𝑜𝑚𝑛𝑖𝑠𝑐𝑖𝑒𝑛𝑡𝑒
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Tenemos que hablar. Esas palabras resonaban en la cabeza de Paola, si algo había aprendido con el pasar de los años es que ese tal "tenemos que hablar" nunca traía nada bueno.
Felipe vio a su niña ida así que para devolverla a la conversión la rebotó un poco logrando su cometido de traerla devuelta a la tierra.
—¿Que sucede?— preguntó nerviosamente sin mirar a los adultos a la cara.
—¿Prefieres hablar ahora o después de comer nena?— pregunto Daniel.
—¿Puede ser mientras como?. —Ambos mayores se miraron mutuamente unos instantes y después asistieron. —Claro corazón, iré a traer tu desayuno— dijo Felipe sentando a Pao en la silla alta, le hizo una señal a Daniel para que acomodada y ajustara las cintas y la charola.
—Bueno, lo primero es que como sabrás, estas empezando a usar tus pañalitos de a poco... Y tu daddy y yo tenemos una idea de como hacer que los uses y te acostumbres más rápido. —Comenzó Felipe poniendo un plato dividido por secciones con pequeños panqueques recién hechos, miel y platano picado.
—La idea es que compramos un calendario y en el vamos a marcar cuantas veces has ido al baño en tu pull ups o pañal y cuantas veces has pedido que te llevemos al baño. Las veces que has ido al baño en el pañal o el pullups serán marcadas con una estrellita dorada y las veces que pidas ir al baño o no te dejes cambiar correctamente serán tachadas— continuo Daniel.
—Mientras más estrellitas doradas tengas al final del mes te daremos un premio, lo que tu quieras sin importar el costo o exclusividad— dijo ahora Felipe instalando aquel calendario en el refrigerador.
—Claro a menos que no nos convenga no se podrá, tipo no puedes pedir dejar de usar pañales o no dejar que te Cambiemos, pero por ejemplo nos puedes pedir salidas, juguetes, juegos, ropa, comida, etc. ¿Entendiste bebé?- Concluyo este mismo poniendo en la barra y fuera del alcance de la niña un biberón con leche. Habían aprendido a darle la bebida después de que comiera ya que ya habia pasado varias veces donde Paola no comía y solo se tomaba la leche o jugó de su vaso.
Paola asintio hacia su pregunta, aun no quería ser expuesta de esa manera, pero pensándolo bien... Los chicos ya no tenían nada que no hubieran visto de Paola... O eso esperaba que creyeran.
— Bueno la otra cosa es... Como sabes tu papi y yo somos dueños de nuestra propia empresa y además socios, bueno pues cuando te adoptamos nos dimos unas cuantas semanas de descanso para poder estar contigo y que te acostumbraras más rápido a todo esto teniendonos a nosotros aquí contigo en todo momento... Pero recién el viernes nos estuvieron bombardeando de mensajes y llamadas de que ya nos necesitaban de regreso.
— Así que, el lunes nos iremos ambos a trabajar, no te preocuoes no será mañana, sera el lunes de la siguiente semana, y para eso te contratamos una niñera... — Concluyó tristemente Felipe.
¡¿Una niñera?!, acaso había escuchado bien. —N-no es necesario, y-yo se cuidarme sola, lo e hecho desde los 10 y...—
—Pao, estamos avanzando enormemente en esto, recuerda que eres muy pequeña, apenas cumpliras 8 meses, y un bebé de esa edad ni de chiste se puede quedar sola en casa, no puedes caminar así que como planeas subir las escaleras, aun no te sostienes firmemente en dos pies como esperas alcanzar las cosas, y lo que es más importante, quien crees que te cambiará el pañal, dejar que te quedes sola solo será un enorme retroceso a nuestro gran avance. Además ya contratamos a la niñera. Esto no está en discusión— Felipe ni siquiera dejó terminar de hablar a Paola en su mente solo pasaba el "como se le ocurre" "ella es lo más presiado en nuestra vida ahora" "si algo le pasaría en esos momentos donde está sola jamás me lo perdonaría". Entre un largo etcétera.
— Papi tiene razón bebé, eres lo más importante para nosotros ahora, eres nuestra bebé y no queremos que te pase nada, solo será de lunes a viernes, y si no te sientes comoda con esa niñera... Bueno pues buscamos otre y ya esta.— Trato de negociar Daniel terminando de darle los últimos pedazos de panqueques con plátano.
Paola agachó la mirada, no quería que nadie la viera de esa manera era simplemente inaceptable, sería muy vergonzoso, pero por lo que acababa de ver los chicos no se veían dispuestos a ceder que se quedará sola en la casa.
. . .
—Arriba princesa el agua se está enfriando— dijo Daniel mientras tomaba a su bebé por debajo de las axilas y con ayuda de Felipe la envolvía en una toalla.
Salieron del baño y mientras Daniel secaba y umectaba la piel de Paola, Felipe subia un poco la temperatura del termostato y escogía un outfit lindo para su bebé. Se decidió por una playera blanca ligera y un body/overol azul, el conjunto venía con un sombrero azul con una fresa que se veía simplemente adorable.
Lo acomodo al alcance de Daniel y admiro un rato como Paola se dejaba pasificamente cambiar, sabía lo que se venía y Paola también, por eso estaba sumamente nerviosa mordiendo la punta de su uña.
—¿Quieres que te ayude a cambiar la o prefieres que ya me valla a bañar para ayudarte cuando sea tu turno?— preguntó Felipe.
—No te preocupes amor creo que puedo solo mejor en un rato me ayudas cuando yo me valla a bañar— respondió tranquilamente mientas terminaba de esparcir crema de bebé por todo el cuerpo de Paola.
Felipe asintió y cuidadosamente salió de la habitación.
—Bueno nena, quedamos tu y yo— se que Paola no a ido al baño toda la mañana seguramente y le den ganas cuando le demos su botella, será suficiente líquido con la que se tomó de desayuno para que quiera evacuar. Está vez le pondré pañal, por que aparte se verá lindo con el conjunto que escogió Felipe, aguantará más liquido. -Pensó-
Daniel saco de los cajones del cambiador un enorme y acolchado pañal blanco junto con talco, aceite y crema anti rozaduras, se encontraba desdoblando el pañal y cuando estuvo a punto de ponerlo debajo del aún descubierto trasero de Paola su niña alzó la voz. —¡Espera!— gritó con desesperación.
—¿Que pasa cielo?— preguntó con un poco de preocupación en su voz gracias a aquel grito.
—E-es que t-tambien tengo vello allá abajo— dijo nerviosamente mordiendo con aún más fuerza la punta de su dedo.
—Lo se bebé, no es la primera vez que veo tus partesitas de princesa— contestó Daniel calmadamente ante la situación hasta que vio la cara suplicante de su bebé.
Hecho un pequeño suspiro antes de hablar.— Ok primero antes que nada saca tu dedito de la boca hemos hablado sobre esto tus uñas tienen muchas bacterias, y segundo... Si lo que quieres decir es que también te depile tus partes íntimas la respuesta es no, tenemos vello ahí abajo por una razón y es para prevenir infecciones, además de que es natural tener vello nena, casi todo el mundo tiene y no tiene por que avergonzarte, ni a mi ni a tu papi nos da asco cambiarte solo por eso.— dijo mientras sacaba una mordedera de plástico de el cajón donde tienen los chupetes y acto seguido se la entregó.
Paola metió el aro de plástico en su boca y comenzó a mordisquearlo ansiosamente antes de contestar.— Pero si alguien más me cambiará y verá mi vagina no quiero que la vea en este Estado, ya es vergonzoso que ustedes la vean— contestó bajito pero lo suficiente fuerte para que Daniel la escuchará.
Nuevamente Daniel hecho un suspiro. —Mira, si prometes dejarte cambiar apenas mojes tu pañal accedere, también te pondré cremas para prevenir este tipo de cosas. Tómalo o dejalo— negocio con malicia, sabía que era muy probable que Paola pidiera ir al baño pero trataría de hacer todo lo posible para que lo hiciera en su pañal sin que se sintiera obligada.
Paola lo pensó un par de minutos, finalmente suspiro resignada y asintio Daniel soltó una pequeña sonrisa victoriosa y se dirigió al baño ordenándole a Paola que no se moviera o intentara bajar del cambiador.
No pasaron ni dos minutos cuando Daniel había vuelto con una crema en sus manos, la abrió y embarro un poco en sus dedos seguido de esto la embarro por toda la soña v de su niña.
Paola no podría estar más avergonzada tanto que tapó su cara hecha tomaré y comenzó a morder más fuerte el objeto de plástico que Daniel le había entregado anteriormente.
Este, para hacerle el rato menos incómodo a su bebé, saco su teléfono y buscó las canciones que tanto le gustaban a su pequeña, le entregó el celular y siguió con su tarea.
. . .
10 min despues, limpio todo el vello caído con una toallitas húmedas y humecto con una crema de coco especial.
De reojo miro a Paola que estaba concentrada en escuchar "no se habla de Bruno" por tal vez 10vez sin duda la película de ayer "encanto" le había gustado de sobremanera.
Por último esparció aceite de bebé, talco y cremas anti rozaduras, cerro el pañal de manera de que solo fuera abierto una sola vez, dos dedos más abajo del ombligo, y finalmente cerro los botones de la entrepierna del body y tomó un pequeño botesito de perfumede para bebé esparciendo lo por todo el cuello y ropa de Paola.
Daniel tomó a la niña de la cintura y la acomodo en sus brazos de manera que estuviera acunada.
Iban saliendo de la habitación cuando se toparon con Felipe que venía con artefactos para peinar, tales como cera de bebé, cepillos especiales para bebé y pequeñas ligas de plástico.
Los tres bajaron Daniel con la pequeña en brazos y Felipe con los artefactos para peinar a su bebé.
En la Sala estaba puesto un puff con forma de conejo rosado con blanco
Daniel sento a Paola ahí y de quien sabe dónde por que no se notaban, abrocho unas cintas que semejaban al cinturón de Seguridad de la silla que tenian en el auto.
Paola saco una mueca de disgusto al ver que casi no podía moverse gracias a que las cintas impedían muchos movimientos.
—Sin caras pequeña, estas al cuidado de papi y voy a estar ocupado con tu cabello así que no quiero que te muevas demaciado— dijo Felipe al ver la cara de disgusto de su bebé.
—Iré a bañarme y preparar lo demas encargaté de ella y para que no te de tanta guerra ponle una película o algo— dijo Daniel antes de dejar por lo menos tres besos cortos en los labios de Felipe y subir al segundo piso a arreglarse.
—¿A donde vamos?- pregunto curiosa Paola.
—Oh cierto, olvidamos mencionarte te programamos una cita con María, la mamá de Sofía, ella es pediatra y doctora, no nos gusta el tipo de actitudes que tomas al ponerte nerviosa como mordisquear tus uñas o mover el pie de arriba a abajo ansiosamente sin mencionar el ataque del otro día así que te llevaremos a un chequeo completo, a se me olvido mencionar también es psicóloga y experta en psicopedagogía, entre un largo etc.— decía Felipe mientras ponía "cuan lejos voy" de "moana".
Oh no. Pensó Paola. No esto, no otra vez
Flashback
—Señores hemos diacnosticado a su hija con estrés y ansiedad incluso con tendencias de depresión- Dijo el psicólogo refiriéndose a los padres de Paola.
—JA ¿depresión? ¿Ansiedad? ¿Estres?, y por que si no hace nada, o ya se es por eso, se pasarsela hechada sin salir ni socializar eso es lo que tiene, es una floja y una buena para nada, en mis tiempos eso era ser raro. —dijo el señor Alejandro en tono burlón
—Sii en nuestra época eso ni siquiera existía eso, es obvio que se lo está inventando, no existe tal cosa lo único que tiene es querer llamar la atención y eso se arregla con unas buenas correcciones.
Los padres de Paola gritaban y discutían con el psicólogo dentro del consultorio, ella estaba en la Sala de afuera de este mismo pero debido a los gritos lo escuchaba todo. Odiaba que sus padres se gritasen no quiso escuchar más, se hizo bolita en el sofá de la recepción y tapó sus oídos. Solo tenía 8 años ¿por que le pasaba esto?.
Ambos señores salieron del consultorio echando humo por las orejas,
—eso me ganó por escuchar a esa maestra tuya ¡vámonos camina!— bruscamente tomaron a su hija del brazo y salieron del consultorio.
Paola recordaba a detalle lo que paso después, su padre se Quito el cinturón y "curó" a su hija de todo mal corrigiendola como lo hacía su padre en sus tiempos y su madre la mantuvo ocupada haciendo tareas y labores del hogar por casi un año.
Fin del flashback
—N-no— murmuro Paola mientras Felipe terminaba su tarea. Paola se había quedado callada mirando a la nada durante por lo menos 5 min.
Felipe no se preocupó ya que pensó que simplemente su bebé estaba atenta a los dibujos de la tele ya que tenía su mirada fija en está.
—¿Perdón mi vida?, no te escuche— dijo Felipe acercándose más a Paola para escuchar mejor.
Paola se puso nerviosa, ya que aunque Felipe no lo habia hecho con malas intenciones ni a manera de reto, así la solían intimidar la sus padres cosa que solo reaccionó como dolía hacerlo.
—No n-nada— respondió con miedo.
. . .
Un rato más tarde Daniel bajo ya arreglado con una pañalera que simulaba un bolso cualquiera en mano
Felipe y Paola se encontraban viendo la "princesa y el sapo", Paola parecía estar sumergida en la película ya que su mirada estaba pérdida en está, pero lo rato es que era el minuto de la canción "ya llegare", y si algo había aprendido estas semanas es que Paola siempre cantaba las canciones de las películas que le gustaban y anteriormente ya le habían puesto esa película y como cualquier otra estaba emocionada cantando su canción bajito casi indudablemente.
Se acercó un poco preocupado y Paola instintivamente giro su cabeza rápidamente en su dirección, se veía rara, no mal si no como si algo le molestara y no pudiese decirlo.
— Quedaste hermosa mi niña, pareces una princesita— dijo Daniel sacandola del Puff y acomodandola en su antebrazo. El comentario fue por que pensó que probablemente estaba avergonzada por que cientos de "extraños" la vieran usando ese tipo de ropa.
Pero Paola solo dedicó una sonrisa tratando de que se viera lo más creíble posible estaba nerviosa, no por su pañal o por su ropa si no porque tenía miedo, miedo de que no la quisieran más, miedo de repetir ese horrible recuerdo, miedo a ser ignorada y hechada de ese hogar que tanto le gustaba y le había cogido cariño.
—No te preocupes hermosa, la clínica de María se especializa en bebés como tu, no tienes por que avergonzarte te ves muchísimo más que hermosa— trató de hablar ahora Felipe.
Paola asintió y forzó otra sonrisa ahora mordiendo su lengua quería reprimir a toda costa el nudo en su garganta que siempre provocaba lagrimas.
—Bueno, mientras daddy y yo arreglamos un par de cositas más que te parece si terminas de ver tu película— preguntó nuevamente Felipe arrebatando a Paola de los brazos de su novio.
Paola como respuesta asintió tratando de actuar lo más normal posible a pesar de sentir un enorme miedo y ansiedad dentro de si.
—Bueno, como se que eres una niña obediente te volveré a sentar en el Puff ahora sin cintas de Seguridad, confiamos en ti de que no te levantaras ni andaras por ahí sola merodeando por la casa, ¿verdad?— dijo nuevamente Felipe, sentando a Paola en el Puff.
Ambos mayores se alejaron y Paola solo se preocupó en tratar de dejar de pensar "estupideces" y concentrar su atención a la pantalla frente a ella..
Pero simplemente no podía no dejaba de pensar en lo que pasaría después de eso y no quería averiguarlo, si mal no recordaba en la lista de castigo habían azotes, lo cual la alarmó más y se llevó a pensar en que este sería su castigo regresando a casa.
—Listo hermosa vámonos— Daniel apareció frente a Paola y cuidadosamente la tomo en brazos, apagó la tele y se encontró con Felipe en la entrada de la casa.
La familia salió de la casa y a cada paso que daban Paola sentía más miedo de todo.
Daniel abrió la puerta trasera de uno de sus autos y cuando estuvo a punto de sentar a Paola en su silla está se aferró a su cuerpo. —Vamos Pao hemos hablado sobre esto— dijo Daniel al ver que Pao nuevamente daría guerra al no quererse sentar en su asiento.
—¿Puedo ir adelante con ustedes?— murmuro con voz apagada. Daniel noto su extraño comportamiento y la separó un poco de su pecho para verle mejor su carita. Al hacerlo vio unos ojitos apagados que reflejaban miedo y sin mencionar apuntó de desbordar lágrimas.
Daniel se sentó en una esquina del asiento del auto y abrazo fuertemente a su bebé en un intento de calmarla. —¿Que sucede bebita?, ¿te sientes bien?— preguntó revisando por todo el cuerpo de Paola algún rastro de molestia o algo que provocara dolor.
Paola callo unos segundos y una pequeña lágrima rebelde salió de su ojito, fingió bostezar y dijo. —Estoy bien daddy, solo tengo sueño— uso su táctica maestra voz aniñada y el apodo que sabía que si usaba Daniel caería a sus pies.
—¿Estas segura bebé?— cuestionó un momento ya que Paola solo lo había llamado así en su little space. Pao asintió y pidió un Bibi de la manera más infantil y vergonzosa posible para no levantar sospechas.
Felipe que presenciaba todo desde lo lejos rebusco entre los bolsillos de la pañalera hasta sacar un biberón de 400ml y unos topersitos donde se guarda la leche en caso de una salida
—Yo te cubro Dani— dijo ahora sacando un termo con agua caliente. Rápidamente preparó una mamila y guardo los demás materiales, se acercó a donde su bebé y novio, y se la entregó.
Esto me va a costar mi dignidad pero tengo que atrasar lo más que pueda esa cita pensó Paola. Daniel estaba por entregarle el biberón a Paola cuando está abrió la boca en una obvia señal de que quería que el se lo diera.
Daniel la miro confundido Paola no se había comportado así ni en su little space. Tal vez quería dar el siguiente paso, ¡¿pero por que ahora?! Si no se apuraban iban a perder la cita y si de algo se caracterizaba María, era de ser súper puntual y esperar lo mismo de los demás.
— Pao sabes que muy pocas cosas te las puedo negar... Pero ahora no mi nena si te doy ahora tu biberón y nos quedamos hasta que te duermas perderemos la cita y tendremos que volver a agendarla...
—No te preocupes amor yo se la doy, tu conduce y así llegaremos a tiempo— dijo Felipe sin dejar terminar hablar a Daniel
MALDITA SEA. Pensó Paola, estaba a nada de considerar hacer un berrinche hasta que cayó en cuenta de como estaba actuando, ¿por que se estaba comportando así?, ella no era una niña pequeña para tenerle miedo al doctor ni mucho menos, aunque a lo que tenía miedo no era al doctor era a lo que pasaría después de la cita. Suspiro pesadamente y estiró sus brazos a Felipe quien felizmente la cargo.
Cada quien fue a su respectivo lugar del auto. Daniel de piloto y Felipe, aunque simpre hiba de copiloto, ahora estaba sentado en el asiento de atrás a un lado de la sillita de Paola. Esta misma se encontraba en el regazo de Felipe recibiendo la mamila que había pedido se sentía sumamente avergonzada, esta era la primera vez que alguien se la daba en lugar de tomarla ella misma.
Gracias a los movimientos del auto, las suaves caricias de Felipe, y el relajante objeto gomoso con reyeno líquido sabor vainilla Paola fue agarrando sueño.
Trato de luchar contra el pero le fue imposible y finalmente cayó inconciente.
[3/3]
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Hola como se encuentran aquí la tercera parte del capítulo anterior que ¿tal les pareciooo?.
Hubieron un par de imágenes que no pude poner en el capítulo como las siguientes
El peinado de Pao que van a tapar en el capítulo siguiente ya que si usará el gorro que venía en conjunto con el body.
El diseño de la mordedera
Y por último el de el biberón, no sabía cómo ponerlo así que aquí les dejo las fotos por si mes daba curiosidad.
Otra cosa xD, recientemente ayer me enferme, nada grabe no se preocupen, pero eso me dio una idea para un capítulo.
¿Les gustaría un capítulo donde Paola se enferme días antes de que Daniel y Felipe vallan a trabajar?
Los estaré leyendo Uwu
Esta nota ya se alargó bastante así que se me cuidan chavos bay tomen awita