El frío de la ciudad les calava en los huesos, si alguno de los cuatro idiotas tuviera auto todo sería más fácil.
Pero no.
Jay llamó a Jake para que se les uniera y después de que terminó el turno de Heeseung se encaminaron a uno de los lugares favoritos de Sunghoon, La taqueria.
—Jay: Juro que al regresar al extranjero les enviaré de a un auto, bola de pendejos.
Jake se rio nervioso.
—Hs: ¿y por que no nos compras uno ahora?
—Jay: por qué aquí no soy nadie.
—Jk: eres mi mejor amigo Jay-ssi~
—habló de manera pegajosa.
—Sh: al parecer ya encontramos a alguien que hiciera entrar en razón a Jake, ¡Gracias Dios!— exclamó mirando al cielo.
—Jk: Soy Hetero estúpido.
—Hs: si si, ya llegamos.
Los cuatro entraron a él establecimiento y comenzaron a ordenar.
Lo que en definitiva no es paraban era que Lee y Park menor cumplieran su objetivo de beber tanto como pudieran.
Pasada la media noche el gerente los corrió y a Heeseung se le ocurrió la brillante idea de Seguir su maravillosa noche en aquel bar donde se conocieron Hoon y Seung.
Hablando de eso.
—Jay: ¿Cómo fue que se Conocieron ustedes dos?
Ambos se miraron y comenzaron a reír.
—Hs: me pidió que lo matara y a cambio me daría todas sus cosas.—apenas se le entendió por lo borracho que estaba y como reía.
—Sh: le di todo lo que tenía pero el solo se fue y después me lo encontré justo allí.—señalo la barra.
—Hs: como su cartera tenía tanto dinero y pensé que no lo volvería a ver vine a tomar algo y terminé enamorado de ese gran estúpido.
Hoon rió y Jake lo vio mal.
—Jk: por qué no me dijiste que ese.—apunto a Heeseung.—fue a quien le pediste que te matara.
—Sh: era un dato innecesario.
De nuevo eran las 2:45 am y lo mejor era irse, tanto a Sunghoon como a Heeseung se les bajó rápido la borrachera después de que sus amigos les quitaron los tragos y en su lugar les dieron café, ahora eran más conscientes de sus actos, así que dijeron a sus amigos que no se preocuparan por ellos podían irse solos.
Heeseung insistió en querer irse a su casa pero Sunghoon se lo negó.
—Sh: iremos a la mía.
—Hs: de verdad no quiero causar molestias.
—Sh: no es molestia, mi padre está en alguna fiesta ahora y su esposa se fue de viaje hoy, esta bien.
—Hs: bueno, solo por hoy.
Caminaron un poco y llegaron a la gran casa Park, entraron en silencio a pesar de que no había nadie.
Hoon prendió la luz de su habitación y busco algo de ropa para Heeseung, se la dio y le indico como usar la ducha de su casa para que se pudiera bañar rápido antes de dormir.
El tomo sus pertenecías y se fue al baño del pasillo.
Después de un momento entró nuevamente encontrando a Hee sentado en su cama.
Tomó el secador y con lentas caricias seco el cabello del mayor.
—Hs: gracias, ahora dejame ayudarte.—tomo el secador de las manos de Park y repitió sus movimientos logrando secar el cabello de este.
Sunghoon desconecto el secador y lo dejó en un cajón, fue a apagar la luz y camino a su cama.
Ambos estaban acostados boca arriba viendo el techo.
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30 minutos después y ambos seguían despiertos mirando el blanco techo.
—Hs: Sunghoon...—dijo el mayor.
—Sh:¿qué paso?
—Hs: no logró dormir.
—Sh: yo tampoco.
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15 minutos después Heeseung se sentó en la cama y después Sunghoon hizo exactamente lo mismo, el mayor lo miró a los ojos e intentó hablar.
—Hs: Sunghoon...no sabes lo mucho que me gusta mirar tus ojos...me gustas mucho...
Ante la repentina confesión Hoon quedo atónito.
—Sh: yo...no se que es lo que siento por ti.
Aun que la habitación estuviera completamente obscura Heeseung podía ver a la perfección el rostro de Sunghoon por los rayos de Luna que entraban débiles por la ventana.
—Hs: hay que averiguarlo juntos.
Heeseung tomó a Sunghoon por el cuello y lo beso.
Hoon le siguió el ritmo a la perfección.
Se separaron por falta de aire, quedaron viendose a los ojos a pocos centímetros.
Esta vez el menor tomó la iniciativa y volvió a besar a Heeseung.
Después de ese beso vinieron otros diez y luego más y más, sus labios estaban hinchados y sus mejillas sonrojadas, pero poco les importaba eso.
Otro beso fugaz de parte de Sunghoon volvió a hacer presencia, y de nuevo desencadenaron otra ronda de besos
De la nada la puerta fue habierta y la Luz prendida.
Y en un segundo, todo se fue a la mierda.
Perdón si están muy cortos y también por abandonar esta historia jaja<33