最高 CORPORATION. DOMINGO. 10:30 a.m.
Quiero contratar sus servicios.
Soy Shoto Todoroki.
Hay una persona acosándome y me ha amenazado con dañar a mis cercanos.
০ He oído sobre tu caso.
০ Me interesa tu oferta.
০ Sin embargo, las tarifas de la corporación no son baratas.
No me importa, tengo como pagar todos los gastos.
০ Entonces discutiremos los términos de mi contrato por un lugar más privado.
০ [才子 ha enviado un enlace]
০ Un gusto hacer negocios contigo.
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Es lunes una vez más, pero Shoto por fin ha vuelto a sentirse seguro ya que tendrá a alguien cuidándole las espaldas mientras se encuentre fuera de su hogar. A medida que recorre los exteriores de la academia para dirigirse a la zona de casilleros, su persona recibe —de forma masiva— miradas poco discretas de disgusto, miedo y rechazo, incluyendo comentarios hirientes que tienen toda la intención de hacerlo sentir marginado, sin embargo, ninguno de los rumores le afecta porque sabe que es inocente y eso mantiene su consciencia tranquila.
Su expresión cambia cuando nota las manchas de barro que abarcan la madera del genkan escolar y los casilleros que comparten sección con el propio, por lo que suelta un pesado suspiro, esperando encontrar sus zapatos de interior completamente embarrados, no obstante, al abrir la pequeña puerta puede ver que su calzado brilla de lo limpio que está y, junto a ellos, una caja de bentō con una nota hace acto de presencia, robándose toda la atención del joven de orbes bicolores.
❝ Me desharé de todos los que intenten dañar tu reputación.
Te amo. ❞
Tiene la intención de arrugar el papel y tirarlo a la basura, sin embargo, aquella pequeña nota de color rosa es confiscada por una persona cuyos pasos ni siquiera fue capaz de detectar a tiempo, cosa que hace que su cuerpo se sobresalte y se coloque en una posición defensiva.
-Buenos días, Shoto Todoroki, soy Saiko Intelli- habla, intercambiando la nota por una tarjeta de presentación para así observar el contenido a contraluz. -Creo que podré revelar las huellas digitales... Bien, necesito que me hagas entrega de todo lo que haya tenido contacto directo con "Yume", no hay tiempo que perder-
Por el momento, Shoto sólo puede hacer entrega de la caja de almuerzo que fue dejado en su casillero y de su celular, esperando que este último pueda ser intervenido para descubrir la ubicación e identidad exacta de la persona que ha convertido su segundo año de preparatoria en un infierno. Él no es necesario durante la investigación de material que Saiko lleva a cabo, así que decide dirigirse a su salón, donde, al deslizar la puerta, su cuerpo choca contra Midoriya, cuyo estado físico enciende todas las alertas en su cabeza.
-Izuku, ¿Qué te ocurrió?- inquiere rápidamente y con preocupación al ver el vendaje que el pecoso lleva en la mejilla. -¿Alguien te hirió? No viniste el sábado, ¿Fue por esto?-
-Fue sólo un pequeño accidente, no tienes que preocuparte- asegura, sonriendo con ternura derivada del gesto del semi albino. -Puede que no lo parezca, pero realmente soy muy fuerte, así que no duele-
Todoroki esboza una sonrisa al mismo tiempo que hace el amago de llevar ambas manos hacia el rostro de su contrario, no obstante, su acción se ve interrumpida cuando un estudiante ajeno a su conversación decide acercarse, misma persona que luego le agarra del hombro y le da media vuelta a su cuerpo para así obligarlo a quedar frente a frente.
-Shoto- llama Katsuki, colocando su puño contra el pecho de su compañero. -Tú y yo en el parque a las tres cuarenta, ni un minuto más tarde, si no llegas te perseguiré hasta en tus sueños-
Y tan pronto como llegó, se fue, dejando a los jóvenes confundidos por su extraña forma de citar a Todoroki para tener una charla privada.
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Tres con treinta y ocho. Intelli ha colocado un pequeño micrófono al interior del bolsillo de la camisa de su cliente y ha preparado un equipo de inmovilización en caso de que a Katsuki se le ocurra intentar alguna maniobra que tenga como fin el producir daño.
Su compañero se encuentra sentado bajo el cerezo del parque, no obstante, se levanta de golpe al divisarlo, luciendo tan rígido que no parece la misma persona de siempre... Y eso asusta un poco a Shoto.
-Estoy aquí, ¿Qué quieres decirme?- pregunta, manteniendo una distancia considerable.
-¿Eres estúpido?- es lo primero que sale de sus labios. -Estamos bajo un cerezo, deberías hacerte una idea del porqué te cité-
-Bakugo, yo...-
-Escucha lo que tengo que decir antes de que me respondas- interrumpe.
Es la primera vez que Todoroki ve al joven de cabellera rubia actuar con duda y nerviosismo. Puede notar como su contrario pasa la palma de ambas manos por la tela de su pantalón repetitivamente y como su pie izquierdo zapatea suavemente la arena, evidenciando su estado emocional.
-Sé que nosotros no tenemos la mejor relación y es posible que yo te parezca insoportable...- comienza, evitando el contacto visual. -Intenté convencerme a mí mismo de que sólo somos compañeros porque estaba asustado de admitir mis sentimientos, pero después de hablar con un amigo me di cuenta de que no puedo seguir ocultándolo, así que escucha bien lo que diré- ordena, finalmente intercambiando una decidida mirada con el semi albino. -Me gustas mucho, así que me haría muy feliz que aceptes mis sentimientos-
Shoto se muestra afligido. Nunca podrá acostumbrarse a recibir confesiones que es incapaz de aceptar.
-No puedo corresponder tus sentimientos- contesta, apenado. -Sólo podemos ser amigos si así lo quieres, pero no pienses que rechazo tu confesión porque hay algo malo en ti- aclara. -Espero que puedas encontrar a alguien que aprecie y comparta el amor que deseas expresar-
-Te gusta Deku, ¿Verdad?- inquiere, pero no se detiene a escuchar la respuesta porque ya sabe cuál es. -Estoy realmente celoso, pero creo que puedo vivir con ello-
Ver a Katsuki retirarse del lugar con una expresión de tristeza coloca una gran sonrisa en los labios del acosador de Shoto, no obstante, su alegre mueca pronto es reemplazada por la ira, lamentablemente aún no puede desquitarse con Bakugo ya que él —a diferencia de sus víctimas anteriores— es un objetivo que fácilmente le supera en agilidad y fuerza bruta.
Su única opción vigente es desquitarse con Camie.
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Cinco con cincuenta, las actividades de los clubes escolares terminaron hace veinte minutos, pero en ningún momento ha visto a Utsushimi abandonar la academia. Quizás decidió irse temprano, arruinando así sus planes de venganza.
Al rastrear el móvil de la joven recibe una alerta que evidencia que ella se encuentra en el Jardín Koishikawa Kōrakuen, específicamente en una de las zonas más ocultas del perímetro. La residencia de Camie no se encuentra en esa dirección, sin embargo, no es una situación extraña ya que aquel jardín es un panorama relajante para estudiantes estresados.
Entonces una persona ajena a su más grande amor pasa por sus pensamientos.
Con su pie desliza el soporte de su moto y —tras encender el motor de la misma— se pone en marcha para dirigirse a la dirección que marca su móvil, tomando todos los atajos necesarios para así llegar a su destino en la menor cantidad de tiempo posible.
Al detenerse a las afueras del parque nota que este ya ha cerrado sus puertas, pero nada es imposible para su persona, además, necesita confirmar el terrible destino que ha sufrido su rival, escena que le toma aproximadamente seis minutos encontrar sólo para observar a un conocido devorar el cadáver de Utsushimi.
-Ah~ Mi hermosa Hime, que honor volver a verte después de tanto tiempo- canturrea, incorporándose al oír los conocidos pasos tras su espalda. Luego da media vuelta para intentar abrazar al acosador, quién rápidamente esquiva su gesto. -Sigues tan amorosa como siempre-
-No te emociones mucho, estoy aquí por ella- señala el cuerpo. -Aunque parece que ya te encargaste de mi problema-
-Puedo darte uno de sus brazos- ofrece mientras extiende la extremidad izquierda que estaba consumiendo. Entonces una idea pasa por la cabeza del acosador.
Con cuidado de no tocar al devorador —no por el hecho de que este puede arrancarle una extremidad de un mordisco, sino que para evitar mancharse con sangre— se acerca al cadáver para depositar a su lado una pequeña bolsita con pastillas que cargaba en uno de los bolsillos de su falda.
-¿Por qué querías manchar tus bellas manos con la sangre de esta muchacha?- inquiere, limpiando su rostro para quitar los pedazos de carne de su piel.
-Porque se metió con lo que es mío- responde con obviedad.
-¿Qué harás si te encuentran culpable? Estás aquí sin todo tu equipo de encubrimiento y posiblemente has dejado alguna huella- indica, tratando de infundir miedo en su acompañante.
-Eso no ocurrirá, tengo a quién culpar de todos mis crímenes, aunque creo que tienes un poco de razón, no puedo arriesgarlo aún- comenta, sonriendo de forma cínica. -He permitido que él se acerque para tener una coartada a mi favor, pero cuando ese día finalmente llegue, voy a despedazarlo hasta que no queden ni sus huesos-
-Estaré feliz de deshacerme de él por ti, cariño mío, me comeré hasta su médula para borrar todo rastro de su existencia-
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NÚMERO PRIVADO. LUNES. 09:02 p.m.
০ Amor, pronto será mi cumpleaños.
০ ¿Qué me regalarás?
০ Deja que adivine.
০ ¿Será un ramo de rosas? ¿Tal vez un osito de peluche?
০ ¿Tu cuerpo?
০ Oh, me estoy apresurando mucho (,,•﹏•,,)
০ Pero algún día pasará, ¿No es así?
০ No puedo dar a luz a nuestra hija si no lo hacemos.
✓✓ 12:00 a.m.
»◦✿◦«
No es Shinso al final, es que no sé dibujar el pelo de Katsuki ( ◞ ‸ ◟)