Lo había conocido es una misión, himejima-san me encomendó dar apoyo al pilar del viento, el miedo se apodero de mi no solo por su carácter, pero no podía negarme a lo que mi maestro me pedía. Y aunque ya sabía de lo grosero, gritón y malhumorado que era el pilar del viento me sorprendió que en todo el trayecto fue así, que incluso cuando me lastime me grito, aunque fueron pocas veces que interactúe con él antes y después de aquella misión, me gustaba.
Como la persona más importante de mi vida y por supuesto mi maestro, himejima-san, se lo conté, no fue la reacción que esperaba, frotaba sus manos mientras lloraba y decía -pobre de mi pequeña espero pueda encontrar un mejor hombre- a pesar de eso me escuchó con atención y me dijo que contaba con todo su apoyo
-que hago no puedo llegar y decirle, shinazugawa-san que bonito día para decirle que me gusta, verdad- dije obteniendo como respuesta una pequeña risa y caricia en mi cabeza por parte del mayor
–escríbele-
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-se la das y vuelas rápido y lejos ¿entendido? Para que no te siga- le decía a mi cuervo mientras le daba mi carta para que la agarrara y probar si se le caía, no sería un viaje largo, pero más vale prevenir
Observe como se alejaba mientras mi corazón se aceleraba –bien, ahí va la primera-
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espero que les agrade esta pequeña historia, creo que las actualizaciones serán diarias, como dije es bastante cortita así que no durara mucho
sin mas que decir nos vemos