Pov Arizona
Dios Calliope estaba con Juani, quiero matar a alguien, claro con que para eso no me quería una semana en casa.
- ¡April! -Le grite. -
- Ayy Arizona, ¿Qué pasa? No soy sorda. -Se acercó a mi. -
- Calliope estaba con Juani, encima iban a comer juntas. -Ella me miro e intento tirar una carcajada pero la guardo. -
- Arizona deja a esa mujer tranquila, no te va a engañar, ¿Vos no sabes como estaba cuando la dejaste? -Yo la mire confundida y negué. -
- Si que sabes, estaba destrozada, esa mujer te ama más que a cualquier cosa y vos sos una persona insegura, te entiendo, pero no le des esas inseguridades también a ella. -Yo solo asentí y empecé a caminar más adentro del bosque. -
- ¡Az! ¿Donde vas?
- ¡A caminar April a donde más! -Dije furiosa y seguí rumbo más adentro. -
Llegue al lago después de 1 hora caminando casi que sin rumbo alguno, me senté en la orilla y empecé a pensar...de todo pasaba dentro de mi pobre cabeza.
Quiero saber que está haciendo Callie con esa mujer, pero también April tiene razón, ella la pasó tan mal cuando "la dejé" que no creo que haga algo intencionalmente para que eso pase, pero esta vez de verdad.
Empecé a tirar pequeñas piedras al lago y mi cabeza daba vueltas, cuando caí en cuentas de que ya estaba oscureciendo y yo tenía que volver.
Emprendí mi camino, intentando recordar por donde había venido.
Pasaron 1...2 horas y yo seguía caminando sin encontrar el rumbo, ya comenzaba a desesperarme y las lágrimas caían de a poco.
- ¡Que estupida soy! -Grite entre lágrimas. -
Seguí caminando y pasó 1 hora más por encima mío, hasta que lo vi...encontré la pequeña luz de la casa a lo lejos y empecé a correr.
April estaba afuera con su celular, creo que intentaba contactarse conmigo.
- ¡Arizona! Tenía tanto miedo, pensé que te habías pasado algo. -Me abrazo y yo empecé a llorar en su hombro. - ¡No vuelvas a hacer eso!
- Per-Perdón, yo...yo no quería. -Empezamos a caminar dentro y yo no la quería soltar. -
- Tranquila, no te quise retar, pero no lo hagas más, me asustaste mucho. -Ya dentro de la casa me abrazo más fuerte y me dejo en el sillón. -
April me busco agua y me trate de relajar de a poco, todo había sido tan lento, parecían días los que estuve perdida.
- Voy a llamar a Call y le voy a decir que estas bien ¿Si? Ella te había llamado, por eso le tuve que decir. -Asentí sin poder decir una palabra todavía. -
Escuché la conversación que estaban teniendo y Call insistía en hablar conmigo, le dije que estaba bien y se tranquilizó.
Me tranquilicé poco a poco en brazos de April y caí dormida en el sillón.
Pov Callie
Después del susto que me pegue con Arizona, me sentía rara, en algún punto todo era mi culpa, sin mi idea Az estaría al lado mío y no en el campo, pero bueno ahora se que está bien.
Con Juani terminamos con las dos habitaciones y pedimos pizza para comer después de tanto trabajo, yo tenía que volver al hogar... NO, ME OLVIDE DEL PSICÓLOGO DE ATHENAS.
- Dios Juani, le prometí a Athenas llevarla yo al psicólogo, esa nena va a estar enojada, pobrecita se lo prometí. -Dije triste. -
Comí rápido y prepare mi bolso para hoy, salimos con el auto y llegamos rápido al hogar.
Fui directo a la habitación de las nenas y ahí estaba Athenas durmiendo en su camita. Busque a Theo peor lo tenían terminado de cenar. Me dijeron que Athy no había querido comer nada y yo me sentía tan culpable.
- Athenas amor, acá estoy. -Ella abrió los ojos de a poco y se alejó de mi, lo imaginaba. - Perdón, tuve que hacer muchas cosas y me olvide, perdón!
- Me dijiste que ibas a estar aquí, creí en vos. -Ella estaba enojada, su tristeza se sentía cuando hablaba y sus labios temblaban. -
- ¡Perdón amor! Te juro que lo olvide, no fue queriendo, mañana te acompaño y hoy voy a dormir con vos. -Su mirada estaba en otra parte, no me miraba a los ojos. -
- Hoy quiero dormir sola. -Okey, ahora tenía a Az y a mi pequeña enojadas, esto no podía salir peor. -
- Okey, pero voy a estar aquí, a tu lado. -Me levante, me puse el pijama y me lave los dientes para ir directo a la cama. -
Me acosté en la cama de al lado y la miré, ella tenía sus ojitos cerrados y su ceño fruncido, estaba tan enojada, me hacía sentir tan mal esto, soy la única persona que tiene.
La mire por unos minutos y me quede dormida, tan dormida que ni llegue a escuchar cuando trajeron a Theo y entraron las demás niñas.
-1 semana después-
Hoy me levante con otra energía, hoy se cumplían nuestros 2 años de matrimonio y hoy iba a empezar nuestra nueva vida junto a nuestros pequeños.
Salí casi saltando de la cama, ayer en la noche me despedí de Athenas y le expliqué que necesitaba volver a casa, que Arizona volvía hoy y yo tenía que tener todo ordenado.
Ella sigue un poco enojada, pero de a poco se le va pasando, al otro día después de su enojo la acompañe al psicólogo y ahí quedo más tranquila.
Arizona sigue enojada, apenas me hablo en toda la semana, pero se que hoy todo cambia, así que así aguante sin ser yo la enojada por su comportamiento.
Mi día empezaba ordenando la casa, arme la cama, barrí toda la casa, limpie la cocina y metí la ropa que quedaba para lavar.
Hace 2 días vino la asistente social a ver la casa y me aprobó la adopción, yo le fui aclarando las compras que faltaban y todo, pero ella dijo que con que tengamos una habitación para cada uno y todo pensado ya estaba.
Ari llega a las 12 del mediodía, son las 11 y yo muero de la ansiedad.
A las 2 tenemos que estar en el hogar para firmar todo y poder traernos a los niños a casa. Mi nivel de emoción es altísimo, quiero ver la cara de Ari cuando vea todo lo que estuve preparando, tengo que tratar que no entre a las habitaciones de los niños.
Le compré un dije para su collar, teníamos un collar de girasol ambas y el mío lo perdí, no se donde quedo pero ella si lo tiene, así que el dije son una nena y un nene con un corazón esmeralda en el centro, son bien chiquitos y bañados en oro.
Quería que ella tuviera algo más que le recuerde todos los días que es mamá y me pareció muy tierno.
Dejé aquella cajita roja con el dije y un par de rosas en el auto, listo para dárselo apenas entremos al hogar.
Moría de nervios y escuché la puerta principal abrirse y mi rubia entraba más linda que nunca, peleando con sus valijas y con el ceño fruncido.
No me di cuenta cuanto la había extrañado hasta que la vi, con todos sus quilombos y problemas, la había extrañado muchísimo.
- ¡Amor Te extrañe tanto! -Dije abrazándola con fuerza y dejando escapar algunas lágrimas. -
- Eyy está todo bien, aquí estoy, yo también te extrañe Call. -Me beso, junto nuestros labios y profundizó con pasión nuestro beso, su lengua reconocía mi boca con hambre. -
- ¿Por qué no me decís amor? -Dije triste y ella no decía nada. -
- ¿Almorzamos? -Dije al ver que no contestaba, la mire y ufff lo que había extrañado sus ojos, son mágicos. -
- Si, muero de hambre. -Caminamos hasta la mesa y ya estaba todo servido. -
Ella miro con gran deseo la pizza casera que reposaba sobre la mesa con una pinta increíble, si lo admito, quedo espectacular.
Comimos en algún silencio incómodo, ella me contó un poco como la había pasado, yo intenté no preguntar sobre su pérdida, pero sola me contó que fue después de que supo que yo estaba con Juani.
- Como te dije amor, ella estaba conmigo por trabajo, siempre solemos juntarnos a seguir los papeles en casa, nunca me atrevería a perderte Arizona. -Ella sabía que yo decía la verdad. -
- Si lo se, pero en ese momento me sentí mal, vos como que te habías liberado de mi un poco y lo sentí cuando nos despedimos. -Si, tenía razón, pero todo por una buena causa. -
- No amor nunca estaría feliz de que te vayas, ¿Sabes? La pase muy bien con Athy. -Ella me miro confundida. - Ahh si ahora le digo así, me parece más tierno.
- Me imagino, deben haber estado muy contentas ambas ¿Y mi rubio?
- Tu rubio vive durmiendo, jugo bastante con nosotras, tuvo algunos problemas para tomar la leche pero después de tanto la tomo.
- Mi amor, pobrecito, seguro porque extraña a la tía Ari. -Si ella supiera que ahora es mamá Ari. -
- Sii estoy segura que si.
Seguimos hablando un rato más, ordenamos y ya daban las 1 pm, así que tenía ganas de jugar un poco con ella.
- Amor siento que hoy es el día de algo pero no sé bien de qué. -Ella me miro furiosa. -
- Ni idea, si no te acordas no debe ser importante. - Dijo casi llorando. -
- Aahhh okey, debe ser cualquier cosa. -Arizona se levantó y se encerró en el baño. -
Me sentí mal, pero en minutos todo terminaría.
Pov Arizona
No lo podía creer, Calliope estaba jugando conmigo o enserio no recobrada nuestro aniversario.
Si, ahora estoy encerrada en el baño llorando, estoy hormonal, me tiene que venir en 2 días y lloro por todo, parezco una embarazada y no solo por la hinchazón.
- ¡Arizona nos tenemos que ir! -Grita Callie, ¿A donde iremos? -
Salí del baño, me puse mis lentes negros y fui con ella.
- ¿A donde vamos? -Ella quedó mirando mis lentes pero no dijo anda al respecto. -
- No podes saber, solo confía en mí. -Y una vez más tenía que confiar en ella. -
Salimos hacia el auto, ella subió del lado del conductor y yo me senté al lado, su mano fue directo a mi muslo como siempre y yo sonreí ante el contacto.
El camino me indicaba que íbamos directo al hogar y mi sonrisa ya era más amplia al darme cuenta de que íbamos a ver a nuestros chiquitos.
- Abajo princesa. -Dijo Call abriendo la puerta de mi lado y estirando su mano. La sostuve y baje. -
Entramos al hogar y Call me llevaba de la mano hacia su oficina, vi como respiro antes de entrar y abrió la puerta.
- ¡Buenas tarde señoritas! Las esperábamos, tomen asiento. -Dice una señora mayor que está del otro lado del escritorio. -
Juani está a nuestro lado y hay otra señora un tanto más joven que la anterior, no conozco a ninguna de las dos.
- Bien podemos comenzar. -Dice Call y nos sentamos, yo sigo sin entender nada. -
Call sostiene mi mano con fuerza y me da una mirada rápida para ver cómo estoy.
- Estamos aquí para firmar la presente adopción de Athenas Cooper y Theo Cooper, hermanitos ingresados hace menos de un mes al hogar. -¿QUE?
No lo podía creer, apreté la mano de Callie y empecé a llorar, ella me miro y sonrió ampliamente asintiendo todo lo que decía la señora frente nuestro.
- Ya tenemos todo realizado, solo faltan las firmas de las mamás presentes aquí y la adopción se da por completada, están hechos los exámenes psicológicos de los niños y la visita a la casa en la que convivirán los 4. -Wow Callie había hecho todo en esta semana. -
Ahí caí de porque su alivio ante mi semana de vacaciones, el porqué de sus juntadas con Juani, ahora entiendo.
- Amor hay que firmar. -Me dijo Call casi al oído sacándome del trance. -
Le sonreí y ambas firmamos algunos Par de papeles, nos entregaron los nuevos documentos de los nenes y ahí fue mi primer quiebre del día.
Athenas Robbins Torres
Decía la primera tarjeta que nos dieron en la mano y mi corazón empezó a latir mucho más rápido de lo que podía.
Theo Robbins Torres
Era el segundo documento, ellos ya eran legalmente mis hijos...nuestros hijos.
Empecé a llorar desconsoladamente y Callie no hizo más que abrazarme y decirme que éramos Mamás, que teníamos dos hijos que nos esperaban y que éramos una familia.
- ¡Feliz Aniversario amor de mi vida! ¡Somos mamis! -Dijo susurrando a mi oído. -
-La mire sorprendida- ¿Hiciste todo esto por nuestro aniversario?
- Sip, pequeño regalito, obvio que sabía que hoy cumplíamos 2 años amor, quería que sufras un poquito más antes de sorprenderte. -La amo. -
- Te amo...te amo más de lo que puedo expresar, ¡Gracias mami Call! -Dije sonriendo y ella me abrazo sosteniéndome en el aire. -
Salimos con prisa a la habitación de los niños y ahí estaban, Athenas tenía al pequeño Theo en brazos y le cantaba una canción que no llegábamos a escuchar.
- Call, Ari ¡Hola! -Athy nos sonrió y llevó su dedo índice a sus labios indicándonos que hagamos silencio. - Se durmió mientras le cantaba. -La pequeña tenia al rubio dormido en sus pequeños brazos. -
- Pásamelo linda, yo lo tengo. -Le dije y lo agarre apoyando su cabecita en mi pecho y me senté a su lado. - Te tenemos una noticia increíble. -Ella nos miro confusa. -
- ¿Qué pasó? -Callie se sentó a su lado y le acarició el pelo. -
- ¿Queres formar parte de nuestra pequeña familia? -Dijo y Athenas abrió grandes los ojos. -
- ¿Co-como su...su hija? -Ella estaba confundida y sus ojitos se empezaban a aguar. -
- Si, queremos que vos y este pequeño sean nuestros hijos, de hoy y para siempre, ¿Aceptas? -Hable yo estaba vez y ella empezó a llorar. -
- Si, si ¡Las amo! -Dijo gritando y cayendo a nuestros brazos mientras seguía llorando, cosa que yo tampoco pude evitar. -
Estuvimos abrazados los cuatro un buen rato, hasta que llegó la hora de partir a casa, nos ayudaron entre las maestras y todos a subir al auto todas las cosas de los niños.
Call se separó un segundo de mi y cuando la vi venía hacia mí con un gran ramo de rosas.
- No quería que este día terminara sin recordarte que soy la persona más feliz del mundo a tu lado y que quiero que sea así hasta que seamos abuelitas. -Dijo con mucha ternura. - ¡Te amo mamita! -Y ahí no aguante y la bese, con el rubio en brazos. -
- ¡Te amo más! -Me pasó una pequeña cajita roja y tomó al rubio de mis brazos. -
- Vamos al auto y ahí abrís todo ¿Dale?
- Dale amor, vamos a casa con nuestros hijos.
Subimos a Theo a su butaca ha dormido y a Athenas a su lado, le colocamos el cinturón y subimos adelante.
Call arrancó y yo abrí la pequeña cajita roja.
Dentro de ella había un hermoso dije con un nene y una nena y un corazón color esmeralda en el centro de ambos. Era hermoso.
- ¡Dios Call lo amo! Me encanta, ahora los voy a tener en mi cuello. Me saque el collar del girasol y los puse ahí. -
- Justo te iba a decir que eran para ese collar, yo lo perdí y no lo encontré más, me tendré que comprar uno parecido pronto. -Ella no sabía que yo tenía su collar. -
- Yo los tengo Call, lo encontré en la puerta de casa un día antes de que volvieras de México, estaba segura que habías pasado por casa y no entraste por Eliza. -Dije no muy segura de tocar el tema. -
- Ayyy que loco, no sabía que se me había caído ahí, si fui a casa y cuando escuché su voz preferí correr. -Ella reía así que me quede tranquila. - ¿Bueno a donde vamos?
- ¿Donde vamos Athy? -Me di vuelta y la mire. -
- ¡A la plaza mamis! -Dijo casi en un grito y muy segura de su respuesta. -
- ¡Nos dijo mamis! -Call me miro y una lágrima rodó en su mejilla. -
- ¡Rumbo a la plaza entonces! -Gritó y me sonrió. -
Así comenzaba nuestra nueva vida, una que no imaginamos tener tan rápido, pero ahí estábamos, Mi mujer sentada a mi lado, conduciendo a alguna plaza, con mi rubia inteligente sentada a un lado cantando y mi rubio completamente dormido con su chupete cayendo de a poco.
Disfrutennnnn capítulo largo, vale la pena al 100%, son mamis por fin!
Gracias por leer✨