๐‹๐Ž๐•๐„๐‘ ๐Ž๐… ๐Œ๐ˆ๐๐„ | D...

By valwritter

22.3K 2.7K 480

๐Ÿƒโ”โ”โ” โ A veces cuando estas tan acostumbrado a tu soledad, es un poco difรญcil aceptar el amor. โž ๐Ÿงฟโ”ƒDin Dja... More

๐—ฃ๐—ฅ๐—˜๐—ฆ๐—˜๐—ก๐—ง๐—”๐—–๐—œ๐—ขฬ๐—ก ๐—ฌ ๐—ฃ๐—˜๐—ฅ๐—ฆ๐—ข๐—ก๐—”๐—๐—˜๐—ฆ
๐—š๐—ฅ๐—”ฬ๐—™๐—œ๐—–๐—ข๐—ฆ
01. Mandaloriano
02. Nave.
03. Adiรณs.
04. Sorgan.
05. Desconfianza.
06. Recuerdos y trampa.
07. Hablando del pasado.
08. Balmorra.
09. Esa es mi chica.
10. Fiesta.
11. Marca familiar.
12. Cebo.
13. Quedate conmigo.
14. De nuevo en Tattooonie.
16. Mensaje en el viento.
17. Seรฑora Rana.
18. Aguas termales.
19. Orgullo y alegria.
20. Heredera.
21. Nevarro.
22. Jedi gris.
23. Thython.
24. Escape.
๐—”๐—–๐—ง๐—ข ๐——๐—ข๐—ฆ.
25. Sable de luz.
26. Tattooonie.
27. Kashyyyk.
28. Mandalore.
29. Aguas Vivientes.

15. Cobb Vanth.

641 79 6
By valwritter

( No dije que te salvaría. )

DRAGÓN


━━━━━━━━━━━━


NO MÁS SALIERON LOS DOS SOLES DE TATTOOONIE, Violette y Din ya se encontraban a medio camino donde se supone que debían de ir.

Din le había avisado a la ojiazul que sería un viaje largo, pero parecía no importarle.

No es como si Violette no estuviera sujetando del pecho de Din para no caerse, aún que sabía que no lo haría. Le gustaba la cercanía y es que si era sincera, ya se había acostumbrado al frío Beskar de su traje. Y no decir de Grogu, que se encontraba feliz en la pequeña mochila que traía Violette con las pertenencias del pequeño como su comida y más de algún juguete.

Además que a Grogu no le importaba nada más que sentir el fuerte aire en sus pequeñas orejas.

Según tus coordenadas, estaremos ahí en un alrededor de una hora. —Mencionó la castaña al Mandalorian que solo la escuchó en silencio.


"Tengo que admitirlo, estoy demasiado cerca de él desde que amaneció." Pensó seriamente al sentir como Din presionaba una de sus manos para que se sujetara de él.


Y es que los dos no sabían lo que les esperaba en el camino, sabían que tenías varias opciones. Uno; que sea una trampa para poder robarles como lo hizo el "ladrón" de antes, y segundo. Que si sea verdad lo que les dijo y encontrar a otro Mandaloriano. Pero Din estaba decidido, tenía que cumplir con su credo y su misión.

Violette sabía perfectamente que no era nadie para decirle que hacer a Din, respeta a su credo y si así era, entonces haría lo necesario para ayudarlo. A pesar de que deseara unas pequeñas vacaciones, sabía como era el, nadie lo haría cambiar de opinión.

—Mmm... —Resopló cansada.

Estaba harta de la arena, especialmente de Tattooonie.

Había pasado por demasiado en ese lugar, había perdido a Madison y eso nunca se lo perdonaría. Pero como protectora diría: "En la vida, lo que a veces parece un final. Es realmente un nuevo comienzo."

Si tan solo se hubiera quedado, si hubiera luchado y aguantado un poco más. Ella seguiría con vida, pero simplemente desapareció de su vista junto la arena de Tattooonie, se había esfumado y no pudo hacer nada al respecto.

Apretó ligeramente el pecho de Din, sintiendo como las lágrimas querían salir.

Pero a lo lejos vio como se estaban acercando a Mos pelgo, no era grande. En realidad, se podría decir que solo habían como diez casas para ser de una comunidad.

Hasta que llegaron, todos los miraban sorprendidos o con desconfianza, algo que no dejo pasar por desapercibido a la pareja.

—Iré a dejar en un lugar seguro la speeder, ¿podrías preguntarle a alguien sobre el mandaloriano?

—Claro. —Bajo con cuidado, aún teniendo al pequeño en la mochila.

Cuando se acercaba a cualquier persona, ellos se escondían en sus casas, dejándola con la boca abierta. Pero al ver como una de esas casas estaba abierta, supuso que sería una pequeña cantina.

Se acercó y vio al cantiner limpiar unas copas, se miraba tranquilo pero cuando vio a la ojiazul se alarmó, al punto de esconderse.

Violette sorprendida tosió, tratando de llamar su atención y acercarse hasta la barra.

—Disculpe, no quiero hacerle daño. —Sonrió, tratando de calmarlo—. Solo tengo un par de preguntas que hacerle, puedo darle créditos si quiere.

—Podría tomar algo si quiere.

—Claro, está bien. —Se sentó enfrente de él—. Estoy en busca de Mandalorianos, vengo con uno precisamente pero estamos buscando a más gente.

—No se que es, podrías describirlo.

—Es como verme a mi. —Finalizó Din, apareciendo en el lugar.

—El comisario... —Lo vi ligeramente cuando sentí otra presencia en el lugar, era otro mandaloriano.

Su armadura era verde pero estaba demasiado desgastada, además que le quedaba pequeña. Pero al fin y al cabo, era un mandaloriano y eso era lo que Din quería encontrar.

Nos estaba apuntando, con delicadeza puse a grogu en la parte de atrás. No quería que saliera herido, así que saque mi láser, asombrándolo.

Tenía fija mi vista en el, al ver como bajaba su arma hicimos lo mismo. Puse al pequeño al lado mío y le dimos algo de agua, no quería que se deshidratara.

—Hey, ¿podrías darnos tres vasos y un poco de spotchka?

—¿Que? —Fue lo único que pudo decir Din al ver como tomaba los vasos y se sentaba para proceder a quitarse el casco y beber.

Violette vio a Din confundida, según le había dicho en su credo nunca se quitaban sus cascos, solo para ellos mismos o sus esposas e hijos, pero que de igual manera que era muy raro en los mandalorianos.

—Es la primera vez que miró un mandaloriano.

Este sonrió, elevando su bebida muy sonriente. Viendo de arriba para abajo a la Jedi, ocasionando que se incomodara y se acercara mas a Grogu.

Din también lo noto, poniéndose enfrente de Violette para de alguna forma protegerla de su mirada. Y no solo eso, le estaba apuntando con su blaster al extraño. El "mandaloriano" no se quedó atrás y también lo estaba apuntando.

Los dos estaban más que listos para pelear, pero de repente el lugar comenzó a temblar. Afuera se podía escuchar como la gente gritaba asustados, otros tratando de ayudarse y guardar sus cosas.

Violette sintió el miedo en el pequeño, tomándolo entre sus brazos y cargarlo.

Los dos hombres salieron del pequeño bar, quedándose justo en la entrada de esta.

La ojiazul se acercó hasta ellos. Logrando ver lo mismo que tanto espanto tenían los de ese lugar. Podía sentirlo gracias a la fuerza.

Viendo como un monstruo se comía una bantha.

—¿Que carajos es eso?

—El dragón... —Dijo mientras entraba de nuevo a la cantina, se miraba cansado y lo único que hizo fue sentarse de donde estaba antes.


Violette escuchaba la historia de Cobb atentamente, sabía que estaban jodidos con ese dragón cual podría comerse una casa si así lo deseara. Además de cómo consiguió la armadura y como pudo liberar esta pequeña comunidad de los contrabandistas gracias por los Jawas.

Din a pesar de escuchar toda la historia, no le importaba quitárselo. Debía dárselo a quien le pertenece.

Eran reglas.

—Mira, después de todo lo que te dije y me has contado. Necesitamos ayuda de los dos.

—¿Por que no hacemos un trato? —Sugerí, sintiendo la mirada de ambos.

—¿Que propones, dulzura?

—Te ayudaremos a matar al dragón, pero, nos devuelves la armadura. —Sonreí, tomando de mi copa—. Es muy importante en las normas de Mandalore y no quiero estar en todo el viaje de regreso con él enojado. ¿Que te parece?

—¿Que? —Din se miraba sorprendido, volteando a verme.

—Se donde vive el dragón, podría guiarlos y que miren el terreno. —Decía pensativo pero estaba convenciendo.

Quería matar a Krayt dragón.

La ojiazul al escuchar el nombre del dragón, se sorprendió. Madison hace mucho tiempo le había dicho sobre esas criaturas y de cómo tuvo que pelear contra una de ellas con algunos compañeros de Alderaan. La comparación, que ese dragón era un bebé.

Si ya de bebé es grande. ¿Como sería uno de adulto?

—Entonces... ¿Que opinan?

—Trató hecho.

Sin más que decir, el grupo partió hacia la casa del dragón. Din se encontraba manejando la speeder con detrás de él Violette. Ahora mismo estaban siguiendo a Cobb que los estaba guiando hasta el dragón.

—Debemos ir con cuidado. —Le alertó al mandaloriano, ambos sabían que este terreno era de los moradores de arena.

Los tusken.

—Cuidado con los francotiradores y esconde al niño en la mochila. —Fue lo único que dijo Din, poniéndose al lado de Cobb con la speeder.

—Lo tomare en cuenta.

Siguieron su camino hasta que escucharon varios gruñidos, deteniéndose y bajar de las speeder. Cobb y Violette se vieron entre sí, buscando la amenaza pero vieron a un tipo de lagartija enfrente de ellos. Pero Din también gruñó, llamando la atención de todos.

La castaña al ya no sentir peligro se tranquilizó, viendo todos los movimientos de Cobb y no bajar la guardia con el, aún no podía confiar en el.

—¿Podrías bajar tu arma? Son totalmente inofensivos.

—Eso mismo pensé, hasta que se comieron a dos de mis hombres.

—Tal vez hicieron algo que no les gusto, ya sabes como son los animales cuando están amenazando su habitad.

—¿Que estás haciendo? ¿Acaso estás loco? —Dijo ya un poco calmado, yendo a su speeder y ver unas cosas.

Hasta que se dio la vuelta y vio a moradores de arena.

—¡Pero que!

—¿¡Podrías dejar de gritar?! —La castaña se acercó a él molesta, pero Din la detuvo.

—Los moradores de arena dicen que también quieren matar al dragón. —Suspiro—. Saben exactamente donde se encuentra y lo que podríamos hacer para detenerlo.

—Genial, espectacular. —Silencio—. Esos que ves ahí, roban nuestras provisiones.

—Es eso, o hacerlo solos ricitos de oro.

Cobb lo pensó varias veces y negó, caminando hasta ellos y asentir. Sin más hicieron una tregua y se fueron con los tusken en sus bantha hacia su aldea. Tendrían que idear un plan para poder derrotarlos entre todos.

Y no sería nada fácil.

Violette entendía algunas cosas que decían, específicamente gracias a que antes conoció a uno y lo ayudó. Además que Din traducía lo que decían para ella y Cobb.

—¿Que es esto?

—Solo tómalo y ya, no nos avergüences. —Sonrió la ojiazul tomando de la pequeña fruta que le dieron.

—No lo beberé.

Al decir eso, uno de los tusken se alarmó, empezando a pelear y amenazarlo.

—¿Que es lo que dice? No me gusta el tono que me está hablando.

—Dice que se les hace una falta de respeto el hecho que no aceptes su bebida, cuando son ustedes quienes roban su agua.

—¿Que? Saben que, esto fue una mala idea. Lo mejor es que vayamos nosotros y nos encarguemos del dragón solos.

Cobb se levantó de su lugar, amenazando con sacar su blaster y todos los tusken se alarmaron, yendo hasta la fogata y rodearlos. Pero Din y Violette resolvieron todo, aceptando un nuevo trato con lo que estaban ahorita.

—¿Que ofreciste?

—A tu pueblo.


































꒰ 🧿 ꒱




































Se habían aprendido el plan de pies a cabeza, lo primero sería llamar su atención después de darle un sacrifico al dragón. Sacarlo hasta la superficie para poder activar las bombas y dañar su estómago.

El cual era su único punto débil.

Además que era enorme, tenían que tener absolutamente cuidadosos con no ser aplastados o comidos de un bocado, lo cual decidieron estar a una distancia y altura considerable para estar a salvos. Siendo Violette la que guíe a todos y la que les dará la señal al dúo para que puedan actuar y usar sus jetpack para poder atacar en el aire al dragón.

Algo que Din no acepto, se negaba al hecho que ella estuviera al frente de todos para guiarlos.

—Ya estamos aquí... —Violette vio el terreno, analizando lo que estaba por hacer.

Mientras que un tusken dejaba al bantha con explosivos en la entrada, amarrándolo y salir corriendo de ahí.

—Tu puedes niña. —Din miró a Cobb, se notaba que también estaba preocupado por ella.

Pero confiaba y sabía que Violette lo lograría, ella era capaz de hacerlo.

—Muy bien, es hora.

Aún que al principio fue difícil para el pueblo trabajar con los tusken, al final pudieron trabajar en equipo y poder organizarse para poder acabar con su objetivo.

—No te preocupes, todo saldrá bien. —La castaña se encontraba con el pequeño que la miraba preocupado—. Te prometo que regresaré para darte de comer. ¿Te parece?

El pequeño chillo feliz, levantando su pequeña mano para acariciar la mejilla de esta.

—Cuídense. ¿De acuerdo? Todo puede pasar. —Sonrió, se estaba yendo cuando sintió una mano en su brazo.

Era Din.

—Tú... También cuídate, ¿si?

Al escucharlo decir eso no pudo evitar sonrojarse, negando.

—Te veo en un rato. —Y sin más salto, ahora que ya aceptaba a la fuerza con ella como tal, había aprendido que podía dar grandes saltos.

Se resguardó, sacando su sable y llamar a todos para que la sigan. Realmente ella era la que tendría que encargarse de la mayoría, más con su sable que eso sería para llamar su atención.

—Ella si que es increíble. —Admiro Cobb, ya que todos los movimientos de la ojiazul eran con delicadeza.

—Si que lo es.

Violette ánimo a todo el equipo, brindándole apoyo a cada uno de ellos hasta comenzar a caminar sola con su sable en la mano hasta la gran cueva, podía sentir que estaba durmiendo y con lo que le habían contado Madison, hacerlo despertar lo haría enojar demasiado.

Pero eso haría que saliera de la cueva.

Vio hacia atrás, donde ya hacían todos viéndola con nervios. ¡Estaba justo en la entrada del dragón! En cualquier momento podría comérsela.

Y fue cuando esta entró corriendo hacia la cueva, ocasionando un grito de asombro de todos en el lugar. ¡Era un suicidio! Din iba a ir hacia su rescate ya que eso no era parte del plan, sabía que algo como eso sucedería.

Pero Cobb lo detuvo, debían confiar en ella y en lo que ella estuvo dispuesta hacer. Estaba pensando en el bien del equipo al solo entrar ella sola para poder sacarlo.

Pero ese silencio estaba alarmando a Din, lo estaba poniendo nervioso.

Fue cuando a lo lejos se escuchó un gran grito, era del dragón. Todos se pusieron en posiciones a la espera que apareciera el monstruo y claro que no se hizo de esperar, había salido de la cueva con la más y nada menos que Violette encima de él con su sable incrustado en su espalda.

—¡Disparen! —Grito la ojiazul, todos comenzaron a dispararle pero el cuerpo del dragón era resistente.

Al ver que se dirigía para las bombas, dio un gran salto. Alarmando a todos en el lugar al ver como se llenaba de arena pero poco a poco fue saliendo.

—Oye... ¿Como sabremos la señal de tu novia? —Cobb miraba confundido todo, ya que nunca habían hablado de cuál sería la señal.

Pero Din lo supo.

—¡Ahora!

Cobb siguió las órdenes de Mando, logrando de cierta manera dañar un poco al dragón gracias que activaron las bombas, logrando que este se volviera a meter a la arena. Todos se vieron entre sí victoriosos, pero el trío sabía que no era cierto.

Fue cuando el dragón salió de la montaña de arena hasta la superficie, alarmando a todos por ver cómo escupía ácido. Din al ver que iba a caer por donde estaba Violette fue hasta ella y la cubrió con su armadura.

—Gracias.

Ambos juntaron sus frentes, en forma de agradecimiento y protección. Entonces Din voló donde el dragón al lado de Cobb para poder dañarlo.

—¡Cúbranse todos!

Violette se dio cuenta que el dragón no salía, solo escupía y mataba a la mayoría. Entonces con la fuerza, logró que saliera un poco y que saltara, logrando que Din y Cobb le tiraran bombas.

Todos disparaban con su blaster, haciendo que el dragón cayera al suelo escondiéndose en la arena.

—No le estamos haciendo daño.

—¿En serio? No me digas. —Din vio al bantha que estaba cubierto de explosivos y el control que tenía Cobb.

Violette sabía que tenían que hacer algo, pero nada se le venía a la cabeza. Hasta que sintió como Din la amarraba con Cobb y golpeaba su jetpack para que salieran volando, lo único que logró ver, fue como el dragón se comía a Mando.

—¡No! —Grito, tratando de zafarse pero sintió como Cobb tomaba de nuevo el control, logrando bajar.

Din había logrado explotar las bombas.

¿Pero a que costó?


Narra Violette

Sentía como se me iba el aire, toque mi pecho al instante para poder calmarme de alguna manera pero mi vida se había ido.

Caí al suelo de rodillas, viendo todo y a la vez a la nada. Simplemente la arena y recuerdos, sin que me diera cuenta. Algunas lágrimas caían sobre mi mejilla.

Hasta que lo sentí.

Salió volando de su boca, regresando hasta donde estábamos nosotros y no podía creer lo que estaba viendo.

Me levante con dificultad y aún con los ojos llorosos, camine hasta el que estaba embarrado de la baba del dragón, sin más le di una cachetada. A pesar de que no le dolería y el golpe me lo llevará yo, me sentí mejor.

Y antes que me dijera algo, lo abracé.

—¿Acaso creíste que sería fácil deshacerte de mi? —Reí, sosteniéndolo más fuerte.

—Idiota.

Sus brazos me rodeaban y por un segundo creí que me estaba oliendo, pero por su casco negué. Después de eso nos separamos, ayudando a los demás con partir al dragón y llevarnos un gran pedazo para los tres.

—Muy bien Mando, trató es trató. Esto es tuyo. —Poco a poco se fue quitando la armadura, entregándosela.

—Si eres hombre de palabra. —Susurre, observándolos—. Espero nos volvamos a encontrar, Cobb.

—Lo mismo digo y suerte en su búsqueda de los mandalorianos.

Poco a poco nos fuimos alejando, grogu estaba feliz viendo la carne desde donde se encontraba y yo estaba sujetada de Din, feliz del proceso que hemos tenido en nuestra relación.

'De amigos, claro está.' Me recorte en su espalda, viendo hacia las montañas de arena pero vi una figura negra a los lejos. No me resultaba peligroso y mucho menos la fuerza me decía nada, así que solo lo vi alejarse y desaparecer junto con la arena.

—Si seguimos así, llegaremos en la noche. Si necesitas que pare, me dices. ¿De acuerdo?

—De acuerdo, jefe. —Sonreí.



Narra Narradora

El resto del camino estuvo tranquilo, incluso Violette y el pequeño se habían quedado dormidos. Din no podía negar que era tierno e incluso se sonrojó al percatarse que se había quedado dormido con el.

Se sentía cómoda a su lado.

Sintiendo cosquillas en su estómago, pero no tuvo mucho que pensar cuando de repente el speeder chocó con un lazo, logrando que todos se cayeran y Violette no pudiera hacer algo pues se había lastimado con una piedra y caer inconsciente.

El pequeño estaba de su lado y los contrabandistas estaban yendo hacia ellos. Din furioso acabo con la mayoría, no había soportado la idea que querían llevárselos de su vida y el hecho de haberlos lastimado, más a la castaña que ya hacía en el suelo todavía.

Hasta que iba acabar con el último, fue cuando se dio cuenta que estaba por acuchillar a Violette y tenía apuntando al pequeño con su blaster.

—¡Ok! Ok, te daré todo lo que quieras pero suéltalos. —Se movió con discreción, al ver que quería sus armas las lanzó enfrente de él.

Soltando la castaña y dársela a Din pero aún sin soltar a Grogu de sus brazos. Ahora apuntándole a su jetpack, poco a poco se la fue quitando, hasta que el contrabandista cayó al suelo y el pequeño se quedó volando.

Era Violette.

Había usado sus cosas Jedi, como decía Mando cuando la miraba practicar.

Tomó al pequeño entre sus brazos y fue hasta donde estaba ella en el suelo, ayudándola a levantarse. Se miraba adolorida pero se podía levantar.

—Gracias. —Dijo sonrojada, el los había salvado de nuevo.

Grogu como pudo salto para los brazos de Violette, con sus manitas tocándole las mejillas y preguntándole desde la fuerza si estaba bien, haciendo reír a la castaña por su preocupación.

—Siempre me deja afuera de los chistes. —Niega, comenzando a juntar todo.

Tendrían mucho que caminar.

Continue Reading

You'll Also Like

6.8K 243 9
por que las facciones estab tan desesperadas?? simple rizevim volviรณ y miles de veces mรกs poderoso que antes y los nuevos Sekiryuutei y Hakuryuukou p...
855 140 5
Los vampiros no sienten amor, solo lujuria... pero jungkook no estรก seguro de que eso sea todo lo que siente cuando bebe la sangre de seokjin. โ™  vamp...
56.4K 4.3K 18
๐’ฏโ„› | โ 'Cause I loved you, I swear I loved you 'Til my dying day And I can go anywhere I want Anywhere I want, just not home โž. หš(๐Ÿชฆ) ึ— โ‹†เผ„ Donde se...
83.6K 4.9K 13
๐“‚ƒ โ˜พโƒา‚ โ› La nieve nunca fue tan cรกlida ni las llamaradas de fuego tan gรฉlidas. โœ โ“˜ ๐˜ด๐˜ช๐˜ฏ๐˜ฐ๐˜ฑ๐˜ด๐˜ช๐˜ด ๐˜ฆ๐˜ฏ ๐˜ฆ๐˜ญ ๐˜ช๐˜ฏ๐˜ต๐˜ฆ...