Hey, pelirrojo! (Inotan)

Especial de Halloween

-¿...?-

Miro interrogante a los desconocidos esperando que explicarán sus intenciones.
El niño pelirosa estaba disfrazado de hombre lobo y la niña llevaba vendas por toda su ropa, simulando una momia.

-¿Dulce o truco?-

"Oh, ya veo."

Se limitó a cerrar la puerta y volver al sofá.

No tenía intenciones de compartir sus dulces.

Mas volvieron a tocar la puerta.

En un único quiso ignorarla pero dado su insistencia la fue a abrir al cabo de unos minutos.

-¿Qué?-

-¡Tú! ¡¿Como te atreves a cerrarnos la puerta en la cara de esa forma?! ¡Solo queríamos unos cuantos dulces!-

-En está casa no se celebra esta festividad, pidan dulces en otro lado.-

-¡¿Eh?! ¿Como pueden no celebrarla? ¿Tus papás te castigaron y por eso no te dejan salir a pedir dulces?...Que malos.-solto el niño, haciendo evidente un bufido en la última parte-

-¡Sabito!-

-¡Pero es verdad! Si no lo dejan divertirse son malos pa-

-No estoy castigado.-

-¿Eh?-

-Mis padres no me odian.-

-...¿Entonces porque no te dejan?-

-No están y a mi no me interesa salir a pedir dulces -"Y tampoco tengo un disfraz o compañía"-

-¿Como que no te interesa? ¡Los dulces son súper deliciosos!-

-No dije que no me gustaran solo que no me gusta ir a pedirlos afuera.-

-¡Umhp! Eres raro...Ven con nosotros-

El niño pelirosa, que la otra niña llamo Sabito, le sonrió mientras extendía su mano en dirección suya.

-No.-

-¿Porque no?-

-Porque no quiero.-

-¿Y porque no quieres?-

-Eso no te incumbe.-

-Lo hace.-

-No lo hace.-

-¡Que si!-

-¡No!-

Se cubrió la boca inmediatamente sin poder creer que halla gritado, y es más, perdió los estribos con un niño que acababa de conocer.

-Vendras con nosotros, aunque tenga que llevarte cargado.-

¿Que estaba mal con él? ¿Porque quería que saliera?
Lo acababa de conocer y además no sabía si confiar en él era una buena opción.

Se mantuvo pensándolo tanto que no noto cuando fue jalado hacia afuera aún con sus pantuflas de conejitos celestes a la vista.

-¿Que-

-Vamos, niño raro, ¡iremos a pedir dulces hasta reventar!-

-¡Te dije que no quiero!-

-¡Pero se que en el fondo quieres!-

Se calló antes de comenzar un tira y afloja con el contrario. No perdería más su tiempo.

-¡Sa-bi-to!-