Leandro Paredes// 15 de diciembre de 2023
Abro la puerta del departamento, son las once de la noche. El partido de hoy fue nefasto, es mejor ni hablar de el.
Candela no fue, no se sentía bien, el dolor de ovarios la estan matando desde anoche y llego al punto de llorar.
Opté en que lo mejor era que se quede, para evitar momentos incómodos y situaciones que la pongan en una situación difícil.
¿Amor? - cerré la puerta, dejé el bolso deportivo a un costado y me quedé con la bolsa donde esta el helado-
Ey, hola - dice al verme, tiene una toalla sobre la cabeza y un pijama color rosa- ¿Llegaste hace mucho?
Recién- respondí y luego me acerqué a darle un beso en los labios- ¿Cómo seguis? ¿Te duele todavía?
Candela luce cansada, unas pequeñas ojeras se marcan bajo sus ojos.
Con pereza camina hasta el sillón, la sigo a paso lento.
Apenas son las nueve y media, estoy muy seguro de que no hay nada para comer y tampoco tengo ganas de hacer algo yo mismo, y apuesto que ella tampoco.
¿Querés que pida algo? - pregunté pasando mi brazo por su hombro, asiente en silencio-
Por lo general cuando está en sus días solemos comer algo dentro de todo sano, porque sino la señorita se queja de como esta su aspecto días después.
¿De qué tenes ganas? - pregunté y ella se acomoda sobre mi cuerpo-
Sushi - murmuró encendiendo la televisión, hago una mueca de asco, me cansé del sushi- O pedí lo que quieras
McDonald's- respondí más conforme, quizás tengamos un pequeño desliz esta noche-
Candela pone la serie que empezamos hace semanas atrás, blindspot, una serie policial y por el momento ambos nos enganchamos.
Hago el pedido por una de las tantas aplicaciones de mi celular, y lo dejo a un costado, aguardando que llegue el pedido.
¿Cómo te fue hoy? - pregunta sin verme, dándome a entender de que no vio el partido-
Perdimos - contesté y besé su frente, tiene un poco de temperatura- ¿Tuviste fiebre hoy?
Asiente, me mira y sus mejillas están con cierto color rojo.
Dormí toda la tarde, me siento mal - se queja en mis brazos, esta tan débil- Me duele todo
Algunas lágrimas se asoman en sus ojos, se que no miente y la verdad que es raro verla tan indefensa y adolorida, prácticamente los días en los que está en su periodo no hay casi ninguna queja de ella, y ni hablar de que se la pasa ensayando.
Mañana quédate - sugerí, sabiendo que si está así ahora, mañana posiblemente esté peor- Habla con Adrien y decile que pasa
Ya le avisé - dice pausando la serie, esta más delgada y se nota-
La miré más detenimiento, labios están secos y esta un poco pálida.
Antes no la había visto así, para mi es raro.
¿Qué pasa? - pregunta estirándose, y debato en plantearle mi duda-
¿Querés que vayamos al médico? - formule la pregunta con cierto, capaz se lo toma de mala forma y me manda a la mierda-
Asiente, me sorprende que haya aceptado tan fácilmente. Digamos, que no es tan fanática de los médicos.
La comida ya debe estar por llegar - me advierte, poniéndose de pie lentamente- Me voy a cambiar
Minutos después me avisan que esta nuestro pedido en la puerta, pagué con la tarjeta y no es necesario bajar, lo más seguro es que no comamos.
Busqué una campera en el perchero, las llaves del auto y algo de efectivo.
Se escuchan ruidos desde el baño, corro rápido hasta ahí y la puerta está semi abierta.
¿Amor? - pregunté corriendo la puerta, dejando a la vista una escena espantosa -
Candela vomita sin parar, esta arrodillada frente al inodoro. Tiene una colita mal hecha, y esta solo con el short del pijama.
La ayudo a levantarse, esta amarilla y no deja de temblar. El corazón se me acelera pensando en lo peor.
Ya estoy acá, tranquila - murmuré cerca de su oído, el temor se apodera de mí-
Continua vomitando durante unos minutos más, le lavo los dientes, no tiene nada de fuerza y esta deshidratada. No entiendo que pasa.
Busco algo para ella, toallitas y esas cosas que suele usar en su periodo,también ropa, es fija que la noche no la pasamos acá.
La abrigo lo suficiente para poder salir, casi no se mueve y opto por hacerle upa , se queja y no le hago caso
Dejamos el departamento.
El ascensor parece tardar un siglo cuando más lo necesito.
Finalmente se abre en la planta baja, el portero nos mira y su semblante cambia.
Señor Paredes, ¿Qué pasó? - pregunta viéndonos, y como puedo le doy mis llaves del auto-
Necesito mi auto, por favor, la tengo que llevar al hospital urgente-enseguida asiente, y va en busca de mi auto-
Candela sigue temblando, y aun no se que puede estar pasando.
No te duermas, por favor - pedí sin saber si hice bien, a esta altura ya no se nada -
Después de cinco minutos el portero deja el auto justo en la puerta del estacionamiento. Deja el auto en marcha y me ayuda a salir.
Gracias- murmuré agradecido acomodando a Candela en el asiento de copiloto-
Él asiente, y me da una pequeña sonrisa.
Rodeo el auto y me subo en el. Le doy una pequeña mirada a Candela y le doy marcha para poder salir.
El hospital más cercano a nosotros está a veinte minutos, y debería saltarme todos los semáforos para poder llegar más rápido, vale cada multa si es necesario.
La mano de Candela se posa en mi pierna, sonríe como puede y me logra tranquilizar.
El camino se hace corto gracias a que no hay tanto tráficoa esta hora de la noche, estaciono en la entrada del hospital y pido ayuda a los trabajadores.
Uno de los camilleros se encarga de llevarla hasta la sacarla del auto. La sentó en una silla de ruedas.
Va delante de mí, hay bastante gente en la sala de emergencias. Se me acerca una mujer, una doctora.
Señor Paredes- estrecha su mano con la mía- Soy la doctora Rosenfelt, me voy a encargar de su novia está noche
Un gusto - murmuré, y me guía hasta una habitación, Candela ya está en una cama y unas cuantas enfermeras la rodean -
Necesito que me complete estos papeles - me da unos cuantas hojas, autorización para todo- Necesito el consentimiento para todo
Asentí, agarré una lapicera y ella se retira, dejándome con los papeles.
Candela esta a metros de mi, le están tomando los signos vitales y le hacen unas preguntas en cuanto a su salud.
Leer, firmar y entender todo me toma bastante tiempo.
Cuando la vuelvo a mirar, esta con mala cara y se siente incómoda ante la mirada de tantas personas.
Ya son casi las doce, las enfermeras nos dejaron solos.
Candela me mira desde la cama.
¿Podemos ir a casa? - pregunta, me reí y negué- No me gusta el juego del hospital
Tiene un mejor aspecto, pero hay signos que aún permanecen en ella.
Cuando nos digan que tenes vemos que hacemos- respondí dejando los papeles a un lado- ¿Tenes hambre?
Negó, que suerte, yo me cago de hambre.
¿Vos si? - pregunta, asentí con un poco de culpa- anda a comprarte algo, a otro lado no puedo ir
¿Segura? Mira si viene la doctora y me tiene que decir algo - hablé, no la quiero dejar sola-
Voy a estar bien - sonrió, y acepté-
Le di un beso antes de dejar la habitación, busque en mi teléfono el número de Nicolas y pensé bien antes de llamar.
¿Hola? - la voz de mi cuñado se distorsiona a causa del ruido de fondo-
Nico, soy yo, ¿podes hablar? - pregunté directo, vi una maquina expendedora y me acerco a ella-
Hay varias opciones para comer, saco efectivo y apreto cualquier botón.
¿Qué pasó? - la pregunta de Nicolás me hace suspirar, el ruido desapareció-
Estamos en el hospital, le están haciendo estudios a Cande - conté rápido y no di muchas vueltas-
¿Esta bien? ¿Qué tiene? - su voz se transforma a una de preocupación, la máquina me deja lo que había elegido y lo tomo-
Le vino antes de ayer , y no se sentía bien - respondí contando todo - No pude estar con ella ayer, esta pálida y deshidratada de tanto vomitar
¿Vos para que mierda la dejas sola? - su reclamo me sorprende, frunzo el ceño- Ves que sos un pelotudo, pasame con mi hermana
Para flaco, ¿quien mierda sos para tratarme así? - levanté la voz, me cansé del maltrato de este pendejo de mierda- Me fui por laburo, y a vos no te debo ninguna explicación. Avisale a tus viejos, mañana los llamo
Corte la llamada sin esperar respuesta,me da bronca, no lo aguanto más. Es un hijo de puta, hago lo mejor que puedo para fumarme esta actitud de mierda y no, el flaco sigue y sigue.
Pendejo de mierda, me tiene harto y hace lo que sea para sacarme y un día lo va a hacer, se la va a tener que bancar solo.
Volví a la habitación con el paquete de galletitas en la mano, Candela esta durmiendo y para no hacer mucho ruido me quede en el sillón que hay para los acompañantes.
Perdí el sueño hace bastante, comí en silencio. La ciudad parisina está con nubes de lluvia, el invierno acá nunca me gustó, nunca pude acostumbrarme a la nieve.
Se escuchan los tipos ruidos de hospital, sirenas, pasos de los empleados y uno que otro grito de alguna habitación.
[•]
Señor Paredes- siento como tocan mi hombro, la misma mujer de antes esta frente a mí-
Me quedé dormido, ya es de día. La espalda me mata, muy duro el sillón.
Candela esta desayunando algo, y me saluda con la mano.
¿Ya se sabe que tiene? - pregunté poniéndome de pie, y disimulando un poco mi cansancio-
La doctora asiente, tiene los resultados en la mano.
La anemia de agravó, pero con el tratamiento adecuado todo se va a normalizar- la mirada oscura no se separa de Candela, quien a toda acosta evita mirarla- Hace tiempo que la anemia está presente en Candela
¿Cuanto tiempo? - pregunté más intrigado que otra cosa-
Meses o quizás años - contesta dejando a un lado el papel blanco - Vamos a comenzar el tratamiento, la alimentación, la actividad física y un montón de cosas más para que pueda recomponerse como corresponda
Gracias, de verdad- murmuré, mucha información para procesar-
Nos deja solos, mi mirada se posa en Candela. Hay algo que no cuadra y me debe muchas explicaciones.
¿Qué? - me mira haciéndose la desentendida- Siempre tuve anemia, no es nada nuevo
Sus palabras me chocan, doy un paso más adelante.
¿Por qué no me dijiste? - pregunté de forma atropellada, me siento cerca suyo y le agarro la mano-
No sé, no lo considere importante-murmuró encogiéndose de hombros -
Le doy un beso en los labios, a veces tiene eso de ocultar las cosas y no se muy bien sus razones. Pero ahora hablamos de salud y creo que merezco saber que le pasa.
Me separé de ella, quedo a centímetros de su rostro.
Desde hoy vas a hacer el tratamiento, nada de peros o excusas - pedí viéndola a los ojos, aceptó-
¿Hasta cuando me tengo que quedar acá? - pregunta, detesta los hospitales-
Dos días - respondí viendo la planilla que dejaron con las indicaciones, suspira-
O sea que no puedo bailar hasta que este mejor - habla con horror, en unos días tiene el cierre de año en la academia-
Creo que no - respondí con un poco de tristeza, se lo importante que es para ella-
Hace un puchero con los labios, provocando que quiera arrancarle todo acá mismo.
Bueno, pero pensa en que si haces todo volves con todo - entrelace nuestras manos y dejé un pequeño beso en su frente-
Si, puede ser - se alejó de mí e hizo una mueca- Lávate los dientes sucio de mierda
Le saco la lengua, y me acerco a besarla nuevamente. Me rechaza unas cuantas veces.
Anda a casa, yo te espero acá- propone prendiendo la televisión, ya se instaló la mina-
Ah bueno, si querés te traigo algún postre - digo sarcástico, cuando quiere se comporta como una diva, igual me encanta cuando se pone así- Hoy es la llamada con los chicos, te aviso que dicen
Mandales saludos- respondió con una sonrisa y volvió a mirar al televisor-
Me tira un beso antes de que me vaya.
[•]
¡Tío! - el grito agudo de Francesca al verme por la pantalla me aturde-
Hola hermosa - sonreí y esperé a que mis demás amigos se conecten a la videollamada que habíamos organizado-
¿Y españita? ¿Ya te dejo? - pregunto con gracia Rodrigo, negué-
Esta en el hospital, es muy largo de contar - respondí haciendo una mueca, después les digo-
Esperamos unos minutos más, estamos a nada de nuestras vacaciones y necesitamos organizar todo. Podemos llegar a ese día y no vamos a tener una mierda, y conociendo estas mujeres las cagadas a pedo son mejor evitarlas.
Claramente los primeros minutos fueron de puro boludeo, teniendo a Paulo de amigo es imposible concentrarse al minuto uno.
¿Al final cuando viajamos? - pregunté, literalmente soy el más colgado- Nosotros pasamos en España navidad
Apaaaa, con la familia de españita - me interrumpe Lautaro, quien tiene a su hijo en brazos-
Y si boludo, mínimo eso merece mi mujer. Una tortura le espera en ese viaje con ustedes- respondí cebandome un mate-
¿Perdoooooon? - Oriana indignada llama mi atención- Tus amigos son unos simios como vos, nosotras somos unas reinas
Como de costumbre todas, TODAS le dan la razón. Que trolas son.
Bueno, tampoco te agrandes gorreada- pide Rodrigo recibiendo un codazo por parte de Camila-
Oriana cambia la cara, ese tema justamente es delicado para ella. No voy a hacerme el boludo, durante mucho tiempo Paulo la engañó y ahora están tratando de reconstruir todo ese noviazgo. No soy quién para juzgar, si yo mismo cague a mi mujer.
Bueno, sigamos con nuestro tema- pide Ariana, sacando ese ambiente tenso creado-
Menos mal que es videollamada, sino se re cagan a patadas entre ellos.
Si, mejor, porque ustedes son unos giles y ya empiezan con el bardo - la apoya Milagros dándole con todo a las facturas-
¿Cómo es que seguimos siendo amigos nosotros? Si viven peleando - me reí ante el comentario de Nicolás, me encogí de hombros-
Porque nos amamos - responde Laila de forma pacífica, y saca un cuaderno de quien sabe donde - Bueno, presten atención que no repito dos veces
El chat de la videollamada se desvío por completo, causando que la modelo nos insulte unas cuantas veces.
¿Quienes viajan el veintiséis? -preguntó nuevamente, y solos dos habían levantado la mano-
Pregunta directamente quien va antes de fin de año, boluda - dice Lautaro con su nena en brazos-
Bouda - repite fuerte y claro Tara, estallamos al escuchar eso por parte de la nena-
Obvio esta que a la madre no le gustó mucho que digamos, recién tienen dos años y ya te putean.
Eso no, a mamá no se le dice eso - la reto casi obligado Lautaro bajo la mirada de su mujer-
La nena como si nada, en su mundo y sin darle bola.
Carraspeo un poco para llamar su atención.
Nosotros seguramente vayamos el treinta - hablé, la verdad quiero que Candela este unos días con su familia y no sienta culpa al dejarlos para año nuevo-
Dale, listo ¿Rodrigo van ustedes con ellos? - le pregunta a mi amigo, ahora que viven en España hace unos dos años ya no viajan con los Martinez o Paulo-
Por nosotros si - respondió a lo que yo asentí dándole mi apoyo. Mejor ir todos juntos - Vamos todos entonces
Nosotros vamos desde Buenos Aires- dice mi ex mujer, así habíamos quedado nosotros en pasar las fiestas-
Destaquemos que ella al ser amiga de todos no puede quedarse a fuera de las vacaciones, lo considero injusto. Tomamos la decisión de que noche buena y navidad la pasaríamos con familia de alguno de nosotros y año nuevo con nuestro grupo de amigos.
Oka, ¿Se suma el Chino? - pregunté, la última vez que habíamos hablado le comentamos que de sume con su familia-
Lauti habló con él, dijo que sí- respondió Laila con una sonrisa- En cualquier momento se suman todo el plantel eh, yo lo quiero a Juli Álvarez con nosotros
Ay si, es un amor - le contesta Milagros, Giovani frunce el ceño mostrando cierto celo en su mirada-
Mientras no se sume Cristian- dice Giovani, y asentí. Lo quiero lejos de estas trolas, se hace el lindo y amigable-
Su novia rueda los ojos, claro está que no piensa olvidar lo que pasó hace unas semanas.
Continuamos la charla lo que resta de la tarde, la diferencia horaria se hace notar más a la noche, cuando ciertos niños reclaman la hora de dormir.
Bueno, cuídense mucho y por favor tengan todo- pide Carolina abrazando a Nicolás-
Ahora paso todo al grupo - interviene Laila y nos despide con la mano-
Nos despedimos una vez más, y apago la computadora.
Miro la hora, son las ocho y media, digamos que me extendí bastante y deje un poco de lado la salud de mi novia.
Busqué mi celular, unos cuantos mensajes de su parte están sin leer.
Abro el chat, y los leo atentamente, justo esta esta línea. No dudo y la llamo.
Hola gordo - me habla con completa calma, bueno, al menos sé que no está enojada-
Hola linda, perdón que no fui, hablamos unas cosas con los chicos y se me paso la hora - me disculpo y me pongo de pie para poder cocinar algo -
Me lo imagine, ¿en que quedaron? - pregunta, acto seguido abro la heladera antes de contestar -
Nosotros vamos el treinta, los demás capaz antes. Hay que tener los papeles y esas boludeces - contesté sacando unas milanesa de carne- ¿Compraste tomate? No lo encuentro
Esta afuera de la heladera- responde riendo, y luego se queja del dolor-
¿Vos cómo te sentís? ¿Dormiste? -pregunté con preocupación, mañana mismo voy a buscarla-
Dormí una banda, la paso bomba -contesta y puedo apostar que sonríe- Acá me dejan dormir, no me andan manoseando el culo como otros
Ah bueno, entonces te podes quedar unos días más eh - digo para pelearla un poco- bien que te gusta que toque, así sos, quedamos así. Quédate tres días más si queres
No, mañana venís y me llevas a la academia- responde dando indicaciones, la mujer más terca la tengo yo-
Pupita, tenes que descansar, relájate un poco - recalco las palabras de la doctora, pero se que es en vano, me mira y me da vuelta como una media -
Bueno, veremos - su respuesta es la más falsa que existe, hace lo que quiere-
Mientras me cuenta ciertas cosas de lo que habló con la doctora, voy preparando al para comer.
Candela habla hasta por los codos, literalmente es super suuuuuuper parlanchina. En una sola conversación cuenta ocho mil temas diferentes, hay que seguirle el ritmo porque te hace una puta pregunta y cagaste.
¿Vos que decís? - pregunta, bueno, cague- ¿Tas ahí?
Perdón, estaba sacando la milanesa - mentira piadosa, pero pupita no sabe eso - No te escuché lo último, repetime
Te decía que me quiero tatuar - repite eso último que había dicho, ah genial, nada que ver con lo que le dijo la doctora. Maravilloso-
Hacelo, ¿donde querés hacerlo? - pregunté apagando la ornalla-
En el medio de las tetas- responde y me atraganto con la saliva, apaaaa, me interesa eh- ¿te va?
Ma vale- contesté como baboso, pero caí en la cuenta en que la van a ver, eso ya no me gusta- Yo te lo hago, así no te ve nadie
No seas tarado, me lo quiero hacer atrás de la oreja- habla cambiando de lugar-
¿Qué te querés hacer? - pregunté mientras llevo las cosas a la mesa, ella suspira. Bueno se dio cuenta que no escuché nada-
Una letra, la ele - respondió con dulzura, sonreí automáticamente-
¿Me lo decís de verdad? - interrogo con cierta incertidumbre-
Si, de verdad te digo - responde ella, y algo hace que se me hinche el pecho-
Te amo - contesté con una sonrisa, esta hija de puta me enamora cada vez más- posta hija de puta, me tenes enamorado
No seas tan trolo - se ríe de mí, y su risa me contagia - yo también te amo
¿Hasta dónde me amas? - le pregunto llevándome un pedazo de milanesa a la boca-
¿En serio me preguntas? - inquiere con cierto desconcierto, emito un sonido sonido los labios- Hasta la luna, ida y vuelta
Sonreí, dios, que mujer. Mía mía mía, la amo tanto.
Yo te amo más que eso- solté, siendo casi una realidad. Creo que ella no dimensiona cuan grande es mi amor por ella -
Si vos decís..... - se escucha casi inaudible, un pequeño bostezo sale de ella, es tarde-
Descansa, mañana hablamos - le doy un trago a mi gaseosa- te amo
Buenas noches - me tira un beso, y me corta- te amo gordo, descansa
Termino de comer viendo un programa de fútbol. Es raro sentir el departamento sin ella, y eso que es solo una noche.
Me acostumbre a ella, a su perfume y a sus ruidos.
La verdad es que siento miles de cosas por Candela, no puedo explicar el amor que siento por ella y creo que me quedo corto de palabras.
Quiero darle lo mejor, se lo merece y juro que doy todo de mí para hacerla feliz.
¡FELIZ MARTES! como lo prometí acá esta el capítulo, como hoy juega la selección y si llegamos a ganarle al segundo de copa América hay otra actualización.
Les gustó el capitulo???
Me mandaron varios mensajes diciendo lo mucho que les gusta la historia. Me llenan el corazón,posta. Ultimamente no la estoy pasando bien y estas cosas me hacen bien. Les agradezco de todo corazón
Amo muchísimo que Leandro se tan osito romántico con Candela 💕 💖
Si les gustó el cap haganmelo saber en los comentarios y dejando su voto 💘
Nos vemos prontito chiquitas