En las alas de la noche

Parte 1 Canción de Cuna

En las alas de la noche escucha el viento llamando tu nombre,

Desde las profundidades del mar, escucha a los ángeles llamar,

pero no olvides, amor, que ellos no guardaran tus sueños

Escucha el viento soplar, amor, escucha el viento llamar tu nombre

Escucha los sueños de las profundidades, escucha mi amor

Que los vientos soplen, que el mar se agite

Que la tierra se abra y los cielos se desgarren

Todo para ti amor, escucha las profundidades

Para encontrar el camino a casa

Navega sobre las alas de la noche y estarás en la playa

No escuches a los ángeles llamándote

Y a salvo en mis brazos, cariño, feliz descansaras...

Mis ojos se abren en la oscuridad, como cada noche en mi memoria, la misma canción, la misma dulce voz, mis padres duermen y se que no despertaran, levanto la vista mientras unas manos blancas como el mármol lechoso me levantan, enredo mis manos pequeñas entre los mechones largos que me cubren, blancos como rayos de luna, tiro y juego con ellos, su voz sigue cantando para mi sobre campos sombríos y lluvia roja, observo sus ojos que me miran tibiamente, tengo hambre como cada noche y el me alimenta pacientemente, permitiéndome sostener caprichosamente su dedo. Luego me lleva con el a través de las sombras.

- Ya levántate Nong te tengo buenas noticias -dijo con diversión- he conseguido el casting de la serie que tanto querías.

Se sentía cansado y decepcionado, había hablado hasta muy tarde con Zee y este le había dicho que no podría hacer el casting con él ya que tenia algunos proyectos pendientes.

- Ya no me interesa - contesto malhumorado.

- Nong Saint me costo mucho trabajo encontrar la manera de que te presentaras a este casting, estuviste insistiendo durante semanas ¿ahora ya no lo quieres?

Observo a mi manager en silencio, se que he estado insistiendo con esto, pero simplemente ya no me interesa, en este momento Zee debe estar volando hacia china para una pasarela.

- Yo quería hacer esto con Zee, pero anoche me ha dicho que sus proyectos no le dejan tiempo - reconozco con una mueca malhumorada.

Niego levemente, mientras reconozco el puchero con el que tan seguido consigue lo que quiere, y pienso en Zee es tan raro que el diga no a cualquier cosa que le pida, ese niño esta perdidamente enamorado, aunque hasta este momento las cosas entre ellos aun siguen siendo amistosas, mas amistosas de la cuenta.

- Saint, por lo menos puedes presentarte... no es seguro que seas elegido y siempre puedes rechazarlo después - dijo con suavidad - estoy seguro que solo algo muy importante impidió que accediera a hacer esto contigo.

Se que no puedo ser grosero, se que no le pregunte antes si estaría libre y negarme a ir no es una opción, por que yo mismo insistí sobre esto.

- Vamos, no podemos llegar tarde - apresuro a Tommy y Jimmy, apenas tenemos tiempo para realizar todos los tramites necesarios.

- ¡Ya vamos!, hoy estas de muy mal humor ¿paso algo malo? -pregunta sorprendido por lo general Zee tiene un buen carácter y es fácil tratar con el.

Observo a Phi caminar rápidamente y miro de reojo a Tommy, el me devuelve la mirada y se encoge de hombros mientras forma con los labios el nombre de Saint, yo asiento en acuerdo, será un largo, largo viaje.

- Nada ha pasado, solo apresúrense -pienso en Saint, en lo triste y decepcionado que se escucho cuando le dije que no podría acompañarlo, pero simplemente no puedo hacer nada para cancelar esta pasarela.

Ha sido un día largo y cansado, mi humor ha estado completamente arruinado. Deseo tanto verlo, tocar su piel y susurrarle al oído, la noche ya ha caído, empiezo a tatarear suavemente la canción que escucho desde mi nacimiento, la canción de cuna que un demonio le canta a su hijo amado, veo como las sombras se agitan, se vuelven difusas y aterciopeladas, una sonrisa ladina baila sobre mis labios, Caminar entre las sombras es una habilidad simple y muy útil, es la primera cosa que me enseño mi padre.

Escucho atentamente cuando llego a mi destino, todo esta en silencio, así se que el ya esta dormido, avanzo hasta llegar a su cama, contemplo su rostro atractivo, las pestañas que se curvan graciosamente sobre sus mejillas, acaricio su cabello oscuro y dejo correr las hebras sobre mis dedos.

- Te extraño - susurro suavemente, veo como se agita en sueños y beso su frente para evitar que despierte - ten dulces sueños.

Eso lo calma y se queda quieto entre mis brazos, ya han sido cientos de noches que lo he sostenido así, sin que el se entere, cientos de noches que he vigilado sus sueños, lo he observado tanto, que ya he memoriza cada uno de sus rasgos, conozco el tacto y la textura de su piel. Una vez mas permanezco despierto observándolo dormir.