Keith volvió a su casa después de dar una vuelta por la ciudad.
?? : Keith...
Keith : ¿Eh?
Al oír su nombre Keith miró hacia todos lados para ver quién lo había llamado, pero no veía a nadie.
Keith : Debe de haber sido mi imaginación.
Tras eso, Keith volvió a su casa, pensando que no había sido nada más que su imaginación. Lo que él no sabía era que alguien le había llamado de verdad, y no se dió cuenta de que ese alguien le había sacado una foto con su móvil.
?? : Tengo una foto suya... Gritaría de emoción, pero entonces me descubriría. Todavía no puedes saber quién soy, mi amor, pero pronto lo sabrás. ~
Tras volver a casa Keith comprobó si Miku y Sarvente seguían dormidas. Como, en efecto, ambas seguían dormidas, y todavía era muy pronto para ir a ningún lugar, decidió desayunar mientras veía la televisión. Una hora más tarde Miku se despertó y bajó a la cocina.
Keith : Buenos días.
Las dos : Buenos días.
Miku : Oye Keith, ¿donde estabas? Habías desaparecido cuando nos hemos levantado.
Keith : Ya me había levantado. Pero eso me lleva a otra pregunta. ¿Que hacíais las dos en mi cama?
Miku : Es que te oímos gritar y nos preocupamos por ti. Cuando vimos que estabas teniendo una pesadilla decidimos quedarnos a tu lado.
Keith : Ya veo... Tengo otra pregunta que hacerte, pero esperaré a que Sarvente esté despierta.
Miku : Ok.
Apenas unos diez minutos después Sarvente se levantó y desayunó con Miku.
Miku : Oye Keith, ¿que es esa pregunta qué querías hacerme antes?
Keith : Bien, es una pregunta muy simple, y por favor responded con sinceridad.
Sarvente : Por supuesto.
Keith : Puede que os resulte raro, pero... Vosotras dos estáis enamoradas de mí, ¿verdad?
Las dos : ¿Q-que? No...
Keith : No me toméis por tonto, me he dado cuenta.
Ninguna de las dos se atrevía a decir nada. Ambas miraban hacia la nada con la cara sonrojada.
Las dos : S-si...
Keith : ¿"Si" que?
Las dos : ¡Si! ¡Estamos enamoradas de ti!
Keith : Chicas... *suspiro* Las dos sois importantes para mi, pero no puedo corresponder a vuestros sentimientos.
Sarvente : ¿Por qué no?
Keith : Sabéis que tengo novia.
Miku : Ugh. No me hables de ella. Parece que solo quiere separarte de mi.
Keith : ¿Que?
Miku : Desde que estás con ella ya no pasas tiempo conmigo. Admítelo, esa novia tuya solo quiere interponerse entre nosotros.
Keith : Miku, se que no hemos pasado mucho tiempo juntos últimamente, pero eres mi hermana y te quiero.
Miku : Ese es el problema, que solo me ves como a tu hermana, cuando yo quiero que me veas cómo algo más. Yo quiero ser tu novia.
Keith : Me salió norteña la hermana.
Sarvente : ¿Que significa norteña?
Keith : Nada, olvidalo. Sea como sea, lo siento, pero puedo aceptar lo que sentís por mi.
Miku : ...
Sin decir nada Miku se levantó de la mesa y se dirigió a la puerta para cerrarla con llave.
Keith : ¿Miku que haces?
Miku : No vas a irte. Te quedarás aquí con nosotras.
Keith : Pero yo
Miku : ¡Pero nada! Eres mi hermano, la persona a la que más quiero en el mundo, y tu... Solo quieres huir de mi. Y yo... *snif* No quiero perderte.
Miku empezó a llorar. Al ver así a su hermana Keith se levantó para acercarse a ella y abrazarla.
Keith : Lo siento Miku, no quería hacerte sentir así. No llores por favor.
Miku : Hermanito... Perdoname por esto.
Miku agarró el rostro de Keith y le dió un beso en los labios.
Miku : Lo siento, pero no lo aguanto más. Te amo, y quiero que estés siempre conmigo.
Sarvente : Un momentito.
Keith : (Maldita sea. Me había olvidado de ella.)
Sarvente : Creo que te has olvidado de mí. Yo también amo a tu hermano, y también quiero estar junto a él.
Miku : Lo siento, pero es MI hermano, lo que significa que es mío.
Sarvente : ¿Quieres pelea? Porque te la estás ganando.
Keith : Parad ya. Dejad de pelearos. Os propongo un trato, si me quedo aquí con vosotras, ¿dejaréis de pelearos?
Miku : ... ¿Tú que opinas?
Sarvente : ... Está bien. Pero solo una cosa más.
Keith : ¿Que?
Sarvente se acercó a Keith para besarlo.
Sarvente : Eso. Ahora estamos en paz.
Miku : Hmm...
Keith : Bu-bueno. Si ya está todo decidido, ¿que tal si vemos una película?
Sarvente : De acuerdo.
Miku : Haré unas palomitas.
Miku fue a la cocina, dejando a Keith solo con Sarvente.
Keith : Bueno. ¿Que película te gustaría ver?
Sarvente : Cualquiera, lo dejo a tu elección.
Keith : Tenemos varias películas en una caja. Buscaré alguna por ahí.
El peliazul se acercó a un armario, de la que sacó una caja llena de películas.
Sarvente : Oye Keith, una pregunta.
Keith : ¿Si?
Sarvente : ¿Te ha gustado el beso que te he dado?
Keith : ¿Eh? S-si.
Sarvente : Puedo darte otro siempre que quieras.
Keith : Ok. L-lo tendré en cuenta. ¿Que tipo de película quieres ver?
Sarvente : ¿Tenéis alguna de comedia romántica?
Keith : Si, creo que sí. (Menudo aburrimiento me espera.)
Unos minutos después los tres se encontraban viendo la película. Más bien Miku y Sarvente la estaban viendo, Keith no prestaba mucha atención ya que este tipo de película no le interesaba mucho. Por suerte para él recibió una llamada.
Keith : Iré a la cocina a contestar.
Miku : Si quieres puedo pausar la película.
Keith : No, no, seguid viéndola vosotras.
Miku : Vale.
Keith : ¿Hola?
Carol : Hola Keith, soy Carol.
Keith : Hola Carol. ¿Que pasa?
Carol : Estoy sola en casa y no tengo a nadie con quién pasar el rato. ¿Quieres venir?
Keith : Vale. Pero primero tengo que... ocuparme de algo. Estaré allí en media hora.
Carol : Ok, te estaré esperando.
Keith colgó el teléfono y volvió al salón.
Keith : Ya he vuelto.
Sarvente : ¿Quien era?
Keith : Era Hex. Whitty se ha metido en un lío y me ha pedido ayuda.
Miku : ¿No deberías ir a ayudarle?
Keith : No, me ha dicho que le bastaba con un par de consejos.
Sarvente : Pues entonces siéntate y disfruta de la película con nosotras.
Keith : Si...
Keith se sentó en el sofá junto a ambas chicas. Media hora después la película terminó.
Keith : (Por fin.) Bueno chicas, tengo que irme.
Miku : ¿Seguro? Podemos ver otra película.
Keith : Gracias por la oferta, pero he quedado con Pico.
Sarvente : Está bien, pero recuerda una cosa.
Keith : ¿Que?
Sarvente : Ahora somos tus novias, así que no coquetees con otras, ¿vale?
Keith : Va-vale. Adiós.
Las dos : Adiós amor.
El peliazul salió de casa mientras que en su mente solo se repetía una misma pregunta varias veces.
Keith : (¿En qué lio me acabo de meter?)
Pobre Keith. Si supiera que su problema solo acaba de empezar...