"No pierdas el tiempo quejándote del pasado. Solo si sigues adelante el futuro te recompensará". – Anónimo.
Cuando sus ojos se posaron sobre la hermosa mansión que se presentaba ante él, no pudo evitar sentirse maravillado por la misma. Nunca Imaginó que su difunto tío Yao construyera un lugar así para su hijo aunque, tratándose del único hijo vivo que tenía, era natural que quisiera que creciera en un lugar adecuado y sin carencia alguna.
La mansión conservaba el diseño tradicional de las viviendas actuales, la entrada contenía el inconfundible color dorado del clan Jin y las puertas eran de un color café oscuro con pequeños adornos de peonias en sus acabados.
Sin duda alguna, el clan Jin estaba representado en algunas partes de la gran mansión, como si su difunto tío quisiera que su hijo siempre tuviera presente a qué lugar pertenecería a futuro, si así lo decidía.
Nunca esperó encontrar un lugar así...
Lleno de vida, árboles, flores, personas sonriendo y con un hermoso claro tras la misma mansión.
Ahora entendía por qué Li Wang era el joven alfa que era, había crecido en un lugar libre de presiones, con personas apoyándole, amándole y sonriendo suavemente... Definitivamente hubiese deseado vivir en un ambiente así.
– Joven maestro.
Una suave voz interrumpió sus pensamientos, haciendo que parpadeara un poco y regresara a ver al dueño de la misma.
– Disculpe, me distraje – le respondió.
El anciano sonrió suavemente y negó con su cabeza.
– No se preocupe, comprendo su sorpresa, la primera vez que ven este lugar, quedan embelesados por su belleza.
– Lo es, el lugar es hermoso, ahora comprendo por qué Li ama tanto este lugar... Es pacífico y lleno de vida.
– Acompáñeme – dijo el anciano ingresando con paso lento y calmado a la mansión, mientras Jin Ling lo seguía de cerca.
Nada más entrar al lugar, Jin Ling fue recibido por una señora mayor y una jovencita.
Ambas tenían una suave sonrisa en sus rostros e hicieron una reverencia al verlo entrar.
– Bienvenido Joven maestro – habló la anciana – mi nombre es Ranran, la antigua nana del joven Li Wang, hemos estado esperando su llegada desde su anuncio.
– Gracias por el recibimiento – indicó Jin Ling con una sonrisa.
– Ella es mi ayudante, su nombre es Xiang Ling – dijo Ranran regresando a ver a la joven Beta.
– Es un honor conocerle joven maestro – indicó con una sonrisa – si necesita algo, no dude en pedírmelo.
– Gracias – le respondió Jin Ling.
– Debe estar cansado por el largo viaje, Xiang Ling lleva por favor al joven maestro a la sala para que descanse – ordenó Ranran.
– Enseguida – le respondió – si me acompaña joven maestro.
Jin Ling asintió y tras despedirse de Ranran, se dirigió a la sala de la mansión.
No tardaron mucho en llegar y una vez entraron a la misma, Jin Ling tomó asiento y la joven Xiang Ling le ofreció un poco de té, mientras esperaba a que Li Wang regresara grande fue su sorpresa al descubrir quiénes eran las personas que entraron al lugar.
– Oh, joven maestro Rulan – lo Dong Hua quien sonrió suavemente al verlo en el lugar – me alegra que llegara sin contratiempos – dijo haciendo una reverencia.
Jin Ling se levantó de su lugar e hizo una reverencia para corresponder el saludo.
– Gracias por su preocupación – le respondió.
Una vez los saludos entre ambos terminaron, Jin Ling posó su vista en la figura del imponente hombre que acompañaba a Dong Hua, quien tenía el cuerpo recto, las manos tras su espalda y un semblante serio pero, que por alguna razón no le transmitía frialdad o desprecio sino, todo lo contrario.
– Joven Rulan, le presento al maestro Zhao – indicó Dong Hua – es la persona que nos entrenó a Heng Yu, Li y a mi desde jóvenes – explicó – todo lo que sabemos es gracias a él.
Los ojos de Jin Ling se ampliaron un poco al escuchar las palabras de Dong Hua.
Había escuchado muchas historias sobre el maestro Zhao gracias a Li Wang mientras convivían dentro del clan Li. Era el último superviviente de su extinto clan y que, tras apoyar en la campaña contra los Wen, desapareció una vez esta culminó, teniendo solo efímeros rumores de su asentamiento en una lejana provincia.
No tenía mucha información pero, por lo que Li le había contado, era un maestro fuerte, metódico y estricto a la hora de enseñar, y por lo bien instruidos que Li Wang, Dong Hua y Heng Yu estaban, era una verdad que no había forma de desmentir.
Si un maestro de su clase pudiera entrar a las filas del clan Jin sin duda su clan podría superarse con más eficacia pero, por la forma en como el hombre se había mantenido durante décadas en esa pequeña provincia, dudaba que aceptara en caso de proponérselo.
Jin Ling sonrió y dejó de lado esos pensamientos, haciendo una reverencia a modo de saludo.
– Es un honor para mí poder conocerlo finalmente maestro Zhao.
El viejo maestro se sorprendió un poco por las palabras del joven omega pero, sonrió suavemente e el gesto del mismo.
– Al contrario, es un para mí conocer al joven líder del clan Jin – aseguró – Li me ha contado mucho acerca de usted.
– Espero sean cosas buenas.
– Sin duda alguna – le respondió.
Tras esos los tres tomaron asiento y disfrutaron del té que Xiang Ling había traído para ellos.
Jin Ling aprovechó para conversar un poco más con el maestro Zhao quien, complacía sin negativa alguna la curiosidad del joven omega. Relatándole como había perdido a su familia a manos del clan Wen, como fue participe en la campaña que los derribando y de cómo decidió partir dejando atrás el mundo de la cultivación para establecerse en aquella lejana provincia.
– Quiere decir... ¿Jamás pensó en retomar el cultivo ni el arte de la espada? – Jin Ling dejando la tasa sobre la mesa.
El viejo maestro sonrió y contestó.
– Asi es, mi idea inicial era solo establecerme y pasar mis muchos años en paz, sin intervenir en nada relacionado con la cultivación.
– Comprendo, perder tanto debió ser un duro golpe para usted.
Zhao simplemente asintió.
– Pero... ¿Por qué decidió retomar la cultivación?
El viejo maestro se tomó unos segundos antes de responder.
– La necesidad...
Jin Ling una ceja al no comprender.
– Cuando llegué aquí, noté que esta provincia tenía mucho potencial para florecer pero... Tristemente quien la administraba anteriormente no lo hacía correctamente – bajando la mirada y colocando un semblante lleno de tristeza – El clan que se supone debía cuidarla hacia la vista gorda, lo más ricos se aprovechaban de los más necesitados, los alfas querían imponer su posición social sobre los omegas y los betas del lugar ni hablar de los niños... – regresando a ver de reojo a Dong Hua quien solo suspiró – muchos de ellos estaban en la calle por la muerte de sus padres por culpa de la hambruna o eran obligados a trabajar para ayudarlos.
– ¿Qué? – Jin Ling lo con sorpresa – pero...
– No todo era agradable en este lugar hace algunas décadas atrás – explicó – por ello decidí abrir una escuela para enseñarle a los más jóvenes, así podrían comenzar el camino de la cultivación y ayudar a sus familias... En vez de mendigar o trabajar en áreas poco saludables para ellos.
– Entiendo – Jin Ling – pero... ¿Cómo fue que mi tío se relacionó?, hasta donde tengo entendido, el esta mansión para Li y su madre... ¿Cómo fue que administrando la provincia?
– Cuando comencé a enseñar, varios jóvenes dejaron las calles, apoyaban en cacerías pequeñas y tenían un pequeño sueldo debido a ellas.
– ¿Entonces su escuela funcionaba como un clan?
– No lo llamaría un clan propiamente pero... Algo parecido.
Jin Ling asintió y dejó que el viejo maestro continuara.
– Los tipos que administraban esta región comenzaron que su mano de obra comenzaba a menguar y sus ganancias no eran las mismas.
– Entonces pidieron cuentas de lo sucedido – Jin Ling – encima de que explotaban a las personas y abusaban de ellas... – ó .
– Un día vinieron a mi escuela, diciendo que "apoyaban" esta nueva forma de negocio – diciendo eso ó con desprecio – y esperaban una asociación para beneficiarnos mutuamente... Incluso ese clan estaba de su lado... – soltando una risa ante el recuerdo – evidentemente me negué y no lo tomaron nada bien.
– Déjeme adivinar... ¿Contrataron bandidos, cultivadores deshonestos y toda clase de alimañas para tratar de eliminar su escuela?, obviamente el clan que administraba la provincia hizo como que no veía por qué ellos también tenían algo que ver...
– Exactamente, pero como era claro, ninguno pudo conmigo y mis jóvenes alumnos... Eventualmente ellos trataron con más fuerza deshacerse de nosotros y...
– Terminaron muertos.
– Asi es... No supe exactamente como sucedió pero tras muchos años, el clan menor que administraba esta región al final decidió deslindarse de esta provincia ya que no resultaba beneficiosa para ellos... Aunque corrían rumores de que soltaron el lugar porque muchos de ellos murieron en circunstancias poco claras.
– Hecho que mi tío aprovechó y se hizo con estas tierras sin que nadie supiera de ello – dijo tomando un poco de su te, tratando de no pensar que su tío tuvo que ver con eso.
– Posiblemente, un día tu tío vino a mi pidiendo algunos de mis discípulos para custodiar la mansión donde vivía su hijo y la madre de este, no me negué ya que después de todo lo que hizo para que esta región floreciera como era debido, era lo mínimo que podía hacer.
– ¿Y cómo entrenando a Li?
– Unos años más tarde, el líder del clan Jin me para que viniera a la mansión para hablar de la vigilancia de la misma... Fue cuando un pequeño Li decidió ser un cultivador como nosotros y el resto es historia... Desde ese día me convertí en su maestro.
– Ya veo – sonriendo suavemente – ¿y su escuela?, escuché que actualmente la misma dejó de funcionar.
– Tras muchos años, los discípulos que é se hicieron lo suficientemente fuertes para poder volar con sus propias alas... Asi que decidí dejar de entrenar nuevos discípulos y solo continuar mi vida como cualquier persona, aunque después de la muerte de la madre de Li, este me pidió seguir a su lado, apoyándolo para administrar esta región... Por ello me quede aquí, para ayudarle en lo que é necesite.
– Li lo tiene en alta estima, era natural que le pidiera continuar a su lado – le aseguró Jin Ling – sobre todo siendo tan joven.
– Ciertamente lo es aunque, Li es un joven que ha demostrado madurez desde muy corta edad por lo que, estoy seguro que en poco tiempo aprenderá a manejar esta región sin mi ayuda.
– Dudo que lo deje ir aun cuando eso suceda – riendo suavemente – además con esa tendencia oculta que tiene por romper reglas... – dijo en un leve susurro.
Los tres comenzaron a reír por lo último dicho.
– A veces me sorprende lo bueno que es para ocultar ese instinto que tiene – apoyo Dong Hua.
El viejo maestro solo negó con la cabeza.
– Siempre lo he dicho, ese chico tiene la particularidad de encontrar las lagunas de las reglas y romperlas sin recibir castigo – soltando un largo suspiró.
Jin Ling solo rio ante lo dicho, recordando como Li había derogado varias reglas del clan Jin y castigado al viejo consejo usando las lagunas de las mismas a su favor.
En ese momento su conversación se vio interrumpida por la inesperada llegada de Heng Yu, quien al lugar con un tono de voz demasiado alto y alegre.
– ¡Ya volví!
– Heng Yu – lo llamo Dong Hua observándolo de reojo – ¿Qué te he dicho sobre entrar gritando a la sala? – le pregunto, pero había un tono de advertencia en su voz.
– Lo siento, lo siento – dijo Heng Yu sin perder su sonrisa – que tendríamos invitados – acercándose hacia donde estaban los demás.
Dong Hua solo suspiró ante la respuesta de su pareja.
– Lamento el comportamiento de mi discípulo joven Rulan – el maestro Zhao – como puede ver, me ha sido imposible cambiar ese modo de ser.
Heng Yu solo se rio por el comentario.
Jin Ling negó con su cabeza y respondió.
– No tiene por qué disculparse por ello de hecho, estoy acostumbrado a ello – recordando de forma fugaz a su familia materna – además, creo que el simple hecho de que el maestro Yu hable de esa forma es porque siente este lugar como su hogar.
Los tres ampliaron sus ojos ante la respuesta tan madura del joven omega, parpadeando un poco y sonriendo suavemente por ello.
– Heng Yu – lo Dong Hua tratando de aligerar el ambiente – ¿Dónde está Li?, ¿acaso no lo acompañaste por las compras?
– Lo hice pero... – riendo de forma nerviosa.
– ¿Le sucedió algo malo? – rápidamente Jin Ling.
– ¿Qué?, no, no es nada de eso – respondió rápidamente Heng Yu – sucede que cuando veníamos de regreso, los niños nos vieron y... Digamos que Li prometió jugar con ellos desde hace tiempo y...
– Y terminaron enredándolo hasta que cumplió lo prometido – Dong Hua lanzando un largo suspiró.
Jin Ling solo pudo reír por la situación.
– ¿Sabe a dónde se lo llevaron los niños?
– Dijeron algo sobre ir al lago que está cerca de aquí, por lo que para dejar las compras, llevarle ropa limpia y toallas para que los niños se sequen.
– ¿Puedo ir con usted?
– Claro, no veo problema alguno, solo la ropa, las toallas y podemos irnos.
Jin Ling a ver a Dong Hua y al maestro Zhao.
– No se preocupe por nosotros – le respondió el viejo maestro sin necesidad de que hiciera la pregunta – aún tenemos asuntos que atender.
– Muchas gracias.
Jin Ling se levantó de su asiento y tras hacer una reverencia, salió del lugar junto con Heng Yu.
Jin Ling y Heng Yu emprendieron el camino hacia el lago donde Li se encontraba. El trayecto ó ser bastante tranquilo, rodeados por árboles, flores y animales recorriendo el lugar.
Para el joven omega un lugar tan pacifico le resultaba un tanto difícil de asimilar, sobre todo tras haber escuchado como era años atrás, con niños maltratados, alfas imponiéndose ante los demás y un clan que prefería el dinero antes que la vida de todas las personas de su región.
De algún modo se alegraba que su tío tomara el mando de aquella región – aunque nadie supo que la manejaba – y que la vida de todas las personas mejorara para bien, aunque el solo hecho de pensar en cómo lo ó , enviaba un escalofrío por todo su cuerpo.
Solo esperaba que ahora que Li posesión de dicha posición, las cosas continuaran igual o mejor para todos, sobre todo porque tendría que hacerlo solo con la ayuda de sus compañeros y amigos, ya que sus padres ahora estaban muertos.
En ese momento un pensamiento su mente, una pequeña curiosidad que hacía tiempo deseaba saciar y esperaba Heng Yu pudiera resolver.
– Disculpa...
– ¿Mmm?
– ¿Qué sucedió con el cuerpo de la madre de Li? – Jin Ling – ¿Pudieron darle entierro?
Heng Yu se detuvo de golpe, logrando que Jin Ling hiciera lo mismo unos cuantos pasos delante de él.
– Pues... Creo te diste cuenta por el ambiente del lugar que todo es muy relajado ¿no?
Jin Ling asintió.
– Eso es porque... Nadie sabe a excepción de nosotros que la señora fingió su muerte.
– ...
– Li decidió que lo mejor era que el buen recuerdo de su madre permaneciera intacto así que...
Mientras los tres continuaban su viaje a través del cielo, los pensamientos del joven alfa seguían centrados en lo sucedido desde que a Torre Koi. El golpe de estado por parte del consejo, convertirse en el líder del clan Jin –aunque había entregado el cargo a su legítimo dueño – tener que lidiar con el atentado en contra de Zewu–Jun y descubrir que su propia madre había estado detrás de todo eso, aun le seguía provocando un mal sabor de boca.
Tenía miles de preguntas del por qué todo así pero, su madre estaba muerta por lo que, las mismas nunca podrían ser respondidas.
Pero lo que más le dolía de todo ello, era tener que volver a casa y romper la imagen impecable que su madre había tenido desde que tenía memoria... ¿Cómo podría ir y decirles que su madre era una cruel psicópata?
– No sé si debería hacerlo – susurro.
– Li – lo Dong Hua – ¿te sientes bien?
El joven alfa en responder, algo que a sus compañeros.
– Li... Si te sientes mal podemos parar en la posada más cercana – Heng Yu.
Li negó suavemente con su cabeza.
– No es necesario – respondió – es solo que...
Ambos betas regresaron a verse al ver la postura tan dudosa de su joven compañero.
– Yo... Simplemente no sé qué hacer sobre... Mi madre.
– Oh... – susurraron al unísono.
– No sé si debería contarles a los demás lo sucedido – hablando – sé qué debo hacerlo, merecen saberlo y no continuar recordando a alguien de una forma que nunca fue cierta pero...
– Pero era tu madre – Dong Hua.
Li asintió.
– Bueno, no podemos tomar la decisión por ti – dijo Heng Yu – después de todo, se trata de la mujer que te trajo al mundo pero... Creo que deberías tomar la decisión correcta no solo por ellos sino, por ti.
– ...
– Toma la decisión que creas que te traerá paz mental – Dong Hua.
Tras esas palabras, el joven alfa no volvió a emitir palabra alguna, algo que ambos betas tomaron como su respuesta para culminar el tema, sobre todo cuando sabían lo difícil que era para el primero tratarlo.
Después de veinte minutos, a los lejos divisaron su provincia natal, algo que les hizo sonreír por que pronto estarían en pero, la voz de Li les hizo detenerse de pronto.
– ¿Li? – lo Dong Hua.
– Yo... ¿Podrían acompañarme a un lugar antes de volver a casa?
Tanto Dong Hua como Heng Yu se regresaron a ver antes de asentir, siguiendo a su joven compañero hacia el lugar donde deseaba ir.
Lugar que reconocieron de inmediato una vez llegaron ahí.
– ¿Por qué querías venir aquí? – pregunto Heng Yu.
Li solo se limitó a sonreír y por el camino, dejando a sus compañeros con muchas dudas pero, aun con ellas rondando su cabeza, lo siguieron sin hacer preguntas, hasta que llegaron a las orillas de un enorme lago de agua pura y cristalina.
– Oh, hace mucho que no veníamos aquí – Heng Yu.
– Es cierto... – respondió Dong Hua.
– Aunque no entiendo por qué Li quería venir aquí.
Dong Hua negó con su cabeza.
Li continúo observando el amplio lago antes de girarse y enfocar a sus compañeros.
– Este lugar... Era uno de los favoritos de mi madre.
– ...
– Decía que el agua tenía propiedades que servían para desinfectar heridas...Además de que podías relajarte gracias a su suave brisa.
– ...
– Por eso...– dijo sacando de entre sus ropas la bolsita que contenía el cuerpo de su madre – creo que... Lo único que podría traerme paz por lo sucedido es... Simplemente dejándola ir.
– Li... – lo Heng Yu.
– Los demás estarían triste si supieran la verdad y sería muy incómodo poder seguir viviendo juntos, así que... Es mejor que tengan buenos recuerdos de ella.
Ambos se sorprendiendo por las palabras del joven alfa.
– ¿Podrían ayudarme a reunir leña?
– Entonces... Tú piensas... – dijo Dong Hua.
– Creo que le hubiese gustado que sus restos se esparcieran en este lugar – contestó con una suave sonrisa.
Sin decir nada más, comenzaron a juntas la leña que el joven alfa les había pedido, creando una especie de cama hecha de troncos, la cual fue adornada con flores y ramas que Li había reunido, para finalmente colocar el cuerpo inerte de Li Yeni sobre la misma.
Li con tristeza la figura de su amada madre, tomando su muñeca entre sus manos, sintiendo la frialdad que esta emanaba, todo lo contrario a la cálida mano que en el pasado había acariciado su mejilla.
– Lo lamento tanto – Li – nunca me di cuenta de tu dolor, mucho menos de todo el resentimiento, los celos y la obsesión que estabas guardando en tu corazón – dijo tratando de reprimir las lágrimas que amenazan por escapar de sus ojos – Me hubiese gustado que nuestra vida fuera diferente pero... No lo fue – soltando la mano de su madre y colocándola sobre la otra – te amo, siempre lo hice... Sin importar lo sucedido, siempre te amaré
Li profundamente y un beso en la frente del cuerpo de su madre.
– Deseo de todo corazón que los cielos puedan perdonarte y darte otra oportunidad de vivir... Y ser feliz.
Tras esas palabras, Li Wang se alejó de lecho improvisado y se acercó a sus compañeros.
– Li – Heng Yu – ¿estás seguro?
Li solo asintió.
– Es lo mejor.
Tras responder, Li un talismán de fuego entre sus ropas, lanzando hacia el lecho donde reposaba el cuerpo de su madre el cual, comenzó a arder unos segundos después.
Ante aquella escena, Li no pudo soportarlo más y de rodillas, acto que hizo que sus compañeros se preocuparan y se arrodillaran a su lado.
– Li...
– Lo siento... Yo solo – dijo incapaz de levantar la cabeza.
Dong Hua y Heng Yu no necesitaron más palabras, simplemente rodearon el cuerpo de su joven amigo, dejando que las lágrimas que había retenido desde hace mucho, finalmente cayeran.
– Una vez el cuerpo de la señora se volvió cenizas, fueron esparcidas en el lago... Al final Li pudo despedirse de ella – dijo Heng Yu, terminando de relatar lo sucedido aquel día.
Ante aquellas palabras, Jin Ling no puedo hacer nada más que sorprenderse ya que, siempre pensó en Li Wang como un alfa que se mantenía fuerte y firme como una roca, sobre todo porque nunca lo vio emitir ninguna emoción más allá de su forma de ser tan pacífica y madura.
Pero saber que había llorado tras mucho tiempo de haberse estado reprimiendo... Le indicaba que había muchas cosas que un no conocía del mismo.
– Debió ser muy difícil para él – Respondió Jin Ling, sintiéndose afligido por lo escuchado – tener que despedir dos veces a su madre...
– Lo fue.
– Es por eso que nadie sabe lo ocurrido con Li Yeni – aseguró Jin Ling – para ellos su señora lleva muerta desde hace meses.
– Asi es... Solo nosotros sabemos que y que su verdadera tumba es el lago que está cerca de aquí.
– Espero Li no guarde rencor por...
– No, para él ni ni nadie más tuvieron que ver con lo sucedido con su madre, la señora sus propias decisiones y las consecuencias.... Además, Li quiere recordarla como la amorosa madre que alguna vez fue.
– ...
– Solo necesita tiempo para sanar lo sucedido... Por eso sus amigos y familia debemos apoyarlo.
Al ver la amplia sonrisa que Heng Yu le estaba dedicando no pudo más que asentir y corresponder la sonrisa.
– ¡Bien, creo que lo mejor es seguir nuestro camino! – Dijo Heng Yu con emoción – Li nos está esperando.
Jin Ling asintió y continuaron su camino.
llegaron a su destino, un hermoso y enorme lago de agua cristalina les dio la bienvenida, la refrescante brisa sus rostros y las agradables risas de los niños se dejaron escuchar.
Ver el rostro de aquellos pequeños hacia que el corazón de Jin Ling se calentara, verlos ser libres, sin tristeza o dolor en sus rostros de alguna forma hacia que recordara a los pequeños del orfanato...
"Debería visitarlos pronto" pensó para sus adentros, ya que desde que había vuelto a ser el líder había tenido mucho trabajo por lo que, la visita que tenía planeada se había visto aplazada por ello.
– ¡Jin Ling!
Una voz conocida hizo que volviera a la realidad y regresara a ver al dueño de la misma... Sonrojándose furiosamente cuando encontró al mismo.
Li Wang se encontraba dentro del lago, sin camisa y vistiendo solo los pantalones interiores de su túnica, las gotas de agua recorrían su cuerpo y la luz del sol hacia las mismas iluminaran su cuerpo... Una visión que de alguna forma aturdió a Jin Ling, quien tuvo que desviar la mirada por la vergüenza.
Heng Yu quien solo observaba de reojo la actitud del omega, solo pudo reír suavemente y aclararse la garganta para que la vergüenza fuera menor para el primero.
– ¡Niños, es hora de volver! – grito Heng Yu – ¡Sus padres los están esperando!
Los niños hicieron un sonido de decepción al escuchar aquellas palabras, comenzando a protestar para quedarse un poco más a lado de Li Wang y seguir jugando dentro del agua.
Tras unas breves palabras dadas por el joven alfa, los niños asintieron a regañadientes y comenzaron a salir uno a uno del agua, siendo el primero el último en salir.
Una vez llegaron con Heng Yu, este procedió a sacar las toallas que había traído consigo, entregándoselas a los niños para que pudieran secarse.
Por su parte, Li se acercó a Jin Ling con una enorme sonrisa en su rostro, haciendo que este último se sonrojara furiosamente por la cercanía.
– Finalmente viniste – Li.
– Si... Yo....
– Lamento no haber estado ahí para recibirte – dijo llevando una de sus manos hacia su mejilla, rascándola nerviosamente – los niños me interceptaron y... Bueno, no pude negarme.
– Mmm... Lo entiendo – respondió Jin Ling desviando la mirada – no te preocupes.
Li Wang al ver el rojo en la cara del omega, su mano a su frente, haciendo que este diera un brinco y se alejara.
– ¿Pero qué...?
– Lo siento, es que tienes la cara roja y pensé que quizás tendrías fiebre.
– ¿Por qué carajos tendría fiebre?
– Bueno... Considerando que el clima de mi provincia es un poco más cálido que en Lanling, pensé que quizás te estaba haciendo mal.
"¿Es en serio?, ¿Piensa que estoy así por el calor?" pensó Jin Ling tratando de no regresar a ver el cuerpo del alfa.
– Jin Ling...
No continuar hablando, ya que algo su cara, siendo la ropa que Heng Yu le había traído.
– Es mejor que te cambies, está comenzando a hacer más calor y no queremos enfermedades innecesarias... Señor exhibicionista – dijo haciendo énfasis en la última palabra y riendo levemente.
Li Wang una ceja ante la última palabra dicha pero, al percibir el extraño tono y la risa proveniente de su compañero, fue que el significado de ello, sobre todo al regresar a ver a Jin Ling y ver como este intentaba no regresar a ver dónde él se encontraba.
– Yo... – regresando a ver su propio cuerpo y sonrojándose ligeramente – Iré a cambiarme.
Fue lo último que dijo antes de desaparecer de la vista de ambos, regresando solo unos minutos después, ya vestido completamente.
– Lamento eso... – dijo soltando una risa algo nerviosa.
– No, está bien – le respondió rápidamente Jin Ling – es normal, estabas... Disfrutando con los niños dentro del agua.
– Mmm... Aunque hubiese sido más divertido si hubieses estado con nosotros desde el principio.
– ...
– Como te gustan los niños, estoy seguro de que hubiesen disfrutado de tu presencia.
El rostro de Jin Ling nuevamente se volvió de color carmín por las palabras del alfa, quien solo lo observaba con una suave sonrisa en su rostro.
Heng Yu al ver la escena solo los ojos, mientras los niños hacían muecas de asco por lo que creían "una escena romántica entre amantes"
– Bueno, creo que lo mejor es volver – nuevamente Heng Yu, hiendo que ambos jóvenes se sobresaltaran y lo regresaran a ver – No sé ustedes pero, yo tengo hambre y ¿ustedes niños?
Pregunta que hizo que los niños contestaran en unísono un fuerte "si"
Al ver como los niños comenzaban a seguir a Heng Yu, tanto Jin Ling como Li Wang se regresaron a ver antes de seguir a los demás.
– Se ve que te quieren mucho – Jin Ling, intentando romper la tensión entre ambos.
– ¿Eh
– Los niños – volvió a decir – se nota que te quieren.
– Oh, eso... Sí, eso creo – dijo algo apenado – me gusta pasar tiempo con ellos y que se diviertan jugando – aseguró – después de todo, la diversión es parte del crecimiento y ellos lo necesitan.
– ¿L crees?
– ¿El qué?
– Que la diversión es parte del crecimiento.
– Claro, así ellos comienzan a desenvolverse mejor en cuanto a interacciones sociales.
Jin Ling solo la mirada.
"Ahora que lo pienso... Yo no tuve nada de eso" pensó para sus adentros.
– ¿Jin Ling? – lo Li al ver el semblante triste y melancólico que el omega estaba colocando en su rostro.
– No, es nada – le respondió – deberíamos apresurarnos o nos dejaran atrás.
Li no muy convencido asintió y continuaron su camino de regreso a la mansión.
Una vez llegaron a la entrada de la mansión, Li Wang se despidió de los niños, quienes le hicieron prometerles que volvería a jugar con ellos en el lago a lo cual, el joven alfa no supo cómo negarse, sobre todo por que adoraba ver las sonrisas de aquellos niños y hacerlos feliz era una de las cosas que más disfrutaba.
Cuando finalmente los niños se fueron, ingresaron a la mansión, siendo recibidos por una preocupada Ranran quien, al ver la figura algo húmeda de Li Wang, comenzó a reñirle.
– Sigues todo mojado – dijo la anciana – ni siquiera te secaste correctamente y solo te pusiste la ropa limpia encima.
– Bueno... Teníamos que regresar y los niños...
– Nada de excusas jovencito – lo interrumpió Ranran – ahora mismo, tomaras un baño caliente y te vestirás como es debido.
– Pero...
– Pero nada, no queremos que te enfermes.
– Dudo que eso ocurra Nana – le aseguró – mi núcleo dorado no...
– No me interesa eso, ve y báñate.
– ...
– O no habrá cena para ti – le dijo con firmeza.
Li Wang regreso a ver a Heng Yu quien solo se encogió de hombros y sonrió suavemente como diciéndole "No puedo ayudarte"
Al ver que no tendría ayuda, simplemente suspiró y se giró.
– Iré a tomar un baño, volveré en seguida – dijo regresando a ver a Jin Ling.
– Ha... Claro – respondió un tanto sorprendido por ver como Ranran lo había casi obligado a bañarse.
El alfa comenzó a alejarse y, cuando su figura finalmente desapareció de la vista de todos, la mujer mayor soltó una pequeña risa.
– Lamento que hayan visto eso – dijo a modo de disculpa – como sabrá, A–Li es un tanto terco así que... Tengo que ponerme firme con él en cosas como estas.
– No se preocupe, entiendo perfectamente – le aseguró Jin Ling – a veces uno debe ponerse firme para que los demás acaten las ó o, se volverán unos rebeldes – recordando fugazmente a los discípulos que a veces no hacían lo que se les pedía y tenía que castigarlos por ello.
– Veo que el joven maestro entiende a esta vieja anciana.
Jin Ling asintió y comprendió en cierta medida porque Li era la persona que era hoy en día.
No solo su maestro había inculcado varios valores en él sino que, también, había tenido el amor y la disciplina de parte de una Nana que solo velaba por el bien de su joven maestro.
Quien aún hoy en día, sabiendo el fuerte cultivador que era su maestro, seguía velando por su salud. Teniendo la confianza de este último como para reñirle si no pensaba en su bienestar personal.
– ¿Gusta un poco de te mientras espera? – le preguntó
– Me encantaría.
– ¡Yo también quiero Ranran! – intervino Heng Yu.
– Con leche – le aseguró.
– ¡Tú si sabes cómo me gusta!
La anciana solo sonrió y ambos la siguieron, disfrutando de su compañía así como el té.
Minutos más tardes, Li Wang reapareció ante todos, vestido y peinado correctamente, mostrando una amplia sonrisa en su rostro cuando al lugar.
– Oh, veo que el joven amo finalmente se vestido correctamente – Ranran – así es como un joven maestro debe verse siempre.
Li rio nerviosamente.
– Es extraño ver a Heng Yu tomar té, comúnmente prefieres el alcohol – dijo Li tratando de desviar el tema.
– ¡Oye! – Heng Yu – para tu información, también puedo disfrutar de una buena taza de té.
– Con alcohol.
– ¡Eso no es cierto!
– Pero Dong Hua dijo que tú siempre quieres ponerle alcohol por que te sabe simple.
– ¡Eso no es verdad!
Tanto Jin Ling como Ranran rieron por lo bajo, escuchando como Heng Yu comenzaba a quejarse de forma infantil.
En ese momento, Xiang Ling – la asistente de Ranran – al lugar con un gesto de preocupación en su rostro.
– Xiang Ling... ¿Qué sucede? – la mujer mayor.
– Bueno... Es que, tal parece que no incluí algunas cosas en la lista de compras y...
– ¿Necesitas eso para los pasteles de luna de esta noche? – Heng Yu.
La joven beta asintió con timidez.
– Eso sí que es un problema, yo tengo que hacer unas tareas que me indicó el maestro Zhao – respondió Heng Yu.
– Puedo ir yo nuevamente – intervino Li.
– Pero joven maestro, acaba de llegar – indicó Xiang Ling – puedo ir yo...
– No te preocupes – le aseguró Li – además, podría ser una buena oportunidad para que le muestre nuestra provincia al joven líder del clan Jin – regresando a ver a Jin Ling con una sonrisa.
– ...
– Claro, si te parece bien – extendiendo su mano para que el omega la tomara.
Jin Ling se mantuvo dudoso durante unos segundos pero, al ver aquella suave sonrisa en el rostro del alfa, sintió como su corazón dio un breve brinco y, sin poder negarse, simplemente asintió y tomo la mano que le era ofrecida.
Tras una breve despida ambos salieron de la mansión, con dirección al pequeño puerto que había en la provincia.
Hacer las compras de los ingredientes faltantes no les más de veinte minutos por lo que, una vez terminaron con los pendientes, ambos se dedicaron a recorrer las calles de aquel pequeño pero fascinante puerto.
Las personas caminaban rápidamente y haciendo las compras rápidamente. Los comerciantes colocaban adornos y faroles en diferentes lugares del puerto, los restaurantes hacían platillos típicos del lugar mientras los comerciantes colocaban sus mercancías de forma que pudieran ser vistas por todo aquel que pasara por el lugar.
Algo que fuertemente la atención de Jin Ling, quien no comprendía por qué había tal ajetreo en el lugar.
– Li...
– ¿Mmm?
– ¿Por qué todo el mundo parece...?
– ¿Desesperado?
Jin Ling asintió.
– Es por el festival de hoy en la noche – respondió mientras continuaban caminando por el lugar.
– ¿Festival?
– Mmm... Cada año en esta época, muchos comerciantes de diferentes lugares vienen al puerto, para presentar sus mercancías con una pequeña reducción en sus precios... Así los lugareños pueden comprar todo aquello que necesitan incluso pueden llevarse dos o tres piezas más, ya que el descuento es adecuado a sus salarios.
– Oh, ya veo, así pueden recuperar el costo de las piezas que no pudieron vender en todo el año.
– ¡Exactamente! – Aseguró Li – obviamente esto solo funciona en objetos como muebles, telas y artículos como peines o tocados, en fin... Todo lo que no sea orgánico como la comida o maquillaje.
– Entiendo.
– Este festival dura solo cinco días por lo que, muchas personas de regiones cercanas vienen a este lugar, lo cual resulta beneficioso para que el flujo del dinero circule y haya ganancias para todos los comerciantes.
– Veo que estás muy bien informado – Jin Ling con una sonrisa.
– Bueno, como sabes mi padre era el encargado de esta provincia – dijo con una sonrisa algo nerviosa – al morir, por derecho a mí ese trabajo. Actualmente solo me hago ciertos asuntos porque sigo siendo menor y tengo la ayuda del maestro Zhao, Heng Yu y Dong Hua para administrar lo demás, pero es mí deber estar informado de todo.
Jin Ling sonrió suavemente, sintiéndose un tanto orgulloso por el alfa a su lado.
– Pero dejemos de hablar de cosas tan serias – dijo con emoción – aún tenemos muchas cosas que ver.
– ¿Eh?
El omega no tuvo tiempo de reaccionar ya que, el alfa su mano y de esta, comenzando ambos a correr el puerto con sus manos entrelazadas, algo que de cierta forma avergonzaba al primero pero, por alguna razón no podía soltar aquella cálida mano.
Minutos después y tras recorrer gran parte del lugar, a se detuvieron en un pequeño puesto, donde decidieron tomar algunos aperitivos – más específicamente dulces– mientras miraban a las personas pasar rápidamente frente suyo.
– ¿Y?, ¿Qué te ha parecido mi provincia? – el alfa mientras se metía otro dulce a la boca.
– Colorida – respondió Jin Ling – es bastante animada, me recuerda de alguna forma a muelle de Loto... Aunque...
– ¿Aunque?
– Aquí no está el malhumorado de mi tío y no me amenazan cada cinco minutos con romperme las piernas.
Li Wang casi se ahoga con el dulce por lo último dicho y tras tragar el mismo, no pudo evitar reír por el comentario.
– Dudo que el líder Jiang se alegre de oír eso.
– ¡Ni se te ocurra decirle, es capaz de perseguirme por todo Yummeng si se entera!
– Prometo solemnemente que no nada de eso por mi parte.
Jin Ling entrecerró los ojos y respondió.
– ¿Puedo confiar en ti?
Li Wang hizo un gesto fingiendo de indignación.
– ¿ dudando de mi honor?
– No lo sé, después de que ayudaste a Zewu–Jun pareciera que son muy amigos – dijo siguiéndole el juego.
El alfa solo pudo reír.
– No creo que podamos considerarnos amigos ya que, s que de algún modo el líder Jiang me odia.
– ¿Por qué dices eso? – un tanto curioso por la declaración del otro.
– Pues... – regresando a ver al omega.
Ambos se quedaron viendo durante unos segundos, incapaces de poder apartar la mirada del otro.
En ese momento, quizás de forma inconsciente el rostro de ambos comenzó a cercarse lentamente, sintiendo como la emoción comenzaba a crecer dentro de ellos y acortar por completo la distancia pero, cuando estaban a pocos centímetros de ello, una voz llamando al joven alfa los e hizo que se alejaran rápidamente.
– ¡A–Li!
Ambos buscaron entre la multitud al dueño de aquella voz, hasta que dieron con la menuda figura de un chico que se acercaba rápidamente a ellos.
Uno que, por su aspecto menudo y delicado, se trataba de un omega... Y uno muy hermoso para molestia de Jin Ling.
– ¿Yue? – Li Wang un tanto sorprendido al ver a la persona en cuestión.
Jin Ling a ver al alfa cuando como pronunciaba aquel nombre, notando como los ojos del mismo se iluminaban cuando sin respuesta alguna que se trataba de esa persona en cuestión y dibujando una amplia sonrisa en su rostro.
– ¿Le conoces? – Jin Ling aun cuando sabia la respuesta.
– Mmm... Es un viejo amigo – levantándose de su asiento.
El omega ya no emitió palabra alguna puesto que, el chico llamado Yue había llegado a lado de ambos con una gran sonrisa en su rostro.
– No esperaba encontrarte aquí – dijo el chico.
– Igual yo – le respondió Li – ¿hace cuando regresaste?
– Regresamos hace unos días pero, ya conoces a mi padre, hizo que limpiáramos el locas hasta dejarlo limpio para que pudiéramos abrir hoy.
– Parece que el viejo Tang no cambia nunca – riendo suavemente.
Mientras ambos conversaban, Jin Ling se mantuvo en silencio, observando de reojo al omega recién llegado, sobre todo porque había algo en el que no le terminaba de convencer, como si un extraño presentimiento quisiera alertarlo de algo pero, no sabía el que.
El chico era hermoso, era algo que no podía negar... Era de estatura promedio, cabello de color negro ébano que le llagaba a la cintura, amarrado en una media coleta y adornado con un bello tocado de plata, tenía unos intensos ojos azul cielo, su nariz era perfecta, tenía unos bellos pómulos y, una suave piel blanca y tersa.
En definitiva era uno de los omegas más hermosos que había visto... Y por alguna razón no le agradaba nada que estuviera cerca de Li Wang.
"¿Pero qué carajos estoy pensando?" se dijo para sí mismo Jin Ling que tuvo que negar con su cabeza para alejar esos extraños sentimientos que estaba comenzando a tener por Li Wang y la cercanía con aquel omega desconocido.
En ese momento percibió la intensa mirada del chico recién llegado, llegando a escuchar un simple "¿Y él es...?" por parte del mismo.
– Su nombre es Jin Rulan – respondió Li Wang, presentándolo ante el omega recién llegado.
– ¿Jin Rulan? – el omega – ¿Cómo el omega que actualmente dirige el clan Jin?, ¿Ese Jin Rulan?
Jin Ling al escuchar ese pequeño cambio de tono en la palabra cuando su nombre hizo que frunciera el ceño y se levantara de su asiento para finalmente encararlo.
– Si, así es, soy el líder del clan Jin – le aseguró Jin Ling – ¿Hay algún problema con eso?
Yue un poco ante la repentina pregunta del otro omega y, se apresuró a responder para evitar cualquier mal entendido.
– Lo siento, no quise ofenderlo – dijo con las mejillas sonrojadas por la pena – es solo que... Había escuchado que el clan Jin siempre fue liderado por alfas y su actual líder era un omega por eso... Me sorprendió un poco que alguien tan importante visitara una provincia tan pequeña y lejana como la nuestra.
Jin Ling no le respondió porque, de alguna forma, sentía que aquellas palabras no eran del todo sinceras.
– Antes era así – intervino Li Wang – pero, las cosas han cambiado en estos meses dentro del clan Jin.
– Ya veo – índico el omega con una suave sonrisa.
Jin Ling un tanto molesto por la situación intervino.
– ¿É quién es? – Le a Li Wang – por lo que noto, es un conocido tuyo.
– Oh, lo siento... – se disculpó por la falta de presentación – su nombre es Tang Yue, nos conocemos desde que éramos niños – le una sonrisa
Jin Ling por su parte dirigió su vista nuevamente a la figura del omega y lo recorrió rápidamente de pies a cabeza antes de volver a depositar su atención en el alfa.
– Su padre es un comerciante de nuestra provincia, hace algunos años se fueron del puerto buscando nuevas oportunidades de comercio y, hasta ahora es que lo vuelvo a ver.
– Entiendo – respondió Jin Ling cruzándose de brazos.
El alfa al verlo un poco más tranquilo, a ver nuevamente a su viejo amigo.
– ¿Regresaron solo por el festival o planean quedarse de forma permanente?
– Hemos vuelto de forma permanente – respondió con algo de entusiasmo, sonrojándose nuevamente y comenzando a jugar con un mechón de su largo cabello.
– Esa es una buena noticia, debemos ponernos al día respecto a todo lo que ha pasado desde que te fuiste.
Tang Yue rio suavemente ante el comentario, haciendo con ello que la molestia de Jin Ling se acrecentara.
"Este chico... Esa personalidad tan tímida y sumisa me saca de mis casillas" pensó al ver la forma en como regresaba a ver a Li Wang.
En ese instante, la voz de un hombre mayor al omega conocido de Li Wang, haciendo que todos regresaran a verlo.
– Papá – dijo Tang Yue – ¿Qué haces aquí?
– Tu madre dijo que no volvías y me pidió te buscara, ya que prometiste ayudarle con las vasijas de porcelana.
– Oh, lo – dijo llevando sus manos a su boca en señal de asombro.
– siempre tan... – la voz del hombre cuando su vista se posó en la figura de Li Wang – ¡A–Li! – Acercándose al mismo y dándole una fuerte palmada en la espalda – ¡Cuánto tiempo sin verte!
– Lo mismo dijo señor Tang – dijo tosiendo un poco por la fuerte palmada.
– ¡Mira cómo has crecido! – Dijo emocionado – ¡sin duda eres
– Mmm... ¿Gracias?
– ¿Y quién es el joven maestro que te acompaña? – fijándose finalmente en la presencia de Jin Ling.
– Es el actual líder del clan Jin – respondió su hijo – Jin Rulan.
– Oh, una visita importante – – espero su visita a nuestro pequeña provincia sea de su agrado.
– Hasta ahora lo ha sido – contestó Jin Ling.
El hombre solo sonrió y a ver a Li Wang.
– Dime A–Li... ¿Finalmente conseguiste un buen omega y has contraído matrimonio?
– ¡Papá! – Tang Yue.
Jin Ling frunció el ceño ante la repentina pregunta por parte de aquel hombre, sobre todo al notar cierta tensión en el cuerpo del omega.
– ¿Qué?
– ¡No deberías estar preguntando eso! – lo reprendió su hijo.
– Esta bien – Li – respondiendo a la pregunta... aún sigo soltero y aun no tengo planes de casarme por el momento – tratando de responder lo más formal posible.
Ante aquella pregunta el hombre sonrió ampliamente y su mano en el hombro de su hijo.
– ¡Excelente, aún tengo una oportunidad para que te vuelvas mi yerno!
– ¡Papá! – nuevamente Tang Yue con las mejillas sonrojadas.
– ¡¿Qué?! Es natural que piense en ello, sobre todo porque tú y A–Li son destinados.
Aquella palabra resonó en la cabeza de Jin Ling, como si un balde de agua fría hubiese caído sobre su cabeza e hiciera que los viejos recuerdos acerca de lo vivido con Sizhui aparecieran en su mente.
– ¿Destinados? – Jin Ling, como intentando que le confirmaran algo que no había escuchado bien.
El viejo Tang se giró para verlo y asintió.
– Mi hijo y A–Li son destinados – volvió a confirmar con gran orgullo – espero con mucha impaciencia el día en que ambos finalmente acepten su destino y se casen. Asi todos seremos de la misma familia - últimas palabras con un tono de voz que a Jin Ling, aunque por el impacto de las mismas no le dio importancia.
– Papá – lo Tang Yue – te he dicho miles de veces que no lo presiones de esa forma – le aseguró – tanto A– Li como yo decidimos solo ser amigos.
Ante aquellas declaraciones Jin Ling solo pudo contener el aliento, sintiendo como su corazón palpitaba rápidamente por todo lo dicho.
Por su parte, Li Wang lo observaba de reojo, notando la clara tensión en el cuerpo del mismo, razón por la cual decidió intervenir para no tener un malentendido entre los presentes.
– Agradezco que me tenga en alta estima – Li – cualquier alfa estaría feliz de poder desposar a su hijo – con una sonrisa – conozco a Yue y se el valioso omega que es pero... Mi decisión sigue siendo la misma, ambos decidimos nuestros caminos y estos claramente no fueron los mismos.
– Pero A–Li... Ambos son destinados y... - intentando hacerle cambiar de idea.
– Papá – lo Tang Yue – A–Li tiene razón, ambos somos amigos y tomamos caminos diferentes – le aseguró a su padre – debes respetar esos deseos... Lo mejor es que vayas con mi madre, en seguida te alcanzo.
– Pero...
– Papá, por favor.
El hombre simplemente se le viendo a su hijo y la lengua, con algo de resistencia decidió despedirse de los presentes antes de girarse sobre sus talones, pidiéndole a su hijo que no tarde mucho y que debían hablar más tarde de ciertos temas que ya conocían, alejándose del lugar unos segundos después.
Tang Yue soltó el aire que estaba conteniendo cuando se que su padre finalmente se había ido.
– Lamento eso – les – me disculpo por lo de la situación – haciendo una reverencia a modo de disculpa.
– No te preocupes – respondió rápidamente Li – el señor Tang siempre ha sido así de... Persuasivo así que, no es algo de lo que debas disculparte.
– Aun así, volveré a hablar con él, para que no siga presionando en algo que... No sucederá.
Li Wang una suave sonrisa en su rostro antes de regresar a ver de reojo a Jin Ling, notando por la ligera filtración de su aroma que este estaba molesto y algo incómodo por lo que, creyó que lo mejor era volver a la mansión.
– Se está haciendo tarde y debemos volver a la mansión – tomando las bolsas que estaban sobre una de las mesas del pequeño local – Ranran está esperando estos ingredientes.
– Oh, entonces no te sigo deteniendo más tiempo – sonrojándose suavemente – espero podamos vernos otros día y hablar con más calma.
– Claro.
– Me dio gusto conocerlo joven maestro Rulan.
– Igualmente – respondió Jin Ling con algo de incomodidad.
– Te veo después.
– Te estaré esperando.
Jin Ling al no poder soportarlo más, simplemente comenzó a alejarse del lugar, retomando el camino que llevaba de vuelta a la mansión sin importarle si Li Wang lo seguía o no.
Al ver como el omega se alejaba, Li Wang se despidió rápidamente de su viejo amigo y comenzó a correr detrás del primero.
Sin percatarse como el rostro de Tang Yue se contorsionaba por la que le ver a su destinado a lado de otro omega.
Una vez llegaron a la mansión, todos los presentes notaron lo incómodo y pesado que estaba el ambiente entre ambos jóvenes, sobre todo cuando fueron recibidos y Jin Ling se negaba a regresar a ver al alfa.
– ¿Joven maestro? – preguntó Xiang Ling, un tanto dudosa dada la incómoda situación.
– Aquí tienes – le respondió Li, entregándole las bolsas con los ingredientes faltantes.
– Gracias – indicó.
Ninguno de los presentes sabía que decir o hacer para cambiar el ambiente, ya que no tenían idea de lo que había sucedido entre ambos jóvenes mientras estaban en el puerto.
Solo cuando Jin Ling tomó la palabra fue que el ambiente cambió
– Me siento algo cansado – habló sin regresar a ver nadie en particular – ¿podrían indicarme la habitación que usaré?
– Claro... – respondió Xiang Ling, regresando a ver a Ranran.
La mujer mayor solo asintió y tomó las bolsas, dejando que Xiang Ling escoltara al joven omega a sus aposentos.
– Jin Ling... – lo llamó Li Wang, haciendo que este se detuviera más, no lo regresó a ver – espero puedas acompañarnos a cenar e ir con nosotros al festival.
El omega no le respondió y solo se giró para verlo unos segundos antes de volver la vista al frente y continuar su camino hacia sus aposentos, dejando solos a Li Wang y Ranran solo en la entrada de la mansión.
La mujer mayor suspiró al ver la extraña situación.
– Joven amo, ¿puedo preguntar qué sucedió? – Finalmente preguntó – cuando salieron de la mansión estaban en buenos términos, ¿discutieron durante su recurrido?
Li Wang hizo una mueca y se cruzó de brazos.
– Sinceramente... No tengo idea.
Ranran enarcó una ceja como desconfiando en la palabra de su joven maestro.
– ¡Es la verdad! – Exclamó el alfa al notar la desconfianza de su nana – no tengo idea de que pasó
– ¿Está seguro de ello? – volvió a preguntar.
– Si... – dijo con algo de duda – no pasó nada que pudiera molestarlo, solo recorrimos el puerto y...
– ¿...?
– Nos encontramos con Yue y su padre.
La anciana amplió un poco sus ojos antes de soltar un suave suspiró, comprendiendo un poco el por qué el joven Jin Ling había actuado de esa forma al llegar.
– De casualidad el viejo Tang no comenzó a hablar nuevamente acerca de su posible unión con su hijo o ¿sí?
– ....
– Ahora entiendo – la anciana soltó un largo suspiró – los alfas nunca se dan cuenta.
– ...
– Ahora entiendo al joven Rulan – negando con su cabeza.
– ¿Lo entiendes? – preguntó Li bastante confundido.
– Es evidente.
– Pues yo no lo entiendo... Entonces, ¿Por qué se molestó Jin Ling?
– Alfas – susurró la anciana – es mejor que vaya al estudio, el maestro Dong Hua lo está esperando para que termine el trabajo pendiente.
– Pero... Sobre Jin Ling...
– A menos que desee ir al festival, es mejor que lo haga, dudo que el maestro Dong Hua le permita ir si tiene trabajo sin terminar.
Fueron las últimas palabras de la mujer mayor, antes de hacer una reverencia e irse con dirección a las cocinas, dejando aún muy confundido Li Wang quien, no tuvo otra opción más que ir al estudio y terminar el trabajo pendiente.
"Mi hijo y A–Li son destinados... Espero con mucha impaciencia el día en que ambos finalmente acepten su destino y se casen"
Aquellas palabras seguían haciendo eco dentro de la mente de Jin Ling, quien no podía conciliar un poco de sueño debido a las mismas.
No entendía que le pasaba, el simple hecho de recordar el rostro de aquel omega y las palabras de su padre, hacía que su pecho se oprimiera con fuerza, robándole el aliento y emitiendo un extraño sentimiento que le transmitía unas intensas ganas de llorar.
¿Por qué se sentía de ese modo?
Él no sentía más que amistad por Li Wang, ¿Por qué debía afectarle el que su destinado apareciera?
Quizás le estaba afectando por todo lo que había vivido hace pocos meses respecto a ese mismo hecho, aun cuando superó la confusión de sus sentimientos a cerca de Sizhui, la melancolía y frustración causadas aún estaban dentro de él y, encontrarse con otra pareja de destinados...
Posiblemente solo estaba sintiendo el remordimiento provocado por todos sus errores.
– Me pregunto... ¿Qué siento por él? – Se preguntó abrazando con fuerza la almohada – Jingyi... ¿Asi te sentías cuando descubriste que yo era el destinado de Sizhui?
Sin dejar de abrazar la almohada, metió su mano dentro de su túnica y sacó el dije que su tío Wei le había dejado, observándolo fijamente, mientras las palabras de este último volvían a su mente.
"Solo nosotros mismos podemos saber si los estamos confundiendo... Lo más fácil es dejarnos llevar sin ponernos a pensar en ello pero, lo realmente difícil es mirarnos frente al espejo y definir con exactitud que sentimos..."
Las palabras se repetían una y otra vez dentro de su cabeza, tratando de descifrar que sentía realmente, el por qué al ver a aquel omega su humor cambió y sintió la imperiosa necesidad de tomar la mano de Li Wang para alejarlo de él.
– Li... ¿Qué siento por ti?
つづく / Continuara...
¿Hola lectores?, ¿Me extrañaron?
Yo sé que si jajaja
¿Qué les pareció esta primera parte?
En un inicio iba a ser un especial corto pero, a medida de que fui escribiendo se fue haciendo más y más largo... Tuve que partirlo en dos partes por que iba a ser mucho.
Como pudieron notar este especial está enfocado en Jin Ling y Li Wang, se desarrolla semanas antes de que sea la ceremonia de presentación de los mellizos.
Asi mismo, debo añadir que corregí dos escenas del capítulo final, más específicamente cuando Jin Ling explica su visita a la provincia de Jin Ling y donde Wei Ying habla con su hermano.
No dejo preguntas por que en el próximo se responderán.
Sin más por decir, muchas gracias por seguir aquí y esperar todos estos meses por este extra.
¡Los amo!
Nos vemos.