Servirle al tercero de los hijos de Judge no era tarea fácil, al igual que sus otros hermanos era cruel, despiadado.
Aunque esos momentos donde mostraba su pasión por la cocina te hacían perderte en su mirada sería, y su cabello. Parecía un chocobo de plumaje negro.
"Jijiji" te ríes al imaginar a Sanji comobun chocobo.
"Oi mujer!!" Hablando del rey de Roma. Mirada sería, podías ver el frío azul a través de su fleco. Sus labios en una mueca que dan a entender que se encontraba irritado por algo.
"Señor" Volteas a verle haciendo una pequeña reverencia.
"Te estaba buscando, no se supone que debes estar conmigo en todo momento para servirme"
"Lo siento mi señor, pero usted me encargo que-"
"Olvida eso, ven conmigo" enojado te toma de la muñeca y camina por la dirección en la que vino.
....
"Dime que tal esta" coloca el plato, con un curioso postre en el, casi lanzandolo frente a ti.
"Provecho" Dices con una pequeña sonrisa. Pensando que alfinal no es tan malo.
El pastel era simple y la cobertura se veía mal aplicada, como si hubiera hecho por un niño, pero al cortar una parte podías ver el interior esponjoso y algo húmedo.
Sabía bien, a frutas.
"Esta delicioso señor" después de darle una probada dejas el tenedor a un lado y te limpas con una servilleta.
"E-enserio?!" Te sorprendió su entusiasmo. "Digo... bueno, no esperaba mucho" su mirada evade tu figura y cruza sus brazos. "Terminatelo y...."
Volteas a verle con curiosidad, el sonrojo en sus mejillas era prácticamente imperceptible.
"Mañana ayúdame con la decoración" después de dar sus órdenes sale de la cocina del su lado del castillo.
Dejándote a solas en la cocina.
Servirle al tercero de los hijos de Judge tiene sus momentos difíciles, pero en el fondo hay algo placentero en estar trabajando para él.