te quiero.
—Yo más Anne.
—Me agrada este Draco meloso— admitió ella.
—A mi no, siento que se escucha tonto, pero lo hago intencionalmente.
Ella solo se recostó en el, viendo el hermoso paisaje verde del jardín de la mansión.
—Eres alguien a quien solo quiero cerca— murmuró cerrando poco a poco sus ojos y dejando que los cálidos brazos de Malfoy la envuelvan.
• • •
nott ya había entrado a la mansión junto con Cissy, habían dejado a la pareja solos.
Los dos se encontraban recostados en las sillas que daban vista al cielo rojo, tomados de la mano en silencio.
Los rayos estaban poco a poco escondiéndose, estaban a punto de presenciar otro atardecer juntos cuando las nubes empezaron a aparecerse oscureciendo el cálido cielo, tapando el rojo con el gris cargado de lluvia.
De la nada la lluvia empezó a caer, pero no eran gotas normales, estás pintaban de negro todo lo que tocaran; un trueno retumbó en todo el lugar y los gritos de Cissy se hicieron presentes.
—¡Es mejor que entren!— gritó llegando a su lado.
Los dos no sabían que pasaba, obedecieron y ya en el interior de la mansión vieron cómo Bellatrix Lestrange -quien no habían visto desde que llegaron de la escuela- los miraba con unos ojos de martirio.
—Deben cambiarse, Anne dejé un vestido sobre tu cama, es mejor que se apresuren— les dijo Cissy antes de irse con su hermana.
Los tres chicos estaban ya cambiados, y algo aterrorizados por toda la situación.
Ya estando en la sala, gritos y risas se empezaban a escuchar arribando el lugar, parecía no ser bueno.
—¡Siento su llegada!— gritaba Bella— deben de sentirse honrados ante su presencia.
No era necesario romperse la cabeza para saber de quién hablaban, Nott siendo hijo de un mortifago en azkaban temía el ser marcado por el, no se diga Malfoy ya que su padre era el encargado de la misión la cual los mando a prisión.
Anne igual temía, el que estuviera ahí y luciendo un vestido parecido al de bella igual era mala señal.
Una luz verde los sacó de sus pensamientos, el terror se sentía en el aire y la falta de respiración se hacía presente en Anne.
—¡Pero que tenemos aquí!— expresaba el ser oscuro— las piezas que necesitaba ante está situación.
Voldemort se iba acercando más a ellos, en un impulso Anne los tomó de la mano, el río y con varita en mano lanzó una luz hacia los slytherin, una sensación de hormigueo se sintioó por todo su cuerpo y calleron de rodillas en el frío piso recorciendose de dolor.