La chica se encontraba caminando en dirección a la convergencia de los santuarios con el Kamar-Taj. No pensaba en encontrarse con Stephen dejando el Ojo de Agamotto en su lugar. Empezó a jugar con las mangas de su traje de hechicera mientras se acercaba a él.
- Y... ¿Cuáles son tus planes para el futuro?- preguntó Kelyani poco segura de querer escuchar la respuesta.
- Lo mismo que tú- la castaña alzó su mirada para encontrarse con los ojos del pelinegro-. Seguir aprendiendo de las artes místicas y proteger nuestra realidad.
La chica se quedó confundida al escuchar la respuesta de Strange, haciendo que este último se empezará a reír por su reacción. Yani se encontraba confundida por aquella noticia y caminará en dirección donde se encontraba Stephen.
- Pero tú...- la castaña pasó su mano en su cabello-. Estaba segura de que querrías recuperar tu antigua vida como neurocirujano. Creí que volverías a ser el gran Stephen Strange.
- ¿Y perderme de tu bella compañía? No lo creo-la chica se acercó para verlo-. ¿Te cortaste el pelo?- preguntó al ver que ahora lo tenía cortado arriba de los hombros.
- En algunas culturas asiáticas, es un símbolo de luto. Ya sabes, por Ancestral.
Los dos se quedaron algunos segundos sin moverse del lugar o emitir palabra alguna. Strange acorto la poca distancia que había entre los dos para besarla. Ese beso era diferente al que habían tenido en el hospital. Era una especie de promesa de que estarían juntos sin pensar en los posibles escenarios que se presentasen en el futuro.
- Una sabia decisión- comentó Wong entrando al lugar haciendo que los dos se separaran inmediatamente tratando de recuperar sus respiraciones sin que su amigo se diera cuenta-. Te pondrás el Ojo de Agamotto una vez que hayas dominado sus poderes. Hasta entonces, es mejor no andar por la calle usando una Gema del Infinito.
- ¿Una qué?- preguntó Strange confundido viendo a Wong mientras la chica se acercaba a la puerta de Nueva York.
- Tienes talento para las artes místicas, pero aún tienes mucho que aprender. La noticia de la muerte de Ancestral se esparcirá por todo el Multiverso. La Tierra no tiene un Hechicero Supremo y una de las fuertes candidatas se niega aceptar- Wong observó a la castaña y después a Strange-. No hay quien lo defienda. Debemos estar listos.
- Estaremos listos- respondió Stephen-. Pienso llevarme a Kelyani conmigo. Mordo desapareció y Ancestral ya no está entre nosotros. Ella es quien podría ayudarme porque fue una de las personas más cercanas a Ancestral y una de las que más creyó en mí en un principio. Apuesto que es una gran maestra.
- Si ella acepta, no veo ningún problema- comentó Wong viendo a la castaña.
- Por supuesto que no tengo ningún problema. Creo que he estado mucho tiempo lejos de mi país y quiero estar cerca de la única familia de sangre que me queda. Ya es tiempo de regresar- respondió la chica.
Wong abrió la puerta, siendo Yani fue la primera en atravesarlo, seguida de Wong y Strange. Wong le hizo un ademán para poder hablar con la castaña a solas. Los dos se detuvieron en una de las escaleras para tener un poco de privacidad para hablar.
- Sabes que le tienes que decir. Él tiene que saber lo que vendrá. No se que te dijo Ancestral sobre el asunto, pero es mejor que lo sepa pronto.
- ¿Y preocuparlo antes de tiempo?
- Mientras antes lo sepa, mejor para todos.
- Lo haré, Wong. Lo prometo.
Wong regresó en dirección al Kamar-Taj. Ella creía que no era necesario preocuparlo antes de tiempo, pero no estaba demás que fuera advertido. Empezó a subir las escaleras, recordando las advertencias que Ancestral le había dado cuando Strange empezaba a dominar las artes místicas.
La castaña soltó un suspiro mientas veía la figura de Stephen viendo al exterior. Era una imagen que quería mantener en su memoria. Subió el último escalón hasta llegar junto al tragaluz que iluminaba la estancia. Puso su mano en el hombro, obteniendo la atención del pelinegro.
- ¿Sucede algo?- preguntó Strange.
- Sí. Tenemos que hablar de algo muy importante que puede perjudicar a todos- respondió Kelyani preocupada.
- ¿Qué es?
- Thanos- Kelyani se acomodó el cabello-. Tengo que hablarte sobre él y el peligro que venimos corriendo desde hace años. Estamos siendo amenazados y nosotros, digamos, somos uno de sus objetivos porque resguardamos una de las Gemas del Infinito. No es necesario que hablemos de esto en este momento porque todavía tienes muchas cosas por aprender.
- Kelyani- la mencionada se detuvo al escuchar que Strange la llamaba haciendo que mirará en su dirección-. Gracias por todo, en serio- la castaña sonrió-. No encuentro manera de agradecerte lo que has hecho por mí.
- Supongo que con que cuides el santuario como si fuera tu propia vida, será más que suficiente para mí.
La castaña empezó a caminar en dirección a la biblioteca para revisar que libros tendría y si sería necesario ir a la biblioteca del Kamar-Taj para sacar libros. Kelyani se sentó en uno de los sillones con el libro en la mano. Steange la había seguido a lo lejos, pero terminó entrando a la biblioteca.
- Antes de que empecemos con nuestras clases, quiero preguntarte algo- Kelyani alzó su mirada en dirección donde se encontraba Stephen.
- Si piensas preguntarme si seré tu novia, por lo menos espérate a la primera cita- respondió la castaña divertida.
- No- tosió haciendo que Knowlton alzará una ceja-. Es sobre la muerte de Ancestral y lo que sucedió con Mordo. No estaré tranquilo hasta que me mires a los ojos y me digas que estás bien sin mentirme, Kelyani.
- Y de repente, te preocupas mucho por mí- comentó confundida.
- Bueno, creo que me he preocupado por ti desde hace algunos meses. Creo que fue cuando Ancestral me dejó en el Monte Everest- Kelyani sonrió al escuchar su respuesta-. Siempre te has preocupado por mí, aún si que me conocieras, convenciste a Ancestral.
- Mordo me dijo que habías curado un perro herido de su patita cuando estabas buscando el Kamar-Taj. Me lo dijo después de que Ancestral te echará. Eso hablaba de que por mucho que fueras una persona egoísta, tenías un gran corazón que dar.
- Aún no has respondido a mi primera pregunta.
- Estoy bien, Stephen- lo miro a los ojos para regalarle la mirada más sincera-. Estoy bien. A ella no le hubiera gustado verme triste o deprimida como cuando llegue al Kamar-Taj. Después de todo, fue ella quien me ayudó a seguir adelante- se acercó para agarrarle la mano-. Esta vez no me siento sola porque te tengo a ti y a Wong.
Strange se le quedo viendo por unos instantes para darse cuenta que ella estaba siendo sincera con él, aunque hubiera pasado todo lo contrario, él no la presionaría. Puso su mano encima de la de ella para demostrarle que la iba acompañar en todo momento.
- Muy bien- los dos se separaron para acomodarse en sus respectivos asientos-. ¿Con que empezaremos la lección de hoy, maestra Knowlton?
- Empezaré, siempre y cuando no me interrumpas. Te contaré sobre Thanos cuando acabemos la lección de hoy y no estés cuestionando mis lecciones.
- Haré todo lo que digas. Lo prometo.
Kelyani empezó a hojear uno de los libros mientras el pelinegro se le quedaba viendo. La chica sintió una corriente que recurría su espalda a causa del hombre que la estaba observando con mucha atención, provocando que se sintiera nerviosa.
- Muy bien- alzó su mirada-. Es hora de comenzar.