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-¡MAMÁ! ¡NO ENCUENTRO MIS ZAPATOS!- Gritó Ron bajando las escaleras despeinado y en calcetas
-Ron, mamá está ayudando a Ginny a buscar el cepillo- Dijo Anne viendo a su hermano y tratando de evitar reír
Era la 1:00 Pm del 30 de Julio de 1996, cumpleaños de Neville Longbottom.
Anne había llegado hace un par de minutos para recoger a los adolescente, Luna, Harry y Hermione ya solo esperaban a que los dos menores Weasley terminaran de arreglarse para que Anne pudiera llevarlos a la mansión Longbottom.
Remus la había acompañado a la Madriguera pues pasaría la tarde con Sirius en Grimmauld Place tratando de remodelar con todas las cosas que Sirius había comprado.
-Mis zapatos son más importantes que el cepillo- Dijo Ronald
-¿Acaso no te da verguenza estar desarreglado frente a tus amigos?- Le preguntá Anne y Ron volteó a ver a sus amigos mientras se sonrojaba ante la presencia de Mione así que subió las escaleras corriendo nuevamente
Anne rió un poco y salió el patio junto a Remus que disfrutaba el viento que le proporcionaba el día.
-¿Qué decía la carta de esta mañana?- Preguntó Remus a Anne una vez que la chica llegó junto a él
-Nora Deidre; me avisó que harán el procedimiento en Ben el próximo fin de semana, más exacto, el Sábado 9 de Agosto- Dijo la chica tratando de no ponerse sensible
-Sabes que es lo mejor para él ¿Verdad?- Le dijo el castaño mientras abrazaba a su amada
-Lo se, pero me aterra que algo salga mal-
-¿Tienes el presentimiento otra vez?- Preguntó el licántropo aterrado
-Gracias a Merlín no, pero no puedo siempre depender del presentimiento- Contestó la mayor de los hijos Weasley
-Entonces todo estará bien, si no tienes el presentimiento significa que por el momento no hay de que preocuparse cariño-
Anne puso una pequeña sonrisa en sus labios y acercó su rostro al de su amado mientras posaba sus manos en los hombros del hombre, en cambio, Remus tomó con una de sus manos la cintura de la chica y la otra la posó suavemente sobre la mejilla de la pelirroja como si su piel se tratara de la más fina tela de seda que al mínimo toque puede desgarrarse. Después de unos segundos, sus labios se unieron en un apasionado beso hasta que...
-¡ANNE!- Se escuchó la voz de Ginny desde adentro
-Lo siento- Susurró la pelirroja a su amado
-No te disculpes, ve con ella, yo te espero aquí- Contestó el castaño igualmente entre susurros
Anne le dio otro pequeño beso y entró nuevamente a la Madriguera hasta toparse otra vez con los tres adolescentes...
-¿Y Ginny?- Preguntó la mayor a las chicas y el elegido
-Aún no ha bajado, sigue en su habitación con su mamá- Contestó Luna mientras trenzaba delicadamente el cabello de Mione quien estaba concentrada leyendo
-Bien, espero ya no tardar en irnos- Dijo la chica caminando hacia las escaleras de su casa
Al entrar a la habitación de su hermana menor se encontró a la anteriormente mencionada y a su madre en medio de una discución.
-Es que no me veo bonita, mamá- Le decía Ginny a su madre una y otra vez
-¿Cómo que no Ginnebra? Te ves preciosa- Le repetía Molly
-¿Qué sucede esta vez?- Preguntó Anne interrumpiendo la discución
-Ginny se la pasa diciendo que se ve mal y no es cierto- Contestó la madre de las ambas chicas
-Por Merlín Ginny- Susurró Anne- Mamá ¿Podrías dejarme a solas con Ginny un momento?- Preguntó la misma y Molly asintió mientras salía de la habitación
-Bien ¿Qué te preocupa?- Preguntó la hermana mayor mientras tomaba asiento en la cama frente a la menor de la familia
-¿Crees que me veo bonita?- Preguntó la pequeña pelirroja mientras no dejaba de verse al espejo
-¿Bonita? Ginny, eres hermosa por dentro y por fuera. Mucho más hermosa que yo a tu edad, yo usaba unas enormes gafas y a pesar de jugar quidditch no tuve un cuerpo perfecto, además de que siempre me importó mucho lo que decían de mi... "Anne, tu cabello corto no me gusta" pues me dejé crecer el cabello, "Anne, tu cabello recogido se ve asqueroso" pues dejé de recogerme el cabello, "Anne, subiste de peso en verano" pues ahí me ves dejando de comer, en mi quinto año yo me sentía una reina porque cada que cambiaba algo que no les gustaba me hacían sentir como una, pero después dejé de sentirme así porque no me sentía cómoda conmigo misma- Para ese momento Anne ya estaba tras su hermana mientras la tomaba de los hombros- Pero tú Ginny, tú no necesitas saber la opinión de nadie porque eres perfecta y no hay nadie que pueda decir lo contrario-
Al momento en que Anne finalizó, posó su barbilla sobre la cabeza de su hermana menor mientras la abrazaba, estaba más claro que el agua que Anne no había vivido una adolescencia como se debía, tuvo sus malos momentos y años, pero también ella creía haber tenido años y buenos recuerdos, aunque, entre más crecía y más lo pensaba se daba cuenta de que realmente no fue feliz.
Gracias a Merlín la vida le había cambiado, y ahora ella creía firmemente que cruzaban el huracán antes del arcoíris.
-No se que soy de Harry, osea, no nos hemos dicho directamente que nos gustamos pero lo sabemos. A veces nos tomamos de la mano y él me da besos en la mejilla y yo una vez besé la comisura de sus labios y el se veía tan tierno sonrojado. Pero no hemos pasado de eso y me estoy desesperando- Confesó Ginny sin más mientras sus facciones representaban lo frustrada que se veía
-¿Lo quieres?- Preguntó la chica y Ginny asintió- ¿Él te quiere?- Ginny volvió a asentir- Entonces tú da ese minúsculo empujón que ambos necesitan, dile abiertamente lo que sientes y si él no tiene miedo de también confesarte sus sentimientos significa que todo está bien, y en caso de que algo no salga bien sabes que yo te esperaré aquí con un par de escobas y un día libre solo para ambas- Dijo Anne mientras volteba a Ginny y seguidamente le daba un beso en la frente
Después de un par de minutos más, finalmente la mayor y la menor de los hijos Weasley bajaron las escaleras, donde Harry se le quedó viendo como un bobo a Ginny, y Remus, que a pesar de que Anne no había cambiado su ropa o algo así, veía a su amada como si un aura brillante la envolviera y la volviera más preciosa.
Y finalmente casi a las 3:00 Pm de la tarde de aquel 30 de Julio lograron partir por medio del Ford Anglia hacia casa de la familia Longbottom.
El cumpleaños de Neville fue disfrutado por todos, los adolescentes se dedicaron a jugar cada juego de mesa que se les ocurría, corrían a todos lados y no habían parado de reír y sonreír. En cambio, Anne y Augusta Longbottom se dedicaron a tomar el té, la señor Longbottom fue una de las personas que más había apoyado a Anne pues prefería no hacer caso a los chismes del Profeta o cualquier otro periódico mediocre, así que nadamás al enterarse de una parte de lo que había sucedido fue de las primeras en querer hablar con la pelirroja y escuchar su versión de la historia.
Para Neville, fue de los mejores cumpleaños, sus amigos lo celebraron junto a él, todos juntos partieron el pastel y había recibido regalos, desde más libros de herbología, dulces y semillas para plantar, hasta un gigantezco Kit de herbología que Ginny y Luna le habían regalado al unir sus ahorros, claro que Anne también aportó algo. Sin duda el Gryffindor amaba a la familia que había formado ese año.
Porque hace un año, en vacaciones de verano, a penas y comenzaron a convivir más y la llegada de Anne no los separó, Anne solo consiguió unir más a la familia....
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¡Capítulo 137!
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Ya quisiera yo tener una relación así con mi hermana menor, ella me cambiaría por ver a un caballo disfrazado de unicornio 🤡🤝🏻
Atte: Potterhead