Bizarre [JaeYong]

By ariaroseyong

107K 12.2K 6.7K

Cuando SungChan conoció a su padre biológico, no esperaba para nada lo que pasó. Nadie lo esperó. • Parejas ... More

u n o
d o s
t r e s
c u a t r o
c i n c o
s e i s
s i e t e
o c h o
n u e v e
d i e z
o n c e
d o c e
t r e c e
c a t o r c e
q u i n c e
⚠️ PAUSA BREVE ⚠️
d i e c i s é i s
d i e c i s i e t e
d i e c i o c h o
d i e c i n u e v e
v e i n t e
v e i n t i u n o
v e i n t i d ó s
v e i n t i t r é s
⚠️ Aviso ⚠️
v e i n t i c u a t r o
v e i n t i c i n c o
⚠️ ESTO ES UN SPOILER ⚠️
v e i n t i s é i s
v e i n t i s i e t e
v e i n t i o c h o
v e i n t i n u e v e
t r e i n t a
t r e i n t a y u n o
t r e i n t a y d o s
t r e i n t a y t r e s
t r e i n t a y c i n c o
t r e i n t a y s e i s
t r e i n t a y s i e t e
t r e i n t a y o c h o
t r e i n t a y n u e v e
c u a r e n t a
c u a r e n t a y u n o
c u a r e n t a y d o s
c u a r e n t a y t r e s
c u a r e n t a y c u a t r o
c u a r e n t a y c i n c o
c u a r e n t a y s e i s
c u a r e n t a y s i e t e
c u a r e n t a y o c h o
c u a r e n t a y n u e v e
c i n c u e n t a
c i n c u e n t a y u n o
c i n c u e n t a y d o s
aviso
e p í l o g o
n o t a d e l a a u t o ra

t r e i n t a y c u a t r o

1.8K 217 149
By ariaroseyong

Cuando TaeYong llegó a casa, envío a sus hijos a dormir deseándoles un simple "buenas noches" sin besitos, ni apapachos como acostumbraba. Los menores no se opusieron, ya que conocían a su padre y sabían que estaba enojado.

Se encerró en su habitación y trató de procesar las cosas una y otra vez, pero simplemente no podía. Seguía sin creer que sus hijos hayan sido capaces de hacer algo así. Se puso la pijama y se dejó caer sobre su cama soltando un gran suspiro. Decidió poner algo de música para relajarse y poder conciliar el sueño, pero la barra de notificaciones llamó su atención.

Al leer los mensajes de YoonOh, su corazón se estrujó y su estómago se revolvió. En ese mismo momento supo que lo había jodido con el menor. Su labio inferior tembló y se echó a llorar.

Luego de que las lágrimas pararon, buscó el número de su novio para enmendar las cosas y pedirle una disculpa sincera. Solo esperaba que YoonOh no lo mandara al diablo. Cuando la llamada fue atendida, esperó una respuesta cortante por parte del castaño, pero no, al contrario recibió un "hola, amor", así que sintiéndose más estúpido que antes, colgó la llamada.

Se cubrió con sus frazadas hasta el cuello y luego de hacerse bolita, cerró los ojos y dejó que el sueño se apoderara de él. Comenzó a soñar con YoonOh y tristemente, en el sueño  se repetía su pequeña discusión, solo que en ese escenario, el menor iba a buscarlo. Dolía porque se sentía tan real...

Abrió los ojos y se levantó de golpe al darse cuenta que el sonido del timbre no solo estaba en sus sueños, si no que en efecto, estaban tocando el timbre. Se levantó y caminó hasta la puerta con pasos temerosos, ya que la única persona en la que podía pensar en ese momento era JongHyun, aunque, seguramente, él habría entrado por la ventana.

No pudo evitar que las lágrimas le salieran cuando vio a YoonOh parado frente a su puerta.

—Perdón—se disculpó y su novio lo abrazó con fuerza—. Sé que actúe mal—chilló.

—Calma, amor—susurró y comenzó a acariciar su cabello con su diestra, mientras que con la otra mano, cerraba la puerta.

Caminaron hasta el sofá más cercano y YoonOh siguió abrazándolo hasta que el mayor se calmó.

—¿Qué haces aquí? —sorbió su nariz y limpió sus lágrimas con el dorso de su mano.

—Mi novio me llamó y luego no respondió, así que me preocupe—se encogió de hombros—. Vine corriendo a ver si estabas bien... bueno, vine en auto, pero de ser necesario, habría venido a pie—se acercó a él y besó la sonrisa que se había formado en su rostro por su tonta broma.

—De verdad siento mucho como actué.

—No te disculpes más. Perdóname tú a mí por querer meterme...

—No—negó repetidamente con la cabeza—. Es solo que... —suspiró— cuando salía con JongHyun él me decía como criar a los niños y yo le hice caso, así que cometí muchos errores con mis bebés—se abrazó a sí mismo—. Supongo que mi mente relacionó lo de hace rato con aquello y por eso me puse a la defensiva. Perdóname.

—No te preocupes—se encogió de hombros.

—¿Entonces me perdona?

—No tengo nada que perdonarte, por mi parte todo está bien entre nosotros—sonrió haciendo que sus hoyuelos se remarcaran demasiado. 

El mayor asintió con una sonrisa y se acercó más a él.

—Sobre lo del cabello...

—No te preocupes por eso—pasó su brazo por encima de los hombros del mayor y lo atrajo a su pecho—. SooJung habló con JongIn y dijo que enviará a una de sus estilistas.

—Costará una fortuna—se incorporó con una mueca de terror.

—Descuida—dijo relajado—. SooJung le comentó lo que pasó y él se ofreció a pagarlo—atrajo de nuevo a su novio hacia él y besó su cabeza—. ¿Me invitas un té? —el mayor asintió y ambos se levantaron para ir hasta la cocina, en donde TaeYong puso la tetera en la estufa y sacó lo necesario para servirlo—. No te pregunté cuando llegué, pero ¿estabas dormido?

—Un poco—rio.

—Perdón—rascó su nuca avergonzado.

—Está bien—se acercó con pasos lentos y aprovechando que YoonOh estaba sentado en un banquillo con las piernas abiertas, entró en ese hueco para abrazarlo por el cuello mientras descansaba su rostro en su pecho.

YoonOh rodeó la cintura de su novio y recargó su cabeza en la del contrario. 

—¿Puedo confesarte algo? —el mayor asintió—. Te quiero.

TaeYong se quedó petrificado ante tales palabras y alejó su rostro para mirarlo directamente a los ojos sin soltar su agarre en el cuello del menor, quien no pudo evitar reír lleno de ternura.

—Te quiero—rio con un sonrojo que le llegó hasta el cuello y con intención de esconderlo, volvió a esconder su rostro en el cuello del contrario.

Se quedaron en esa posición hasta que la tetera comenzó a sonar, avisando que el agua estaba lista. Prepararon un simple té, de esos que vienen en bolsitas, y lo bebieron en la sala con calma, mientras charlaban de los pequeños. 

Cuando YoonOh se quiso despedir, vio en su móvil que ya era bastante tarde, así que TaeYong le ofreció quedarse a dormir. Solo le envió un mensaje a su hermana para avisarle que se quedaría y subió detrás de su novio. 

Se recostaron uno muy juntito del otro y luego de desearse buenas noches con un dulce beso con sabor a té de menta, cerraron los ojos para quedarse dormidos. 

A la mañana siguiente, TaeYong despertó sintiendo un delicioso calor cubriendo todo su cuerpo. Giró un poco su cabeza y vio que su novio estaba justo detrás de él haciendo la pose de "cucharita". Sonrió y se levantó con cuidado para no despertarlo.

Salió de la ducha y en lugar de ver a su novio recostado, vio la cama hecha. Fue a cerciorarse de que sus pequeños ya estaban despertando y bajó la cocina, en dónde YoonOh estaba cocinado huevos revueltos. Caminó sigilosamente hacia él hasta que quedó a pocos centímetros y picó su costilla sin realmente lastimarlo.

—Buenos días—saludó luego de dar un saltito en su lugar.

—Buenos días—respondió con una radiante sonrisa.

—Disculpa por irrumpir en tu cocina.

—Está bien—se encogió de hombros—. ¿Te ayudo en algo? —el menor negó—. Entonces solo te veré cocinar...

—Disfruta el espectáculo—rio dándose la vuelta para comenzar a servir los platos.

Ver a YoonOh con el cabello algo alborotado y vestido con ropa deportiva que solo marcaba más su figura, definitivamente era algo que se debía disfrutar.

—¡¿Qué vamos a desayunar hoy, papi?! —Jeno preguntó antes de abrir la puerta de la cocina—. ¡Papi! —corrió hasta YoonOh y el castaño tuvo que dejar caer la palita de madera con la que estaba cocinando para cargar al pequeño—. ¿A qué hora llegaste? —lo abrazó por el cuello

—Eh... —tragó saliva y miró a su novio en busca de ayuda, pero TaeYong se encontraba en la misma situación.

—Llegó anoche—respondió XiaoJun relajado—. Hola—saludó a los dos mayores con una pequeña sonrisa.

—Hola, mi amor—TaeYong besó su mejilla y se levantó para quitar a Jeno de encima de YoonOh—. Hola, mi amor—también dejó un beso en la mejilla del menor y lo sentó en un banquillo.

YoonOh terminó de servir los platos, preparó dos tazas de café y dos vasos con leche, los puso sobre la isla y tomó asiento a un lado de su novio. Los Lee le agradecieron por la comida y comenzaron a comerla en un ameno silencio.

En cuanto terminaron, TaeYong envío a sus hijos a terminar de alistarse para la escuela y ayudó a YoonOh a limpiar todo el desorden. Luego de recoger, el mayor se recargó en la isla en espera de sus hijos. Nunca en su vida como padre había tenido tiempo de sobra.

—¿Quieres que los lleve? —se paró a su lado.

—¿No tienes que ir a trabajar?

—Puedo llegar un poco tarde.

—Me encantaría, pero tengo que ir a mi trabajo y me queda algo lejos el metro—hizo un tierno puchero.

—También te puedo llevar a ti.

—No quiero que tengas problemas en tu empleo.

—No los tendré—mintió con una bella sonrisa.

—¿Seguro? —el menor asintió—. Está bien, vamos—giró un poco su cuerpo y tímidamente rodeó el cuello de YoonOh con sus manos. El menor se inclinó y rozó su nariz con la del contrario.

—Ya estamos listos, papá—XiaoJun llamó su atención haciendo que se separaran de golpe, ambos con con un sonrojo.

—Sí, mi amor—TaeYong sonrió con nerviosismo y entró al baño de abajo para terminar de arreglarse, mientras que YoonOh subía al baño del mayor para peinar un poco su cabello y lavar sus dientes con el cepillo de "Paw Patrol" que el pelinegro le dio la última vez que se quedó.

Al salir, TaeYong les dijo a sus hijos que irían en el auto de YoonOh, y sin oponerse, los pequeños subieron en la parte de atrás y abrocharon los cinturones de seguridad con ayuda de su padre.

Cuando llegaron a la escuela, TaeYong bajó solo para acompañar a los pequeños hasta la entrada, pero antes, se despidieron y agradecieron a YoonOh por llevarlos. El castaño aprovechó que se encontraba solo para llamar a una de sus compañeras del trabajo, aunque se arrepintió al instante. 

—¿En dónde estás?—Yeri susurró al otro lado de la línea—. El jefe está preguntando por ti desde que llegó.

—Voy en camino, pero hay un tráfico terrible—bufó—. ¿No te dijo que quería?

—No, pero se ve molesto.

YoonOh vio que su novio se acercaba, así que colgó de inmediato la llamada y sonrió como si nada pasara. Encendió el auto y comenzó a conducir hacia donde TaeYong le decía.

A la mitad del trayecto, el celular de TaeYong sonó y este con temor, lo sacó de su bolsillo para ver quien lo llamaba. Se sintió aliviado cuando vio el nombre de SungChan en la pantalla, se lo mostró rápido a YoonOh y respondió.


—Ho-hola, TaeYong—saludó tímidamente.

—Hola, SungChan—respondió alegremente.

—¿Estás ocupado? 

—No, dime.

—¿Podrías decirle a Johnny sobre lo que hablamos?

—De hecho ya se lo comenté hace algunos días y me dijo que lo llamara cuando tú estuvieras listo. ¿Estás listo?

—S-sí, eso creo—rio nervioso.

—¿Te parece si vas a mi casa hoy a las siete? Llamaré a Johnny para decirle que te vea ahí.

—Sí, claro.

—Perfecto, nos vemos en la noche. Adiós—el menor se despidió con el mismo tono gentil y colgó la llamada.


—¿Te llamó para quedar con Johnny? —el mayor asintió—. Yo pensé que lo de estudiar derecho era una broma.

—¿Por qué creíste eso?

—Porque ya no lo ha mencionado—frunció el ceño.

—Tal vez quiere estar completamente seguro antes de tomar una decisión definitiva—se encogió de hombros y YoonOh asintió sin quitar la vista del camino.

Cuando TaeYong le dijo que girara en la siguiente esquina porque su oficina se encontraba ahí, él se detuvo justo antes de girar.

—¿Por qué te detienes? —preguntó girándose un poco en su asiento.

—Porque quiero hacer algo y no podré hacerlo frente a tu oficina.

—¿Qué quieres hacer? —rio.

YoonOh no respondió, en cambio desabrochó su cinturón de seguridad y se inclinó hasta él para posar sus labios sobre los del contrario. Era un beso cálido, pero ésta vez se sentía diferente. Se sentía más atrevido, y no solo eran sus labios, las manos de YoonOh acariciaban la cintura y el cuello del mayor.

—Esto—susurró sobre sus labios haciendo que el mayor sonriera torpemente.

A TaeYong no le dio tiempo de asimilar lo que había pasado recién, ya que el menor encendió el auto y condujo hasta su destino. 

—Gracias—el mayor se inclinó hacia él y dejó un beso rápido en su mejilla antes de bajarse del auto—. ¿Te llamo más tarde? —preguntó a punto de cerrar la puerta.

—Por supuesto—sonrió y luego que el pelinegro le devolviera la sonrisa, solo esperó a que entrara a su oficina para conducir lo más rápido posible a casa.


Aparcó el auto sin cuidado dañando algunas de las flores del jardín y bajó corriendo. Al entrar, su hermano lo saludó desde el sofá, pero YoonOh no pudo detenerse, así que solo gritó "hola, voy tarde", y SungChan comprendió.

YoonOh se desnudó completamente y comenzó a buscar que ponerse. Mientras se ponía los calzoncillos, también buscaba una camisa que combinara con un pantalón que ya tenía a la vista. Notó que la camisa que eligió estaba un poco arrugada, pero no había tiempo de elegir otra o de plancharla, así que solo se puso un par de zapatos, peinó su cabello y se perfumó de pies a cabeza.

—¿Te puedo acompañar? —preguntó siguiéndolo hasta el auto y su hermano asintió sin pensarlo. Subieron al auto y YoonOh condujo en silencio por un buen rato—. ¿Estabas con TaeYong? —su hyung asintió sin quitar la vista del camino—. Entonces supongo que escuchaste lo que hablé con él...

—No realmente—mintió—. ¿Por qué?

—Me veré con su amigo hoy—suspiró—. No les había dicho nada porque quiero estar seguro de lo que haré.

—No te preocupes—le dedicó una sonrisa rápida.

Su hermano asintió con una sonrisa y guardó silencio hasta que llegaron a su destino, en dónde YoonOh se despidió rápido y bajó del auto. SungChan vio como su hermano entraba corriendo al edificio en donde trabajaba y no pudo evitar reír. Se dispuso volver a casa y tocó sus bolsillos, notando que no llevaba su billetera. Genial, ahora tendría que volver a pie.

YoonOh acomodó las solapas de su saco y entró a la oficina de su jefe, en dónde recibió un regaño monumental.














Cuando TaeYong entró por la puerta de su casa, un delicioso aroma inundó sus fosas nasales. Olía a carne recién hecha. Entró a la cocina con una sonrisa, suponiendo que era su novio, pero cuando vio a la persona recargada en la isla, su estómago se revolvió.

—¿Qué haces aquí? —preguntó sonando firme, aunque por dentro, estaba temblando.

—Hola, lindo—sonrió—. Hacía mucho que no entraba a tu cocina—acarició el borde de la isla mientras caminaba hacia él—. Le hiciste algunos cambios. Me gusta.

—¿Qué haces en mi casa, JongHyun?

—Odio cuando me llamas por mi nombre—hizo un puchero—. ¿Por qué no me llamas "cielo"?

—Vete de mi casa—no sabía de dónde estaba sacando el valor para enfrentarlo—. Mis hijos no tardan en llegar.

—Nuestros hijos, bonito. Nuestros.

—Gracias al cielo, no. Míos—se sentía como una presa frente a un devorador. Aterrado, pero cuidando de sus crías.

—Tuyos y de ese niño con el que sales, ¿no? ¿Cómo se llama? ¿YoonOh?

Sus piernas temblaron. Lo que temía tanto, se había cumplido. Ese loco había indagado en la vida de su novio.

—Y si es cierto, ¿qué? —JongHyun negó una y otra vez—. Vete de mi casa—repitió casi en un grito.

—Me iré porque tengo una cita—suspiró con una sonrisa y pasó a su lado—. Preparé la comida para los niños—salió de la cocina y TaeYong se relajó cuando escuchó la puerta de la entrada cerrarse.

Se sintió orgulloso de sí mismo cuando en lugar de estar llorando, comenzó a limpiar el desorden que ese imbécil había dejado. Tomó las cacerolas llenas de comida y las vació sobre el bote de basura. Ni loco comería eso y mucho menos, les daría a sus hijos.

Sus pequeños llegaron pocos minutos después y él de inmediato dejó lo que estaba haciendo para darles un gran abrazo.

—La comida tardará un poco más—acarició sus melenas—. Vayan a jugar y yo los llamo, ¿sí? —los pequeños asintieron.

Mientras su sopa de verduras hervía, llamó a su amigo para hablarle de lo de SungChan. Johnny de inmediato aceptó diciendo que él como el gran tío que era, ayudaría a su sobrino a lo que fuera, aunque TaeYong le pidió que no lo llamara así, ya que podría incomodarlo.

Llamó a sus pequeños al comedor y ambos comenzaron a comer en silencio.

—¿No vas a comer? —preguntó el mayor de sus hijos.

—No tengo hambre, mi amor—se abrazó a sí mismo—. No te preocupes y come—le mostró una linda sonrisa, haciendo que su hijo asintiera.



SungChan llegó a las siete en punto. TaeYong lo invitó a pasar y luego de que el chico tomara asiento en la sala, le ofreció comida, golosinas y bebidas, pero el menor solo aceptó un vaso con agua.

—Johnny me acaba de enviar un mensaje—le dio el vaso y levantó su móvil—. Está un poco retrasado, pero llegará. ¿De verdad no quieres algo de comer?

—No, gracias—sonrió y le dio un sorbo a su bebida—. Vengo de la casa de Winter y su padre nos cocinó comida irlandesa.

—¿Vienes de dónde? —preguntó emocionado.

SungChan rio bajito y le contó que había estado hablando con la chica desde ese entonces y que la había ido a visitar en más de una ocasión.

—Yo pensé que su padre sería muy estricto.

—Lo es—bufó—. Cuando voy no me quita los ojos de encima.

—Ten mucho cuidado—le advirtió con una sonrisa.

—¿Quién es, papi? —preguntó Jeno bajando por las escaleras, pero en cuanto vio al chico, se acercó con una sonrisa—. Hola, SungChan hyung...

—Jeno... —su padre llamó su atención.

—Perdón—hizo un puchero—. ¿Puedo llamarlo "hyung"? —SungChan asintió con una sonrisa y Jeno se sentó a su lado en silencio mirándolo de pies a cabeza con una sonrisa. 

Después de unos minutos, Johnny llegó. En cuanto sus sobrinos lo vieron en la entrada de la sala, corrieron hacia él gritando con emoción. El mayor los saludó con besos y alguno que otro mimo, y luego se acercó a SungChan para saludarlo con un gentil apretón de manos.

—Pueden ir al estudio a hablar—TaeYong señaló el pasillo con una sonrisa y ambos asintieron para ir hacia allá.

—Oye, papi—Jeno subió al regazo de su padre y apretó sus mejillas.

—¿Sí, mi amor?

—SungChan hyung es tu hijo, ¿verdad?

—Sí, mi amor.

—Y si papi YoonOh es mi papi...—se señaló— ¿también es papi de él?

—No mi amor, ya habíamos hablado de esto. SungChan es mi hijo biológico. Mío y de otra mujer.

—Pero son hermanos, ¿no? —inclinó su cabeza hacia un lado lleno de confusión—. No entiendo como uno es tu hijo y el otro es tu novio—frunció el ceño.

TaeYong juraba que había desarrollado un tic nervioso en el ojo solo con escuchar a su hijo.

—Es algo complicado, mi amor—suspiró y acarició su cabello—. No pienses en esas cosas, ¿sí?

El menor asintió y bajó de su regazo.

—¿Papi va a venir hoy?

—No, mi amor—torció una sonrisa y su hijo asintió con un leve puchero.

Mientras Johnny y SungChan hablaban, TaeYong y sus hijos miraban una de las tantas películas de "Spider-Man", aunque él no le prestaba mucha atención por estar pensando en la visita indeseable de la tarde.

—Dile hola al futuro abogado—Johnny señaló al meno con ambas manos y usó un tono divertido.

—¿Estás seguro? —le preguntó al menor con una sonrisa.

—S-sí, bueno, iré a la oficina de Johnny hyung y ahí tomaré mi decisión—se encogió de hombros tímidamente. 

—Me alegro por ti—sonrió.

—Tenemos que celebrar—Johnny desapareció por el pasillo y volvió con tres copas y una botella de champagne. Sirvió las copas y luego de dárselas, hicieron un pequeño choque de ellas y bebieron con calma—. Eres mayor de edad, ¿cierto? —preguntó de golpe, haciendo a ambos reír.

—No se preocupe, lo soy—volvió a levantar su copa para chocarla con la de los mayores. 

—¿Qué celebran, hyung? 

—¿Sabes a lo que se dedica tu tío Johnny?

Jeno asintió con una sonrisa orgullosa.

—Defiende a la gente, como un superhéroe. 

SungChan no pudo evitar reír con ternura.

—Bueno, pues yo quiero ser como él.

—¿Cómo un superhéroe? —abrió su boquita tan grande como le fue posible y el mayor asintió.

Terminaron de beber y aunque Johnny quiso brindar con whisky, su amigo no se lo permitió, ya que tendía que trabajar al día siguiente.

—Nunca me dejas beber cuando quiero—se quejó con un puchero.

—¿De verdad? —preguntó incrédulo. 

Su amigo negó fingiendo molestia y se despidió de sus sobrinos. Se ofreció a llevar a SungChan a su casa, pero el chico se negó con amabilidad.

—No, gracias—recordó en donde se había abierto la cabeza—. Mi casa queda al otro extremo de la suya.

—¿Cómo sabes en dónde vivo? —preguntó con la ceja arqueada y el menor supo que lo había jodido.

—Porque le comenté hace poco—TaeYong intervino salvando al chico—. Ya va a anochecer, deberías irte. Yo lo llevaré—se apresuró a decir. 

—¿Seguro? 

—Sí—esta vez fue SungChan quien habló—. Gracias, Johnny hyung. Mañana nos vemos—sonrió y fue correspondido por el mayor, quien salió de la casa de su amigo.

—Vayan a buscar un abrigo para llevar a SungChan a casa—sus hijos se levantaron del sofá y fueron a hacer lo que su padre les dijo.

—Yo pensé que ya sabía lo que había pasado en su casa—susurró como si Johnny siguiera presente.

—Nunca les diré—rió—. No conoces a Johnny como padre sobreprotector.

Los pequeños bajaron abrigados y luego de que TaeYong se cerciorara de que la puerta estuviera bien cerrada, subieron al auto para ir camino a casa de los Jung. 

El camino fue tranquilo y silencioso. La radio de fondo era el ubico sonido que habitaba en el auto, y a pesar de eso, no se sentía para nada incomodo. 

En cuanto TaeYong aparcó el auto, SungChan agradeció no solo por el viaje, también le agradeció por contactar a Johnny y por no mencionarle lo que pasó el día de San Valentín en su ausencia.

—¿Quieres pasar?

—Eh... —tragó saliva con dificultad.

—A hyung le gustaría verte... —dijo con una sonrisa y el mayor asintió sintiendo que todo le temblaba.

SungChan abrió la puerta para ellos y entró detrás. Caminó hasta las escaleras y gritó el nombre de su hyung. 

YoonOh bajó con una mascarilla de tela sobre su rostro. En cuanto vio a su novio, se la quitó y la hizo bolita para meterla en el bolsillo de su pantalón. 

—¿Qué haces aquí? —preguntó mientras quitaba el resto del producto de su rostro.

—Traje a SungChan y me dijo que te gustaría verme...

—Por supuesto—se apresuró a decir. ¿Quieren algo de cenar? 

—Prepararé la cena—SungChan sonrió y caminó hasta la cocina.

—Hola—YoonOh rió y lo saludó correctamente con un beso sobre la comisura de sus labios. Saludó a los pequeños dedicándoles sonrisas llenas de amabilidad que fueron correspondidas.

—¡La cena está lista! —gritó desde el comedor.

—¿Tan rápido? —preguntó TaeYong con el ceño fruncido.

—No sabe cocinar—susurró cerca de su oído y aprovechando la poca distancia que había entre él y su novio, depositó un beso en su mejilla—. Vamos.

Cuando entraron al comedor, había cinco tazones sobre la mesa, algunos cartones de leche y diferentes tipos de cereales. 

—Bon apettit.

YoonOh iba a decirles que cocinaría algo más, pero XiaoJun y Jeno se lanzaron emocionados hacia el cereal de Oreo. Ambos agradecieron por su cena con un "gracias, hyung" que SungChan respondió con una sonrisa nerviosa.

Sirvieron el cereal con ayuda de su padre y comenzaron a comerlo tan deliciosamente, que cuando terminaron, pidieron un poco más.

—¡Hola, preciosos! —SooJung asustó un poco a todos con su aparición repentina en el comedor—. Hola, TaeYong—sonrió ampliamente—. De haber sabido que estaban aquí, les hubiera traído un obsequio—formó un pequeño puchero.

—Hola, noona—el menor de los Jung saludó ofendido.

—Hola—saludó simple—. Que bueno que estás aquí—se sentó frente a TaeYong—. Acompañe a la loca a que le arreglaran el cabello—rodó los ojos—. Lo bueno de esto es que ya le quedó claro que no tiene que acercarse a ti—señaló a su hermano— y mucho menos a ti—señaló al mayor—, así que tranquilos—suspiró—. Los dejo porque tuve un día bastante pesado en el trabajo—se puso de pie y acarició las melenas de los pequeños en forma de despedida.

—También me voy—SungChan se puso de pie y comenzó a recoger los tazones vacíos—. Mañana tengo tengo que ir temprano con Johnny hyung.

—Gracias por la cena—TaeYong sonrió ampliamente y el menor asintió despidiéndose—. También nos vamos—se puso de pie.

—¿Vas a venir con nosotros, papi? —Jeno tomó su manita y caminaron hasta la entrada. YoonOh no sabía como negarse y al parecer, TaeYong lo notó y lo ayudó.

—No, mi amor. YoonOh tiene que trabajar mañana. 

—¿No puede irse de la casa?

—Puede—TaeYong asintió—, pero tiene que venir a ducharse y a alistarse para irse, y se le haría tarde.

—Pues que se lleve su ropa—dijo con obviedad.

Ambos mayores rieron con ternura y no dijeron nada, en cambio, caminaron hasta el auto de TaeYong en donde YoonOh se despidió de todos. Ayudó a los pequeños a asegurar sus cinturones y como siempre, rodeó el auto para despedirse de su novio por la ventana con un tierno y cálido beso. 

TaeYong lo miró directamente a los ojos y sintió que podía confiar ciegamente en él, pero sin embargo, no pudo contarle lo de JongHyun.

—¿Qué sucede?

—¿Uh?

—Estás pensando en algo, ¿no es cierto?

TaeYong suspiró.

—Que en efecto te quiero—sonrió bobamente.

—También te quiero—metió su cabeza por la ventanilla y depositó un corto beso en sus labios—. Ve con cuidado—dejó un beso más en su mejilla y se alejó del auto.








🌹🌹

No se ustedes, pero yo me morí cuando se dijeron "te quiero" I was like- 🥺

Les digo que ya el drama está en mis venas 💀

Muchas emociones en un solo capitulooo c:c

Se viene capitulo bonito, pero igual con poquito drama ggg 

Vamos a ver a Jae desconfiando un poquitín de Tae por culpa del malparido ese :c 



Nos estamos leyendo uwu



Continue Reading

You'll Also Like

50.4K 5.9K 33
Mientras Jeno es aquel chico ideal, Jaemin es sólo el pelirosa bonito que fácilmente pasa desapercibido. Nomin Créditos a @namfakes
101K 13.8K 75
Jihoon conoce a S.Coups en un juego online y se enamora de su voz, de sus encantos y de lo coqueto que es con él. SeungCheol no puede evitar ser coqu...
20.6K 2.4K 22
Enamorarse de un caliente doctor alfa no estaba en los planes de Lee Taeyong cuando acude a una clínica para curar sus extraños calores. Por desgraci...
9.8K 1.1K 28
Muchos decían que Jihoon era un bebé, cuando cuidaba de su bebé. 🥀M-preng 🥀Pareja principal: JiCheol 🥀Mención de parejas: JiHan, Meanie, SoonHao...