¿Que ustedes son que? Harry Potter conoce a la tercera generación

Capitulo 37: Evan Arthur Krum Weasley

- bien tío George, digamos que recibo muchos paquetes de tu parte

- eso es cierto, pobre directora necesita vacaciones - Comento Teddy

-Y pensar que creyó que todo sería más tranquilo cuando Ale y yo terminamos Hogwarts - Mcgonagall parecía querer llorar, al ver que se encontraría con una generación tan revoltosa, comparado con lo que le esperaba los merodeadores parecían haber sido el menor de su problema.

- Gianna, creo que no deberías haber dicho eso, no queremos que la profesora Mcgonagall renuncie.

- Si, Ari tiene razón no se preocupe Profesora, no todos estamos perdidos en esta generación

- ¿te incluyes en ese grupo Al, pero si tu también haces bromas?

- pero no tan seguido como tú, hermano

- en esta generación son pocos los que no le dan jaquecas profesora ' le advirtio Victorie a su profesora favorita

- Pero así nos quiere - sonrió angelical Evan - Algo mas que quieran saber de mi, nada de acuerdo entonces eso es todo - se bajó del escenario para reunirse con su familia, abrazo a sus abuelos y tíos en especial al su tio Fred al que todo habían querido conocer.

- Hermanito no puedes quedarte con todo el amor - Eliana también abrazo a su tío Fred

Tras las cortinas Scorpius no dejaba de pasear de un lado al otro de la habitación nervioso por el enfrentamiento que lo esperaba al presentarse ¿contaría con el apoyo de su madre? ¿aun cuando en estos momentos ni siquiera se le pasaba por la cabeza la idea de casarse con Draco Malfoy?

- Scor, le harás un hoyo al piso -

- después de Evan me toca a mí, ¿sabes lo que significa?

- tu madre también está ahí además de Albus, Rose y los demás.

- lo sé, pero aún estoy nervioso

- nada ganas preocupándote antes de tiempo siéntate y cálmate por favor.

Minutos después el director recibió una nota que había traído una lechuza de un profundo color negro, después de leer la nota suspendió las presentaciones hasta el día siguiente, Scorpius tras las cortinas dejo de andar de un lado al otro de la habitación sintiéndose aliviado, al menos por aquel día no tendría que enfrentar a su familia.

Aprovechándose de que se habia formado un pequeño tumulto al querer salir todos al mismo tiempo del gran comedor Evan aprovechó para llevarse a Leisa por una salida diferente.

- sucede algo Evan, porque me has sacado del gran comedor - Adoraba su voz tierna, su carácter gentil que se transformaba cuando estaba enfadada aunque eso pasaba en muy raras ocasiones, sabía que era dos años mayor que ella pero eso no le había impedido verla, cuando caminaba por los pasillos, cuando estaba en el gran comedor, cuando pasaba largos ratos en la biblioteca.

- quería hablar contigo a solas - normalmente el no era un chico tímido, todo lo contrario pero Leisa lo ponía nervioso - quería decírtelo en el baile pero no pude... yo... - soltó un resoplido no podía terminar ni una frase coherente entonces hizo algo de lo que estaba seguro llegaría a arrepentirse siguiendo el ejemplo de su hermana acerco su rostro al de Leisa que por la sorpresa no tuvo tiempo de reaccionar cuando sintió como los labios de Evan se posaban sobre los de ella que seguía inmóvil, hasta que el comenzó a mover los labios para besarla, entonces ella se alejó, sorprendida

- qué haces Evan -

- lo lamento Leisa... yo... te quiero Leisy, me gustas y me gustaría que fueras mi novia

- Evan perdón pero yo no puedo aceptar, te quiero pero no de esa manera- ella intento tomar sus manos pero el se alejó sintiéndose estúpido

- es por alguien más ¿uno de los Scamander?

- no Evan, Lorcan y Lissander solo son mis amigos no hay nadie.

- ¿entonces? ¿Por qué?

- Porque, Evan tengo me faltan unos meses para cumplir catorce no me siento preparada para tener novio.

- perdón por haberte besado Leisy. - evan de verdad se sentía muy apenado con ella, pero sus nervios le habían ganado y no supo que más hacer.

- sabes Evan si tuviera que elegir a un chico te elegiría a ti - le tomo de las manos para transmitirle que el era importante para ella

- ¿de verdad? - Pregunto sintiéndose esperanzado - entonces dame una oportunidad

- Evan solo puedo prometerte que lo pensare, solo dame tiempo

- te prometo que no volveré a insistir hasta que tu estés lista te esperare los días, las semanas, los meses, los años que necesites.

Leisa sonrió sonrojada jamás se imaginó que Evan sintiera esto por ella, siempre lo había visto como a un primo y alguien en quien podía confiar, de verdad esperaba poder corresponder en algún momento a su cariño por qué no lo quería ver sufrir por ella.

- Gracias Ev - lo beso en la mejilla y se alejó de nuevo - quizá debamos dejar esto entre nosotros, no me gustaría que mis hermanos, especialmente Al se molestaran contigo

- de acuerdo y gracias por preocuparte por mí, realmente me gusta mi rostro como esta y Leisy discúlpame

- no pasa nada, vamos hay que volver

- regresa tú, yo me quedare aquí un rato mas.

Evan se recostó bajo el árbol cercano al lago negro, las cosas no habían salido como el esperaba y aunque no perdía las esperanzas no podía dejar de pensar que el siguiente era su último año y no le gustaría irse sin saber la respuesta de Leisa, sin embargo cumpliría su promesa y no la presionaría.

- ¿Por qué tan solo Evan? - la voz de Ari lo saco de sus pensamiento

- Acabo de declarármele a Leisy - Ari hizo un gesto sabía que con Leisa no era lo mas conveniente declararse tan pronto

- Lo lamento Ev.

- Era tan obvio que me rechazaría - como no se había puesto a pensar en eso '

- Con Leisa si ella creció viéndote como a un primo, lo mas conveniente era hacer las cosas más lento ¿me entiendes? Pero si quieres que te diga algo creo que tienes posibilidades.

- Gracias Dariana.

- Para que estamos las primas menores - Ari abrazo a Evan pensado mientras él pensaba que quizá primero debio pedir la opinión de su prima al fin ella era de la edad de Leisa y eran muy buenas amigas.

- Es mejor que volvamos ya casi es hora de cenar.

Volvieron al castillo donde se desarrollaban diferentes situaciones.