Está es la razón por la que nunca te tienes que detener mientras manejas en la noche
En el año 2000 un hombre manejaba por una carretera de Arizona.
Eran alrededor de las 11:00 pm, y había mucha niebla por toda la carretera.
Las luces delanteras del auto solo dejaban ver unos pocos pies de distancia por tanta niebla que había.
Cuando entonces en pleno camino se topo con una chica como de unos 14 años completamente vestida de blanco.
Aunque la chica se mantenía inmóvil el pensó que estaba pidiendo un aventón algún lugar.
La esa carretera era peligrosa esas horas así que le dijo que subiera al auto, que el la ayudaría.
La chica sin decir una palabra subió al asiento trasero del vehículo.
A mitad del camino el hombre quiso entablar una conversación con la chica pero en vano porque la chica no movió la boca en ningún segundo.
Hasta que en tramo la chica le dijo al chico
—Cuidado con la curva, allí morí yo—
El hombre pensando que era una broma se voltea para mirar a la chica pero al hacerlo se da cuenta que la chica ya no estaba allí.
Al voltear al frente asustado y sin poder controlar el auto a causa de los nervios, no pudo desvíar la curva.
Muriendo al instante.