𝐑𝐎𝐉𝐎: ATADO AL LOBO (OFFG...

By wonder_navigator

3K 417 140

ROJO: ATADO AL LOBO Gun es un chico que nació de una dinastía de brujas. Siendo huérfano y sin culpa de haber... More

R O J O| C A P 1
R O J O| C A P 3
R O J O| C A P 4
R O J O| C A P 5 (1/2)
R O J O| C A P 5 (2/2)

R O J O| C A P 2

447 70 26
By wonder_navigator


GUN

Decidimos caminar un poco más en el interior del bosque, hasta que anocheció, así que me senté con Tay en unos troncos al lado de la fogata que hizo. Le pedí que se quitara la camisa para revisar su espalda. Efectivamente estaba magullada.

Completamente en rojo con una hinchazón que tardaría días en curarse. —Dios. Se ve muy mal.— Le comente apenado tocando su tosca y amplia espalda con cuidado. No quería herirlo después de todo.

—¿Se ve tan mal?— Pregunta tímido. Con una voz ronca.

—Parece que mil sanguijuelas bebieron sangre de esta espalda.

—¡¿Qué?!

Se asusta volteando ligeramente hacia mí por lo que yo estalle en pequeñas risas. Cubrí mi boca para no intensificarlas.

Woah. Me asustaste.— Él bufa una risa. Yo detuve las mías, pero no borre mi sonrisa. Tome su camisa tirada al suelo para adentrarsela.

—Oh. Gracias.— Él me ayuda metiéndose los brazos por las mangas y así ya la tiene puesta. Se da la vuelta para quedar frente a la fogata.

—¿No hablaremos de lo que sucedió antes de que despertase?— Pregunta todo tímido.

Por supuesto que pienso en el beso, pero decido que tal vez no sea eso de lo que quiere hablar. —¿Del lobo?— Pregunte.

—El beso.

Síp. Era del beso. Otra indirecta del universo a que tal vez sí soy inteligente y las personas pensarían lo mismo si lo pudiera demostrar.

“El beso”...— Repetí con un tonado más lento tratando de procesarlo todo. Midiendo mis palabras. Midiendo mis pensamientos. —¿Qué hay con el? Solo estabas confundido mientras despertabas. Decías que veías a una tal valkyria. Incluso acariciaste uno de mis brazos diciendo que eran “bien sedosos”— hice una voz placentera como imitación mientras tire para atrás mi cabeza con los ojitos cerrados, una media sonrisa, mis manos frotando de arriba a abajo mis brazos sobre la capa roja. Tay agranda sus ojitos como más puede avergonzado con la explicación. —y pues lo dejo pasar.— para lo último me reincorpore con simpleza y lo mire totalmente neutral solo que parpadeando lento, sin embargo, más de la cuenta.

—¿Y solo lo dejas pasar? ¿No estás enojado conmigo?

—¿Debo enojarme?

—No, no, no. Es solo que como ambos somos hombres... ¿No te molesta?

—Bueno igual ninguna chica me quiere en nuestra aldea así que tampoco he recibido un beso de una.

—¿Ninguna te ha besado?

—... No. Gracioso, ¿no? Dicen que tengo la belleza de las Laikorn, pero no parezco ser lo suficientemente guapo para atraer a las chicas.

—Ellas se lo pierden. No les hagas caso.

—¿Tu crees?

—Eres un chico divertido y agradable. Solo la indicada lo valorará.

P'Tay rodea mis hombros con un brazo. Acercándome a su pecho mientras pellizca una de mis mejillas. Estirandola de sitio. —¿Quién se perdería eso?

—Ay, P'Tay.— Dejo ir un quejido de dolor ante el pellizco. Él ríe antes de soltarme.

OFF

Sin que ambos se den cuenta los estoy vigilando tras unos arbustos. Es increíble la manera en que un pelaje puede camuflajarse con los arbustos. Después de todo los pelajes en greñas parecen los picos puntiagudos de alguna montaña. Mis ojos permanecen mirando sus figuras bajo la oscuridad de la noche. Ese leñador se ve apetecible. No me quejaría de probar su carne, tener su sangre entre mis colmillos, pero no luce tan apetecible como el de la capucha roja. Su carne exterior luce tan suave. Tan exquisita.

Emití un gruñido en bajo por no haber cazado a ese tal Laikorn. Es peligroso... Pero eso solo hace que mi cacería sea interesante. Es de noche y por tal yo también merezco un descanso así que salí de ahí.  Corriendo con estas patas que todo lo puede matar. Que todo lo puede pisotear. Incluso la más hermosa flor cruje debajo mío y se hunde en la nieve que la lleva a la otra vida.

Puse patas en mi hogar, una única cueva que encontré alejada tanto del bosque como de la ciudad. Esta era un punto medio entre ambos lugares. Su oscuro interior simplemente espanta a cualquiera, los huesos que se encuentran por ahí y allá a veces crujen bajo mis patas. Todas las comidas, todas mis cacerías, son los adornos que se encuentran en este reconfortante hogar.

Tras ingresar, dar unos pasos más en su interior, hasta la abominable pared que te alerta "No hay salida una vez entres", los huesos de mi cuerpo comienzan a crujir. Un chillido escapa de mi hocico a la vez que caigo sobre mi estómago. Ni el pelaje de este cuerpo era tan frondoso como para no revelar el asqueroso doblez de los huesos. Estos se doblaban de arriba, de abajo, luego sobrealían por esta asquerosa carne de lobo.

Hasta que salí como un extenso vomito de su, ya roto, hocico. En el suelo a un lado de esa monstruosa carne de lobo quede acostado. Esta metamorfosis es agotadora, pero al menos puedo ser humano durante el día y fuera de la luna llena.

Completamente desnudo y sucio, me senté en mi trasero, mirandolo todo con estos ojos rasgados asiáticos. Estos labios de apariencia humana eran pomposos. A veces hasta sentía que ellos cubren más de mi rostro de lo que puedo contar aunque cuando fui capaz de verme en el pequeño espejo de una mujer a la que me comí... Note que eso no era cierto. Que eran pomposos pero normales. Mis cejas son gruesas y con ese pequeño espejo...

Volví a coger el pequeño espejo circular a una esquina para mirar mi apariencia. Saque las garras de una sola mano para apuntar una garra entre las cejas.

Puedo afeitarme las cejas si es necesario. Aunque de todos modos no me veo con humanos a menudo.

Sin embargo, humanos merodeando en este bosque es algo muy inusual. De seguro están buscando algo o alguien... Si es a alguien... Entonces debe haber una casa muy lejos de aquí. Puedo darme un paseo a ver. Sería interesante. Además, eso significa que habrá más comida. Mucha más comida. Con una sonrisa siniestra dado a esos pensamientos, la garra baje de mi entrecejo para mirar el pequeño espejo con estos ojos humanos de color negro.

GUN

Acabamos dormidos tanto al lado de la fogata como de los troncos. Abrí mis ojos por los pájaros que trinan en la mañana. Al abrirlos con un gruñido madrugador puedo ver a Tay dormido súper cerca de mí. Incluso puso su amasado brazo bajo mi cabeza para mi conforte. Parpadee varias veces porque no podía recordar cómo terminamos en esta posición. Cómo termine con la cabeza sobre su brazo. Además, ¿no le duele? ¿No se le habrá adormecido? Dios, Hace tanto frío. La fogata ya fuego no tiene solo un humo negro que brota de el.

Me acurruque más a su pecho con demasiado frío. Buscando calor. Parece que Tay siente mis movimientos pues abre sus ojos. Yo lo miro cuando lo hace. Aún muestran sueño.

—N--No quería despertarte--

Pone una de sus grandes manos contra mi espalda para acercarme más a su pecho. Quede con los ojos en su pecho ahora que mi cabeza esta justo bajo su mentón.

—Está bien. Solo... Durmamos unos minutos más por favor.— Comunica con una voz ronca.

—Durmamos todo lo que tu quieras, Tay. Después de todo eres mi guía.

Yo le digo sobre su pecho. Su agarre simplemente se intensifica... Ahora lo nuestro es como un abrazo súper reconfortante.








En unos minutos, nos dispusimos a caminar. Dejé a Tay en la delantera para jugar a pisar sus pisadas dejadas en las nieve. Con cada brinco que daba, caía en sus pisadas, alzando mi capa con una de mis manos. Es un movimiento muy infantil, pero la verdad es que simplemente así soy yo. Estas cosas locas salen de mí sin poder evitarlo.

Tay detiene sus pasos justo cuando caí en las pisadas recientes que hizo. Por ende mi cabeza choca contra su espalda.

—Oh.— Me toque la frente. Él se da la vuelta con una sonrisa bajo un ceño fruncido.

—¿Ahora qué haces, pequeño Laikorn?

—Solo... Me entretenía.— Le dije guardando mis manos tras mi espalda con la canasta colgando de una de las muñecas.

—Huh. Ya veo. Siempre me pregunto qué es lo que pasa por tu cabeza.— Tay dice con una sonrisa ahora alzando sus cejas. Se da la vuelta para que sigamos caminando. Hice un puchero mirándolo mal.

—No soy pequeño...— Murmuré para mí mismo antes de dejar atrás el jueguito de brincar sobre sus huellas así que mejor me apresure para caminar a su lado. Se sorprendió un poco por eso, pero decidió no comentar nada y solo seguir adelante con nuestro viaje.

🐺

Salimos de los arbustos para llegar a una cabaña que si nieve no hubiera, sería visible su gran patio. El patio distanciaba  los árboles de su alrededor haciendo esta área una "sin árboles" que se entrometieran. Suspire en una sonrisa viendo la casa de esta tal Amanda Laikorn. Ahí estaba. La madre de mi madre, ¡solo unos pasos más y vería a mi abuela!

—No puede ser... Esto en serio es real. Dios, pero tal vez ella no esté lista. ¿Qué le diré?

—Tranquilo. De seguro sabrás que decir cuando la veas. Algunas palabras no salen hasta que enfrentemos nuestros miedos.— Tay siempre es tan reconfortante. Incluso sabio. Su recomendación me da seguridad así que asentí listo para lo que sea.

—Muy bien — Cachetes vacíe con un bufido. —aquí voy.— camine para enfrente yendo a esa casa. Tay se me queda mirando antes de seguirme.

Con pasos cautelosos pise los pequeños escalones de madera frente a la puerta. El crujir de la madera era escalofriante. Ponía mis nervios a filo. Pero solo me acerque a la puerta.

—¿Hola?— Apenas di unos tres toques, la puerta se abrió. Ya estaba abierta y ni cuenta me di. Fueron mis toques lo que la empujaron. No elimine mi sonrisa sino que la incremente. Tal vez es tan confiada estando apartada del mundo que su puerta deja abierta.

Seguí introduciendo todo de mí en esa casa ajena. —¿Amanda Laikorn?— Pregunté ansioso.

Sin ver cómo Tay también ingresaba a la casa a unos pasos detrás de mí.

—¿Amanda Laikorn?— Volví a preguntar. No había nadie en la cocina. El silencio era mortificador. No habían señales de vida. Encontré la habitación de la abuela. Su puerta también estaba abierta así que solo la empuje un poco.

—Voy a entrar ¿sí?— Avise antes de poner un pie dentro. Entonces cuando alce la mirada a la cama de la habitación, deje de sonreír.

La abuela, o la tal Amanda Laikorn, estaba fallecida en esa cama. Su cabeza separada de su cuerpo con un charco de sangre seca bajo esta. Se notaba llevaba semanas así, pero fue colocada como si estuviese durmiendo. Incluso tenía puesta una túnica rosada. Las sábanas blancas todas mal puestas decían que hubo una pelea antes de su muerte.

—¡Abuela!— Respingue cubriéndome la boca con una mano antes de retroceder unos pasos. Retrocedí lentamente sin eliminar el miedo que calaba por mis entrañas, mis huesos, hasta reflejarse tanto en mi piel como en mi rostro.

Mi espalda chocó contra un pecho así que deje caer la cesta. Las frutas rodaron por el suelo en cámara lenta. Todas ellas rodando hasta quedar lejos de mis botas.

Voltee para ver con quién choque y era Tay. Quién más pude pensar que iba a ser sino él.

—¡Tay! Llegamos tarde, la abuela... La abuela está muerta — Llore tomándolo de sus brazos. —Creo que Lilith la mató. Lilith llego a ella, Tay...

Sus palabras reconfortantes ya no hacían presencia. Todo lo que podía escuchar era mi propio llanto. Mire a sus ojos durante las lágrimas y los sollozos, pero solo pude sentir que su reconfortante cuerpo era como una misma pared.

—¿Tay?— Pregunté. Él me miraba sin sentimientos alguno. Como si de repente todo de él fuera frío. Parecía un completo desconocido. Ya ni hablaba. ¿Qué le sucedía? —P'Tay... ¿Por qué me miras así?

Enarco una ceja antes de ir agrandando sus ojos. —Yo lo siento mucho, Gun.

—No, P'Tay, no es tu culpa. Tal vez para cuando la viste Lilith ya la tenía como objetivo--

—No hablo de Lilith.

—Entonces, ¿De qué hablas, P'Tay?

—De lo que haré por siguiente.

Él retrocede dos pasos de mí antes de cargar el hacha con dos brazos, cargarla a un lado de su cabeza y apuntarme con ella. Las lágrimas cesan de mis ojos. Mirando con demasiado impacto la hacha.

—Todos en la aldea me pidieron que te matara. Nadie quiere a ningún Laikorn... Y yo lo siento mucho, Gun.— Informa tembloroso Tay. —Pero creo que es para lo mejor.

—¡P'Tay!

Le grite antes de caer sobre mi trasero con la primera oscilación que hace. La oscilación atraba la hacha entre la pared de madera a su lado. Yo lo miro con demasiado miedo retrocediendo con mis manos.

—P'Tay...

—¿En serio quieres vivir? Es decir, piensalo,— Tay logra arrancar el hacha de la pared y yo volteo a quedar en mis cuatro en orden de pararme. —no me lo hagas más difícil. Me quemaran a mí si no llevo tu cabeza como evidencia.

Él pisa mi capa roja por lo tanto el empujón me regresa a quedar acostado boca abajo. Tay trepa sobre mi cuerpo y me da la vuelta agarrándome del cuello con una mano.

—Deja de moverte. No lo hagas más difícil.

—¡Somos amigos! ¿Qué clase de amigo mata a otro?

—Cierra la boca.

—¡P'Tay! ¡Tú no deberías hacerme esto!

Su enorme mano cubre mi boca mientras alza el hacha al lado de su cabeza. —Dije que dejes de moverte pequeño Laikorn.— Su gruesa voz regaña.

Yo le doy un fuerte rodillazo en las bolas y él cae fuera de mi cuerpo. Tomo esa ventaja para correr de regreso a la puerta de esa cabaña.

—Debo salir, debo salir, debo salir.- Repetí como en un trance debido al shock. Justo saliendo de la casa, Tay va saliendo de la habitación.

—¡NO SEAS EGOÍSTA! ¡MUERE COMO HIZO TODA TU DINASTÍA! ¡TENGO UN FUTURO POR DELANTE CON PADRES Y UNA FAMILIA! LOS VAN A QUEMAR SI NO TE ENTREGO.

Grita potentemente mientras cojea fuera de esa puerta.

Mis botas dan con la nieve. Ya a unos pasos de los escalones de madera. Ante sus gritos mi cuerpo se congelo. Respire agitadamente por toda la adrenalina del escape.

—¿Qué no sea egoísta?— Mencione mientras voltee a mirarlo. Mis ojos aún grandes, podía sentirlos, con lágrimas que amenazaban con salir. —En todo este tiempo jamás se me ha permitido ser egoísta. ¡Jamás he podido ser egoísta! ¡No es mi culpa que no haya podido nacer sin padres ni una familia como tú! ¡A TODA MI FAMILIA LA ASESINARON! LA ASESINARON. TÚ ERAS AL ÚNICO QUE VEÍA COMO FAMILIA.

Eso último lo hizo dejar de cojear. Se detuvo en medio del pasillo. Mirándome con el cabello en greñas por lo que ha luchado para matarme.

—Así que perdoname,— gruñí a pesar de las últimas dos lágrimas que cayeron de mis ojos. —si debo usar este momento para ser egoísta con la persona que asesinó a mi abuela. No fue Lilith... Fuiste tú. Cuando la encontraste. Y me ibas a hacer lo mismo.

Apreté mis puños. De ellos estaban saliendo unas llamas amarillas que alarmaron a Tay. Este trato de apresurarse en cojear. —¡GUN! ¡ESTA BIEN! LO ADMITO! PERDÓN. PERDÓN. CONTROLATE.

—¡NO DES UN PASO MÁS!— Grite enfurecido. Entonces toda la cabaña se prende en fuego. Todas las ventanas estallan por el fuego que sobrenaturalmente estalla desde adentro. El fuego abraza a Tay quién grita el doble de lo que ya lo estaba haciendo. Su cuerpo se carboniza con líneas de fuego ensordecedor en este. Sus brazos se estiran para enfrente pidiendo ayuda. El hacha cae así como cae su cuerpo carbonizado.

Yo quedo impactado viendo como la cabaña ha estallado en fuego por mis poderes. No los sé usar así que no sé de lo que soy capaz. Abrí mi boca tanto que pensé se me rompería. Toda la casa se derrumba con todos sus pedazos de madera abrazados por el fuego.

El impacto de todo repentinamente me hizo desmayar. Cayendo a la nieve con toda mi capa roja esparcida por esta.

Sin mi consciente, un hombre lobo sale de los arbustos, habiendo visto todo. Este llega a mí y me toma en sus brazos de manera nupcial. Él mira la cabaña antes de regresar su mirada a mí... Y nos aleja de ahí.

*N/A: ¿Les sorprendió que Tay quisiese matar a Gun?🤯 Espero les haya gustado este capitulito, ya en el prox podremos tener la interacción entre estos dos😍*

Continue Reading

You'll Also Like

9.1K 2.1K 89
Te haz preguntado si realmente los mexicanos somos como los ven en las películas Pues aquí tu servidora te diré cosas sobre los mexicanos por si dese...
622K 38.2K 136
-Yo fui el primero en besarla-, alardea Bryce. -Yo la llamo virginidad -, grita Ace en voz alta. -Ella me amara primero-, responde Chris enfadado. Er...
7.7M 618K 63
Nunca sabes lo que puede ocasionar una equivocación.
459K 33.5K 61
🚨Está historia contiene demasiados errores, ya sean narrativos como ortograficos. Por favor, si vas a pasar a dejar malos comentarios no la leas...E...