Skyler
Estuve un largo rato bajo la lluvia de la ducha mientras el agua caliente golpeaba mi cuerpo, hoy estaba por casarme, estaba a horas de que fuera mi boda. Pero en mi cabeza, todo lo que se repetía en este momento, era la noche anterior. Los besos con Pery, sus manos en mi cintura, sus ojos viéndome, las palabras que nos dijimos, los susurros nocturnos y nuestros cuerpos uniéndose.
Una parte de mi, seguía ahí, dormida a su lado, una parte de mi me estaba arrastrando a que vuelva. Pero no podía hacerlo, tenia que concentrarme en lo importante. Cierro la llave de la ducha y salgo de la misma colocándome la bata de baño, me acerco al espejo donde con mi mano la paso por todo el espejo empañado y me observo antes de resoplar.
Observo mi mano izquierda donde descansa el anillo de compromiso, y me permito fantasear un poco, ¿Cómo hubiera sido si no hubiera acabado todo en aquel aeropuerto?, ¿estaría por casarme con Percy?, ¿viviríamos juntos en una linda casa?. Negué con la cabeza, ¡debía concentrarme!, voy a casarme.
—Amo a Tom.—dije a mi reflejo.—Por eso voy a casarme, ¿no? Porque amo a Tom y nos iremos a Canadá.
Escucho una risa sarcástica en mi cerebro junto a las palabras de "créetelo tu misma ,amiga".
El fuerte ruido del timbre hace que me alarme y camino descalza hasta la puerta, al abrirla me encuentro con mi mamá tenía una falda hasta las rodillas de color rosa suave, y una remera blanca decorada con varias flores, su cabello el cual se encargaba de teñirse para que no se le notaran las canas estaba acomodado en un perfecto moño, me sonríe pero su sonrisa se va borrando de a poco donde comienza a fruncirme el ceño al ver mi estado realmente lamentable y para nada listo.
—¡Sky!, ¿y tus damas no están aquí para ayudar a vestirte? ¿Volvieron tarde de tu despedida?—pregunta ingresando a mi departamento.
—Yo...
—No importa, ven, yo me encargo mientras tu llamas a tus damas de honor, tenemos pocas horas antes de que te cases.—comenta ella agarrándome de la mano, coloca una silla frente al pequeño espejo para mirarme, ella comienza a trabajar a mi alrededor.
Mamá peinaba mi cabello con sumo cuidado, mientras veo su reflejo sonreír en el espejo, mientras que mis dedos se mueven por la pantalla del celular mandándole mensajes a mis damas de honor.
—Recuerdo cuando tenía que peinarte para que fueras a la escuela.—dice en un tono nostálgico mientras se colocaba hebillas en la boca.—Me costó domar tu cabello rizado, siempre te molestabas cuando intentaba peinarlos.
Suspire mientras busco el esmalte rosa claro para pasarlo por mis uñas. No me interesaba abrir una vieja caja de los recuerdos y hablar de mi niñez con mamá, tuve una niñez feliz si soy honesta, mamá estaba presente, jugábamos mucho, armábamos obras de teatro en el patio trasero de mi vieja casa mientras papá escribía o estaba con nosotras.
Hasta que decidió escaparse, y perder todo el contacto conmigo porque ella quería ser feliz, y yo no era suficiente. Irse a perseguir sus sueños donde no consiguió la grandeza que buscaba, y aun así, jamás volver.
—Esto me recuerda a mi boda.
—Claro, fue hace unos años.—dije destapando el esmalte.
—No hablaba de esa, si no con tu padre.—dice y fruncí el ceño, pero ella no se da cuenta.—Fuimos a una linda capilla, amigos cercanos, tenia un vestido bastante cómodo y bonito con unos adornos...
—Mamá.—Hable cortante clavando mis ojos verdes en el reflejo de su rostro.—Aprecio que vengas a mi boda y quieras tener todo este vinculo madre e hija de nuevo, que quieras peinarme y ponerme bonita para mi boda. Pero no toques ese recuerdo con papá como si hubieras sido feliz.
—Fui muy feliz, Skyler.
—¿Y te fuiste?
—¿Sabes? No volvamos a tener esta conversación.—dice mamá.—Olvide lo obstinada que eras.
—Claro que lo olvidaste, te pasaste gran parte de mi adolescencia sin ser parte de ella, te fuiste para jamás regresar haciéndome creer que no era lo suficiente para ti, dejándome aquí sin molestarte en llamar hasta seis años después.—dije molesta volviendo agarrar mi celular.—Maldita Zoe, ¿Dónde esta? Rosie y ella ya debieron haber llegado.
—¿Algún día vas a perdonarme, Sky?—pregunta mamá.—Realmente lo lamento hija, solo...fui egoísta y claro que te amo, solo...
—Entiendo el porque te fuiste.—dije seria.—Lo entendí antes, lo entiendo ahora, pero mínimamente te hubieras esforzado por mantener contacto conmigo, ¡todo lo que tuve de ti fue una seca carta para navidad!, y luego volviste, años después a pedir un divorcio porque te casarías con otro, eres increíble porque encima quieres que te tenga lastima.
—No quiero que me tengas lastima, Sky. Trato de reparar todo.
No alcance a contestar cuando, sin molestarse en tocar, la puerta fue abierta de golpe y tres chicas aparecen.
—¡Hola!, perdona la tardanza, estábamos muy dormidas, Dios que calor de mierda, espero que mejore para la tarde...—dice Zoe ingresando con bolsas, Dove y Rosie están detrás de ella con los vestidos, los set de maquillaje y demás. Mamá se seca sus lagrimas al igual que yo, Zoe y Rosie nos miran pero ninguna dice nada, solo suspiro mientras le indico a Zoe que me ayude con mi maquillaje, en lo que mamá decide ir a la cocina.
Las chicas se mueven por mi departamento comenzando a prepararse entre ellas, preparándome a mi, veo a Dove morderse el pulgar tras el reflejo del espejo, y la mirada de mi madre tras la conversación que tuvimos.
Horas después, nos dirigimos a la recepción de la iglesia, en donde estoy en un cuarto preparado para la novia mientras todos los invitados ingresan al salón, Tom también esta en otra habitación terminando de prepararse. El cuarto esta decorado con rosas blancas por todos lados, un enorme y claro sillón con almohadas mullidas, mis damas de honor asegurándose que todo este en su lugar, el reloj indicando la hora.
Y aquí volvimos, al principio de esta historia, donde me veo en el espejo y siento que estoy a punto de vomitar. Luzco hermosa, debo admitirlo, con el vestido blanco, la falda ancha con pliegues y mangas cortas con un pequeño escote, mi cabello atado en un lindo moño y demás. Si este es el día mas feliz de la vida de cualquier persona, ¿Por qué luzco tan aterrada? Si voy a casarme con un chico que amo, ¿Por qué Percy sigue en mi cabeza?
Unos golpes suenan en la puerta y me acerco a abrir, me sorprendo demasiado a ver a Niklas frente a la misma. Con un pulcro traje negro y una corbata color borgoña, su cabello perfectamente acomodado con gel peinado hacia atrás y sus ojos cafés que me miraban con amabilidad. Me sonríe.
—Wow, eres una de las novias mas lindas que vi.—dice viéndome.
—Gracias.—dije y lo invite a pasar.
—¿Cómo te encuentras?—pregunta Niklas.—Gran día, debes estar emocionada.
Niklas acaricia los pétalos de unas flores y suspira pesadamente mientras la hora se iba acercando.
—¿Luna de miel?—me pregunta.
—Iremos a Canadá, ya sabes para...buscar lugar y conocer la ciudad.
—Apuesto que serán muy felices-—dice sonriendo, de a poco su sonrisa se va convirtiendo en una mueca mientras mira a su traje, introduce una mano en su saco y de la misma saca una carta, mueve el sobre entre sus manos.—Es de Percy...Pensaba en no dártela, porque no servía de nada si los hería a ambos de una forma, pensaba que si no te la daba tu te ibas por tu lado y Percy por el suyo...pero también me di cuenta que si no te la doy, soy el malo de la historia cuando solo quiero protegerlos.
—Y eres muy bueno en eso.—dije viéndolo.
—No lo suficiente.—dice extendiéndome la carta.—Te dejare para que la leas si quieres.
—Por favor...
—Estaré en mi asiento con los demás, buena vida Sky.
—Adios—susurre, Niklas besa mi mejilla antes de salir por la puerta mientras yo me siento en el mullido sillón blanco y me deshago de la carta demasiado rápido para comenzar a leerla.
"Querida Skyler: No haré preguntas de porque te fuiste en la noche, la respuesta es bastante sencilla y no me interesa en este momento gastar tinta y papel cuestionando eso. Tranquila, no habrá una canción o un álbum dedicado a esa experiencia.
Pero quiero pedirte algo, quiero que volvamos a cuatro años atrás, donde tu tienes dieciocho y yo diecinueve. En el aeropuerto, donde yo estoy por hacer mi gira y tu estas por terminar conmigo, quiero que vuelvas atrás y cambiemos unas palabras, quiero que cuando tu me digas que no me quieres y yo te pregunte por que, tu me seas honesta desde el principio. Porque mis palabras serian diferente.
Sky. Skyler, eres la chica mas hermosa y a la que mas ame profundamente, y no anduve contigo por tu físico, ¿conocí varias famosas? Si, ¿alguna llego a gustarme como tu me gustas?, no. Honestamente, no. Cuando era mas joven, la fama se oía como algo divertido, pero nada de eso era suficiente si te perdí a ti. La fama vino con cosas buenas, pero también con cosas malas, pero me moría de ganas de descubrirlo contigo. Se que será difícil el camino, será que será duro hacer oídos sordos cuando todos comentan sobre ti, pero mientras yo te ame profunda y locamente como lo hago, voy a protegerte de todo aquello que te haga daño. Y eso te mereces Sky.
Mereces la clase de amor que iría a buscarte a cualquier hora si te quedas atrapada en un lugar, mereces la clase de amor de lo que puedes hablar y reír de lo que sea, la que te ama y te protege como si fueras lo más valioso del mundo. De la que discuten pero en el fondo se aman tan fuerte que la sola idea de separarse te lastima. Ese es el tipo de amor que tu y todos merecen.
Ojala Tom te de el tipo de amor que tal vez, yo no pude darte. El tipo de amor que le ponga tu nombre a un platillo porque te lo mereces.
Espero que seas feliz en Canadá, y que encuentres lo que tanto buscas. Espero que al caminar en aquella ciudad, puedas verte y sonreír estando completamente orgullosa de ti misma, de lo que eres, como yo lo estoy.
No me presentare a tu boda, porque es muy difícil para mi hacerlo, es muy difícil verte marchar y dejar que te vayas de mi mano, pero lo haré por ti, porque es lo que quieres. Porque eres dueña de tu vida, y ni yo, ni Tom ni nadie te debe decir que hacer y que no hacer. Pero espero que sepas, cada vez que me escuches cantar en la radio, o me veas en una entrevista, una parte de mi, siempre y completamente, te amara y te pertenecerá.
Por siempre tuyo, Percy".
Vuelvo a leer la carta de arriba a abajo, estudiando cada línea de aquella delicada caligrafía, sintiendo mis ojos llenarse de lagrimas y el corazón acelerando en mi pecho antes aquellas palabras escritas.
Quería llorar, pero si lo hacía, iba a arruinar todo el maquillaje, me levanto caminando en círculos mientras vuelvo a leer la carta de Percy, sus palabras, cada emoción "Por siempre tuyo", había firmado así.
Amaba a Percy, lo amaba tanto.
Me detengo abruptamente frente al espejo con la carta en la mano y mis ojos brillar, podía sentir mis nervios a través de mi reflejo, mis ojos verdes me devolvían la mirada. Reflejando todo el temor que estoy sintiendo ahora, comienzo a caminar de lado a lado, pensando que me falta un poco de aire. ¿Voy a morir?
Oh vamos, no tengo que ser tan exagerada, no estoy a punto de morirme. Si de tener un ataque nervioso, pero eso no significa que voy a morirme. Me siento en el cómodo sillón blanco, tomando respiraciones tranquilas, contando hasta diez, como mi padre me explico muchas veces.
Tres suaves toques suenan en la puerta, ya era hora, y estaba sudando demasiado. Oh si, porque no hay nada mas lindo que ser una novia sudorosa.
Zoe asoma su cabeza para mirarme, hace una mueca, dándose cuenta el desastre que estoy siendo en este momento.
—¿Qué sucede?—pregunta ella ingresando.—¿Quieres agua?
Tal vez algo mas fuerte de ser posible, como una botella de vodka.
Le extiendo la carta, porque no se si puedo expresarme con palabras, Zoe se sienta y la lee atentamente. Ella muerde la uña de su pulgar y cuando termina de leer, levanta la mirada mirándome a mi.
—¿Y que harás?—pregunta ella.—¿Te vas a casar con Tom?
—No lo se.—susurre.
—Sky.—dice Zoe dejando la carta de lado y agarra mis manos.—Eh visto como Percy te mira cada vez que están juntos, cada vez que entras a una habitación parece que se le corta la respiración, no digo que Tom no te ame...solo digo que, Tom ama mas su trabajo que estar contigo, este casamiento es un plan para hacer mas fácil su estadía en Canadá si estabas casada a él. Solo...debes decidir, ¿caminaras al altar? ¿o iras detrás de Percy?
La pregunta del millón se estaba haciendo en este momento, ¿Qué haría?, no quería ser como mi madre, mirar hacia atrás y arrepentirme de las decisiones que tome. Me aterraba la idea de empezar una familia con Tom y que mi cabeza solo estuviera Percy.
Y me daba mucho mas miedo, pensar en llegar a ser completamente infeliz una vez que tuviera una familia. Arrepentirme para siempre y querer abandonarlos.
La puerta vuelve a abrirse donde Rosie junto a Klaus ingresan, ambos nos sonríen levemente mientras que la rubia juega con su bolso entre sus manos, y tras preguntar que sucedía, Zoe se encarga de explicarle todo, porque no se si yo podía hacerlo, tenia miles de dudas, miles de preguntas.
—¿Entonces que harás?—pregunta Klaus.—¿Que quieres, Sky?
—No quiero tener estas dudas.—susurre.—Si hace meses me hubieran preguntado estaría bastante segura pero...Percy...yo nunca deje de amar a Percy, solo hice lo que creí mejor...lo que necesitaba para crecer.
Veo a Rosie quien se mordía levemente el labio y jugaba nerviosa con su bolso.
—Oh soy una mierda.—dice ella lamentándose.—Lo siento, Sky, quería decírtelo pero estabas tan nerviosa porque faltaban pocas semanas y Tom siempre estaba dando vuelta, entonces nunca podía decírtelo, me tarde porque necesitaba confirmarlo, y no quería hacerlo ahora, hoy justamente, pero te iras y necesitas saberlo, lo lamento soy una terrible amiga, tuve que decírtelo todo antes...
—Rosie, tranquila, habla con calma, no entiendo.—pedí agarrando la mano de la rubia.
—Si, con tus disculpas parece que estas disculpándote de acostarte con Tom o algo asi...—habla Klaus y Zoe le da un zape provocando que el chico asiático se queje agarrándose su cabeza por el golpe.
La rubia suspira abriendo su bolso antes de sacarme unos papeles.
—El día que llegue tarde a la prueba de vestido, fue porque Tom estaba en la editorial.—comienza a hablar dándome los papeles.-—Quería que le imprimiera esto, vi un poco, planeaba amenazarlo en la fiesta para que al menos te dijera la verdad antes de irse...pero Sky...Tom se hizo pasar por ti, compro la propiedad del restaurante a tu nombre y estuvo sacándote plata del banco, todo a tu nombre...
—¿Qué?—susurre agarrando los papeles, viendo los números y las cuentas, estaba mi firma aunque claramente yo nunca firme esos papeles ni los había visto. Zoe aprieta los labios y murmura algo como "hijo de puta", Rosie se vuelve a disculpar por no contarme antes en lo que yo me levanto y camino en paso decidido hasta la otra habitación.
Ingreso sin molestarme en tocar a la habitación done se encuentra Tom, haciendo que él y su hermano Matty peguen un brinco. Matty nos mira a ambos, tras pedirle que nos deje solos él asiente y se retira, Tom me mira confundido.
—Sky, no tenemos que vernos antes de la boda, es mala suerte.—dice Tom, lo mire realmente molesta antes de tirarle los papeles que golpean su pecho.—¿Qué es esto?
—¡Tu dime, Thomas!—grite molesta.—¡Dime porque aparece una propiedad a mi nombre!, explícame como has extraído mi dinero del banco, cada centavo que me gane en mi trabajo, lo que lleve ahorrando por años, me lo ibas arrebatando...por dios, ¿por esto te casas conmigo?
—¿Qué? ¡No!
—¡Entonces explícame!
Tom comenzó a balbucear seguramente intentando en pensar una mentira, aunque sabia que ninguna mentira le convenía en este momento, suelta un suspiro fregándose la frente.
—¿Te acuerdas esa noche que fui borracho a tu departamento y estaba molesto?—pregunta.—Había comprado un restaurante en Inglaterra, mi propio restaurante, pero el hijo de puta al que se lo compre me estafo y se fue...¿sabes cuanto quería un restaurante?, ¡me ofrecieron ese pequeño local en Canadá pero yo no tenia dinero!
—¿Y por eso robarme? ¿por eso hacerte pasar por mi?
—¿Qué podía hacer?, mi dinero fue robado, tardaría demasiado en recuperarlo y en el restaurante se me había bajado el sueldo, entonces...tenía que hacer una compra rápida para obtenerlo.
—¿Sabes que pudiste haber hecho?¡Hablar conmigo!, siempre te e apoyado, si necesitabas dinero te hubiera prestado, ¡porque somos una pareja Tom! ¡Por Dios vamos a casarnos!, el dinero esta en estas cosas de pareja, pero decides robarme...—suspire.—¿Solo te casas conmigo porque estas asustado?, porque al estar casado nuestros bienes se dividen y...Dios mío. Eres increíble.
—Hey, eso no es cierto.—dice Tom tomando mis manos.—También me caso contigo porque te amo, porque me gustaste demasiado cuando te vi hace años, porque...
—No, Tom, tal vez te gustaba cuando nos conocimos, y tal vez debió quedarse asi, porque tu amas tu trabajo mas que a nada, siempre fuimos tres en esta relación. Tu, el trabajo y por ultimo estoy yo, intente entenderlo al principio, pero...que llegues tardes a citas, que me mientas que creas que no puedes confiar en mi...¿Cómo quieres iniciar un matrimonio asi?, ¿Qué haría yo en Canadá donde no conozco a nadie?, ¿estar encerrada en el departamento sola mientras tu te encargas de tu precioso restaurante?, ¿Qué si teníamos niños los cuide sola?
Un enorme nudo apareció en mi estomago, "Mereces la clase de amor que le pongan un platillo a tu nombre". Percy me escribió una hermosa canción de amor a meses de estar juntos, Percy no dudo en decirme que me quería, si yo estaba triste ahí estaba Percy. Y todos los chicos, cuando la hermana menor de Zoe enfermo, todos abandonaron su gran primer concierto para estar con nosotras.
Tom nunca abandono nada por mi, Tom llegaba tarde, Tom podía ser lindo, podía quererme. Pero no era Percy.
—Skyler, lo lamento, te lo compensare, cuando estemos en Canadá...
—No.—susurre y él me mira.—Haz lo que quieras, vete a Canadá, quédate con mi dinero y tu lujoso restaurante, pero no te quedaras conmigo, ni lo sueñes.
—¿Qué...?
—Me acosté con Percy, anoche.—dije riendo amargamente mientras que su rostro comenzaba a volverse rojo y me miraba molesto.—Así que, ahí lo tienes, tu me robaste mi dinero, te hiciste pasar por mi, yo me acosté con el mejor ex que tuve.
—Skyler...
—No necesito esto.—Dije sacándome el anillo y se lo tire haciendo que rebote en su pecho.—Espero que encuentres una chica que sea lo suficientemente genial para amarte a ti y a tu trabajito, yo...no haré esto.
Sin esperar palabras, o que me hable, me salí del cuarto. Suspire pesadamente mientras masajeaba mi frente, agarro la falda del vestido para no pisarlo mientras comienzo a caminar en paso apresurado. Veo al grupo de Midas King hablando entre ellos, Rosie estaba siendo rodeada por un brazo de Caleb, Zoe enlazaba su brazo con el de Magnus, mientras que Klaus se mantenía cerca de Niklas en silencio.
Todos se voltearon a verme, sorprendidos, seguramente preguntándose que hago aquí.
—Necesito que cancelen la boda por mi.—dije viéndolos.—Zoe ¿puedes hacerlo? Dile a mi padre, o a quien quieras, no me casare hoy, necesito las llaves de uno de sus autos, tengo que ir a ver a alguien urgente.
Todos se quedaron atónitos viéndome, rodee mis ojos y aplaudí para llamar su atención.
—¡Chicos!, ¿me oyeron? No hay boda, y necesito llaves, ¡Ya mismo!
Zoe se apresura a irse por el pasillo seguida de Klaus, mientras que Midas King rebuscan en sus bolsillos. Agarro las llaves de Magnus cuando me las extienden y comienzo a correr agarrándome de la falda del vestido, varios de los invitados en la entrada se voltearon a verme sorprendidos, Dove no alcanza a preguntar donde me iba que yo estaba bajando por las grandes escaleras, busco con la mirada el auto de Magnus hasta que di con el mismo y me subo a él, con las manos sudadas y el sol de verano pegando en mi cara, pongo la llave haciendo contacto con la misma.
—¡Skyler!—escucho la voz de Tom.—¡Skyler espera!
Le muestro mi dedo del medio antes de arrancar, dejando a varios de los invitados totalmente confundidos.
Conduje bastante rápido, me saltee los semáforos, seguramente el auto de Magnus tendría una multa por mi manera de conducir. Hasta que llegue al edificio, bajando con el vestido corrí hasta adentro donde el portero solo me observa, me subo al ascensor hasta su piso donde comienzo a tocar el timbre varias veces.
Apoyo mi cabeza en la puerta, por favor Percy, ¿Dónde estas?
—¿Sky?—pregunta la voz de Percy detrás mio, me volteo a verlo, tiene una remera sin mangas de color blanca puesta y jeans. En su mano derecha tiene unos lentes de sol mientras que en la izquierda sostiene una bolsa de comida china.
Percy me observa detenidamente.
—¿No tienes una boda?...tu boda—pregunta él.
—No voy a ir.
—¿Como dices?—pregunta confundido.
—Percy...—murmure.—Yo...mierda, anoche...
—Oh...
—No hables, no me mientas diciendo que lo lamentas o es algo que no debía ocurrir porque así se desarrollan todos los problemas y libros de romance.—dije, pero Percy sonríe de una manera engreída.
—La verdad iba a decirte que no lo lamento. —dice él antes de que su sonrisa se borre.—Te ves hermosa.
Suspire acercándome a él.
—¿Me amas?—susurre.
—¿No fui bastante obvio en todo este tiempo?—pregunta él, pero yo solo lo miro.—Claro que te amo, Sky, lo suficiente como para escribir un álbum sobre ti pensando que así podría olvidarte pero te quedaste en mi cabeza, lo suficiente para no interrumpir a tu boda pensando que eso quieres, lo suficiente para conducir en una noche de san Valentín y buscarte porque te dejaron ahí, escribirte una canción de amor a meses de estar juntos...Te amo.
—La Skyler de dieciocho años lo lamenta, Percy...ella quería decirte que te ama pero estaba bastante aterrada y sus inseguridades la estaban matando que...perdóname.-susurre, Percy me mira y asiente una vez.-La Skyler de ahora...acaba de huir antes de cometer el error mas grande de su vida, es una larga historia pero...desde que volví a verte...te amo, te amo mucho, ¡oh por Dios, estoy enamorada.
—¿Enserio?
—¡Si!—dije, Percy se las empeña para agarrar mi rostro y besarme. Sigo su beso pegándome a su cuerpo mientras que los labios de Percy se mueven sobre los mios. Agarre sus brazos mientras sentía que iba a llorar.
Las manos de Percy acarician mis mejillas mientras nos seguíamos besando en el pasillo, seria todo un espectáculo para sus vecinos.
—Percy.—susurre.—Quiero irme de aquí.
—¿Dónde quieres ir?
—Donde quieras, llévame a un lindo lugar, solo nosotros dos, unos días.
—Claro que si.—susurra besándome.—Pero...¿viniste en el auto de Magnus?
Reí asintiendo.
—Yo me encargo de eso.—susurra.
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Que bello el amor.
Pero aun no es el final, todo puede pasar.
Ig: Julxswatt99