《Karmaland》

37: Vegetta, FA

Vegetta: Tranquilos, hay Vegetta para todos, pero más para ti, guapa. -miró a su novia y ella miró victoriosa al oso.

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Vegetta: Ya que estamos tú y yo solos te quería preguntar, no te gustaría, ya sabes, hacer...

Mack: ¿Cuándo lleguemos a casa? -Él asintió- claro.

Luzu: Salgan de ahí, par de enamorados.

Alex: ¿Qué estaban haciendo, tórtolos? -los miró curioso.

Vegetta: Nada de otro mundo.

Ellos ya tenían todas las cabezas, sólo era cuestión de llevarlas, en eso les salió un oso, ella fue la primero en verlo así que lo atacó.

Alex: Que fuerte está tu mujer, Vegetta.

Vegetta: No es mi mujer, es mi novia... por ahora.

Cuando el oso estaba muerto gracias a Luzu y Mack, llegaron a la fogata, invocaron a Jason, varios se lastimaron, los ayudaron, derrotaron a Jason, bla bla bla, todos se saben esa historia.
Era el momento de irse a casa, todos habían hecho lo que tenían que hacer, menos Vegetta, él era el único que no había cumplido su objetivo.

Vegetta: Mack...

Mack: Dime.

Todos los demás se iban lentamente, no iban a irse muy lejos, pues querían oír, pero si lo considerable para darle espacio a la pareja, estaban en la fogata, a la luz de la luna y el azul del lago.

Luzu: Que emoción, ¿no crees Rabis?

Rubius: Me quiero ir a casa.

Auron: Vamos, por favor, esto es bonito.

Vegetta, después de haberle dicho unas hermosas palabras a su novia, se había arrodillado, sacó la cajita morada de terciopelo y la abrió mostrando un precioso anillo de oro con un diamante en forma de corazón encima.

Vegetta: ¿Quieres casarte conmigo?

Mack: ¡Sí!

(...)

Mamá: Mack, tenemos que decirte algo...

Mack: Díganme.

Job: ¿A mi también?

Papá: Si.

Mamá: Fuimos a hacer unas pruebas con tu novio, Mack y... es su hermano.

Mack: ¿Qué?... ¿Están de broma, verdad? ¡¿verdad?!

La chica irradiaba ira, estaba llorando, tenía que decirle a su pareja que no podían casarse, salió de su casa encima del chocobo que habían capturado juntos, llegó a la casa y tocó la puerta.

Vegetta: Pasa Mack.

La chica dejó al Chocobo afuera y entró, él estaba en la sala, él, al verla, se levantó rápidamente, se había preocupado.

Vegetta: ¿Qué pasó?

Mack: Eres mi hermano.

Vegetta: ¿Qué?

[...]

Vegetta: ¿Me enamoré de mi hermana pequeña?

Mack: Tenemos que huir, me voy a cambiar el nombre, haré lo que sea, pero quiero estar contigo.

Vegetta: Te espero en la casa de Lolito a las 8, nos iremos muy lejos. -la besó-, te amo.

Mack: Yo más.

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