Camino hasta el pequeño puente, se sentó en la orilla y cerro los ojos, el cielo estaba bastante nublado y gris, en la radio habían dicho que habría una tormenta eléctrica... Amaba las tormentas, en su planeta habían todos los días, eran realmente hermosas.
-¿Puedo sentarme contigo?
...
Al abrir los ojos pudo observar el extraño lugar en el que se encontraba, la habitación parecía sacada de la era victoriana, la decoración iba desde iba desde figuras de cerámicas y estatuas hasta muebles hechos de huesos, los matices beiges y marrones le daban un aire oscuro al lugar... Pero dejando eso de lado, no dejaba de preguntarse donde se encontraba, ese viejo lo había engañado.
-¿Como te sientes?- Pregunto un sujeto con voz grave.
Pudo escuchar sus pasos acercándose por detrás, quería escapar, pero sus manos y pies estaban atados a la silla en la que se encontraban. Tenía la sensación de que se desmayaría en cualquier momento, el frio de la habitación lo estaba matando y el olor a incienso lo tenía mareado, en eso sintió una fría mano posarse sobre su hombre y pudo escuchar al sujeto reír .
-¿Me recuerdas, Dadic?
Frunció el ceño mientras intentaba zafarse del agarre, sintió como si una corriente fría recorriera su sangre, en eso fue arrojado con todo y silla contra el suelo, el golpe en su cabeza lo dejo inconsciente por unos segundos, no comprendía lo que estaba sucediendo, ¿Quién era Dadic? ¿Lo habían confundido o algo así?
-Pequeño hijo de puta, ¿Cómo pudiste traicionarme de esa manera? ¿No te da vergüenza acercarte a mi ciudad después de o que hiciste?
Sonaba molesto y ¿Herido? Quería decirle que se estaba confundiendo, pero la mordaza en su boca se lo impedía y la impotencia comenzaba a destrozarlo.
-Que desagradecido que eres, después de todo lo que hice por ti...Lo único que te pedí era tu fidelidad... Fue demasiado para ti ¿Verdad?
Su voz era grave, pero tranquila, aun así la forma en la que lo dijo le dio un escalofrió, se temía que no pasaría de ese día. De pronto el tipo levanto la silla para ver su rostro, frunció el ceño y lo dejo caer de nuevo.
-¡¿Pero que?! ¡Frederick!
-¿S-si, señor?
Su súbdito se arrodillo apenas entro, estaba temblando, su corazón alienígena estaba por salirse de su pecho.
-¡¿Y este quien es?! ¡El no es mi Didac!
-¿Ah no? Pero si el...
-¡Cierra la boca! Esta cosa no me sirve, llévatela- Exclamo tomando la silla por el respaldo para arrastrándola hasta su súbdito- Anda, llévatelo, llévatelo.
Intento ver al sujeto que lo había mandado a traer, pero traía una máscara que cubría la mitad de su rostro, la luz de la habitación no dejaba percibir casi nada...
-Señor, pero... ¿Dónde lo dejo? ¿Qué hago yo con un humano?- Pregunto sin levantar la mirada.
El superior suspiro y se dejo caer sobre un elegante sofá.
-¿Que no querías una mascota? Ahí tienes
El súbdito enmascarado se giro hacia el humano y negó con la cabeza.
-No es mi tipo.
-Pues te jodes que no hay mas.
...
-¿Y que has hecho? ¿Qué tal te va con el humano del que me hablaste?-Pregunto el anciano con curiosidad.
Bajo un poco el sonido de la pequeña radio que había traído y suspiro.
<<Te extraño tantito, pero si lo admito me veras llorar...>> *
-Pues, no me correspondió, pero tampoco me dejo- Respondió para luego colocar su cabeza sobre sus piernas.
-No te preocupes, hijo, ya conocerás a otros chicos- Dijo dándole un par de palmadas en el hombro.
<<Me haces mucho daño, pero me es extraño yo solo sanar>>
-Supongo que si- Mascullo.
No quería hablar de eso, pero no sabia como cambiar de conversación , tenía un buen tiempo sin ver a su padre así que la situación era incomoda, ni siquiera recordaba hace cuanto le hablo de Oliver.
<<No, no vuelvas otra vez, porque cada que te vas...>>
-Pa ... ¿Sabes que me voy a ir ,verdad?- Cuestiono levantando su cabeza.
<<Quiero volverte a ver>>
-Lo se, supongo que ya se lo dijiste a tu amigo.
<<No vuelvas otra vez, porque cada vez que te vas quiero volverte a ver>>
-El no quiere que me vaya, se puso muy serio- Murmuro.
-Mira, creo que... Hay una manera de que eso no ocurra.
<<Y mas daño me harás>>
...
-¿Donde estoy? ¿Van a decir donde estoy? ... ¿No?
-Shh, no hagas mucho ruido ¿Acaso quieres que te mate?- Respondió el súbdito aumentando la velocidad del paso.
-¿No me van a quitar la bolsa? No puedo respirar bien-Murmuro.
Seguía intentando quitarse las esposas, pero lo único que lograba era lastimarse las muñecas, el no saber a donde iba lo ponía muy nervioso, podía escuchar murmullos a los lejos y también algunos disparos, las conversaciones no eran comprensibles... Parecía que hablaban en otro idioma o simplemente el agua que le habían dado hace unos minutos tenia algo, sentía que el piso se movía y tambaleaba.
-No me siento muy bien... Y quiero ir al baño.
-No lo creo, ¡No puedes engañarme! ¡No soy un idiota, ni soy fácil de manipular! ¿Entiendes? Soy ¡Muy! capaz de hacer mi trabajo- Vocifero muy alterado.
-Oye, no grites ¿Si? Mi cabeza... Se siente rara.
-¿Ah?
-Creo que voy a vomitar- Mascullo deteniéndose.
-Ay, no, no, no.
-Todo se ve borroso- Murmuro tambaleándose mientras buscaba en donde apoyarse.
-¡Espera, no!
...
-Señor, mientras 17 perdía su tiempo trayendo al sujeto equivocado, yo, 25, encontré a alguien a quien seguro querrá conocer- Alardeo un tipo al que no lo conocen ni en su casa.
-¿Ah, si?- Pregunto con curiosidad mientras dejaba su copa en una mesita de cristal.
-Así es, un alíen, un traidor.
-Hay muchos traidores, ¿Qué tiene el de especial?
-Que tiene conexión con Habauc Gquim.
La mirada del superior se ensombreció, reconoció ese nombre al instante , el súbdito al ver su reacción no evito sonreír, era la reacción que buscaba, por fin tendría su atención.
-Háblame de el.
...
Llego a su habitación caminando sobre sus puntas, por suerte nadie había despertado aun, bueno, casi nadie, pero el tema era que nadie que le importara no lo había descubierto, aunque si que había visto a Andrew o mejor dicho a Daniel siguiéndolo y también lo vio irse, la curiosidad lo estaba matándolo ... Le agradaba no ser el único con secretos, lo hacia sentir bien, no tenia pesado confrontar al chico, no sin saber toda la historia.
Se recostó en su cama y cerro los ojos, estaba un poco preocupado por Yannic, no sabia por que se había ido de esa manera y no podía evitar preguntarse si era por algo que había dicho o hecho, la noticia lo había puesto mal así que lo mas seguro es que había actuado de una manera estúpida como casi siempre, pero ¿Podía culparlo? El amaba al alíen, no de una manera romántica, pero lo amaba... No quería que se muriera, quería vivir tantas cosas junto a el... No podía perderlo de esa manera, aunque sabia que era algo egoísta de su parte.
-¿Ya despertaste?
-¿Mmm? Ah, si- Murmuro incorporándose- ¿Cómo dormiste Daniel, digo... Andrew?-Cuestiono con una gran sonrisa en su rostro.
El tono irónico en su voz lo puso nervioso, además esa mirada, sentía que estaba apunto de destruirlo, quería preguntarle que tanto sabia, pero no se atrevía.
-Mejor hablemos de tu escapada - Soltó sin mas.
El menor rio y se puso de pie mientras extendía sus brazos estirándose.
-¿No tienes hambre? Ayer vi una receta y me gustaría probarla- Cambio de tema después de bostezar un poco.
-Tu...
-Ya habrá tiempo para exponerlo, vicepresidente- Dijo para luego salir de la habitación.
➱ Espero que les haya gustado el capitulo, pueden dejarme sus correcciones y sugerencias en los comentarios, nos vemos pronto ❣
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