Estoy cargando demasiado,
tanto que su mismo peso me abruma.
El aire hace tiempo que se volvió pesado,
y mi estómago tiene un dolor inexplicable.
Acurrucado entre viejas cobijas,
esperando a que todo el tormento pase;
es una prueba difícil.
Por mi cabeza,
la idea de abandonar esto se cruza.
Porque tal vez quiero morir,
ya no vivir para no sentir.
Cerrar mis ojos y no saber más,
quizá así mi latente corazón se dé cuenta que estoy fuera de mi límite,
y comience a borrar aquellos sentimientos de remordimiento, culpabilidad y tristeza que trae constantemente en mis días.