TODO O NADA

Capítulo 2.

PVS De Eylon Piers.

  Que incomodidad.

Dormir con una chica extraña, que se me hace sexy —desnuda con tan solo mi camisa encima—, es incómodo.

  A ella no parece incomodarle dormir al lado de un completo extraño, de hecho no parece ni un poco molesta o nerviosa porque tiene un buen rato dormida. Sin embargo, yo soy todo lo contrario sin poder pegar el ojo aunque sea unos segundos y, pese a que no soy de ese tipo de chicos que sexualizan a las mujeres y las trato con todo respeto y amabilidad, siento una gran atracción hacia ella...

  ¿Y cómo podrían juzgarme si estoy durmiendo con una diosa—físicamente— desnuda con únicamente mi camisa para cubrirla, y no poder hacer nada por mis principios y respeto a ella? Además de que la acabo de conocer.

  Me siento un poco culpable al estar pensando en como ella se veía con solo una toalla puesta, me hace sentir pervertido... Tal vez lo soy, pero es que es demasiada tentación hecha mujer como para no pensarla de esa forma; su piel blanca bronceada, los pechos medianos dibujándose perfectamente debajo de mi camisa de tela fina, sus piernas largas y gruesas, lo suave que se ve su piel y ni hablar de su rostro.

  Ella es el sueño erótico de todo hombre.

  «Tal vez si no le hubiera dicho lo de la camisa... Tal vez ella ahorita estuviera desnuda» Pienso mientras me muerdo los labios.

  Una corriente eléctrica pasa por todo mi cuerpo, quedándose en una parte que no voy a mencionar y haciendo que mi respiración se acelere al imaginar aquella escena. Luego, como un cruel juego del destino, cuando siento que puedo controlar toda la tensión que siento pensando en otras cosas, Spink se da la vuelta, apegándose a mi cuerpo al mismo tiempo que pone su brazo por mi cintura y pone una pierna cerca de mi entrepierna abrazándome como si fuera un oso de peluche muy grande.

  Tomo una sonora bocanada de aire conteniéndome de no perder la cordura, ya que sus pechos se pegan a mi costado cerca de las costillas haciendo que la tensión en mi cuerpo y en otros lados crezca. 

  Siento sus erectos pezones en mi costado rozar con el ritmo de su respiración pausada, haciendo mi imaginación volar.

  «Respira. Respira. Tengo novia, tengo novia. Esto no es nada, esto no es nada. Solo es una chica—hermosa— casi desnuda pegada a tu cuerpo...

Coño, si es mucho» Pienso muy nervioso y excitado, tratando de regularizar mi respiración y hacer que las imágenes hechas por mi imaginación paren, cosa que no logro.

Y para colmo, ella se atreve de respirar pesadamente y soltar un suspiro en mi oído, como si no me tuviera mal ya.

«Voy a morir por excitación. Está noche no es nada como la espere» Pienso respirando con mayor dificultad mientras mi miembro cada vez se endurece más.

  Hoy cuando salí de la casa de los padres de mi novia para regresar a la de los míos, nunca pensé que me encontraría a una mujer en la calle toda ensangrentada y mucho menos que dormiría con ella minutos más tarde, así como estamos justo ahora, para luego tener que viajar con ella está California, donde viven mis viejos.

  Spink suelta un pequeño jadeo entre sueños y se apega más a mi costado.

  «¡Joder!»

  Hasta aquí llego yo.

  Me daré un baño de agua fría.

  Lentamente, acerco mis manos a su pierna con cuidado para no despertarla y a penas toco su piel siento la suavidad de esta haciéndome tragar en seco. Tomando una profunda inhalación, apartando todo pensamiento indebido y pecaminoso, pongo su pierna arriba de la otra y hago lo mismo con su brazo alejándola de mi cuerpo.