—No lo voy a negar. Sí llegué a pensar que hoy podrían llegar —soltó Amatista —. Tal cual como en la boda de Garnet.
La nave lentamente comenzaba a aterrizar sobre el mar, una esfera blanca flotante se dejó aparecer para dirigirse a la costa.
—¿Ahora que? —dijo Steven con el ceño levemente fruncido. Recordó la última vez que las vió.
La esfera se abrió y dejo ver a tres diamantes. El resto de los invitados quedó en silencio para poner total atención.
—¡Wow, son gigantescas! Tengo que grabar esto. Seguro ganaré más visitas —Ronaldo comenzaba a grabar detenidamente.
—¡¿Qué es eso?!
—¿Eres nuevo? —pregunta Amatista.
—Antier me mudé a esta ciudad pensando que sería el lugar adecuado en cuanto a pacifico y hermoso.
—Estás en lo correcto respecto a hermoso, guarda una paisajes increíbles. Y sobre a lo pacífico, déjame decirte que podría serlo un 50 %, el otro 50 %, es algo como lo que acabas de presenciar —se encogió de brazos.
—¡¿Qué?! —responde incrédulo— ¿No me digas que vendrán aliens a este lugar?
—Viejo, justo estas conversando con una gema extraterrestre, aunque, de hecho yo nací aquí —baja la mirada pensativa y vuelve a levantarla—. Acabaste de estar en una boda de dos gemas extraterrestres, no puedo creer que no te hayas percatado.
—Pensé que eran cosplays. Creo que iré iré tomar agua —con la misma expresión se retiró.
—Hola, Steven, Spinel... —Saluda Blue Diamond sonriente.
—Steven... —Yellow Diamond fue la primera en hablar—. Venimos a disculparnos por nuestro comportamiento, estamos arrepentidas.
—¡Nos hacen tanta falta! ¡Es tan aburrido si no están con nosotras! —confesó White Diamond.
—No es conmigo con quien se deben disculpar —miró a Spinel y la tomó de los hombros—. Es con Spinel, fue a ella a quien le trataron de ese modo.
—Blue, Yellow y White —nombró la gema magenta.
—Spinel, sentimos habernos comportado así, no te consideramos como un simple objeto o una forma de mantener el recuerdo de Pink —se arrodilló Yellow—. Te hemos tomado apreció, eres una gema especial para nosotras, solo que no sabíamos como expresarnos, no queríamos que te alejaras de nosotras.
—Lo que dijo Yellow es prácticamente lo mismo que siento —al igual que la diamante, se arrodilló para acariciar la cabeza de la pequeña gema—. Eres nuestro tesoro, por lo que al enterarnos de que te alejarías de nosotras, nos había afectado, no queríamos que volviera a pasar algo como con Pink. Te amamos Spinel, y estuvo mal ser egoístas, respetaremos tus decisiones.
—Mis Diamantes... —la gema en forma de corazón miraba con sorpresa por las palabras de ambas.
—Recordé que por nuestra misma actitud, fue que Pink se quiso alejar de nosotras, no queremos que vuelva a suceder —mostró una faceta apenada.
—Eliminaremos esos pensamientos y actitudes conservadoras —siguió Yellow.
—Con tal de que sean felices —continuó Blue—. No estaremos cerca físicamente pero nuestro cariño hará que lo estemos.
—Entonces, Spinel ¿Nos perdonas? —reiteró White.
—Claro que sí, yo también las quiero. Y a decir verdad, su forma de actuar me había afectado, pensé que no recibía el mismo afecto, pero menos mal que me equivoqué —con una sonrisa de oreja a oreja saltó para abrazar a las tres bellas diamantes utilizando su poder de estiramiento.
Los presentes no evitaron apreciar aquella escena.
—Gracias a esto, puedo demostrar que las gemas extraterrestres pueden manifestar sus sentimientos —soltó Ronaldo con un lágrima traicionera.
[...]
—¿Qué es lo que están haciendo? —pregunta Yellow—. Recuerdo que hace unos años vimos algo similar.
—Oh, esto es una boda. Un tipo de ritual que consiste en unir a dos personas que se quieren mucho —explica Steven.
—¿Se fusionan? —muestra una expresión desconcertada.
—N-no, no, no, no, no. Es en sentido figurado, es para que permanezcan juntos por ciertos años, queriéndose, compartiendo cosas materiales, apoyándose en todo momento y otros más.
—Entonces, si tú quieres a Spinel ¿se casarán? —pregunta Blue.
—E-eh... —no evita sonrojarse.
Hace unos momento, Spinel había dicho algo similar, no había pensando sobre el tema de casarse, pues cree que aún faltaría años para ello. Sin embargo, no le desagrada la idea, ha pasado el tiempo y ha amado a la gema como la primera vez, o incluso más; han pasado por diversas situaciones y momentos y juntos lograron enfrentarlo, el cariño que se tienen nunca faltó.
—Yo amo a Steven, y nunca lo cambiaría por nada —se abalanza hacía al chico y enrosca sus brazos en el cuello del mismo—. Así que, a mí sí me gustaría casarme con él, pasaría el resto de los años que el destino me permita con él.
—Spinel, que linda eres —rodea su brazo—. Eres la única a la que amo, y me gustaría que así lo fuera. Solo quiero que esperemos un poco más, ¿sí?
—No entiendo porque quieres esperar pero está bien —sonríe y junta su cabeza con la del chico.
Las tres diamantes miraron con ternura aquella escena.
—Si yo no hubiera sido tan conservadora con Pink, si le hubiera permitido que hiciera lo que tanto anhelaba y amaba, podríamos haber mantenido una buena relación entre las cuatro y nunca se habría hecho pasar por una cuarzo para rebelarse y vernos como sus enemigas —ladea la cabeza y coloca su mano sobre su mejilla—. Tal vez el presente sería diferente, ella podría seguir aquí y ocupar el lugar de Steven —inconscientemente imagina a Pink en Steven.
—¿Qué sucede, White? —habla Yellow.
—¿Crees que si hubiéramos sido diferentes con Pink, ella seguiría con nosotras? Tal vez no en el planeta madre pero nos seguiremos tratando bien.
—Hay tantas alternativas, pero las más posibles es que si estuviera presente con nosotras ahora mismo, ella en la tierra y nosotras de visita por lo menos; o, hay que recordar que ella amaba a los humanos, siendo una diamante o hacerse pasar por una cuarzo, abandonaría su forma para que Steven existiera.
—Su manera de ser nunca cambiaría, hayamos sido diferentes o no —prosigue, Blue—. Además, fue gracias a Steven que hemos logrado cambiar. Nosotras seguiríamos cegadas con nuestras formas de pensar sin él.
—Tienes razón, Steven ha conseguido hacer muchas cosas por el bien de todos. Es asombroso —dirige la mirada al chico.
—Y mantiene una forma de pensar distinta a la de Pink —se cruza de brazos Yellow.
—Cierto, White. Les tenías una sorpresa ¿no?
—¡Oh, es verdad! ¡Steven y Spinel~! —llama la atención de la pareja con entonación—. Les tengo una sorpresa, una gema ansía por verte, Steven.
—¿Una gema? —dice una tanto extrañado.
—Nos dijo que quería conocerte y jugar contigo, pensamos que sería una agradable idea traerla con nosotras.
Yellow realizó un movimiento que permitió traer desde la nave una esfera blanca pequeña. Llegado a la arena, esta se abrió y permitió visualizar de quién se trataba.
—Hola, Steven~ —sonríe de forma "inocente"
Entrecierra los ojos —Tú eres...
—Azurita. Un gusto verte, Steven Universe..., estaba ansiosa por conocerte.
El nombrado no evitó sentirse incómodo y un tanto sorprendido. Era obvio que se trataba de la fusión de Rubí y Aguamarina, dos gemas quienes guardaban rencor hacia el chico.
En un momento aleatorio se preguntaba por ellas. Desde que la lucha entre gemas y diamantes había finalizado, ninguna había hecho acto de presencia, solo esperaba que estuvieran bien. No obstante, nunca tuvo en mente que se conocían o que incluso estuvieran juntas.
Su mirada ocultaba algo, no estaba seguro si confiar totalmente en ellas.
—¡Hola! —Spinel tuvo la iniciativa de saludar.
Toma la mano de la gema —Vaya, nunca te había visto, ¿fuiste creada recientemente?
—¡Oh! No, no, no —suelta una corta risa—. Yo fui creada hace más de 6mil años. Era la compañera de juego de Pink, solo que ocurrieron ciertos sucesos —lo último lo menciona con desagrado.
—Creo que incluso fuiste creada antes que yo... —suelta con asombro—. Fue una pena no haberte encontrado antes, eres una gema muy bella ¿sabes?
—¡Wow! Muchas gracias, Azurita —no evita sonreír.
—No hay de qué, solo digo lo que es —le dedica una mirada coqueta.
Steven miraba aquella escena, no evitó sentirse en un ambiente incómodo.
—Sabes, Steven —se dirigió al hibrido—. He estado esperando este día para poder verte y jugar juntos ¡Espero y podamos divertirnos! —se abalanza para abrazarlo.
—Wow, gra- ¡Uhg! Parece que te gusta abrazar —confesó al sentir la fuerza de la fusión.
Mientras Steven y los demás no veía el rostro de la fusión, soltó una sonrisa malévola. Su plan estaba por iniciar.
—Fue buena idea traerla. Spinel y Steven se ven felices —comenta Azul.
En el resto de la tarde, mientras todos festejaban la boda de ambas perlas (incluidas las diamantes), Azurita no paraba de hablar con Spinel, no parecía querer separarse de ella. Steven miraba entre la multitud, en un momento se había sentido excluido, por lo que era mejor dejarlos hablar.
Mala idea.
Azurita tomaba frecuentemente la mano de la gema magenta. No aguanto sentirse celoso.
—Vamos, Steven. No es para que te sientas así, solo están hablando, no creo que quiera algo con Spinel, recién la conoce —suspira y abre una lata de soda que termina empapandolo— ¡Ahg! ¡¿Quién agitó la lata?!
Volteó a todos lados, en unos cortos segundos pudo captar que Azurita había dirigido la mirada hacia él.
Giró su rostro repetidas veces, sería mejor no pensar mal. Resignado fue al templo a cambiarse, no estaría con una mancha de soda durante el baile de las gemas.
[...]
—Viejo, ¿dónde andabas? Te he estado buscando.
—Lo siento, Amatista. Fui a cambiarme, alguien me jugó una broma con la lata de soda.
—¿Quién sería? Seguro no fue a propósito —rodea su brazo—. ¿Por qué no estás con Spinel?
—Una gema comenzó a hacerse amiga de ella, al punto de que yo me sentí excluido —entrecierra los ojos.
Suelta una carcajada. —¡Oh, viejo! ¿Estás celoso?
—¡Claro que no! —frunce el ceño—. Es solo que, me da una mala impresión. Azurita se trata de nada más y nada menos que de la fusión de Ojito y Aguamarina.
—¿Y?
—Hace unos años buscaban acabar conmigo y en el juicio. Aguamarina me secuestró junto con Lars y Ojito mi delató en el juicio —aprieta los dientes.
—¡JAJA! ¡Steven, eso ya pasó! —ríe—. Seguro ya cambiaron. A todos les has dado otra oportunidad, ¿por qué ellas no?
—Ahg..., tienes razón. Será mejor que aleje esos pensamientos; les daré otra oportunidad.
Mientras tanto, el baile de la pareja recién casada, acababa de comenzar. Ambas se tomaron para realizar un vals lento, la música era lenta y pacífica.
Todos miraban con atención, algunos conmovidos, entre ellos se encontraba Blue, Spinel y Garnet.
—Perla..., espero no cometer algún paso vergonzoso —menciona ruborizada.
—Oh, tranquila. Para mí no lo será, incluso si lo haces te seguiré el paso, el punto es pasarla bien, que la pases bien—le sonríe.
—Owww, Perlaaa —apoya su rostro en el hombro de la contraria.
Minutos después, ambas se separaron y comenzaron a bailar a su manera, aunque el paso era similar. Consistían en unos pasos similares al ballet y al vals, bailaban muy bien.
Finalmente dieron el paso final acercándose, dieron una vuelta en la que Volleyball terminó en brazos de Perla, una luz se manifiesta y la fusión se hace presente. Mega perla había vuelto.
Todos aplaudían y miraban con asombro. Claro, Ronaldo no se perdió de ello y grabó todo.
Mega Perla soltaba pequeñas risas ruborizada.
Nuevamente los invitados volvían a entrar a la pista para bailar.
—¿Que te parece si bailamos un poco, Peridot?
—Está bien, solo no te quejes si lo hago mal.
—Para nada —toma la mano de la gema para dirigirse a la pista—. Solo busco pasar el rato contigo, nada más.
—¡Es increíble! —habla Spinel— ¡Me encanta!
—Dime, querida. ¿Alguna vez te has fusionado con alguien diferente? —pregunta la fusión.
—Oh, así es —mira a otro lado sonriente—. Nunca sentí lo que era estar fusionada y cuando pasó, ¡fue increíble! —jala sus coletas con emoción.
—Sigo sin creer que ahora las diamantes permitan ese tipo situaciones. Cualquiera que lo hiciera, su destino era ser quebrada.
—¡Pero todo eso cambió! ¡Ahora son más liberales y eso es gracias a Steven!
—Steveen... —renombra mentalmente con irritación.
—E incluso yo también quería destruir su planeta al estar cegada de sentimientos negativos, quería destruirlo.
—¿De verdad? —la mira con atención— ¿Y por qué ya no lo hiciste?
—Porque no era lo correcto. Pink me hizo mucho daño al dejarme sola por miles de años y era normal sentirme así. Pero Steven no tenía la culpa de lo que sucedió, no tenía que sufrir por ella. Tenía que cambiar —se levanta del lugar, coloca su mano izquierda sobre su gema—. Y luego Steven me cantó ¡AAAAAH~! ¡CAMBIOS HAS DE HACER~! —canta poniendo grueso su tono de voz
—Ahg. Así que con una cancionsita puede lograr todo.
Poco a poco fue oscureciendo. Algunos invitados se encontraban cansados de tanto bailar y debido a que la temperatura comenzaba a bajar comenzaban a retirarse, hasta que ya nadie se encontraba, a excepción de las gemas.
—Fue el día más feliz de todos. Gracias por todo, Perla —la abraza.
—Y también para mí. También te doy las gracias —corresponde.
—Es momento de irnos, Spinel y Steven~ —anunció White
—Nos gustaría quedarnos pero tienes que cerrar tus párpados para recuperar energías —continua Yellow.
—¿Hablas de dormir?
—Eso, exactamente.
—Espero y puedan visitarnos pronto o nosotros a ustedes.
—Lo haremos, Blue —responde Spinel sonriente.
—Espero y se diviertan con la gema que trajimos —chasquea los dedos para hacer aparecer la burbuja blanquecina— ¡Nos vemos~! —finalmente se despide White a nombre de las tres para acto seguido cerrarse completamente y subir a la nave desapareciendo velozmente.
—Solo espero que así sea —pensó Steven.
Azurita a lo lejos miraba con rencor al hibrido. A partir de ahora, ella se encargará de hacerle la vida imposible al "Salvador de la galaxia".
Buenos días, tardes y noches. Espero que se encuentren bien uwu.
Espero que les haya sido de su agrado la nueva parte, cualquier cosa, no duden en comentarlo c:.
Sé que es algo tardío, pero deseo que hayan tenido una feliz navidad y año nuevo; que sus metas, propósitos y sueños se cumplan satisfactoriamente; que aprueben el año, semestre o el examen que estén por presentar.
Y lo más importante, que estén bien, salgan y regresen a casa sanos y salvos. Esto de vivir en latam, se vuelve complicado u.u
Les deseo lo mejor :D.
Aquí un sueño que nunca se cumplirá:,c