》T/n 《
Últimamente no he estado muy concentrada, y no solo yo lo había notado, mis compañeros me preguntaba si todo estaba bien, o si... algo me ocurría. Yo solo contestaba que si, todo estaba bien. Pero no voy a negar que si me sentía algo diferente, como con más energías, era una sanción bastante extraña para mi, me sentía algo... feliz, y la verdad no es normal en mi...
Habían pasado unos días desde la última conversación que tuve con Mina. Ella ya salía más seguido de su habitación, era un gran progreso para su tratamiento. No salía del palacio, se perdía en los alrededores del lugar, o solo se iba a mirar el lago por un largo tiempo.
Sus amigas iban constantemente a visitarla, la veía sonreír cuando estaban juntas, pero cuando se iban, ese semblante triste volvía, parecía una felicidad instantánea, le duraba poco.
Y es extraño, pero me dolía verla así...
No me acerco a ella para nada, aunque fue agradable lo que pasó la otra noche, algo en mi me impedía estar cerca de ella.
Sigo buscando la razón... quiero echarle la culpa a que en mi trabajo es vital darle su espacio al cliente, pero quizás solo busco excusarme para no acercarme a ella...
Sólo la miraba a lo lejos, era mi trabajo, y no me estoy justificando, a veces me sentía como una acosadora, pero es parte de lo que hago ¿no? Ahhhh!! Si que no estoy nada bien...
Miré mi celular - 4:45, pronto tendré mi descanso - pensé.
Empecé a caminar hacia la cocina, era lunes, y lo único bueno de eso, es que está la señora Yisure, ella cocinaba unos deliciosos Takoyaki, que cada lunes sin falta en mis descansos, me regalaba un poco, están amable...
Me coloqué mis auriculares mientras caminaba, puse mi playlits favorita en aleatorio, ahora con que sorpresa me saldría...
Toqué la puerta con delicadeza, y la sonrisa de la señora Yisure fue la señal para entrar.
- Buenos días T/n, pasa, pronto te sirvo un plato.
- Gracia, que amable... - sonreí después de sentarme en la banca quedando frente a la barra.
- Y cómo has estado hija?
- Bien... lo de siempre.- dije mientras me quitaba un auricular, estaban The Doors, seria un pecado quitar esa joyita.
- Me alegro hija, ten...- Se giró y me sonrió dejo frente a mi un plato de Takoyaki, yo igual sonreí, se veía delicioso.
Tenía una manera de hablarme, me gustaba que me llamará hija.
- Y usted como a estado señora?- dije mientras tomaba los palillos para empezar a comer.
- Pues ya sabes, hay mucho trabajo, como tu dices, lo de siempre... - yo solo asentí sin dejar de comer - que sabes de la señorita Myuoi - dejé de comer y levante mi rostro.
- No te atragantes hija, primero come!! - se reía de mi - tomate tu tiempo...
Yo reía mientras limpiaba mi boca, es que en verdad estaba deliciosa la comida.
- Ella al parecer se encuentra bien, la vigilo- dije después de masticar.
- Pobre niña, lo que sufrió fue algo que no se lo deseas ni a tu peor enemigo - dijo triste- pero parece que está mejor, eso me alegra!!- sonrió sutilmente.
- Si...
Por un momento me perdí en mis pensamientos, Mina si estaba mejor?
- Y que tal la comida hija?- me hizo volver en si cando me llamo- está deliciosa señora, tiene talento en sus manos, como está su familia?
- Bueno... - negó con la cabeza - mi hija se quiere ir a occidente, ya no la puedo detener, ya es mayor de edad...- la señora Yisure platicaba conmigo mientras seguía partiendo algunos vegetales para la hora de la comida- no quisiera que se fuera, es mi única compañía...
Ya hacia tiempo que hablaba con la señora Yisure, ella me contaba que solo tenia a su hija a su lado, su marido había muerto ya hace tiempo atrás, y ella y su hija se habían valido por si solas, una historia de superación sin duda. Entablamos una bella amistad, tanto, que logré poder platicarle algo sobre mi, algunas cosas claro...
- Y aunque me duela... se que su sueño es se una gran cheff.
- Tiene como serlo, estoy segura que heredo su talento.
- No es por nada pero ella hace un delicioso tempura- reía- te encantaría.
- Me encantaría probar su comida - dije sinceramente.
- Eres una gran persona T/n, lo que haz pasado, fue duro pero saldrás de esto- tomó una de mis manos, no lo esperaba, pero me llenaban de fuerza. - Y claro!! te llevare a conocer a mi hija, se llevarían muy bien, bueno antes de que se vaya... - bajo su rostro con tristeza, le di un leve apretón a su mano, aún la tenia sobre la mía. - Gracias, ya vera que todo estará bien...
Pasé un rato más charlando con la señora Yasico, algunas anécdotas que pasaban en la cocina con los demás sirvientes, yo le contaba cosas divertidas que pasaban de mi lado, y así, pasamos un buen rato, hasta que me di cuenta que me había pasado de mi hora de descanso, y de inmediato me levante de mi lugar agradeciéndole por la comida.
~•~
Caminaba a peso veloz directo al lago, esperaba que Mina sugiera ahí, pero...
- Rayos!!- solté con frustración.
Ya no estaba ahí, buscaba por todos lados, buscaba con mi mirada en cada rincón, pero nada, me estaba empezando a desesperar, tendría que ir a buscarla al palacio, debía estar cerca.
- A no ser que... - miré el lago por un instante- No!! eso nunca...
Me giré ignorando esa idea y volví al palacio.
Disimulaba que había perdido a Mina, a Mina, la hija del primer ministro, no puede ser T/N, que haz hecho...
Mis compañeros solo me veían raro cuando pasaba de un lado a otro, pero yo seguí en mi papel, haciendo como si nada pasará.
Subía y bajaba las escaleras, y en ningún lado la podía encontrar.
Me paré por un momento a respirara y repasar los lugares en los que había estado.
- Piensa T/N!! en que lugar puede estar...- extendí mi manos para empezar a seleccionar con mis dedos los lugares en los que ya había buscado. - Cocina: no, están cocinado, sala: no estaba nadie, jardines: solo estaban los guardias, su habitación: la estaban limpiando, el comedor: nadie estaba, el lago...
Suspiré frustrada pasando mis manos por mi cabello.
- No... que lo que estoy pensando no sea por favor... sentía miedo de tan solo pensarlo.
Me abroché mi saco y empece a caminar de nuevo al lago.
Rogaba a quien sea que estuviera escuchando que Mina no hubiera hecho alguna estupidez.
Me pare en la orilla del lago, buscando algo sobre el agua. Mis manos temblaban mientras que yo seguía buscando, pedía a gritos no encontrar nada.
- MINA!!- grité- MINA!!!- una y otra vez, pero no había respuesta.
Un terror me empezó a invadir en todo mi cuerpo, un miedo tan profundo que nunca había sentido, ni siquiera en las misiones de vida o muerte en las que había estado, sentía tanto miedo como ahora.
No tenía ninguna respuesta, di vueltas de un lado a otro cerca del lago, pero nada, todo era inútil, no podía seguir engañándome, tenía que hacerlo.
Con desesperó empece a quitarme mi saco y mi corbata, me quitaba mis zapatos, aventándolos lejos, iría a buscarla.
- T/N QUÉ HACES??
Me detuve antes de aventarme al agua, me giré para donde venía la voz.
- Qué carajos haces??
- Myoui-san ‐ tartamudiba- está ahí adentro, no la encuentro por ningún lado, quizás se aventó al lago... tengo que salvarla!!
- T/n de que hablas?? - mi compañero me miraba desconcertado - ella está en el palacio...
Me detuve por un momento a asimilar lo que acababa de escuchar pero como?? - QUÉ??? PERO SI VENGO DE ALLÁ!!
- Está en su estudio de baile, no sabías que tiene uno?
- No...- dije más tranquila.
- Si que estas mal... anda búscala antes de que te despidan. - mi compañero comino y desapareció del lugar.
Me quede quieta por un momento tratando de asimilar lo que acababa de pasar, respiré profundamente y me volví a colocar la ropa que me había quitado.
Mi cabeza estaba llena de muchas cosas, en cualquier momento podría explotar.
~•~
Caminé hasta quedar en medio de la gran entrada del salón de eventos especiales. En el fondo de esté, pude ver una puerta de doble hoja con unos zapatos de ballet tallados a mano en la madera como había dicho un sirviente del palacio, a quien le había preguntado antes. Usualmente era el único lugar donde no había buscado.
- Cuanto detalle...- pensé.
Lentamente empece a caminar hasta quedar frente las puertas, la verdad es que el detalle si es hermoso. Coloqué mi mano sobre la puerta y está se abrió, no tenía seguro.
- Mina? - la llame, pero no obtuve respuesta.
Qué debía hacer?, no es apropiado entra sin un permiso, pero también era parte de mi trabajo saber que ella estaba bien.
Algo era cierto, estaba dispuesta a las consecuencias, hace rato casi me tiro al lago con tal de salvarla, ahora no era la excepción.
Abrí la puerta y entre a la sala, espejos en ambos costados del lugar, pisos de madera, un candelabro en el techo, y unas telas de terciopelo color vino tinto, decolaban las partes donde no había espejos. Me giré y en mi costado había un piano color negro brillante.
Mis ojos brillaron al verlo, me acerque a el y me senté en el banco.
Levanté la protección de las teclas y coloqué la yema de los dedos en éstas hasta rosarlas, quería volver a tocar el piano, lo extrañaba bastante.
- Qué haces aquí?
De inmediato me levanté del asinto cuándo escuché su voz.
- Emm... perdón... - carrespie la garganta- la estaba buscando...
- Pues ya me encontraste...
Pero... qué acababa de escuchar? Enserio respondió así?? Solo bajé la cabeza, otra vez se estaba comportando como una idiota.
La miré de reojo, acercándose y sentándose en el banco del piano.
- Tocas piano? O solo tenías curiosidad?
Subi mi rostro, ya algo fastidiado por su comentario, no tenía otra opción, debía aguantar su arrogancia.
- Si se tocar el piano Mina...
- A ¿sí?- se giró para mirarme- puedes tocar algo?
Yo sólo la miré y acenti, no valía la pena tratar de descifrar a que estaba jugando, decidí ignorarlo y acercarme hasta el piano, de cualquier manera, ella seguía siendo mi jefa.
Me senté a su lado, mirando las teclas del piano, de verdad extrañaba tocarlo. Pensaba que canción tocar, tenía tantas opciones, pero una en especial llamó mi atención.
- Te gusta el rock?
Le pregunté llamando su atención, que tardó en captar, parecía que se había perdido un poco.
- Si... no es algo que escuche siempre, pero creo que me gusta.
- Bueno... espero que conozcas está canción, es de mis favoritas, y significa mucho para mi. - posicione mis dedos en las teclas y respiré profundamente - ya hace bastante tiempo que no toco el piano!! - dije sonriendo y mirándola esperando que también lo hiciera, pero nada... si que era difícil de entender.
Borré la sonrisa de mi rostro ignorandola por completo, aquí lo importante es que volvería a tocar el piano...
Cada nota que tocaba, cada melodía que mezclaba, me hacia irme cada vez mas lejos de ahí, ya no recordaba que ella estaba a mi lado, solo era yo y mi música. Fue una sensación que extrañaba demasiado, y el volver a experimentarla me hizo no querer parar de tocar... me sentía feliz, y no es que fuera egoísta pero esto era mi momento, una pequeña parte mi vida había vuelta a mi, que pensé que ya no existía.
Xuando había terminado la canción, aún continuaba con esa hermosa sensación en mis dedos, tenia mis ojos cerrados disfrutando de lo que había pasado.
- Eso fue...
En un instante mi momento perfecto se derrumbo, su voz me había jalado haciéndome caer al mundo real. Giré mi cabeza para mirarla, cayendo directo en sus ojos, otra vez estaba ese brillo.
- Hermoso... - habló casi en silencio- ¿te gusta mucho la música...? porque en la forma en la que te fuiste... - me miraba fijamente- se nota que lo disfrutaste...
La mitaba fijamente tratando de entender como es que alguien cambiaba de estado de ánimo tan rápido, era... mejor así... ella tendrá sus razones.
- Esto es lo que amo- respondí sinceramente - no tengo palabras para describir lo que siento cuando hago música es..!!.- me detuve mirándola tratando de controlar mi felicidad al explicarle el como me sentía al tocar el piano- es... incluible...- terminé suspirando al perderme en sus ojos - creó que sabes a lo que me refiero- ella inclino un poco su rostro con duda- si!! cuando bailas... apuesto a que sientes lo mismo que yo...- sonreí tiernamente- apuesto ha que si te ha pasado...
Mina bajo su rostro cortando el contacto visual.
- Me pasaba... ahora no se si lo que viví me haga volver a sentirlo...
Su voz se corto un poco, sabía perfectamente a que se refería, no podía evitar que algo dentro de mi me doliera, pero no quería sentir eso, no quería desarrollar un vinculo con ella, ¿quizás este a tiempo a evitarlo? o... ¿no...?
Despeje mi mente, bloqueando por completo cualquier idea rara que me llegaba, y empece a buscar la forma de llamar su atención, no quería que volviera a hundirse es esa pesadilla.
- Y cuando te vas a Juliard??- dije con una sonrisa grande tratando de animarla.
- Aún no es la audición...- hablo sin levantar su rostro, seguía triste.
- Segura??- dije tratando de llamar su atención otra vez- apuesto a que va a ser pronto...
Mina levantó su rostro con el seño fruncido, parecía molesta, yo traté de sacar la mejor sonrisa fingida esperando una respuesta de su parte, y sabía que no sería la mejor.
- Ya no importa...- habló Mina seria levantándose del asiento empezado a caminar sin un rumbo fijo - ha pasado mucho tiempo de mis solicitud, no creo que me llamen...
- Y si...- continuaba tratando de sonreír- quizás sera pronto, no se... lo presiento- ahora mi sonrisa la sentía de verdad sincera.
Ella paró en seco al escucharme hablar, se giro, ahora tenía un rostro de ironía, era como: "enserio dijiste eso??"
Me levanté del asiento acercandoem un poco a ella- te apuesto a que serán pronto, apuestas??- le dije sin dejar de mirarla, y en su rostro se formo una pequeña sonrisa, sabía perfectamente que ahora me tocaba a mi vengarme de lo que me hizo aquella noche, esa pulsera se le veía muy linda es su muñeca, y me gustaba mucho que la usara.
Mina colocó sus manos detrás suyo tratando de esconde la pulsera que llevaba puesta, pero tarde!! entendió completamente la indirecta.
Era inevitable no reírnos juntas, a ambas nos encantaba este pequeño juego.
- Hecho!! - respondió de repente extendiendo su mano- es una trato, espero que puedas pagarla, porque barata no será...- dijo tan segura de si misma, que por un momento olvido su depresión, decidí seguirle el juego.
- Por qué estas tan segura que ganaras??- pregunté levantado una ceja.
- No es que sea pesimista, pero no ha todos les toca surte, y puede ser que sí me toque, pero después de mucho tiempo, pero aquí la apuesta es que tú!! dijiste que será pronto... esa es la diferencia...- decía con una enorme sonrisa.
Me detuve a pensar por un momento, ella tenia razón, creo que no pensé bien en lo que hacia, pero el tratar de alegrarle el día me hizo hacerlo sin pensar. Bueno ya estaba hecho, espero que valga la pena.
- Hecho!! es un trato!!- entrelace su mano con la mía para sellar la apuesta- yo aún no se que te pediré, lo pensaré...
~•~
《Mina》
Algo no estaba bien en mi, por qué no podía dejar de sonreír? buscaba la manera de a cualquier costa ser fría con T/n, grosera, déspota, pero por alguna razón no me estaba funcionando, o ella de verdad no le importaba, o yo no sabía mantenerlo por mucho tiempo??
Está maldita confusión era muy frustrante, no poda seguir siendo atraída por ella como lo hacia, pero su manera tan sutil de ver las cosas, como lo hace ver fácil todo... T/n!! que estas haciendo conmigo!!
Me dejé caer en mi cama, mirando a un punto fijo tratando de despejar mi mente, no tenia una respuesta a todo esto, solo pasaba... que debía pararlo!!
Miré mi celular, había recibido un mensaje, lo tomé y miré la notificación. Hanami estaba aquí, de verdad necesitaba hablar con alguien y desahogarme de lo que estaba pasando.
Bajé las escaleras con tanta emoción, que casi no me doy cuenta que estuve apunto de chocar con alguien.
Esos zapatos de charol color rojo intenso, nunca los olvidaría, es característico de ella, levante mi rostro hacia mi madre. Ella siempre vestía bien, su estilo era garantía de elegancia y glamur, eso era tan vistoso en ella, creó que es lo único que puedo recordar de ella.
Ese rostro inexpresivo y frio ,en todo mi vida pude nunca pude descifrar, que había detras de el? que escondía?
Ninguna decía absolutamente nada, era tortuoso y más para mi, nunca pude sostenerle la mirada, me odiaba por ello. Miraba el piso fijamente, sabía que ella no diría nada, pero de verdad quería que me dijera algo, lo que fuera, solo quería escuchar su voz de nuevo... aunque fuera solo para reprenderme...
La rodea pasando a su lado bajando los escalones de la escalera dirigiéndome hacia la salida, que importaba... solo era perdida de tiempo.
- Mina...
Se detuvo mi aliento por un segundo, me llamó... Giré mi cuerpo para quedar casi frente a ella, mi madre estaba unos cuantos escalones más arriba que yo, me sentía tan pequeña viéndola desde abajo, eso no era algo nuevo, eso siempre fue así, nunca pude llenar sus expectativas de la hija perfecta y mucho menos ahora, que todo Japón habla de mi, y no por ser la hija ejemplar que todo padre quisiera tener, sino sirviendo como ejemplo de lo que nadie quiere como hija, una hija ultrajada y sin dignidad.
Esperaba sus palabras con ansías pero su rostro seguía igual, estático. Mamá!! por favor!! Dime algo!!
Y al final solo se dio media vuelta y se fue, sin más, me quede mirando como se perdía en el fondo de la mansión.
Tenía que volver a ser fuerte, no se da cuenta que necesito a mi madre...?? un simple "hija estoy contigo" haría la diferencia en el maldito hoyo obscuro en el que estoy, quizás lo haga...
Pero que estoy diciendo!! ella nunca me lo dijo... ¿ahora hará la diferencia? no lo creo...
~•~
》T/n《
Son 9:30 am, no he comido nada... quizás haya algo para comer cerca, no hay nada por aquí, en la esquina venden pan, iré a comer algo, aún no abren el conservatorio.
Sentarme frente a las grandes puertas quizás no es buena idea, ya era hora de que abrieran el lugar, y no se como preguntar sobre las audiciones, no es como que a cualquiera le den esa información.
Ya habían pasado como 15 minutos desde que habían abierto, buscaba con cual escusa llegar, pero encontraría la manera. Muchos niños llegaban al conservatorio, parecía que tomarían clases, tiré la envoltura de la dona que me había comido junto a un envase de café. Me adentré hasta llegar a la recepción donde Mina había estado la ultima vez que vino.
- Disculpe, buenos días- dije con la mejor sonrisa que tenia.
- Hola buenos días, en que te puedo ayudarle?- respondió amablemente una señorita que se encontraba en la recepción del lugar.
- Mire... - hablé tratando de sonar algo tímida- quisiera pedir informes acerca de las clases de ballet, vera... mi hermana pequeña ama el ballet, y quisiera regalarle clases de este conservatorio, para su cumpleaños.
- Llegó al mejor del país!!- alardeó- no es por nada, pero tenemos las mejores oportunidades para nuestros alumnos.
- Enserio?? como cuales...??- pregunté haciendo que llegara a lo que estaba buscando.
- Mire...- sacó un folleto de su cajón y me lo entrego- estas son las universidades e institutos a los que estamos afiliadas, su hermana se puede dedicar al baile profesional si así lo desea.
Miraba el folleto detalladamente buscando a Julliard, y BINGO!!
- Suena maravilloso!!- hablé sin salir de papel- pero para lograr algo así es muy complicado no??, digo... que una de estas prestigiosas escuelas te acepte.
- Nada de eso, claro es un proceso largo, pero no imposible eso se lo aseguro... El nivel de nuestro estudiantes es excelente, y cualquier escuela los aceptaría- dijo de manera segura y prepotente.
Asentí lentamente, lo había logrado.
- No debería decirle esto, pero con tal de que su hermana se convenza, las invitamos a ver las audiciones de julliard que tendremos la siguiente semana, y ahí, podrá ver la calidad de estudiantes que tenemos, y en especial una, le apuesto que no se arrepentirá de escogernos a nosotros.
Extendió su mano, dándome dos pases para la presentación, parecían limitados, porque en el modo en los que me los dio fue casi en secreto, aunque uno que otro niño sentado en la recepción vio la curiosa escena, yo solo les sonreí en secreto y haciendo una seña, les pedí, que guardaran el secreto. Ellos asintieron con una hermosa sonrisa.
Guardé los pases en mi saco y me dispuse a salir después de haber hecho una reverencia agradeciendo por la amable atención de la señorita.
=3° Persona=
La noche habia llegado y T/n caminaba de regreso al palacio, una gran sorisa nonsesparecia de sj rostro, pensaba y pensaba que reclamaria de premio, pero aún no se le ocurría que.
Hoy particularmente la noche era diferente, otra vez inexplicablemente se sentía feliz.
Llego a su destino y llevo directamente a donde ella asumía que estaría Mina, pero para su sorpresa no estaba ahí.
Miro de un lado a otro esperando que estuviera cerca, pero no fue así.
- Su sala de ensayo- pensó de inmediato T/n y se dirigió hasta allá.
Pero el lugar estaba vacío, no había nadie ahí, tenía que darle la buena noticia, no podía esperar hasta mañana, de verdad quería verla feliz otra vez.
El último lugar era su habitación, pero no podría subir solo porque si, tendría que haber una razón.
~•~
T/n miraba hacia arriba de las escaleras donde quedaba la habitación de mina. Metió su mano al saco y sacó el pase junto con el folleto del conservatorio y con una pequeña sonrisa desidio seguir adelante.
Lentamente subió los escalones vigilando que nadie estuviera cerca. cuando estaba apunto de llegar, una puerta fue abierta.
T/n como pudo es escondido detrás de uno de los pilares, esperando que pasara. Le llamo la atención de quien había salido se ese cuarto, llevándose una gran sorpresa, frente a la habitación de Mina, se encontraba su madre, la señora Myuoi.
Sin ningún tipo de movimiento o expresión en su rostro, solo estaba parada enfrente a la puesta de su hija, estática.
T/n miraba la escena extrañada, parecía que algo le impedía tocar la puerta, solo mo lo podía hacer.
Pero de un momento a otro la señora Muyai, dio media vuelta y volvió a meterse a su habitación.
T/n salió con cautela mirando a todos lados, pero dirigió su mirada unos segundo a aquella puerta que se acababa de cerrar, tenía muchas preguntas, pero era algo a lo que no debía meterse.
Desvío la mirada, para ahora aterrisarla en las puertas de Mina, metió el pase dentro del folleto antes de sin querer haber sonreído.
- Mina... - susurró detrás de la puerta - perdiste la apuesta... ‐ tocando sutilmente la puerta con sus uñas para llamar la atención de Mina.
Mina se encontraba acostada en su cama, sin poder consiliar el sueño, pero un pequeño ruido llamó su atención.
Se enderezó en su lugar sin bajar de la cama esperando volver a escuchar ese sonido.
‐ Mina... ‐ escuchó a alguien decir su nombre desde el otro lado de la puerta.
Se levantó y se colocó detrás de su puerta, sabía perfectamente quién era.
- Perdiste la apuesta... mira...
T/n se inclinó, y deslizó el folleto debajo de la puerta.
- Estoy pensando en que te pediré como recompensa... pero no será nada caro...
Mina tomó el folleto y pudo ver el pase dentro de este, ella sabía que era cierto, esos pases solo lo dan para personas invitadas para presenciar audiciones.
Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro de asombro, no podía creerlo, T/n, lo había logrado, de verdad estaba impresionada.
T/n quería pensar que Mía estaba detrás de esa puerta como otras veces estuvo, no perdería la oportunidad de ahora si hablar.
- No pierdas la oportunidad de algo así... - continuaba susurrando átravez de la madera de la puerta- miralo como la oportunidad de algo nuevo para tu vida, se que no es fácil, pero... vale la pena arriesgar, ya no importa a estas alturas, te lo digo por experiencia...
Mina solo escuchaba del otro lado de la puerta recargada en ésta.
- Descansa... - dijo T/n recargando su frente en la puerta, como esperando alguna señal...
Se cansó de esperar y sin más, T/n se fue del lugar dejando a mina recostada abrazando con fuerzas el folleto entre sus brazos contra su pecho.
De verdad T/n estaba haciendo imposible el poder odiarla...