Llegaron al lugar de la filmación del video musical con la cabeza de Astrid en las nubes. Todo en lo que podía pensar era en la reacción inesperada del príncipe al verlo.
Sabía que una vez que se hiciera famoso, el príncipe definitivamente sabría que solo estaba actuando en ese video. Probablemente incluso llegaría a la conclusión de que sabía de la presencia de esa cámara, por eso actuó de esa manera a propósito. Por lo que había oído sobre el temperamento del príncipe y por lo que había visto durante ese breve tiempo en Delryria, estaba seguro de que el otro se vengaría de él.
Pero estaba seguro de que podría evitarlo. Podía admitir sinceramente que temía que su interés por él aumentara aún más. Por eso actuó así. Y luego decir algo como si el interés del príncipe se interpusiera en sus sueños o algo así. Pero basado en la reacción que ese chico había mostrado antes, probablemente no tendría la oportunidad de usar esas excusas.
Si Astrid no vio la sorpresa en el rostro del otro cuando sus ojos se encontraron, podría haber pensado que lo había olvidado. Entonces, ¿eso significaba que ya había perdido interés en él y su acción era como decirle que ni siquiera valía la pena su tiempo?
Este tipo de actitud era exactamente el polo opuesto de cómo actuó cuando se conocieron. No podía envolver su cerebro alrededor de eso. Solo había pasado un poco más de un mes desde entonces. ¿Era realmente tan olvidable? ¿O fue su actuación simplemente demasiado convincente que el príncipe estaba disgustado por su "llanto" y "mendicidad"? Entonces, después de ver ese video, ¿todo su interés en él desapareció?
Astrid de repente sintió un cosquilleo en el pecho. Como se sentiría uno cuando estuviera molesto.
Luego se detuvo y casi se abofeteó.
¿Qué diablos fue eso? ¿Qué hormigueo? ¿Qué molesto? ¿No fue este el mejor resultado posible para él? ¿Por qué alguna vez estaría insatisfecho? No, espera, ¿cuándo dijo que lo era?
Sacudió la cabeza y tiró todos esos pensamientos innecesarios. Lo importante ahora es el video musical que protagoniza.
Pero probablemente todavía era demasiado tarde para que él recuperara la expresión aburrida de su rostro porque escuchó a Reas preguntar;
"Aster, ¿estás bien?"
Se volvió hacia su hermano y sonrió. "Por supuesto. ¿Por qué no lo estaría?"
Pero lo que no sabía era que su sonrisa parecía forzada. Especialmente para Reas, quien creció viendo su verdadera sonrisa.
"¿Estás preocupado por ese príncipe?" Preguntó Reas. Porque la única razón posible por la que Astrid tendría esa expresión era por la presencia de esa persona aquí. "No te preocupes, si te molesta aquí, haré todo lo posible para ser tu escudo."
Astrid se rió entre dientes cuando escuchó eso. Todas las cosas raras que sentía se convirtieron en diversión.
"Entonces también haré todo lo posible para esconderme detrás de tu espalda", dijo, siguiéndolo.
Los dos saltaron de sus caballos y los arrastraron hacia la playa. Había una cabaña de madera de dos pisos justo antes de la orilla. Estaba rodeado de flores y había enredaderas llenando sus paredes.
No habían entrado todavía cuando un robot de inteligencia artificial masculino llevaba una especie de traje de mayordomo con faldones de abrigo a juego y gafas de media luna.
"Queridos invitados, bienvenidos a nuestra cabaña junto al mar. ¿Están de fiesta con la gente de Kaleido Entertainment?" preguntó el robot.
"Sí," respondió Astrid.
"Entonces, por favor, entre. Algunas de las personas de su grupo ya están adentro", dijo el robot con una sonrisa. "Puedes dejar los caballos aquí y haré que alguien los cuide".
Los dos hicieron lo que les dijeron y entraron en la cabaña. Aunque el exterior parecía una casa de campo que se encontraría durante la era georgiana de Inglaterra, el interior era como un hotel moderno en la Tierra. Había un salón y un mostrador de recepción, detrás de un robot de inteligencia artificial.
Al igual que lo que dijo antes esa IA con aspecto de mayordomo, ya había gente en el salón. Toda su atención se volvió hacia ellos. No, más exactamente, su atención se centró en Astrid.
Astrid tomó la iniciativa de presentarse. "Buenos días, soy Astrid Townsend. Hoy trabajaré con todos ustedes como parte del video musical".
La parte del equipo que estaba allí ya tenía la sensación de que la adolescente que acababa de llegar era la que iban a rodar hoy junto a Miria Lane. Con esa apariencia, sería un desperdicio si estuviera aquí como una ayuda adicional para la tripulación.
Lo saludaron con entusiasmo. ¿Cómo podrían no hacerlo? No solo se veía bien, también era muy educado. A cualquiera le gustaría una persona con buena actitud laboral.
"Eh, entonces, eres mi estrella hoy", dijo de repente una voz de mujer detrás de ellos.
Ambos gemelos se volvieron y vieron a una mujer alta parada en la entrada de la cabaña. Tenía el pelo corto de color púrpura oscuro con reflejos azules en el flequillo. Vestía toda de negro con un maquillaje ahumado que solo aparecía debido a su tez pálida.
Astrid no pudo evitar recordar a una de esas chicas rockeras de su vida pasada viéndola. Pero se aseguró de no mostrar ninguna reacción en su rostro.
Solo sonrió y saludó: "Buenos días, Director Hale".
Sí, esta mujer fue la directora de este video musical: Harper Hale. Miria le había dicho durante mucho tiempo que esta persona se encargaría de dirigirlos en este video. Entonces, tuvo mucho tiempo para buscar información sobre ella.
Ella era una directora en ciernes que solo comenzó su carrera hace tres años. Ella solo había estado filmando anuncios, videos musicales y cortometrajes. Pero a pesar de eso, había estado ganando continuamente reconocimientos por su trabajo. Se podía ver que estaba muy apasionada con su oficio. Astrid estaba contenta de trabajar con alguien así.
El director Hale lo miró de pies a cabeza. "Astrid, ¿verdad? Espero que no me decepciones hoy."
"No lo haré, Director", dijo Astrid sin dudarlo. "Haré todo lo posible para superar tus expectativas".
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(Capítulo ciento treinta ^^)