Theo, dejando su libro de lado: bien, ¿cuál es el problema ahora?
Draco, frustrado: es el cuatro ojos.
Draco: es como, no puedo sacarlo de mi cabeza y cuando lo veo siento algo raro en el pecho, no sé que es, pero sé que es su culpa.
Draco, enojado: pero ya verá ese idiota.