❀ See you standing in your dress ❀
(Te veo de pie con tu vestido)
Fiorella se había percatado del poco ánimo que había tenido su maestro últimamente, no sonreía tan frecuente cómo lo hacía antes, o los animaba a cantar algo junto a él; ella se lo había comentado a sus padres, y estos pensaron que a lo mejor haya pasado algo entre él y Harry. Después de aquella discusión, ellos se habían apartado un poco, Harry se había quedado envuelto en el hospital y Louis ya no lo visitaba cómo lo hacía antes.
Fiorella tuvo una idea una mañana, le había pedido a uno de sus padres si podían conseguirle flores para llevárselas al maestro Lou ese día, les había parecido una idea hermosa, así que estos compraron las flores y se las dieron a la pequeña; Fiorella antes de entrar a clases, vio a su maestro sentando en su escritorio escribiendo unas cosas mientras atendía una llamada, la pequeña se percató que el maestro Lou había llorado.
– Ya les dije que estoy bien, ¿cuál es la necesidad de hacerme esto? – Escuchó, y no quiso interrumpir – ¿Creen que me importa? Ese estúpido me dejó en el hospital... – Hizo una pausa – No pienso decir nada para que salga, ¿Qué creen que pasara cuando eso pase?... estoy feliz ahora, o al menos eso intento porque ustedes no me dejan. – Murmuró – Harry es una buena persona, sabe lo quebrantado que estoy y aún así me ama... ¿cómo te atreves a decirme eso? Ustedes no lo conocen, él no mentiría, ustedes son unos...
– ¿Maestro Lou?
Lo llamó Fiorella preocupada, Louis detuvo lo que hacía y apartó el celular de su oreja; este limpió sus ojos y sonrió levantándose para darle la bienvenida a la pequeña.
– Fio, es muy temprano ¿Qué haces ahí con esas flores?
– Les pedí a mis papás si podían conseguirme estas flores para usted, no sonreía como lo hace todo el tiempo y ellos pensaron que sería buena idea – Dijo la niña con cuidado; Louis sintió una pequeña punzada en el pecho –, ¿mi tío Harry lo hizo llorar?
– Louis negó de inmediato acercándose a Fiorella; este se arrodilló para estar del tamaño de la niña – Tu tío sólo me hace llorar con sus malos chistes; hay veces que necesitamos llorar para sentirnos mejor. Cuando te caes, raspas tus rodillas, lloras porque estas asustada ¿no? – Fiorella asintió – Luego te sientes mejor cuando una persona te ayuda a limpiar las heridas y te dice que estarás bien...pero, aún sientes miedo de volver a ese lugar dónde te provocó las heridas ¿cierto?
– Cómo la primera vez en los columpios ¿recuerda? – Louis asintió con una sonrisa – Usted me ayudó a limpiar mis rodillas y mis manos, me dijo que estaría bien y fue a jugar conmigo para no tener miedo. En la escuela, usted es mi superhéroe maestro Lou y me gusta verlo sonreír, en mi casa son mis papás y en cualquier otra parte, es mi tío Harry... ¿mi tío Harry es su superhéroe en algún lugar?
– Tu tío es quien me acompañó de nuevo a los columpios cuando había tropezado una vez y tomó mi mano para decirme que todo estaría bien – Confesó Louis cayendo en la pequeña metáfora –; a veces soy un poco testarudo y prefiero quedarme en el piso, por eso lloro. – Limpió su rostro una vez más y suspiró – Pero no más lágrimas.
– ¿Ya no les teme a los columpios? – Preguntó Fiorella con una pequeña sonrisa.
– Sólo un poco, pero pude darme cuenta de que ya tengo quien sujete mi mano cuando caigo – Ambos sonrieron –; eres una buena niña Fio, eres hermosa he inteligente, tienes una familia que te ama y jamás debes olvidar eso ¿de acuerdo?
– ¿Su familia lo ama a usted? – Preguntó la niña sin saber la pequeña herida que había causado.
– Mi familia, son personas complicadas que aún no han tenido algo bonito en su vida, pero tu familia si lo consiguió y eso eres tú...
– ¿Y si le presto a mi familia? Bueno, ya tiene al tío Harry para usted. El tío Harry también ha estado triste, mi papá se preocupa por él, pronto mis papás tendrán una fiesta y el tío Harry dijo que a lo mejor iría – Hizo una pequeña pausa– ¿Usted irá con él? Así puede conocer mi casa.
– No lo sé, no hemos hablado mucho últimamente – Dijo cabizbajo –, pero ¿Qué tal esto? – La miró –, ponemos esas lindas flores en agua y esta tarde podemos hablar con tu papá Niall para salir y conversar un poco... tal vez entre los dos me ayuden hacer sonreír al tío Harry un poco más.
– Hecho.
Afirmó ella emocionada; una cosa que Louis amaba de los niños es que siempre había una forma simple de decirle las cosas con el cual ellos lograban entender un poco mejor las cosas y emociones. Sabía que Fiorella había entendido un poco la metáfora del columpio y pudo comprender que su maestro Louis solamente estaba lastimado.
– Me alegro mucho de que hayas querido hablar conmigo Louis – Dijo Niall con honestidad –, espero que no te haya molestado el atrevimiento de Fiorella con las flores, Harry nos contó de la vez que lo hizo y dijo que no tenías buena cara.
– Harry y tú se conocen mucho ¿no?
– Uff... no tienes idea, Harry y yo nos conocemos de toda una vida, crecimos juntos...
A la hora de la salida, Louis había hablado con Niall de su idea y a este le había parecido fabulosa; desde hace un tiempo, Niall había querido conversar con Louis en privado, pero no sabía cómo Louis se iba a sentir al respecto. Habían ido a comer, y Fiorella se entretenía con otros niños en la zona de juegos mientras ellos conversaban.
– Unos niños me molestaban en la escuela – Continuó Niall –, era nuevo, venía de otro país, Harry intentó hablar con la maestra para que los niños dejaran de molestarme y al final nos molestaban a los dos – Los dos no evitaron reír –; fue cuando conocimos a Zayn, pues los niños le tenían más respeto a él que a un pobre chico con rulos y ojos verdes.
– ¿Cuándo supiste lo enamorado que estabas por tu esposo? Perdón si es algo personal, Harry me ha contado unas cosas y pienso que ustedes tienen una bonita historia, además de la manera en la que es Fiorella, sólo me da más la razón. – Admitió Louis y Niall sonrió.
– Zayn y yo éramos polos opuestos – Comenzó Niall –, no era alguien de abrir su corazón al primer extraño, pero siempre cuidó de nosotros en la escuela y en la vida tal vez, Harry me molestaba diciendo que Zayn estaba enamorado de mí y yo lo negaba ya que él jamás daba un indicio de eso... – Niall sonrió ante el recuerdo –, pero una vez, de la manera más simple, fue una tarde a mi casa hablar con mis padres diciéndole lo que sentía por mí, que tal vez éramos unos niños, pero les dijo que no se imaginaba pasar una tarde sin mí. Mis padres lo amaron desde el principio, y creo que esa fue mi señal y una vez me lo dije, esa persona era para mí y por lo que me dijeron, yo lo era para él.
Louis no pudo evitar que sus ojos se cristalizaran, jamás pensó conocer una historia de amor tan hermosa cómo esa, pero tal vez le dolía un poco ya que, en su juventud, nadie lo había amado de esa manera, ni siquiera sus padres.
– No llores – Le pidió Niall –, eso será parte de mis votos en nuestro aniversario. No quiero hacerte sentir inferior Louis, Harry me contado por encima lo que has pasado, y puedes pensar que la vida no es justa para todos, aunque no lo creas, sí lo es, sólo que no todos pueden tener su momento perfecto al mismo tiempo que otros; cada uno merece su momento, uno que sea especial y único. Míralo de esta manera, encontraste al amor de tu vida en la escuela, ahora mismo los dos estuviésemos contando la misma historia y eso no es entretenido; tu por tu parte, tienes experiencias que yo no he vivido, y que me puedes contar para aprender de ellas. Sería lindo que pudiese verlo de esa manera.
– ¿Puedo contarte un secreto? – Niall asintió – Yo pensé que había conocido a esa persona, pero todo resulta que no fue así, mis padres querían que me casará con él sólo por un común acuerdo; incluso esta mañana, fueron capaces de llamarme para que retirara la denuncia así el pudiese perdonarme y casarse conmigo por que mis padres dicen que soy un fracasado. No creen en lo que siento por ahí, y son ellos lo que me han estado poniendo inseguro de mis sentimientos, yo quisiera tener esa señal que me diga que Harry es la persona para mí.
– Y la tendrás Louis – Le dijo animándolo –, eres una persona increíble, mira lo que haces con esos niños cada día... si tuviese una idea de lo mucho que te adoran, Fiorella quería casarse contigo antes de que supiera que le gustabas a su tío – Louis no evitó sonreír –; escucha, Harry nunca fue bueno con sus relaciones, más cuando comenzó a trabajar, ninguna lo animaba a llegar temprano a casa. Espero que entiendas que contigo fue diferente, que puede que estemos hecho mil pedazos, pero no podemos esperar que otra persona venga a unirlos todos para que estar mejor, ese es un trabajo de dos; ayuda a Harry a que te sane, sé honesto y háblale de lo que sientes y cómo entre los dos pueden ayudarse. Mi aniversario será una fiesta de blanco y negro, realmente espero que estés allí.
Era una bonita fiesta, Harry no lo podía negar, nunca había visto a sus amigos tan felices cómo lo estaban esa noche, incluso Fiorella se veía hermosa con su vestido en tonos grises haciendo una hermosa referencia de lo que se había convertido el amor de sus padres. Harry estaba en una esquina tomando de su copa, estaba cansado, había tenido un turno casi toda la noche y mañana, realmente lo que único que quería ir a casa.
Fue en un momento en cual había perdido a Fiorella de su vista, cuando la encontró corriendo hacía al recibidor del hogar cayendo en los brazos de alguien quien recién había llegado; Harry pudo ver desde su lugar cuando esa persona se incorporó de nuevo después abrazar a Fiorella, Louis había llegado a la fiesta y vestido de blanco.
El aliento de Harry había abandonado su cuerpo, Louis no podía verse más angelical de lo que lucía ahora; Louis lo había visto, y lo había saludado, fue Fiorella quien la tomó de la mano y prácticamente lo jaló hasta donde se encontraba Harry.
– Ahora los dos están completos – Comentó la niña –, es una fiesta en blanco y negro, no blanco o negro; ¿sabes que ayudamos al maestro Louis a conseguir su ropa? Se ve muy bonito, maestro Lou.
– Gracias Fiorella – Agradeció Louis –, tu luces igual de encantadora.
– Gracias – Dijo ella –, tío Harry me ayudó con el vestido.
– Louis – Se acercó Niall para saludarle –, te dije que lucirías increíble, no te olvides que estás en tu casa ¿de acuerdo? – Él asintió – Bueno Fio, ven conmigo para que me ayudes con los entremeses.
– Pero papá, estoy hablando con el maestro Lou...
– Fio, dije que vengas conmigo...
Su padre le dio una mirada y ella pudo entender; finalmente, Harry y Louis pudieron quedarse solos, era clara la poca tensión y nerviosismo que estaba en el ambiente para ambos, pero Harry realmente no podía callar lo que estaba pensando ahora mismo.
– No pensé que vendrías – Confesó –, realmente luces encantador.
– Gracias – Louis agradeció tímidamente –, el negro te sienta bien.
– Gracias, es el mismo que use para nuestra primera cita – Admitió; Louis cambió la mirada –; lo siento, por alguna razón me has puesto nervioso.
– ¿Yo te puse nervioso? Soy más pequeño que tú.
– Pero eres más encantador.
Louis cambio la cara con pena, pero luego volvió a mirarle.
– Sólo tu Harry Styles puedes hacer que un adulto cómo yo se sonroje.
– Me gustaría provocar más cosas en ti, Louis.
– Realmente me gustaría arreglar las cosas Harry, tú sólo has sido encantador conmigo y yo me he comportado indiferente contigo, y no te lo mereces. He hablado con personas muy interesantes y me han hecho comprender lo mágico que es estar contigo, siento que hayas tenido que toparte con una persona que no es capaz de sanar sus propias heridas...
– Y lo volvería hacer una y otra vez Louis, sólo déjame estar ahí. No puedo prometer que todos los días serán perfectos, pero si puedo prometerte estar ahí para ti aunque no te sientas seguro de quererme cerca... fui un tonto en alejarme, pero sentía miedo que de algún modo te estuviese lastimando.
Para su sorpresa, Louis se había acercado para abrazarle y Harry había aprovechado cada segundo para sentirlo cerca; no había mentido cuando dijo lo mucho que le había gustado Louis desde la primera vez que lo vio, aún cuando este intentó alejarlo por consecuencias de su pasado, Harry no había dudado en seguir esperando por él.
La fiesta fue hermosa, Niall no le había mentido a Louis en que iba a utilizar esa pequeña historia para la renovación de su esposo; Harry y Louis se habían sentado juntos mientras que tenían sus dedos entrelazados, pequeñas sonrisas se escapaban cuando se miraban y ninguno de los dos se habían sentido así antes en sus vidas.
Escuchaban la renovación de votos, mientras iban comprendiendo lo que el amor significaba para esas personas, lograban entender, que no todos eran amados de la misma manera, no todos eran amados en el mismo tiempo, pero aún así, al final siempre logran serlo; no importa que tan rotos estén, no importan lo cansados que puedan estar o lo poco que puedan creer, cuando el amor es real, se siente aún cuando se te haga difícil expresarlo o sentirlo.
– Entonces, ¿el anillo era para mí?
Comentó Niall ganándose las risas de sus amigos.
– Creo que por ahora estamos bien sin un anillo. – Comentó Louis mirando a Harry.
– Tiene razón, aún hay mucho en lo que tenemos que trabajar – Concordó Harry –, lo importante es que ahora trabajaremos juntos para los dos. Te quiero mucho, Lou.
Louis sonrió y besó a Harry en los labios