Estamos bien, ¿supongo?
El chico no pudo evitar sonreír un poco al ver a la hermana amazona y el hombre lobo pelear por la comida.
Tiona: ¡Hey lobo estúpido, eso era mío!
Bete: ¡De que hablas estúpida "pequeña" amazona, fuiste la primera en comerte tu porción de esto!
Tiona: ¡¿A que te refieres con "pequeña"?!
A su lado izquierdo se encontraba Ais y el resto de la familia Loki, y a su lado derecho se encontraban sus compañeros.
Lili: Woaaa, ¿por qué nunca nos dijo que cocinaba tan bien, Bell-sama?
Bell: No creo que sea para tanto Lili.
Welf: Bell, la comida es uno de los grandes placeres de la vida, y el poder saborear comida tan deliciosa hace que agradezca seguir vivo, así que no menosprecies tu cocina.
La seriedad en el rostro y las palabras de su amigo no iba de la mano con el tema a discutir.
Bell: L-Lo que tu digas Welf...
A pesar de su nerviosismo por lo antes dicho por su amigo, no pudo evitar considerarlo.
Observando los carteles que flotaban sobre la cabeza de cada uno, se centró en una palabra en particular.
"Estado: Feliz"
Obviamente habían más emociones, pero esta era la que importaba.
Incluso intentó ignorar el "Tsundere" que flotaba sobre la cabeza de la elfa pelinaranja mientras parecía negarse a comer su comida pero al final cedía a una cucharada más, y así en un infinito bucle.
La verdad es que no pudo evitar sonreír ante la calidez que rodeaba el grupo, se sentía casi como su familia...
Cuando sus expresión decayó, pudo sentir una cálida mirada sobre él.
Era la princesa.
Aunque seguía siendo un misterio el cómo podía transmitir dichas emociones a pesar de su expresión de muñeca, no pudo evitar estar agradecido con ella.
Y así pasó la cena.
Parecían haber olvidado el tema por el cual llegaron y en cambio se pusieron a discutir sobre los pisos profundos, con el equipo de Bell algo asustados y emocionados por lo que escuchaban que había en ellos.
Después de unos minutos, el grupo se puso de pie y se preparó para retirarse.
Finn: Como capitán de la Familia Loki agradezco la buena comida que nos a sido servida.
Bell: N-No hay problema, Finn-san.
El cocinar es algo que disfruto mucho.
Finn: Ya veo...
¿Entonces no es problema si mañana lo repites?
Bell: S-Supongo que no es ningún problema.
Finn: Bien, estoy muy agradecido contigo.
Mientras el resto de la familia Loki regresaba a su campamento, Finn se detuvo y observó seriamente a Bell, el cual seguía en el lugar de antes junto a sus compañeros.
Finn: Hoy lo dejé pasar, mañana tendremos que hablar sobre cierto tema.
Y con esas palabras, se retiró del lugar.
Bell se quedó allí de pie, preguntándose qué pudo haber sucedido para ganarse cierta hostilidad de algunos miembros de la familia Loki.
Welf: No pensé que sería tan grave...
Debido al tono tan bajo de su voz, ninguno de sus compañeros fue capaz de escucharlo, aunque cada uno parecía estar en sus propios mundos.
Lili: *Suspiro*
No sé que pudo haber provocado esta enemistad con la familia Loki, pero es mejor que nosotros también vayamos a descansar.
Cuando se dirigían a "su" tienda, escucharon unos gritos provenir de la entrada al piso 18.
Aunque desconocidos para el resto, para Bell eran familiares.
Bell: ¿Hestia-sama?
Lili: ¿Hestia?
¿Es alguna conocida tuya?
Bell: Algo así.
Es una diosa que actualmente está viviendo con nosotros.
El grupo aceleró el paso hasta quedar frente a la fuente de los gritos, y una pequeña diosa de coletas negras bajó rodando del mismo.
Bell: ¡Hestia-sama, ¿qué hace aquí?¿está bien?!
Incorporándose nuevamente usando a Bell como apoyo, la pequeña diosa lo observó fijamente y sus bellos ojos azules se cristalizaron.
Hestia: B-Bell... me alegra tanto que te encuentres bien...
Atrayendolo a un suave abrazo, la diosa dejó caer unas cuantas lágrimas de alegría.
El peliblanco se congeló momentaneamente pero logró corresponder al abrazo.
Había cierta calidez en ese abrazo, una calidez que en primer lugar nunca existió y que nunca sintió realmente.
Bell: (Me recuerda mucho a mamá...)
Una tonta sonrisa apareció en su rostro y puso un poco más de fuerza en su abrazo.
Ciertamente tenían una relación que ni él mismo entendía, pero...
Bell: (Digno de la diosa del hogar...)
Salió de su propio mundo cuando una voz masculina se escuchó desde la entrada.
???: Me alegra que te encuentres bien, Bell.
Un hombre, no, un dios.
Su cabello rubio/naranja resaltaba bajo su sombrero de viajero.
Hermes (Dios)
Estado: Aliviado, alegre.
De alguna forma a logrado esconder su aura divina para poder ingresar al calabozo.
Parece que de alguna forma conoce a Bell Cranel.
Bell: ¿Nos conocemos de algún lado?
???: No lo creo, pero he de admitir que soy tu fan.
Bell: ¿Ok...?
???: Oh, discúlpame por mi descortesía.
Mi nombre es Hermes, un gusto poder por fin hablar contigo.
El dios extendió su mano en forma de saludo.
Bell: Bell Cranel, un placer conocerlo dios Her- mes...
Sus movimientos y voz desaparecieron, confundiendo al dios, que al observar su rostro notó la incredulidad y ¿temor? mientras observaba a la entrada.
Bell: Naaza-san...
Ignorando al dios y a la bella chica de cabello celeste que se acercaba al par.
Asfi Al Andrómeda
Nivel 4
Estado: Cansada (mentalmente), confusa
Capitán de la familia Hermes.
Ignorando la información de la chica, se acercó rápidamente a su capitana.
Naaza Erisuis
Nivel 2
Estado: Un intenso miedo recorre su cuerpo, agotada mentalmente, temerosa
A pesar de su trauma generado por el calabozo, se las arregló para que su dios (Miach) le permitiese acompañar al grupo de expedición en busca de su más reciente ¿compañero?
¡¿Otra más?!
Le pareció escuchar unas voces acompañar el cartel que apareció sobre su capitana, pero las ignoró, no importaba, no ahora que vio a su capitana temblar ligeramente.
Bell: ¡Naaza-san!
Los ojos de la chica se centraron en él, y como fue con Hestia, un gran alivio se expresó en sus rostro.
Nazza: Bell...
Bell: ¡Naaza, ¿estás bien?!
Dedicandole una sonrisa que denotaba cansancio, la chica usó su brazo como apoyo y comenzó a caminar hacia el resto del grupo.
Naaza: Estoy bien, por ahora solo quiero descansar un poco...
Mientras caminaban hacia el resto del grupo, pudo observar a una elfa que portaba un atuendo de batalla algo revelador acercarse rápidamente a ellos.
Ryuu Lion (Vendaval de León)
Nivel 4
Estado: Aliviada
Bell: Ryu-
Un dedo sobre sus labios lo silenció y la elfa le dedicó una mirada algo severa.
Ryuu: Por favor, absténgase de usar mi nombre en público, Cranel-san.
Tras recibir un asentimiento del peliblanco, la elfa comenzó a caminar hacia el bosque.
Algo confundido, escuchó unas cuantas pisadas más, a lo que dirigió su vista a la entrada.
Bell: Ustedes...
Su rostro se tornó serio, el grupo que anteriormente los habían usado como carnada habían regresado.
No es que no los conozca, habían interactuado anteriormente ya que el dios Takemikazuchi resultó ser un buen amigo de su dios, Miach.
Además de la asistencia que tuvo en su enfrentamiento con el Silverback.
El pequeño grupo se detuvo de pie frente a él, ninguno dijo palabra alguna mientras tenían sus miradas bajas, Bell pudo ver el nerviosismo y algo de vergüenza en los rostros de los aventureros.
Bell: Hablaremos mañana.
Tenía que llevar a su capitana y pequeña amiga diosa a descansar, ya tendría más tiempo para hablar con ellos.
Y aunque ciertamente una parte de él quería perdonar al grupo como un agradecimiento de su asistencia en el pasado, sabía que Welf y Lili no lo dejarían pasar.
○○○
Habiendo pedido unas tiendas extras para el nuevo grupo, Bell por fin pudo descansar (otra vez).
Con Naaza a su izquierda, Welf y Lili descansaban a su derecha, aparentemente todos dormidos.
No tenía tanto sueño como pensaba, así que decidió "planear" lo que haría al día siguiente.
Lo primero sería el desayuno y después las preguntas que le haría Finn.
¿Que podría hacer después?
Oh, Ais había mencionado una ciudad instalada en este piso, podría ir a conocerla más adelante.
Pero primero lo primero.
El desayuno.
¿Que podría preparar?
Pensandolo bien, si la comida es del suficiente agrado del grupo entonces Finn no sería tan estricto con sus preguntas, así que tendrá que ganarse sus estómagos.
Cuando empezó a recordar las recetas que había leído en el libro otorgado por su abuela, que ahora sabía que era Hera, una pantalla se generó en su visión.
Libro de recetas de la Abuela Hera.
Aunque ciertamente la diosa era de todo menos una buena cocinera, sus constantes viajes y años de vida han hecho que reúna una gran variedad de platillos destinados a complacer las múltiples razas existentes en este mundo de aventura.
Buscar: < | >
Oh, esto sería muy útil.
Debería empezar por el más problemático.
Bete Loga.
Oh, al parecer su nueva habilidad le permitió obtener más información sobre el platillo que llamó su atención, aunque no recuerda haber escuchado nunca los nombres Luna y Reene.
¿?
Bell: (Mmmm, Naaza-san comenzó a temblar...)
Prácticamente estaban cara a cara, si se acercaba un poco más sería probable que pudiera sentir su respiración algo agitada.
Sin saber si era frío o temor lo que atormentaba a la chica, él simplemente se acercó un poco para abrigarla usando su propia manta/cobija, que era inusualmente más grande y cálida que el resto, ¿cortesía de Ais-san, tal vez?
Bueno, no importa.
Con toda la inocencia que se esperaría de un niño de 14 años, solo se acercó un poco para cobijarla y tomar suavemente su mano en un intento de tranquilizarla.
Hizo todo lo posible para alejar aquellas narraciones de su abuelo de lo que podría suceder en situaciones como éstas, su capitana no merecía tales pensamientos sucios inculcados por Zeus.
A la mañana siguiente.
Se había despertado un poco demasiado temprano, por lo que no encontró nada más que hacer que estar acostado apreciando la belleza de su capitana.
¿Qué? Él también era un hombre a fin de cuentas.
Ella había dejado de temblar hace mucho y una pequeña sonrisa adornaba su tranquilo y bello rostro, pero no podía quedarse toda la mañana observandola, no era como la dueña de aquella mirada que lo perseguía desde lo alto de la torre.
Abrigandola, salió lenta y silenciosamente de la tienda, no pensó en encontrar a nadie más despierto ya que el lugar todavía se notaba oscuro, pero notó a los aventureros que tomaban el rol de guardias para el campamento.
Oh, y también a una alta-elfa de cabello color jade.
Bell: Buenos días, Riveria-sama.
Acercándose a la belleza elfica con un saludo casual, notó la leve sorpresa en su rostro.
Riveria: Oh, buenos días, Bell Cranel.
No pensé que fueras del tipo madrugador.
Bell: Es simple casualidad, no recuerdo haberme levantado tan temprano últimamente, aunque tampoco es que pueda conocer la hora exacta mientras estamos dentro del calabozo.
Riveria: Ya veo, ¿hay algo en lo que pueda ayudarte?
Bell: ¿Eh?
Oh, cierto, ¿podría decirme dónde puedo preparar el desayuno?
Riveria: Claro, sígueme.
Mientras caminaban hacia algún lado, Bell notó las ocasionales miradas de la elfa.
Bell: ¿Tiene alguna pregunta Riveria-sama?
Riveria: Solo tenía algo de curiosidad por el que llamó tanto la atención de Ais.
Caminaron en un cómodo silencio durante un par de minutos y pronto pudo apreciar la hoguera y demás cosas para cocinar.
Cuando la alta-elfa tomó asiento a unos metros de él, lo tomó como una señal para que comience.
Time Skip
Bell: Listo.
Colocando la comida sobre las mesas que anteriormente habían buscado junto a la enérgica amazona, Tiona.
Hace no mucho los demás miembros se despertaron y tras un leve saludo se concentraron en sus asuntos, aunque la enérgica amazona estuvo a su lado casi todo ese tiempo junto a una princesa dorada que observaba la comida con anhelo y un pequeño hilo de saliva que limpiaba tan rápido como aparecía, y su capitana, Naaza, que se encintrabab mejor mejor que ayer.
Los demás aventureros tomaron asiento y agradecieron por la comida, algo sorprendidos por notar la variedad de platillos y lo que podrían considerar un "clásico" o un "manjar" en sus propias razas.
Bete: *Intentando no sonar molesto*
Ciertamente me sorprende que hayas podido preparar todo esto con las pocas cosas que habían y estando en el calabozo.
Y
también soy consciente de lo buena que es y seria un tonto si lo negase pero...
Los ejecutivos (menos la princesa que se enco traba comiendo) solo pudieron observarlo con los ojos en blanco por los "disparates" que había comenzado a soltar el hombre lobo.
Bete: *En un tono más fuerte y demostrando su molestia*
Donde está mi comida.
Bell: Lo siento, tenía que esperar un poco más a que estuviese listo ciertos elementos de su comida, pero aquí está.
Perdón por la demora.
Sí, tenía algo de miedo por las palabras que parecían ser de cualquiera menos de Bete, por lo que inconscientemente actuó de manera formal.
Y ese miedo aumentó cuando el cuello de su camisa fue sujetado por un furioso hombre lobo.
Bete: ¡DONDE MIERDA VISTE ESTO!
Finn: ¡Tranquilízate Bete, es solo comida!
Bete: ¡NO TE METAS EN ESTO FINN!
Tiona: ¡Oye, suelta a Argonauta-kun!
Bete: ¡HABLA!
A las espaldas de Bell se pusieron en formación su equipo y el grupo de Ouka si mal no recordaba.
Además de su capitana.
Bell: M-Mi abuela viajaba mucho, y en uno de esos viajes dijo haber conocido una aldea de hombres lobo.
Ella solía recolectar recetas de platillos, éste es uno de ellos.
Una verdad a medias, aunque ciertamente fue Hera quien le dio el libro, fue su habilidad la que le permitió saber dicha información.
Bete: Tch.
Bajandolo, centró su vista en su comida, Bell podía jurar haber visto que sus ojos se cristalizaron, pero decidió no hablar.
Con mucho cuidado, sorprendentemente, tomó su comida y comenzó a retirarse con calma y cuidado del lugar.
A unos cuantos metros del grupo se detuvo y se giró levemente hacia Bell.
Bete: Gracias...
Tras ese silencioso agradecimiento, se retiró del lugar.
Bete Loga [Vanagard]
Nivel 5
Relación: ¿Amistad?
Estado: Confuso, melancólico, agradecido
A parte de ese incidente, la mañana pasó relativamente bien, recorrió junto al resto la ciudad de Riviera con las vocacionales preguntas de Finn, aunque no entendía el por qué siempre parecía intentar llevar la conversación a un tema en particular.
Maldiciones.
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Próximo capítulo: Problemas consecutivos.
Próximas historia a actualizar: Existen Reglas Que Nunca Se Deben Romper ---> [ Regla Número 1 ]
Un Heróico Padre ---> [ Familia Astraea]
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Llegó septiembre banda.
Grandota para que me baje el cereal.
Xd
Mames, no me acordaba de esto.
Por cierto, lamento por la demora, he estado trabajando de lunes a viernes y los domingos.
Y debo admitir que a veces me daba pereza escribir.
Intentaré sacar los próximos capítulos más pronto, este sí que tardé como 2 meses xd