Apetito De Matar

No hay marcha atrás.

Aprende a matar a alguien en un simple pasó: no lo nombre nunca más.

No recuerdo Cómo llegamos a esto, pero aqui estamos las dos en un sotano de nuestra casa, planeando un asesinato.

Andrea decidió planearlo en el sotano de nuestra casa ya que es un lugar mas seguro que mi cuarto o el el suyo ya que sino seria una sentencia de muerte, Andrea también decidió que es mejor matar a Brad en la tarde asi el amigo que comparte cuarto con el no aparezca en la casa, Parecía como si Andrea lo hubiera planeado hace mucho tiempo. Sólo faltaba escoger el momento correcto.

Andrea: creo que es mejor que sea un día viernes.

Estabien, pero ahora el gran problema es cómo vamos a su casa, vive a 3 horas de nuestra casa, demorariamos demasiado, y aumentarían las sospechas.

Andrea: tranquila, todo esta controlado, partiremos en la mañana para llegar en la tarde. Y no te preocupes por la escuela, una amiga se encargara de ponernos asistencia.

¿Como que una amiga Andrea? Ella sabe todo esto.

Andrea: Claro que no, sólo me debe unos favores, pero tranquila es de confianza nunca dira nada.

Sí pero esto es ilegal, si alguien de la escuela se percata, estaremos en graves problemas y no solo eso nos podrían descubrir.

Andrea: relájate nadie se dará cuenta, Y si en caso pasa algo tengo una extraordinaria cuartada, tu tranquila nomas, aparte ilegal jajajjajajajjaja matar a alguien si es ilegal jajajjajaj.

Cómo quería que me relaje, nose que me pasaba, pero ya no queria hacerlo, ya no queria matar, tenia panico mucho panico.

Viernes día del asesinato
Andrea estaba del todo normal como siempre toda relajada, se habia puesto unos leggins negros con un top rosado y unas botas altas negras y una cola alta, Mientras tanto yo no tenía ánimos para nada, estaba muy nerviosa a pesar de que me guste matar ya no queria hacerlo.

Andrea: estas lista, tenemos que ir ya, sabes que no podemos levantar sospechas ¿entiendes?.

Si claro, entonces trate de disimular mi nerviosismo y me puse un jim negro con una polera azul y mis zapatillas negras.
Cogimos el autobús como siempre, para no levantar sospechas, aunque esta ves Nos dirigimos a matar a alguien.

Todo el camino lo pase pensando en las consecuencias de todo esto, a pesar de que al principio estaba tan decidida, hasta yo fui la de la idea, aunque a veces pienso que andrea ya lo habia pensado antes.