Entonces éramos niños inocentes, nefelibatos y bondadosos. Pero todos tarde o temprano crecemos y nos damos cuenta de la realidad. Nosotros cambiamos, nos costó manejar las cosas. Ahora sé que todo pudo haber sido muy diferente, si tan sólo alguien hubiera leído nuestro diario.
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NOTA: ¡Hola! Espero que les guste esta historia y de cierta forma se puedan sentir identificados. He puesto mucho esmero en esto, ya que incluso hay algunas experiencias personales y de otros hijos/as de pastores en ella que quise plasmar en la vida de Adan y Génesis. Así que sólo les pido su apoyo :]