# 2

11 3 0
                                    

Para cuando Flor despertó lo primero que observo fue al pequeño Mario en su pecho, acto por el cual sonrió para besar su frente; No fue hasta fue hasta entonces que reparo en la presencia de sus hermanas quienes con una sonrisa guasona la observaban desde la puerta de su habitación.

__ ¿Qué tal durmieron? -pregunto Tina, mientras que la menor se acomoda-

__Riquísimo- admitió- por un momento se me había olvidado que estaba conmigo -negó entre risas- que mala niñera soy -hizo un puchero, pero Mario solo reía mientras la veía- Este señorito es pura risita, Tina.

__ Solo contigo y su papá -dijo- por cierto, ya Lucas salió desde hace unas cuantas horas de su trabajo, pero al decirle que el pequeño dormía, decidió dejarlo un rato más.

__ Entiendo -comento- ¿puedes chequear si se secó la silla?

__ ¿Qué hiciste? -inquirió Laura buscando lo ya nombrado, llevándose una gran sorpresa ante lo hecho- ¡Flor! -grito emocionada- ¡Esta hermoso!

__ Quería darle color, estaba muy sencilla y...

__ Buen trabajo hermanita, las letras de su nombre, los dibujos, todo quedo espectacular. -ambas la abrazaron y la menor solo reía-

__ Me alegra que les haya gustado. -confesó-

Después de conversar un poco más, Flor se dedicó a alistar al pequeño, mientras que Tina se disponía a llamar a su cuñado, quien se encontraba culminando unos trabajos pendientes de su universidad, haciéndose de oídos sordos, ya que Sabrina no lo dejaba tranquilo, reclamándole por quien sabe que cosas que no eran de verdadera importancia.

+ ¿Cómo estás?

_ Tratando de tener un poco más de paciencia con respecto a...

Los gritos de Sabrina, hicieron que Tina alejara su teléfono un poco y negar en compasión de su amigo.

+Ya te entiendo, pero te estoy llamando para salvarte unos cuantos minutos, el pequeño ha despertado.

_ Gracias al cielo. Ya voy para allá. Gracias.

Cortando la llamada, Lucas se levantó para rodear a Sabrina y así entrar a la ducha, estaba harto de su persona, pero eso era lo que se buscaba. No obstante, decidió no pensar más en eso, y terminando de acomodarse, pidió el auto de su madre para dirigirse a la casa de los González. Sin embargo, se detuvo en una tienda para comprar algo de comestibles para sus cuñadas y al llegar a dicho lugar toco dos veces la puerta, haciendo sobresaltar a Flor quien sostenía a Mario;

__ Ese debe ser Lucas –comento la chica- ten al bebe –se lo entrego a Tina- hasta luego monito lindo –beso su frente y subió las escaleras casi corriendo-

__ ¿Monito? –Pregunto Tina entre risas- anda abrirle la puerta a Lucas hermana, por favor.

Laura riendo asintió para tomar la manilla de la puerta y encontrar a su cuñado;

__ Lucas, ¿Qué tal?

__ Todo muy bien Laura gracias a Dios –sonrió y paso a casa, encontrando a Tina con su bebé- Oh, ¿Dónde está mi tremendura? –Pregunto enamorado para cargar a su hijo-

__ Se ha portado muy bien, se despertó cuando te llame y del resto ha estado jugando con Flor.

__ ¿Y eso? –Señalo Laura viendo las golosinas- ¿me regalas una?

Lucas sonrió y se los entrego

__ Son para ustedes, no es mucho pero pase por una tienda y –se encogió de hombros-

FLOR  [Al final del camino #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora