El lado oscuro del placer (Li...

Od Candikatt

174K 15.6K 913

Genave Stevens había comenzado con buen pie su carrera como abogada y las cosas entre Darla y ella habían com... Více

Prólogo
Capítulo 1. Maldita pesadilla
Capítulo 2. No es tan fácil
Capítulo 3. El poder
Capítulo 4. Arrastrarla al infierno
Capítulo 5. En la boca del lobo
Capítulo 6. Malas intenciones
Capítulo 7. Necesito escapar
Capítulo 8. Pagar con creces
Capítulo 9. Alimente sus deseos
Capítulo 10. Egoísta
Capítulo 11. La tormenta
Capítulo 13. El cazador y la presa
Capítulo 14. Ninguna otra
Capítulo 15. No me dejara ir
Capítulo 16. Pagar con sangre
Capítulo 17. Mi perdición
Capítulo 18. La jugada
Capítulo 19. Le pertenezco
Capítulo 20. Sobre mi cadáver
Capítulo 21. Volviendome loca
Capítulo 22. Inocencia y virginidad
Capítulo 23 ¿cuánto daño?
Capítulo 24. Sucia jugada
Capítulo 25. Preocuparme por nada
Capítulo 26. Corazón encadenado
Capítulo 27. No es quien dice ser
Capítulo 28. Decidir
Capítulo 29. Hoyo negro
Capítulo 30. Perdido por ella
Capítulo 31. El verdadero poder
Capítulo 32. Eliminar los obstáculos
Capítulo 33. Mentiras y traiciones
Capítulo 34. Camino a la muerte
Capítulo 35. Frío en el alma
Capítulo 36. La mujer que amo
Capítulo 37. Mi realidad
Capítulo 38. Algo se avecina
Capítulo 39. Su presencia
Capítulo 40. Respirar de nuevo
Capítulo 41. El hombre que mereces
Capítulo 42. Detrás de la máscara
Capítulo 43. Los muertos resucitan
Capítulo 44. Desenmascarar
Capítulo 45. Emiliano
Capítulo 46. Intermedio
Capítulo 47. Vino a salvarme
Capítulo 48. Mi oxigeno
Capítulo 49. Sin regreso
Capítulo 50. Niebla
Capítulo 51. Adiós
Capítulo 52. Su amor
Epílogo
Lo claro y oscuro del placer (Próximamente)
Disponible en papel

Capítulo 12. Destrucción y muerte

2.8K 285 13
Od Candikatt

Rubén 

Caminó con determinación sin mirar atrás y aquello me encolerizo. Jotrov me miraba fijamente y sabía que tenía muchas cosas que decir, pero aunque tuviese razón no iba a importarme, aquella mujer sacaba lo peor de mí, me hacía desearla y odiarla al mismo tiempo, eran tantos sentimientos que no me podía controlar y un hombre como yo debía tener el control absoluto sobre sí mismo.

— ¿Por qué insistes si sabes que va a terminar mal? —Levante la mirada y fije mis ojos en él —Tú no vas a dejar este mundo y ella no dejará el suyo, tienes que controlarte y tienes que dejarla ir —Como dije sabía que él tendría la razón, pero aún así seguía queriendo tenerla.

—No puedo dejarla ir y no sé porqué, la tengo aquí —dije señalando mi cabeza —clavada en mi mente y el maldito clavo no quiere salir, sé que es una maldita locura y daría todo por volver al tiempo en que ella creía que era un simple miembro de la policía Italiana —lo escuche reírse con ironía y sabía que tenía algo más que expresar.

—Lombardi no lo hubiese permitido, no hubiese dejado que su cuñada se viera envuelta en asuntos de mafiosos, si bien lo hizo por su esposa, también lo hizo por mantener su estatus —Alessio Lombardi era un hombre que no se tomaba las cosas a la ligera y luego de aquella noche en la que su mujer fue secuestrada sabía con certeza que le haría saber a Genave quien era yo.

— ¿Qué hay del asunto que te mande investigar? —pregunte cambiando radicalmente el tema, cosa que él captó de manera inmediata.

—Marco y su familia están aquí de paso, volverán pronto a Italia —No me gustaba que aquella familia rondara mi territorio, pero teníamos una tregua y me esforzaba por respetarla.

El móvil comenzó a vibrar en el bolsillo de mi pantalón y al mirar el nombre en la pantalla sentí que se me encogió el corazón. Había rechazado demasiadas veces las llamadas de mi madre, estaba tratando de evitarle más sufrimiento, sabía que era un infierno para ella saber que el único hijo que le quedaba se encontraba involucrado en el mundo que tanto odiaba, ese que ya le había arrebatado otro hijo.

—Mamá —dije tomando al fin aquella llamada, le hice un gesto a Jotrov para que me diera privacidad.

Por Dios hasta que contestas, pensé que algo malo te había pasado —había dicho aquello con tanta tristeza que algo dentro de mí se rompió.

—Estoy bien, sabes que esto absorbe todo mi tiempo, pero tú ¿cómo estás? —pregunté tratando de desviarla de aquel tema.

Cómo puedo estar Rubén, vivo con un nudo en el pecho pensando que algo malo te puede pasar, perdí a Emiliano y me moriría si te perdiera también a ti, tú padre realmente nunca tuvo consideración alguna de sus hijos, lo único que le importo siempre fue mantener a flote su sucio negocio.

Emiliano era mi hermano mayor, mi padre estaba comenzando a darle instrucciones sobre este mundo y dejó varios clientes a su cargo, era sanguinario, no tenía tolerancia y muchos de los socios de mi padre comenzaron a quejarse de él. Mi madre le suplicó a mi padre que lo enviara lejos, que lo protegiera, pero antes de poder hacer cualquier movimiento lo asesinaron. Mi madre nunca perdono a mi padre y trato de arrastrarme con ella de regreso a Italia, pero yo no podía regresar, no sin antes hacer pagar a los que mataron a mi hermano.

—No pasará nada, te estaré visitando pronto —la escuché sollozar y esta era una de las razones por las que evitaba hablar con ella.

Cuídate Rubén, cuídate mucho hijo —mi madre terminó primero con aquella llamada y como siempre me sentí el peor hijo del mundo, pero ya estaba demasiado metido en esta mierda, estaba hasta el cuello embarrado.

Lleve mis pasos al despacho y le pedí a Jotrov que trajeran la botella de vodka más costosa. La situación con mi madre siempre me hacía perder los estribos y si le sumamos a esto la rubia de ojos azules que no salía de mi cabeza era una combinación explosiva. El hombre me miró con mala cara, porque él mejor que nadie sabía que si bebía, debía mantenerme controlado y apartado de todo aquello que me había llevado a la conclusión de que al alcohol era la mejor solución. Con mi madre lejos era fácil, pero con Genave a unos cuántos kilómetros tendría que mantenerme encerrado.

—Tienes que mantenerme lejos de ella —dije mientras tomaba el primer trago directo de la botella —Existen cosas que ni yo mismo entiendo, como el hecho de querer poseerla con todas mis fuerzas, pero también tengo esta maldita necesidad de protegerla —Jotrov me miró sorprendido y supe en aquel momento que él había se había dado cuenta de algo que yo no.

—Estás enamorado —Y pude sentir como le horrorizaban aquellas palabras. En mi caso cada parte de mi cuerpo se estremeció con aquella afirmación, porque en mi mundo amar a una mujer significaba debilidad y yo no podía darme el lujo de enamorarme de ella, porque la estaría arrastrando conmigo a un camino de destrucción y muerte.

Pokračovat ve čtení

Mohlo by se ti líbit

349K 25.7K 51
Amity, una master en negocios, está acostumbrada a tener a todo y a todos bajo su control junto a su socia y mejor amiga: Boscha. Con un chasquido d...
1.1K 156 5
Ranking #5 en AgentCarter Historia Corta Después de la perdida de Steve, a Peggy el unico consuelo que le quedaba era escribirle cartas al amor de su...
1.4K 418 12
Allegra es la hija del Gran Manzini, un mago de poca monta que actuaba en lugares bastante cutres. Desde que ella empezó a ayudarle, los trucos mejor...
341K 21.8K 36
[SEGUNDO LIBRO] Segundo libro de la Duología [Dominantes] Damon. Él hombre que era frío y calculador. Ese hombre, desapareció. O al menos lo hace cu...