- Lose, lo que no se es porque mierda hablas con el -su miraba había cambiado a sería.
Si, eso el y Justin tenían iguales. Otra cosa.
— Me lo encontré en McDonald's ya sabes como es -murmure haciendo una mueca.
Mierda porfavor cree mis mentiras.
Prometo ya no decirlas.
Sólo hazlo.
Créeme.
— ¿Y que hacías ahi? -pregunto serio.
— Porfavor Derek -suspire.
— ¿Que? Te estoy preguntando
— Lose pero no preguntes algo que es demaciado obvio -mordi mi labio.
— ¿Demasiado obvio? -me miro mientras levantaba una ceja.
— Si amor, sólo fui a comer -me encoji de hombros.
— Confío en ti princesa -una sonrisa salió de sus labios.
— Gracias por hacerlo -suspire.
No lo merezco.
Mierda Derek.
¿Porque tenias que cambiar con tu hermano? ¿Porque?
— ¿Esta todo bien? -pregunto.
— ¿Ah? -lo mire- oh si -susurre mientras me sentaba en la cama.
— ¿Que pasa amor? -sus manos acariciaron mis mejillas.
Negué.
— Hey -susurro.
No podía mirarlo.
Me sentía muy mal.
El no se merecía esto.
— Háblame -susurro.
Me quedé callada, el también lo estaba.
Lo mire mientras el se incaba frente a mi en el piso y abría mis piernas para poder ponerse en medio de ellas, recosto su cabeza en mi pecho y me abrazo fuerte, sentía sus manos acariciaban mi espalda.
— Aveces quiero escapara sabes -hablo de repente.
— ¿Ah si? -pregunte y coloque mi mano en su nuca.
— si... -susurro.
— ¿Y porque no lo haces?
Mi mano se movía en su nuca lentamente acariciandolo.
— No podría vivir sin ti nena, si me voy te llevo conmigo -me miro.
¿Más lindo podía ser?
— Prefiero morir a estar sin ti mi amor -se fue acercando a mi hasta que sus labios y los míos se unieron.
— Que lindo mi amor pero no me podría ir, no quiero dejar a mi padre-susurre sobre sus labios mientras seguía besandolo.
— Lose nena... Quiero estar solos, juntos y sin nadie, tu y yo solamente -mordió levemente mi labio.
— Mi padre no me dejaría ir contigo -hise una mueca.
— Da igual, encontraremos una manera de estar juntos y solos -volvió a besarme.
Asenti siguiendo su beso nuevamente.
— Tengamos sexo duro ahora -sus labios bajaron a mi cuello.
Mierda, no podía tener sexo con el.
Me había acostado con Justin HOY en la mañana.
— Derek no... espera -susurre mientras trataba de alejarlo.
Una de las reglas estando con Derek era que si Derek estaba caliente, no se podía detener.
Nunca lo detuve porque me gustaba cuando haciamos el amor.
Nunca lo detuve porque nunca me había sentido culpable.
Jamás lo había engañado.
— ¿Que? -murmuró y me miro serio.
— Yo... ahora no tengo ganas -suspire.
— Mierda nena -bufo- no te e tocado en mucho tiempo y te necesito -sus manos acariciaban mis piernas.
— Lose amor créeme que lose -suspire y acaricie su mejilla.
— ¿Entonces? -se levantó y empezó a caminar de un lado a otro.
— Tranquilo amor -me levanté rápido y lo abraze.
— Lo siento -susurro y beso mi frente.
— Esta bien no importa -suspire.
— No... No quiero que pienses que sólo te quiero para eso, tú sabes que no es solo que -sus ojos se empezaban a cristalizar.
Y lo callé con un beso.
— No pienso eso, no lo pienso -susurre en sus labios.
— Pe...Pero -murmuró rápidamente.
— Cállate -coloque mis manos en sus mejillas y las apreté un poco, mientras negaba.
— Te amo -susurro y beso mis labios cortamente.
— Yo también amor -pegue mi frente con la suya.
— Se me ocurre una forma de poder estar juntos amor -escondió su cara en mi cuello.
— ¿Cuál? -pregunte mientras suspiraba.
— Casate conmigo -susurro.