# ;; 𝓑 𝓮 𝓼 𝓸 𝓼 𝓰 𝓻 �...

By KaruleKun

30.3K 1.8K 3K

" Edit porque ya estoy un poco harta de los comentarios fuera de lugar: Esta historia es en su mayoría (por n... More

💌🏷️Aclaraciones 📨
💌🏷️ Prólogo 📨
💌🏷️ Byron : 01 📨 [🍵]
💌🏷️Sandy : 02 📨 [🌌]
💌🏷️El primo : 03 📨 [🌮]
💌🏷️ Jacky : 04 📨 [💥]
💌🏷️ Colt : 05 📨 [❤️]
Lean esto antes de seguir con la historia.
💌🏷️𝔹𝕦𝕝𝕝 : 06 📨 [🐃]
💌🏷️ Leon : 07 📨 1/? [🍭]
💌🏷️ Leon : 09 📨 2/2 [🍭]

💌🏷️ Sandy : 08 📨 2/? [🌌]

1.8K 129 282
By KaruleKun

🏷️

Edgar caminaba en dirección a su vivienda, pues como había dicho, tenía que ordenar un poco si no quería pasar vergüenza.

Hace unos momentos le había mandado la dirección a la peli-rosa junto con la hora en la que podían ir, recibiendo de respuesta un emoticón de un robot pirata levantando el pulgar en señal de aprobación.

Mentiría si dijera que a mitad del camino no se estaba arrepintiendo de la idea de dejar dormir a dos personas -casi extrañas- en su casa. La única persona con la que tenía tanta confianza solo era Colette, y eso que hasta a veces la sacaba de su casa a rastras por quedarse demasiado tiempo dentro.

Pero ahí estaba, a unas cuantas calles de llegar a su destino. Ni siquiera sabía muy bien que cosa debía hacer en reuniones así.

Cuando Colette dormía en su casa se tragaba toda la comida, Andaba todo el día en pijama y utilizaba cualquier cosa sin su permiso.

¿Acaso sería lo mismo con Penny y Leon?
De solo pensarlo se le tensaba todo el cuerpo.

Unos momentos después, ya estaba al frente de su casa con cara malhumorada, insertó sus llaves y abrió la puerta, ingresando a su dulce y cómodo hogar.

Lo primero que hizo fue quitarse algo de ropa, quedando solo en boxers y su polo negro, luego optó por tirarse en su cama, descansando un poco del pesado día que había tenido.

Después de todo aún tenía mucho tiempo antes de que ambos vinieran.

Se volteó quedando boca arriba sacando su celular, no se sorprendió al ver que tenía un montón de mensajes de su loca amiga, solo los abrió y suspiró.

Los mensajes en resumen solo eran de ella preguntando dónde se había metido, o que si estaba haciendo cosas indebidas con el camaleón.

Edgar rió, en un caso cualquiera solo habría ignorado los mensajes pero en estos momentos necesitaba ayuda para no quedar mal en su primera reunión social.

Decidido marcó el número de la albina y la llamó, esperando muy poco tiempo pues a los segundos su amiga ya había contestado, como siempre.

- ¡EDGARSITO! - Gritó Colette desde la otra línea. - Lo chapaste verdad? Cuéntamelo todo! - Chilló de emoción.

- No pasó nada, deja de imaginarte cosas raras. - Respondió rodando los ojos. - Pero necesito que me ayudes con algo. - Continuó. - Cuando viene gente a dormir a tu casa estás obligado a darles de comer? - Preguntó directo, ya se estaba avergonzando de preguntárselo.

Hubo unos cuantos segundos de silencio hasta que la cromática respondió alterada.

- LO INVITASTE A DORMIR A TU CASA? - gritó con un tono entre emocionado y asombrado.- TE PILLÉ LO QUE QUIERES HACER, ERES UN PUERCO. - siguió gritando ahora más feliz.

- Dejá de gritar! - Respondió el azabache aturdido por el repentino grito de su amiga. - Deja de imaginarte cosas raras, solo necesito saber lo que te pregunté y...- pero Colette lo interrumpió.

- VAMOS ENSEGUIDA! - Gritó la albina desde la otra línea y cortó.

Edgar se quedó unos cuantos segundos procesando lo que acababa de escuchar, ella le había dicho que vendría? Y más importante, había dicho "VAMOS"? Ella y quién más?

Se levantó de su cama un poco asustado, ¿Y si a Penny y a Leon les incomodaba la presencia de Colette?

Un extraño sentimiento de culpa lo invadió tras pensar eso de su amiga, dió un suspiro largo y se dió un zape mental.

Volvió a revisar su móvil y le anticipó a la peli-rosa que vendría una amiga suya.

Se dirigió al refrigerador revisando la cantidad de comida que había, dándose cuenta que solo quedaban dos fideos instantáneos y una que otra pequeña botella de alcohol.

Suspiró, recordando el motivo por el que estuvo casi toda la mañana en ese hospital, aunque aún no se haya visto a sí mismo él sentía las vendas bajo su ropa a causa de los moretones que tenía.

"Ojalá le toque una Oreo sin relleno" maldijo, recordando los insultos que le lanzaba su amiga cuando estaba enojada con él.

Unos golpes fuertes lo despertaron de sus pensamientos.

- ¡EDGARSITO! - Lo llamó su amiga desde el otro lado de la puerta.

Edgar cerró su refrigerador y se dirigió a la entrada de su hogar, ni siquiera se molestó en ponerse algo, tenía la suficiente confianza con la albina.

Agarró la perilla y abrió la puerta.

- Antes de que digas tus estupideces necesito ayuda con ...- El azabache se detuvo en seco, vió a Colette con algo en las manos y a su lado, ni nada más ni nada menos que Sandy, quien lo miraba de pies a cabeza dándose cuenta de la ropa que traía.

Fueron unos cuentos segundos los que tardó el de prendas negras en reaccionar y cerrar la puerta de un manotazo, haciéndola sonar por todo su hogar.

Llevó una de sus muñecas a su boca, recargandose en la pared al sentir que se caía.

Así se siente querer que la tierra se lo trague.

Tragándose su orgullo por la mitad, se puso un pantalón medio holgado, y por encima una chompa que le cubriera los brazos.

Regresó a la puerta y dando unos cuentos respiros la abrió aún algo ruborizado de lo terrible que se sentía.

- EDGARSITO! - Gritó Colette adentrándose a la casa pasando por el de flequillo sin pedir ningún tipo de permiso e ignorando la penosa situación anterior.

- Hola Edgar. - Saludó el de pelo morado, sonriéndole un poco avergonzado.

- Hola...- Devolvió el saludo el de calidad épica, rascándose el cuello.

Hubo un silenció incómodo después del pequeño saludo que se dieron, Edgar miraba para todos lados pues le costaba ver de frente al contrario.

- Puedo pasar? - Preguntó bajito el legendario, ahora observando la chompa que traía el de flequillo.

- Ah, si, si. Lo siento, estoy acostumbrado a que entren sin permiso. - Aclaró, haciéndose a un lado de la entrada dejándolo pasar.

- EDDIE CUÉNTAMELO TODO - Gritó Colette regresando de la habitación del mismo con su celular en manos.

- Deja de gritar. - Reprochó el mayor. - Ya te lo dije no pasó nada, dejemos el tema hasta ahí. - Siguió, con una expresión un poco molesta.

- Quiénes más vendrán a dormir? - Preguntó Sandy desde dónde estaba, dejando las bolsas que había traído con Colette encima de una mesa, junto con su mochila.

Edgar se quedó procesando lo que había escuchado, ¿Sandy también se quedará?

- Leon y Penny. - Respondió la albina por el de flequillo, revisando la conversación que tuvo su amigo con la pirata.

- Leon? - Preguntó extrañado Sandy, pero no le tomó mucha importancia.

- Sip sip sip. Y SE DARÁN MUCHOS BE- Edgar le tapó la boca, evitando que termine su oración.

- Yo no haré nada, te dije que dejarás el tema de lado.- Increpó el mayor, avergonzado de que hablara de eso frente al de prendas moradas.

- Bueno.. - Respondió bajito la estrella.

- Y bien... En qué necesitas ayuda Edgarsito? - Preguntó la cromática emocionada, retirando la mano de su amigo.

- Eh.. Solo necesito saber si es que se necesita comida.

- Qué clase de pregunta es esa? Por supuesto que sí! Y no te preocupes, Con Sandy compramos unas cuentas botellas de alcohol para pasar la noche. - Soltó emocionada, mientras dejaba su bolsa al lado de la de Sandy, dejando ver en su interior botellas llenas de la sustancia dicha y una que otra cosa para comer.

Edgar se quedó callado, literalmente esta misma mañana se había prometido a si mismo no volver a tocar la bebida en un tiempo, y muy a parte de eso, estaba seguro que Leon era menor.

Pero como negarse en ese momento? Sandy lo veía con una expresión calmada y emocionada. Eso era suficiente para no negarse.

- Está bien.. - Soltó derrotado. - Entonces... Colette, toma. - Le pasó una escoba. - Mi casa siempre está desordenada por qué siempre agarras todo y no guardas nada. Yo iré a intentar cocinar algo.

- Sabes cocinar? - Preguntó el pelimorado, acercándose al azabache. - Puedo ayudar?

- Si quieres, por mi normal. - Respondió ocultando la leve emoción que tenía en ese momento.

- Edgarsito no cocina casi nunca, pero las pocas veces que me robé comida preparada por él sabían exquisito, no parece por la cara de qlo que tiene pero se le da demasiado bien! - Dijo con alegría la albina, abrazando la escoba con emoción.

- No digas tonterías. - Habló el de flequillo, un poco avergonzado por el halago.

- Ahora tengo ganas de probar algo tuyo. - Respondió Sandy con una expresión feliz, seguido de un bostezo que no pudo contener.

Edgar solo se avergonzó ante lo dicho y se dirigió a su cocina, Seguido del dormilón.

El tiempo transcurrió normal, ambos hablaban calmados de diversos temas que les interesaba, estaban cómodos.

Mientras tanto Colette estaba de Cenicienta limpiando lo que podía, deteniéndose una que otra vez para olfatear el aroma que provenía del lugar donde estaban preparando los aperitivos.

En algún momento la albina puso música alta de amores fallidos, gritando una que otra vez por Spike con la cara llena de lágrimas dramáticas.

- Creo que tomó un poco de camino aquí.- Río el legendario, escuchando desde dónde estaba el cantar de Colette.

- Nah, siempre actúa así, en unos momentos se le pasará y armará un plan para secuestrar a su "alma gemela" según ella. - Río también, deteniéndose a picar un poco del pollo que había cortado.

- Pobre Spike. - Siguió riendo el pelimorado, ahora observando de medio lado al azabache. - Por cierto... cómo te va con lo de la publicación? - Preguntó bajito, observando con atención las expresiones que cambiaban en la cara del mayor, sin que se diera cuenta, dando un suspiro inconsciente.

- Pues.. digamos que prefiero momentos como estos. No soy de andar por ahí haciendo "eso". - Respondió rascándose el cuello con una mano mientras que con la otra echaba sal a lo que preparaba.

- Entiendo... - respondió bajito.- Sabes, tu piel es como la leche.- Bromeó el menor, observando como a Edgar casi se le caía todo que traía en manos.

- Eh... La leche es fea. - Respondió confundido y avergonzado. - De todas formas Colette también me lo dijo, pero no le veo parecido en lo absoluto. - Ahora miraba su mano.

- La leche no es fea. - Río el pelimorado, ahora cambiando su expresión feliz a una un poco seria. - Colette y tú son... Algo más? - Preguntó, fijando su vista en una canasta llena de panes.

- Qué? - Soltó el azabache al escuchar la pregunta. - No. - Respondió rápido y directo, volviendo a fijar su mirada a la de Sandy, pero este no lo miraba. - La conocí en mi trabajo. Desde entonces no para de venir a mi casa o mandarme mensajes.- Respondió sincero, con una expresión relajada. A él no le molestaba en lo absoluto la presencia de la albina, e incluso agradecía tenerla como amiga cercana. - Muy a parte de eso, estoy seguro que entre yo y Spike ni lo pensaría dos veces en irse con él.

- POR QUÉ SPIKE NO ME AMA? - gritó de la nada Colette desde la sala, asustando a ambos chicos.

- Lo ves? - Río el azabache, acercándose al de calidad legendaria buscando que lo mire.

- Umh.. Si, entiendo. - Respondió. - También me consideras un amigo? - Preguntó, ahora devolviéndole la mirada.

Y si la situación no fuera lo suficientemente incómoda, de fondo de todo ese mar de sentimientos encontrados sonaban las canciones de amor que ponía la cromática a excesivo volumen.

- ... si? - Respondió casi preguntado a la vez, le tensaba mucho escuchar las letras de las canciones mientras hablaba con el contrario. - Digo, no nos conocemos mucho aún pero si no te considerara un amigo no dejaría que te quedes, no? - Preguntó ahora volteándose derrotado, se había dado demasiado trabajo a si mismo el articular las palabras.

- Leon y tú son amigos? - Respondió con otra pregunta.

Antes de que Edgar pudiese responder unos golpes a la puerta se hicieron presentes, La música se apagó de la nada mientras que Colette se asomaba por la puerta donde se encontraban ambos chicos.

- Edgarsito es Penny.- Río la cromática para después desaparecer por la misma puerta.

- Tan temprano?! - Preguntó en crisis el mayor, olvidándose de la pregunta anterior que le había dicho Sandy.

Rápidamente dejó lo que hacía y se fue directo a la entrada de su hogar, no entendía el por qué de venir 2 horas antes de lo acordado y por si no fuera poco sin avisar

Agarró la perilla y giró.

- Chico nuevo! - Gritó Penny apenas visualizó a Edgar. - DIOS, desde la esquina de e la calle huele realmente bien. - Habló emocionada, intentando ver detrás del mayor.

El azabache solo se hizo a un lado en señal de dejarle pasar, cosa que hizo la peli-rosa lo más rápido que pudo, trayendo en su espalda un pequeño robot.

- Te preguntarás por qué decidí venir tan temprano, verdad? - Preguntó con una sonrisa de oreja a oreja, deteniéndose en mitad de la sala. - Bueno, la respuesta es simple, como nuestro objetivo es chapar a nuestro querido camaleón ,pues, me puse a pensar que las cosas debían hacerse bien verdad? - Río, bajando un poco su espalda dejando ver aquel robot. - Él es Tick. A Darryl no le gustó la idea de quedarme a dormir en la casa de una persona que no conoce, así que me obligó a venir con esta máquina de la muerte. - Le daba leves caricias al robot, mientras que estaba soltaba sonidos extraños. - Y también lo utilizaremos como prueba de chapamiento.

- ... Qué? - Soltó Edgar al escuchar lo último, esperando que sea una broma.

- LEON Y TU CHAPARÁN LO SABÍA.- Gritó Colette llegando de la nada. Dando leves empujones al mayor esperando una respuesta.

- La loca es tú amiga que vendría? - Preguntó asombrada la pirata, notando la pesada mirada feliz de la cromática en ella.

- Edgarsito, Penny me conoce.- Susurró en chillido emocionado la albina mientras lo rodeaba con sus brazos y se reía al mismo tiempo.

- Esto sin duda es lo más extraño que veré. - volvió a reír. - Bueno, de todas formas me hablo con Leon así que estamos igual. En fin, veo que tú amiga está al tanto de nuestro plan, entonces, activemos la misión "Seducir al idiota adicto a la merca dulce".

- SII!! - Exclamó emocionada la albina, sacudiendo de un lugar a otro al azabache.

- No griten! - Levantó la voz el de prendas negras. Estaba preocupado de que Sandy escuchara todo ese tema extraño hasta para él.

Pero quizá su reacción fue demasiado tarde. Detrás de aquella pared que separaba la sala del comedor, el de calidad legendaria escuchaba apoyando su espalda en la misma, con una expresión decaída mientras jugaba con las mangas de la chompa que traía.

- Estamos en tu casa, por qué no podríamos hablar? - Preguntó la pirata cruzándose de brazos. - Por cierto, por qué hay tanta bebida? - Volvió a preguntar la peli-rosa dándose cuenta de la cantidad de alcohol que había en un lado de la sala.

- Pues para pasarla super bien! - Respondió Colette súper emocionada.

- Quieren emborracharlo para que sea más fácil? Pues entonces yo les ayudo con eso, con tal de que Shelly ni Colt se enteren estaremos bien! -

- Shelly y Colt? Pero, no se supone que ellos solo se hacen cargo de las ceremonias del lugar? - Interrogó la albina confundida.

- Eh, si, pero no es tanto por lo que digan ellos. Verán, si Shelly se entera es muy probable que se lo cuente al Señor Bo, y si él se entera entonces le haría daño a Leon de nuevo y...- Detuvo su explicación, con una expresión incómoda. - Olviden todo lo que acabo de decir, si? Si Leon se entera que ando contando sus problemas me matará. - Concluyó Penny rascándose la parte trasera de su cabello.

- Memoria olvidada! - Gritó la cromática alzando los brazos feliz.

Edgar solo se quedó pensando en lo que escuchó, en algún punto se dió cuenta que Penny le estaba acercando al robot en brazos, cosa que no rechazó.

El pequeño robot solo hacía ruidos inentendibles mientras que se ponía algo rojo. Parecía enojado.

- Creo que no le gusta que lo carguen..- Habló el azabache para después dejarlo en el suelo, siendo detenido por la pirata.

- Nop, él se pone así siempre, de echo, que se ponga rojo indica que quiere un chape contigo. - Bromeó, molestando a Tick mientras que este solo respondía con ruidos frustrados. - No te quejes, te dije que era esto o dejarte en un tacho de basura toda la noche.- Bufó la peli-rosa dándole golpes en la cabeza al lanzador.

- Puedo cargarlo yo? - Preguntó súper feliz la albina, dando leves saltitos.

- Ja, claro, pero antes Edgar debe darle un pico.

Los ruidos se sentían cada vez más frustrados.

- No creo que le guste la idea. - Afirmó el azabache observando como el robot ahora lo miraba enfadado.

- Nah. Tu dale nomás, no dirá nada, piensa que es Leon. - Río.

- Tampoco me gusta la idea.

- No mientas, bien que te lo quieres chapar.- Afirmó Penny quitándole al robot.- Déjame te ayudo. - Lo acercó de manera rápida a la cara del mayor, haciendo que retrocediera del susto.

- No! Es incómodo y raro! - Levantó la voz inconscientemente, alejando la cercanía con su mano.

- EDGAR NO GRITES.- Gritó la cromática para seguidamente meterle un golpe.

- Hiciste que Tick se sintiera mal. - Bufó molesta la pelirosa mientras fruncía el seño.

- Ah.. lo siento? Había dicho que no, no entiendo por qué se enojan. - Respondió un poco ofendido el de prendas negras.

Siguieron discutiendo un poco más, hasta que Sandy optó por salir de la cocina, un poco incómodo.

- Penny? - Preguntó el de calidad legendaria con su típica voz cansada, haciendo que la mencionada se volteara asustada.

- SANDY?! - Gritó la peli-rosa sorprendida.

- ... No, soy Gale.- Bromeó el pelimorado, ignorando la incomodidad que sentía.

Colette solo rió mientras se robaba a Tick de los brazos de la pirata, abrazándolo cariñosamente.

- QUÉ HACES ACÁ. - Volvió a preguntar ahora acercándose al contrario.

- Eh.. Colette me invitó.. - Contestó sintiéndose mal por pensar que no lo querían ahí, después de escuchar de lo que hablaban anteriormente su subconciente lo llenaba de malos pensamientos.

- Edgarsito y yo! - Corrigió la cromática sin detener el abrazo que le daba al pequeño robot.

Penny se volteó en dirección al mencionado, fulminandolo con la mirada.

Que parte de "Si ÉL asiste no tendría la atención de Leon" no entendió?

Penny solo rodó los ojos mientras agarraba su celular.

- Edgar, creo que se está quemando la comida ... - Habló despacito el adormilado.

El azabache solo corrió rápido hacia su cocina maldiciendose internamente, siendo seguido por Sandy.

Cuando el de prendas negras llegó, se sorprendió de ver qué todo estaba completamente intacto, no se quemaba nada y no había problemas en ningún lado. Un poco confundido se volteó extrañado, encontrándose con el adormilado cerrando la puerta del cuarto donde se encontraban.

- Sandy? - lo llamó el azabache, queriendo encontrar una explicación.

- Eh .. ya sé, lo siento.- Se disculpó inmediatamente. - Es solo que... Me estaba empezando a sentir algo incómodo ahí...- Explicó bajito mientras se alejaba de la puerta cerrada y se apoyaba en una pared cercana, dejándose caer hasta quedar sentado en el suelo.

- Incómodo? - Preguntó con un tono un poco preocupado pero ocultandolo, repitiendo la misma acción que el contrario y sentándose a su lado.

- Si.. bueno, es difícil de explicar, últimamente me siento... Raro... - Confesó, observando sus manos como si fueran lo más entretenido del mundo.

- ¿Raro? ¿Te sientes bien? ¿Te duele algo? ¿Estás enfermo? - Lanzó varias preguntas inconscientemente, llamando la atención del de menor estatura.

Este rió, pero no estruendosamente cómo se reía Colette o cualquier otra persona, su risa era calmada y bajita, algo que le gustó mucho a Edgar inconscientemente.

Hubo un pequeño silencio cómodo entre ambos.

- Si... Me siento raro... - Reafirmó lo antes dicho ahora mirando al azabache a los ojos, avergonzandose un poco.

Edgar se quedó devolviéndole la mirada con un poco de pánico y vergüenza. ¿Era él o era una especie de indirecta? No quería afirmar ni confirmar nada por el solo, pero, la forma en que lo miraba... ¿Cuánto tiempo se quedaron observándose uno al otro?

Todo era tan confuso...

¿Cuando fue el momento en el que se comenzaron a besar?

Si. Besar.

Simplemente Sandy se acercó al azabache de manera desprevenida, juntando sus labios con los ajenos mientras medio temblaba en el intento y a la vez su cara estaba toda roja de la vergüenza.

Desde la vez en que Edgar se quedó a dormir en su casa sus sentimientos se hicieron confusos con absolutamente todo, incluso, dejándolo sin poder conciliar el sueño de solo pensar en lo mal que se sentía.

Pero ahora, con lo que acaba de suceder, se dió cuenta que quizá el de calidad épica le atraía un poco... Por no decir demasiado, pues, cada cosa de él le gustaba de manera en que ni el mismo entendía. Se sentía como si de la nada quisiera solo cerrar sus ojos con fuerza y ocultar su cara en su apreciada almohada, contándole todas las cosas que lo emocionaban del contrario.

Simplemente, el estar ahora besándolo y sentirlo tan cerca, era una sensación inexplicable para él. Nunca en su vida se arrepentiría de su acto.

Edgar, por su parte, le sorprendió mucho la acción del pelimorado, pero no lo rechazó, al contrario, el ambiente era casi perfecto para eso, y agradecía que Sandy diera el primer paso.

Hablar de cómo se sentía solo era un enredo, tantas cosas habían sucedido a lo largo de su llegada a este lugar que solo lo hacían sentir súper extraño y confuso consigo mismo.

Pero Sandy, Sandy... Quizá fue de las pocas personas que de verdad no se arrepiente de haber conocido por ese estúpido reto.

Desde su primera impresión al verlo, hasta ahora. Simplemente quizá no tenía ni idea de lo que su subconciente le decía, será que por fin se enamoró?

El beso se intensificó un poco, ahora Edgar tomo la iniciativa, inclinándose un poco hacia delante, haciendo caer un poco al pelimorado.

De fondo juraba que estaba escuchando la voz de Colette llamándolo, pero en ese momento no se encontraba disponible, era 1 millón de veces mejor estar ahí que allá.

Y tal y como fué su primera vez estando juntos, lo recostó sobre el suelo, de manera inconsciente.

Unos brazos lo rodearon alrededor del cuello, llenandolo de una calidez cómoda que amó.

El olor de Sandy se le quedaría pegado un buen rato, y olvidarlo tomaría demasiado, demasiado tiempo.

De la nada, ante las pequeñas caricias  inconscientes, un click resonó en toda la mente del azabache.

No sé estaba quemando nada. Ese era el problema, se había olvidado completamente que además de estar en el suelo tenían a Penny y a Colette afuera de la habitación. No había absolutamente nada de privacidad para ambos ni de chiste.

Se separó un poco, rompiendo la cercanía que tenían entre ambos.

Sandy abrió los ojos y lo observó con la cara ardiendo, un sentimiento de vergüenza lo golpeó de la nada, literalmente quería enterrar su cabeza en un hoyo y no salir nunca.

- P- Perdón.- Salió rápido de los labios del menor, acercando sus brazos a su cara, tapándose de inmediato.

Edgar estaba igual o casi peor que el contrario, odiaba y amaba no tener su bufanda puesta en esos momentos.

- ¿Por qué te disculpas? - Soltó un poco más calmado, saliendose de encima del pelimorado.

- E- Esto significa que... Te gustó?... - Preguntó completamente rojo y  con un poco de pánico que casi no se notaba por las ojeras.

Hubo un momento de silencio entre ambos chicos, uno que no duró mucho.

Golpes a la puerta cerrada de la habitación en la que estaban se hicieron presentes, asustando a ambos chicos.

- EDGAR, POR QUE XUXA NO ME RESPONDES QLO.- Gritó la albina desde el otro lado dando muchos golpes fuertes en la puerta.

- ¿¡Q- QUÉ?! - Gritó asustado y frustrado de forma inconsciente.

Se acercó a Sandy un poco apresurado, acercándole su mano para ayudarlo a levantarse, acción que el legendario no rechazó.

Seguidamente el azabache abrió la puerta, siendo casi derrumbado por la albina.

Colette lo miró como leyendo su mente, observando cada detalle de la habitación buscando pistas de lo que tanto hacia encerrado ahí, incomodando un poco al pelimorado.

- Algo se estaba quemando pero ya lo arregle, ahora ven y ayúdame con algo. - increpó el de calidad épica, jalando a su amiga fuera de la habitación.

Sandy se quedó quieto antes de reaccionar, de manera inconsciente se quedó pensando en lo que había pasado.

Una pequeña sonrisa se formó en su rostro, cerró sus ojos dando un pequeño suspiro y se retiró de la habitación feliz y contento.

- Andas muy sonriente. - Apareció Penny de la nada delante del adormilado, con una expresión de duda y confusión.

- Nada. - respondió rápido y avergonzado, evitando la mirada de la peli-rosa. - Voy a buscar el baño. -

Penny se quedó dudosa con la respuesta, algo no andaba bien y eso la estaba poniendo ansiosa.

Algo instantáneo pasó por su mente que la hizo sentirse preocupada, pero lo descartó de inmediato.

Se olvidó del asunto y se dispuso a buscar a Tick hasta la hora donde llegaría Leon para así seguir el plan acordado con la albina.

—————

.

Hola!
Después de mucho tiempo, si.
Me quedé sin ideas.

Ya ni releí el capítulo, si hay algún error o si da cringe o está mal redactado pido perdón (?)

Quiero que esto tenga un final, así que por el momento quiero hacerlo rápido, el siguiente capítulo será con Leon y después empezarán los demás brawlers, ya tengo más o menos un final en mi cabeza, pero me gustará saber alguna opinión TT

Bueno, ahora me retiro, hasta una próxima actualización, espero sea pronto (?) De nuevo pido perdón por el cap.

Bais(?) 🦿

Continue Reading

You'll Also Like

157K 9K 24
Chiara se muda a Madrid en busca de nuevas oportunidades para lanzar su carrera como artista. Violeta se dedica al periodismo musical, trabajando en...
136K 11.4K 32
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...
79.8K 8.8K 14
Tras la victoria de Max en los X-Games Bradley se encarga de ser el chico de las toallas del equipo de patinaje de Max, ambos se ven forzados a iner...
380K 41.7K 81
✮ « 🏁✺ °🏆 « . *🏎 ⊹ ⋆🚥 * ⭑ ° 🏎 𝙛1 𝙭 𝙘𝙖𝙥𝙧𝙞𝙥𝙚𝙧𝙨𝙨𝙤𝙣 ✨ 𝙚𝙣𝙚𝙢𝙞𝙚𝙨 𝙩𝙤 𝙡𝙤𝙫𝙚𝙧𝙨 ¿Y si el mejor piloto de l...