Personajes utilizados en esta historia no me pertenecen, créditos a sus respectivos creadores.
la mirada dorada no se separó de él, el sudor se deslizó en pequeñas gotas que dejaban al descubierto su preocupación.
-vaya, parece no saber la clase de criatura que vive con usted.- merlín como se había proclamado siguió tomando la palabra, dejando a un gokú que sin muchas palabras le escuchaba atento. -por si no lo sabe, los compañeros de ella están destruyendo todo lo que obstaculize su paso, esa mujer no es más que un bicho que se aprovecha de usted.- con su clara mirada señaló al mandamiento que entró inmediatamente en cólera.
-maldita zorra!.- la voz de la peli-rosa no pudo contenerse más, la oscuridad que de ella emergió apartó a gokú de la puerta y su figura se mostró ante el pecado capital que con una sonrisa burlona no parecía sentirse amenazada en lo más mínimo.
-¡no la escuches gokú!.- contestó a los comentarios que la pelinegra había soltado. -ella es parte de las personas que antes me lastimaron, solo han venido a tratar de matarme otra vez.- explicó, entonces los ojos de la recién llegada se entrecerraron por el comentario dado.
-pero miren, alguien al fín decidió salir de su escondite...- nuevamente retomó la sonrisa y observó directamente el ceño fruncido de la diablesa. -así que tú eres el bicho que trata de engañar a este hombre.- siguió hablando solo causando aún más enfado en meláscula.
-¡no la escuches gokú!.- inmediatamente después de escucharle exclamó .-ella es peligrosa, pero yo me ocuparé.- sus colmillos se apretaron y su oscuridad hirvió de la rabia por la presencia de esa mujer que, aunque no le conociese le fastidiaba que viniera por gokú. -no permitiré que ninguno de esos pecados te ponga las manos encima.- aclaró, pero antes de que su oscuridad arremetiese contra la maga, una extraña barrera púrpura apareció repeliendo los ataques de la diablesa.
-¿proteger?.- interrogó burlona, pues ahora a causa de las palabras de Meláscula obtuvo el nombre del hombre frente a ella. -¿gokú, no es verdad?.- hizo mecer su corto cabello en un movimiento de rechazo hacía la demonio que llena de cólera intentaba buscar la manera de atacar. -cree que estaría bien que mientras usted está siendo manipulado por esta demonio, el resto de los mandamientos asesinan a gente inocente, destruyen los pueblos y reinos que con tanto esfuerzo se ha logrado mantener?.- interrogó, los ojos de gokú miraron con decepción a la hermosa diablesa que apretó sus puños sin saber cómo silenciar a la maga.
-podría prestar su fuerza para detener eso, ella no es su amiga, solo es un monstruo que trata de seducirlo.- de forma elegante y cero preocupada recitó cada palabra, inmediatamente meláscula se giró hacía dónde el chico se encontraba.
-¡e-eso no es cierto!.- aclaró y voló hacia dónde el humano se encontraba. -yo no tengo nada que ver con ellos, yo vine aquí por tí.- se explicó, pero para ese momento las dudas del chico habían vuelto a emerger nuevamente.
-el deber de los demonios como ella es solo conquistar toda britannia, no les importa cuánta masacre traigan consigo porque eso solo es un gozo para ellos, apuesto que en el fondo esa desea matarlo y devorar su alma.- fácilmente describió como Meláscula se llegó a sentir alguna vez, pues en el primer día que le conoció trató de hacer todo eso, cosa que no logró consumar siendo un rotundo fracaso.
-¿es cierto?.- gokú habló, con una imponente mirada que de alguna forma le intimidó y sin poder contestar desvió la mirada.
-no, yo nunca haría eso!.- respondió, palabras que causaban burla en el rostro de merlín, de alguna manera parecía ser divertido ver a un demonio no poder actuar de acorde a su naturaleza.
-si es así, ¿entonces por qué viniste?, ¿por qué no estás con tus detestables amigos?, con esas personas que no hacen más que torturar a las personas?!.- al fín la pregunta que quiso hacer salió a la luz, pudo notarse la inconformidad del Son ante algo que no había podido expresar desde que le miró posada en el marco de la ventana aquella mañana.
el silencio entonces llegó, un viento frío sopló todo el lugar meciendo los cultivos cercanos y levantando algo de polvo, los sedosos hilos del cabello de la demonio se arrastraron un poco por la corriente entregando una respuesta que parecía no existir.
él soltó un suspiro de pesadez confirmando lo que ya venía sospechando de la dama, ella no era distinta a esos demonios y todo lo que dijo merlín parecía ser verdad, no obstante antes de que pudiera decir algo más aquellas manos se deslizaron a su pecho con lentitud, recorriendo la tela naranja de sus prendas delicadamente hasta que en un movimiento tímido logró aprisionar con sus manos parte del doji del pelinegro.
-porque ellos no son mis amigos...- susurró y con vergüenza agachaba la mirada. -pero gokú sí lo es...- musitó, y como si cada declaración anterior no existiese, ahora toda su sorpresa se centró en ella y, muy diferente a un sentimiento de decepción, ahora incluso el tiempo pareció detenerse cuando le cautivó con cada palabra.
-aún no sé cómo puedo tratarte, no tengo idea porque mi vida solo se a relacionado a servir y nada más, pero si puedo defenderte de alguien como esos detestables pecados, yo los mataré.- exclamó y se posicionó nuevamente frente a la maga que abrió sus ojos de par en par ante el repentina declaración.
Bastó de esa frase para que gokú lo entendiese, había querido escuchar al menos una disculpa por parte de ella porque todo lo que le gritó aquella noche no fueron más que ofensas y aunque decía haber una razón para eso esperó algo más, algo que lo dejó de hacer en ese momento porque entendió que ella también se siente desconcertada.
-por si no lo sabías, la persona que aquella noche matamos fue el causante de que la mayoría de nuestra raza pereciera porque él mató a miles de los nuestros y eso no era justo, ellos solo quieren aniquilarnos.- aclaró y los ojos de gokú señalaron a merlín. -y ese mismo tipo ahora es quien dirige a esta gente, los siete pecados capitales que trataron de matarme.- el espesor de su poder demoniaco se preparó para hacer verdaderas sus palabras, el asombro de merlín ceso y un rostro serio fue el que ahora tomó su lugar.
-debería considerar su forma de actuar gokú.- habló la mujer. -su fuerza puede ser útil para ayudar a mucha gente apartándolos de las desgracias que los mandamientos traerán sobre la tierra.- el cubo perfecto se desvaneció mostrando que pasaría de hablar a contestar a las amenazas de Meláscula. -hombres, mujeres y niños perecerán si alguien no los detiene.- exclamó tratando de persuadir de permanecer con la demonio, en el fondo tal vez inclusive ni le interesaba lo que pudiese pasar en los reinos ni nada de lo que había mencionado, porque su único motivo de estar ahí era aquel hombre que goza de un exorbitante y desconocido poder, que aunque no estuvo presente aquella noche pudo verlo todo, cada golpe, cada ráfaga que emergió del cuerpo de aquel que parecía ser un humano, una fuerza que repelió a la élite de le élite demoniaca, ¿cómo lo había hecho?, ¿de dónde proviene ese poder?, bueno todo eso al menos podía ocultarlo bajo esa fachada de mujer hermosa y amable.
-infeliz maga de quinta!.- vociferó la diablesa y su oscuridad se extendió por todo el campo creando un capullo de espesa oscuridad. -devoraré tu alma y callaré tus sucias palabras!.- amenazó y trató de hacer verdaderas sus amenazas, no obstante se encontró en una encrucijada, pues no pudo encontrar alma alguna en ese cuerpo a la cual engullir.
-tu poder parece interesante...- murmuró la mujer maga burlona. -pero no surtirá efecto sobre mi, pues mi alma está en otro sitio.- y creando una esfera de poder mágico contestaría a los ataques de la chica demonio.
-rayo exterminador!.- exclamó y de la punta de sus dedos el mismo se disparó hacía la chica que todo eso le tomó por sorpresa, pero podría esquivarlo si lo desease, no obstante atrás de ella se encontraba gokú y su casa.
-¡maldición!.- pensó viendo el destello dirigirse a ella.
-el capullo se deshizo y su oscuridad apenas si logró detener el ataque, pues aquella maga era mucho más poderosa de lo que pensó y no salió tan bien librada de la respuesta de aquella mujer azabache.
una desastrosa explosión se desató desde el interior de la técnica de Meláscula, el piso se fracturó y mucho viento escapó hacía los alrededores desvaneciendo la oscuridad de la demonio y en sus brazos el cuerpo malherido de la chica aterrizó.
-maldición!.- logró hablar, la sangre se escapaba de sus heridas, mismas que se curaron pero le dejaron jadeante de cansancio y aún más repleta de rabia.
-estás bién Meláscula-chan?!.- exclamó el saiyajin y con su voz el enojo se marchó, al menos en ese instante.
-si gokú, lo importante es que estés bien.- no recordaba sentir cuán bien se sentía que el chico la cargase de esa manera, tal vez porque no podía sentir su calidez en ese entonces.
-será mejor que desistas de tus planes si esto es todo lo que puedes dar.- la maga emergió de entre la nube de polvo.
-maldita...- retomando su enojo habló y trató de ir a enfrentarla nuevamente, pero lo que no esperó es que gokú la dejase detrás de él y decidiera tomar el asunto él mismo.
-ya basta.- exclamó con un rostro serio dirigiéndose a merlín. -no sé qué tan cierto sea lo que me dices tú o lo que meláscula-chan dice, pero te diré de una vez que no me busques para atender sus asuntos.- aclaró, en viento arrastró el polvo restante que se interponía entre la pareja y la maga. -si ustedes son las personas que lastimaron de esa horrible manera a melascula-chan, entonces no me interesa nada que tenga que ver con los pecados capitales y no quiero involucrarme en problemas.- no separó en ningún momento la mirada del pecado que solo se mostró serio, no pensó que sus planes resultasen de esa manera.
-veo que la demonio ha cumplido su cometido.- se expresó con un poco de molestia. -qué fue lo que le hizo?, lo sedujo de alguna manera?, si es así no me extrañaría viniendo de una demonio.- esta vez los comentarios parecieron dirigirse a la chica que aún más enojada trató de lanzarse hacía ella.
-¡¿me estás diciendo que soy una zorra maldita humana?!.- apenas gokú trató de detenerla antes de que pudiese ir por la pelinegra. -te quiero escuchar repetirlo nuevamente y juro que te haré ver el infierno como una salvación!.- siguió amenazando, pero gokú logró dejarla en su antigua posición y él confrontó a la maga nuevamente.
-le pido señorita que se marche de aquí, solo me causa problemas y no quiero tener que hacerlo por la fuerza.- esta vez fue él quien amenazó a la maga que con tantas cuestiones sobre el misterioso hombre parecía no cedería ahora que parece tener mejor oportunidad con los disturbios y calamidades causadas allá afuera.
-no hará caso gokú...- en ese momento de alguna forma las palabras de la maga se hicieron verdad, porque su corazón le dijo podría jugar algunas piezas en su favor para terminar todo esto cuanto antes. -ella quiere matarme y no se irá hasta lograrlo...- fingió sentir miedo en ese momento, dio la impresión de ser una niña temerosa y cómo no estarlo?, si esas mismas personas habían calcinado su cuerpo y condenado a una tortura de la cual sería preferible morir, o al menos así es como gokú lo creyó en ese momento.
no lo permitiría, eso estaba claro porque sus dudas ya estaban resueltas y sin pensarlo mucho extendió su mano hacía la maga que quieta se cuestionaba si haría verdaderas sus palabras.
-no se preocupe señor, me marcharé ahora mismo.- declaró y su poder le hizo flotar apartándola del suelo, era bastante desconocido para enfrentarlo con lo poco que sabía y debería prestar más atención. -pero debe saber que esta no será la última vez que nos encontraremos gokú, no lo olvide, soy merlín, el jabalí carmesí de la gula, nos vemos.- pudo jurar que antes de verla desaparecer observó como ella remojó sus labios y guiñó un ojo, cosa que confirmó cuando la demonio se enfadó.
-maldita perra, vuelve y repite eso!.- exclamó inconforme con la última acción de la maga.
pasó mucho en tan poco tiempo y aunque pareciese que todo estuviera bien, la realidad era otra para el saiyajin.
-entonces tenemos que irnos?.- un tanto confusa preguntó a gokú al verle empacar un montón de cosas momentos después del incidente con merlín.
-ya causé muchos problemas con tus amigos y ahora con más gente, además ya saben donde vivo y no quiero entrometerme más en estos asuntos.- explicó guardando lo poco que había en esa casa, su ropa, algunos objetos más.
salió fuera de su hogar por un par de caballos que mantenía en los verdes prados que se encontraban al pie de la colina, ella le siguió en todo momento aún preguntándose por qué tanto afán de cambiar de residencia.
-y por qué es malo que los humanos sepan tu ubicación?, no es como que puedan vencerte, incluso asustaste a esa maga.- exclamó, pero gokú negó levemente con su cabeza. -simplemente no puedo hacerlo, no debo intervenir con asuntos de nadie, de lo contrario no podré regresar.- explicó, pero esa respuesta solo dejaría más dudas en la demonio.
-regresar?, a donde?.- preguntó, era claro que su origen desconcertaría a cualquier persona de ese sitio, por eso mismo debería mantenerlo alejado lo mejor posible de cualquiera. -a mi hogar.- contestó.
preparó a los animales con un carruaje de carga que se encontraba detrás de la casa, solía utilizarlo en el pasado antes de mejorar su teletransportación, pero ahora debería retomar esos viejos hábitos por su bien.
para cuando la tarde terminó por caer todo ya estaba listo, lo único que puso como carga fue la ropa y algo de comida entre otras cosas sumamente importantes.
-oye, no es necesario, si esa bruja vuelve yo la mataré para que no cause problemas.- propuso, pero no mostró una clase de alivio en el rostro de gokú.
-no es eso, solo no quiero involucrarme con nadie, quiero seguir viviendo tal y como lo he hecho.- se explicó y ascendió a la carrocería y esperó por algo más.
-pero... si no quieres involucrarte con nadie más... eso me incluye?.- preguntó la demonio causando que gokú comprendiera el peso que sus palabras traían y se confundió así mismo, porque bien pudo irse no obstante esperaba a que ella se sentase junto a él y salieran de allí, véase cómo se viese ella tenía igual o más peso en asuntos ajenos que la maga que les había visitado.
-melascula-chan vino por mi a pesar de tener más cosas de las cuales preocuparse no es así?.- él decidió preguntar a la diablesa que se arrepintió de haber indagado tanto, pues ahora le era imposible siquiera encontrar una respuesta para eso, había venido exclusivamente por las órdenes de sus superiores, pero de alguna manera prefería estar con él que allá con el resto de sus compañeros.
-pue-puede decirse que así es...- cuando dijo eso vio nacer la sonrisa del joven una vez más. -entonces hay que irnos antes de que alguien venga.- como no negarse a esa petición, no bastó de más para que descendiese al antiguo vehículo y ambos partiesen dejando atrás el lugar en el que se conocieron y de alguna u otra manera, llegaron a sentir que eran los dos contra lo que sea que se venga.
-¿no era más fácil ir volando?.- un tanto aburrida y recostada sobre la madera habló, la noche ya había pasado y poco o nada había sido lo que logró descansar, no era nada cómodo viajar de esa manera.
-lo que menos queremos ahora es llamar la atención, cualquier cosa extraña que hagamos será motivo para sospechar.- explicó amablemente el chico.
-bueno, trataré de ser menos descuidada y vigilaré que ningún poder mágico esté sobre nosotros para evitar que ningún mago nos esté viendo a través de un hechizo.- comentó la diablesa.
-esa maga merlín era muy extraña.- después de un corto silencio habló repentinamente llamando la atención de Meláscula. -¿por qué?.- preguntó, el tema del que menos quería tocar era de esa mujer irritante.
-bueno, nunca había visto a alguien con esa ropa, eran muy pequeña y dejaba ver mucho su cuerpo.- colocando su mano en el mentón respondió, tomándose el tiempo para analizar, sin embargo inmediatamente sintió la fría respiración de la demono soplarle en su cuello de forma amenazante.
-no me digas que te gustó cómo se vestía la zorra esa.- inconforme con sus declaraciones interrogó, gokú tragó hondo ante la fría voz del mandamiento de la fé.
-no-no es eso...- titubeó en su respuesta completamente nervioso. -e-es solo que estoy seguro que debe hacerle mucho frío.-respondió dando su inocente conclusión, pero no pareció convencer completamente a la demonio que no borró del todo su expresión.
-bueno, ya que te gusta ver a otras chicas, supongo que no te molesta que pregunte algo...- aprovechando la situación comentó. - qué piensas de mí?.- repentinamente preguntó volando y posicionándose frente a él para verle directamente.
- a qué te refieres?.- confuso ofreció esa pregunta.
-quiero saber como crees que me veo.- le siguió preguntando, y gokú inclinó su cabeza apenas entendiendo la pregunta.
-bueno... el cabello de melascula-chan es muy suave y tiene un color muy bonito.- fue lo primero que dijo causando un rubor en las mejillas de la chica. -además esa ropa te queda bien.- siguió alagando, ella no pudo soportarlo y desvió la mirada.
-pe-pero... quién crees que es más linda, esa maga o yo?.- un tanto tímida decidió ser un poco más directa.
-pero claro que melascula-chan es la más linda.- decidió aclarar sus dudas, sus palabras eran dulces y sinceras que le cautivaron enseguida.
-hay algo que más te guste de mi?.- comenzó a jugar con sus dedos ansiosa por más, gokú rascó su mentón pensando. -me gusta cuando Meláscula-chan prueba mi comida y dice que es rica, también me gusta cuando duerme tranquila y también es linda cuando ríe.- siguió diciendo, no eran halagos que resaltaban directamente su belleza, más bién eran cosas que aunque tuviese el cuerpo deplorable de antes seguirían siendo las mismas.
-go-gokú!.- sin poder contenerse más abrazó el torso del humano y se sentó en su regazo a la vez que frotaba su rostro en el pecho del joven.
-de-detente meláscula-chan, me harás caer!.- alertó ante los gestos repentinos de la demonio.
-no quiero que seas amable con nadie más, me escuchaste?, con nadie más!.- le ordenó con voz ahogada, dejando sus declaraciones al aire porque ahora solo podía hacer algo para ocultar el rojo que su rostro había pintado.
no hay temor alguno que se pinte en sus palabras, la tranquilidad con las que decía parecía mostrar que a través de sus ojos no la miraba como un monstruo que temer o un peón del clan demoníaco, ¿pero cuánto podría durar todo eso?, no había ser que supiera mejor que ella que su cuerpo y su apariencia no es más que una farsa total, porque en vez de esa blanca y suave piel se esconde un seco y largo cuerpo repleto de escamas, unas fauces que se pueden deformar de manera espantosa, ella era un reptil asqueroso y solo de pensar que gokú lo supiese o la mirase en esa forma le revolvió el estómago, se preguntó cuán lejos podría llevar esta farsa, pero no podía negar en el fondo que mientras perdure, lo disfrutaría.
fin del capítulo 8
Bien gente, aquí el nuevo cap.
Espero que les haya gustado y no olviden votar si es así.
Gracias por leer y no olviden dejar sus opiniones respecto a este cap y como se desarrolla la relación del kokun y melascula.