Travesía sin camino

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Sé de muchas cosas que con el tiempo
han perdido importancia.
Sé de problemas irrelevantes que quitaron el sueño
y martirizaron la cabeza.

Conversando sobre las quejas
que genera una vida compleja,
descubrí que a pesar de cualquier proeza;
para todos, en algún momento, la vida será digna de tristeza.
Perder un trabajo, perder un objeto,
perder una pareja, la salud, la felicidad
o perder los motivos para gozar la existencia.

Todos tenemos algo que nos aqueja,
las razones para sufrir nunca se alejan,
a veces simplemente es necesario resaltar
con un color diferente, el diario
para quebrarse en llanto
por razones que no comprendemos,
pero si lamentamos.
No importa si el color no era el adecuado,
fue una excusa para liberar el dolor acumulado. 

Yo he llorado por una pluma que no escribe,
por una canción que se calla,
por un mensaje sin respuesta,
por la indiferencia y el olvido. 

Yo he llorado por problemas que superan,
encerrado en la penumbra:
he llorado, he gritado, me he quejado.
Caminando y conversando, he contenido el llanto
y puede ser porque no he superado
los momentos que estuve a tu lado.
No quiero olvidarlos, no quiero dejar de recordarlos,
contigo todo fue bueno
por eso te he idealizado.

Recuerdo que mi llanto
nunca intervino en el público,
nunca se presentó con la gente
por más que las razones agobien.
Lloraba únicamente a tu lado
me sentía seguro al desahogar el desconsuelo
abrazando tu alma, mientras tu tocabas
mi corazón y lo consolabas.
Te conocí y aprendí todo de ti,
descubrí contigo el gozo de vivir,
mostraste realidades perfectas
en las que cualquiera puede compartir,
sin obligaciones, ni condiciones
aceptaste todo de mí.
Perdonaste mis errores,
castigaste mi mal actuar,
enseñaste que no existen razones suficientes
para dejarnos derrotar, para dejarnos de amar.

Tus peores momentos
nunca fueron descargados sobre mí,
tus lágrimas, tu odio y tu sufrimiento
nunca afectó la relación;
con eso entendí que siempre habrá una opción.

Pusiste mis expectativas muy altas
esperaba encontrar todo lo bueno que hallé en ti,
en alguien más, alguien parecido a ti.
Gracias a tu actuar, gracias a las huellas
y semillas que regaste en el desolado suelo de mi alma,
pude confiar en las demás personas. 

Pensé que todos serían como tú,
pensé que era fácil colaborar con alguien,
pensé que el desinterés estaba presente
en todas las acciones de la gente.
Llegué a comparar con todos, tus características,
tu forma de vida y tu actuar.
Fue terrible encontrar
que como tu, nadie más.
Tuviste tus errores y ahora doy cuenta
que eran pequeños tropiezos
incomparables con los grandes destrozos
de la gente irresponsable que ahora conozco.
Te perdí de mi lado
y no he parado de buscar un reemplazo,
he querido duplicar un ser, que en su tiempo, fue perfecto.

Desperdicié cada momento,
que necio al admitirlo con tardanza,
pues pensé que siempre te tendría...
desestimé tu compañía
pues intuí que siempre acudirías.
A pesar del mal tiempo
y los malos momentos
siempre estuviste para mí
y yo nunca para ti.
Ahora que soy infeliz
me doy cuenta que los problemas afectan,
pero no deberían ser importantes,
la vida te somete y es una porquería
no te deja disfrutar lo que tienes,
condicionando las quejas para lo que pierdes.

Yo te perdí y en mi sufrimiento descubrí
que solo te necesitaba a ti.
Ahora paso encerrado, no quiero salir a buscar,
tengo un espacio entre la cortina
y la ventana que da un poco de claridad.
A veces pongo mis ojos en ese lugar,
veo toda la gente pasar.
Algunos con su afán, otros con tranquilidad,
personas muy distintas a quienes suelo imaginar
en sus vidas como protagonistas
de una gran función.
Me pregunto si ellos también perdieron a alguien
y en su desolación encontraron la solución
a esa confusión provocada por la pérdida
del camino y la compañía que guiaba
y conocía el destino.

Yo me he quedado varado, sin mapa,
sin camino, ni destino.
Sin alguien que con sus palabras
sea un acólito alentado a la aventura, a la vida.
Me he quedado lamentando una perdida,
incapacitado para continuar el camino.
Siento reposar aislado, no conozco a nadie
que desee subirse a mi lado,
no quiero permitir que alguien
ose en querer ocupar tu lugar,
creo estar pagando las quejas dichas
en su momento, pues obtuve de ti
mucho más de lo que merezco.

Lo poco que recuerdoحيث تعيش القصص. اكتشف الآن