Su celular vibró, sacándolo de su bolsillo con tranquilidad, alzó las cejas y se apresuró a atender al ver el nombre en la pantalla.
-Jihyo- murmuró, mirando hacia el asiento delantero, su chófer, deseando estar sola-. Creí que no me llamarías.
-No iba a hacerlo.
La voz grave de la chica la hizo suspirar un poco.
-Pero ... Aquí tu omega se desmayó.
Somi frunció el ceño, ladeó la cabeza, y tardó unos segundos en hablar.
-¿Cómo?
- Minatosaki- la beta intentaba sonar despreocupada, pero Somi pudo notar el nerviosismo en su voz-, perdió el conocimiento, ahora la acosté en tu cama, era lo más cercano, no la iba a tener en brazos todo el día hasta que regresaras. ..
Somi golpeó el asiento del conductor, haciendo que el chófer la mirara por el espejo.
-Regresemos a casa, rápido- ordenó, el hombre sólo asintió, girando en la próxima esquina.
Somi volvió a colocar el celular sobre su oreja.
-¿Pero está bien?
Escuchó un silencio y luego a la rubio suspirar, en ese tono de "no me gusta que te importe" que hablaba desde hacía bastante.
-Se ve muy enferma, Somi- murmuró por el teléfono-. No tiene color y está fría, aunque su frente está muy caliente ... Creí que ibas a cuidar mejor a tu omega.
-Deja de decir eso, no es mí omega, y no lo será nunca, idiota- Somi intentaba controlar su enojo, aunque no le resultó muy bien-. Me preocupo por su estado, pero eso no significa nada, ¿Cuántas veces te lo tengo que decir?
Escuchó el silencio del otro lado de la línea, cosa que la inquietó, y la hizo dudar si había usado su voz de alfa sin querer y eso había incomodado mucho a Jihyo, la chica era tan sensible como una omega en ocasiones.
-La cubrí un poco con las sábanas- escuchó su voz luego de unos segundos, su tono estaba totalmente normal.
Somi soltó el aire que había retenido.
-Sigue respirando, tranquila- continuó la rubia-, por ahora.
-¡ Jihyo !
Escuchó su risa, Somi se frotó el rostro, aunque sonrió un poco, hacía bastante que la chica no bromeaba.
-Ya, no la mataré- dijo Jihyo, como para "tranquilizarla" -, ¿Ya estás en camino?
Somi separó el celular de su rostro para pedirle al conductor que acelerara.
-Llego en dos minutos- dijo la castaña-, o menos.
-Bien, adiós.
-Ah.... Espera, Jihyo, ¿Qué hacías en mi casa?
El pitido de la llamada finalizada la hizo maldecir por dentro.
No llegó a guardar su phone que una nueva llamada la hizo detenerse, viendo el nombre de Kang TaeHyun.
-¿Buenas? - preguntó, sin saber muy bien el porque de la llamada, ya que desde que el pelirrojo se había marchado no había estado en contacto.
-Hola, Somi- su tono de voz parecía el de alguien estresado.
-¿Pasó algo? - preguntó con algo de miedo.
-Pude encontar a Tzuyu- dijo.
-Me alegro mucho por la noticia- dijo Somi con una sonrisa, aunque le costó un poco al ver su mansión a unos metros- ¿Cómo está?
-¿Ahora? Inconsciente.
De nuevo, Somi había perdido las palabras.
-¿Ella también? - murmuró, aunque creyó que sólo lo estaba pensando.
-¿Cómo que también?
-Eh ... Sana también se desmayó.
Escuchó el silencio por unos segundos.
-Me acaban de llamar para informarme- agregó, que eso le hiciera hablar al pelirrojo.
El coche entró en el terreno, pasando el portón, andando hacia la entrada de la casa.
-... ¿No te parece raro? - preguntó TaeHyun, aunque no había escuchado lo que había dicho antes.
-¿Qué cosa?
Lo escuchó suspirar.
-De porque no hay comida para gatos sabor ratón- dijo, quiso sonar sarcástico, pero el enojo lo tapó-. ¿De qué mierda estamos hablando Jeon ?
Somi permaneció en silencio.
-La omega olía a mi hermana .. Y cuando la encuentro, se desmaya, mientras tanto, Minatosaki se desmaya también.
Somi cerró la puerta del auto, caminando rápido hacia la casa.
-¿A dónde quiere llegar con eso, TaeHyun?
-¿Y si están conectadas? - dijo, retóricamente-. Me han dicho que Tzuyu ha estado como enferma estos últimos días.
- Sana también- concordó Somi, pasando la llave electrónica por la puerta, entrando a la casa, caminando hacia su cuarto.
-¿Y si tienen un lazo?
Somi frunció el ceño, negó, por más que el otro no lo podía ver.
Al entrar al cuarto se encontró con Sana en su cama, cubierto con las sábanas, como había dicho Jihyo, aunque la rubia no estaba allí.
-Sana tiene un collar- dijo la castaña, se acercó a la cama, viendo a la omega-. Tenía. Pero no, no tiene marca.
TaeHyun hizo silencio del otro lado.
-¿Predestinadas? - preguntó, aunque Somi no contestó.
Tocó las mejillas rojizas de la omega, luego puso su mano en su frente, sintiendo la temperatura, no tenía demasiada fiebre. Corrió un poco las sábanas para encontrar las pequeñas manos de la chica, que estaban heladas.
-TaeHyun- lo llamó-, ¿Tu hermana también está con fiebre?
-No estoy con ella ahora- dijo-. La llevaron hasta la casa de una chica que se ve que trabaja con ella, su madre es enfermera y la tiene descansando en un cuarto, no deja entrar a nadie.
Somi suspiró.
-Bien- murmuró-, después fíjate cómo está, no sé, pregúntale a esa madre de la que dices, después comparemos cómo está con los síntomas de Sana.
TaeHyun hizo un ruido afirmativo.
-Después hablamos- dijo la castaña, el pelirrojo se despidió y cortó.
Somi permaneció mirando a Sana unos segundos, la chica parecía que estaba sólo dormida, aunque sabía que no era así y que luego tendrían que hacer más estudios para saber el porqué de su desmayo.
[ ... ]
-¿Todas estas personas se van a quedar a comer aquí?
La castaña miró a su hermano con el ceño fruncido.
-Si por "todas las personas" te refieres a que hay dos más, y que una está inconsciente...- Nayeon hizo una pausa-. Sí, ¿Algún problema?
El pelinegro se encogió de hombros, limpiando sus manos con un trapo.
-Que voy a tener que cocinar yo por todos.
La puerta se abrió y entró una chica pelinegra, apresurada por el frío.
-Agrega a Minari a la lista de personas para alimentar- dijo la castaña.
-¡Hola, BeomGyu! - saludó con alegría.
-Hola, Minari.
La pelinegra fue a dejar su abrigo sobre el sillón, pero vió al pelirrojo sentado en este, ocupando toda su totalidad por tener las piernas extendidas sobre el mismo.
El fuerte aroma de aquel alfa hizo que su nariz se arrugara.
Mina gruñó al ver la suciedad de los zapatos del chico, apoyados sobre los cojines.
El pelirrojo parecía estar demasiado ocupado pensando como para notarla, así que se acercó a él unos pasos hasta que la miró.
-Disculpa, ¿Cuál es tu nombre?
El chico le dedicó una mirada extraña, como de desagrado.
-TaeHyun- respondió sin más, apartando la vista de nuevo.
Mina fruncio el ceño por esa actitud.
-Deja al cabeza de naranja- escuchó decir a BeomGyu desde la cocina-, creo que está un poco estresado.
TaeHyun lo miró con el ceño fruncido.
-Si yo me desmayara de golpe, ¿No estarías estresado? - preguntó Nayeon, con intención de ser retórica.
-Si te desmayaras te dibujaría cosas la cara-respondió BeomGyu.
El hermano mayor de Nayeon solía ser malhumorado, aunque no tanto como su hermana.
Tenían bastantes cosas en común, como el que ambos sean omegas, y que a ninguno se le notase.
BeomGyu siempre había tenido su olor de forma sutil, un agradable aroma a fresas y vainilla, no lo sentirías a menos que estuvieras bastante cerca de él, aunque con los supresores que tomaba se notaba casi nada.
-¿Ya están discutiendo? - habló fuerte la mujer, apareciendo por el pasillo-. Hola, Mina- agregó al ver a la pelinegra.
TaeHyun se levantó al verla, acercándose a ella, abrió la boca para hablar pero la mujer contestó antes de que pudiera decir palabras.
-Está bien, No tiene nada. No es para preocuparse, piénsalo como si estuviera dormida.
-Sí, porque la narcolepcia no es nada por lo que preocuparse- dijo el pelirrojo con sarcasmo.
-Yo que tú no le contesto así a la jefa- avisó BeomGyu, mirándolo desde detrás de la barra entre la cocina y el comedor.
Las otras dos chicas asintieron.
-Lo más probable es que se haya desmayado por una combinación del dolor de cabeza y una baja de presión- dijo la mujer, mirando a TaeHyun-, para su cuerpo fue un sobreesfuerzo- aclaró.
TaeHyun se veía sinceramente preocupado, los demás comprendieron cuán importante debe ser Tzuyu para él sólo por su expresión.
-Lo que dice no hace parecer que esté bien. La mujer asintió, frunciendo los labios.
-No estaba bien- dijo-. Pero se vé que luego de desmayarse, de alguna forma se ha autorecuperado. Su presión, respiraciones, nivel de oxígeno ... Todo se normalizó, incluso bajó su fiebre, no del todo, pero sí bastante. Sigue algo pálida, con el rostro ruborizado, pero no le afecta demasiado, al parecer. Está algo fría, así que la cubrí bien y le encendí la calefacción del cuarto.
TaeHyun suspiro, un poco más tranquilo.
-No la despierten- agregó la mujer-, está muy tranquila, debe sentirse mejor dormida que estoy despierta, dejenla descansar, despertará por sí misma en algún momento.
Los demás asintieron.
-Cuando se levante denle algo dulce- agregó-, un té o una chocolata, nada sólido, a menos que encuentren unos caramelos o algo así por algún lado- miró a su hijo mayor.
-¿Estás insinuando que tengo dulces en mi cuarto? - preguntó BeomGyu.
La mujer se encogió de hombros con una mueca, no dijo nada más de Tzuyu, avisó que se iría a su cuarto y que no la molestaran antes de marcharse.
TaeHyun se frotó el rostro.
-Chico naranja.
-TaeHyun- corrigió.
-Me vale- BeomGyu hizo un gesto con la mano-. Me quejo de cocinar, pero no de que coman, estás muy delgado, siéntate y te sirvo algo.
TaeHyun pensó en negarse, así que se quedó parado en donde estaba.
-No quiero que haya dos inconscientes en mi casa- dijo Nayeon, corrió un silla de la mesa para invitarlo.
El pelirrojo terminó por aceptar, comiendo lo que BeomGyu había calentado en el microondas con gusto, ya que no sabía para nada mal.
[ Llevo más de una hora escuchando boca de dreamcatcher 😎 ]