En el castillo de Liones hay tres chicas que buscan una manera para huir de sus vidas predestinadas. ¿Lo lograrán?
Siempre pensé que lo más valioso que tenia eran mis hermanas, pero ahora tengo otras prioridades. Mi voluntad nunca tuvo importancia...
— la atracción física no es amor — dice Elaine. La oji violetas la mira confundida. — Osea... Diane, lo conoces desde hace solamente tres días. Te gusta solamente como es exteriormente. No puedes decir que estás enamorada si no lo conoces
— tienes razón... però es muy lindo, me encantaría conocerlo más
— todavía no me han dicho quien es — digo intrigada
— es Meliodas — responde secamente Diane
Meliodas. ¿Porqué el? De los tres tenía que ser el. Hace apenas algunos minutos me había revelado que le gusta otra. No quiero que Diane sufra más. ¿Que debería hacer en una situación así?
— no entiendo que vez en el de tan atractivo
Diane me mira seriamente — entonces te gusta a ti también...
Me sorprendí mucho y respondí inmediatamente — ¿¡que?! No no no... solamente pienso que el no sea el indicado para ti — digo mientras agitaba mis manos
— Por una vez... ¿Podrías estar feliz por mí? — pregunta bastante amarga. Hubo un momento de silencio en tre las tres. Yo causaba esto en ella... y detesto todo esto.
— mejor si vamos a dormir — digo mientras me levantaba
Me preparo para ir a dormir y luego me echo lentamente en la cama. Espero solamente que algún dia Diane pueda perdonarme y deseo fuertemente que ese día llegue pronto... Mientrasbuscaba de consillar el sueño no podía dejar de pensar en la conversación que tuve esa noche con Meliodas. Ese chico me habló como si fuera una persona común... con simplicidad... Y su naturalidad ha logrado hacerme feliz.
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Los rayos del sol entran por la pequeña ventana de nuestra habitación, provocando que yo despertara. Me siento en la orilla de la cama y bostezo. Estaba lista para un nuevo día. Parecia una mañana espectacular... hasta que Meliodas hizo aquel comentario. Estábamos desayunando todos juntos en el salón. Nadie decia nada. El que abrió la conversación fue aquel rubio.
— ¿chicos es necesario que yo valla con ustedes al local? — pregunta el oji verde
— es que yo y Elizabeth habíamos quedado en salir hoy
Diane me mira fijamente con odio y desprecio. Su mirada parecía vacía, daba miedo. Elaine también me miraba de reojo y un poco decepcionada. Probablemente pensará ella también que me gusta Meliodas y por eso le pedí de tener una cita. ¿En que lió me metí? Ahora me odiarán ambas... Luego de eso los chicos se fueron a trabajar, las chicas dijieron que hiban al mercado para comprar algo de comer para esta noche y el rubio y yo nos fuimos a la plaza de la ciudad para pasear un poco. Solamente cuando llegamos allí me acordé en que lió estoy metida y que si alguien me reconocía era la fin para mi y mis hermanas. Estaba iniciando a agitarme y a mirar a mi alrededor para controlar quien estaba allí. De repente siento Meliodas llamarme por nombre.
