Capitulum Cinq

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—Agradece que te levante a las cinco de la mañana, porque por mi te hubiese levantado a las tres, hora en la que HoSeok ya está despierto junto a JungKook. —menciono sin ánimos.— En la puerta de enfrente está el baño, date una ducha que hueles a perro mojado.

—Oye. —hablo ofendido—. No tenías que decir que huelo a perro mojado.

El rubio rodó los ojos—. Es un decir, pero que importa, además es la verdad, hueles mal, pareciera que no conoces el jabón. —JiMin le miro muy mal, incluso gruño en advertencia, Suga le miraba de reojo con bastante diversión, le encantaba provocarlo—. Anda ve a bañarte ahí encontrarás toallas y todo lo necesario.

—Si, si lo que digas idiota. —dijo el peliplateado bruscamente, Suga frunció el ceño a la vez que le hacía una seña al menor para que se acercara, cosa que claro tomo por sorpresa a JiMin—. ¿Qué sucede? —. pregunto confundido.

—¿Cuál es tu edad, cachorro?. —su voz fue severa, casi demandante.

—¡No soy un cachorro!. —se quejo con las mejillas coloradas.

—Responde a mi pregunta. —JiMin resopló de manera inmediata cuando dijo:

—Veinticuatro años, no soy un cachorro. Soy un Alfa adulto. —se señalo así mismo, su lobo aulló afirmativo junto a él.

Suga se cruzó de brazos, su mirada dejo de verse sarcástica de echo su semblante era serio, intimidante, alzó su dedo índice delante del rostro del peliplateado, mismo dedo que toco la nariz de botón del menor, JiMin miro curioso ese acto, pero Suga solo acarició levemente la nariz del menor hasta que dijo:— Yo tengo veintiséis años, así que tenme más respeto, mocoso. —fue una orden que hizo a  JiMin dar un paso atrás al reconocer que Suga había usado su voz de mando, el menor asintió rápidamente entendiendo que debía ser más respetuoso con el mayor, a los Alfas no les gustaba las faltas de respeto y menos que pasaran por sobre de ellos.— Dime Hyung, ¿Entendido, niño?.

El cuerpo de JiMin tembló, su corazón se aceleró al reconocer que tal vez Suga no era tan amigable como parecía, de cierta forma parecía emanar el mismo aura peligroso y misterioso que tenía su Padre el Rey.  Eso no hizo más que provocar un terror en JiMin que no había experimentado en bastantes años.

—Sí... Alfa —.bajo la cabeza, sintiéndose apenado por haber sido tan irrespetuoso, el pudo notarlo desde el primer momento en el conoció a Suga y entro al orfanato. Suga era el Alfa de ese lugar, aún cuando solo se tratara de un orfanato el era a quien todos obedecían, era el líder y JiMin solo un invitado o como dirían un visitante que debía de mostrar respeto. Pero le era difícil, toda su vida fue a él, a quien le mostraron respeto y sumisión y era ahora al revés, el debía obedecer y respetar.

Pero no parecía molestarle del todo, le daba nervios, si, pero no miedo, era tan confuso que no sabía que significaba, tampoco a su lobo parecía molestarle quien meneo la cola feliz por decirle Alfa al rubio, ¿Qué le ocurría a su lobo?. ¡¿Qué le ocurría a JiMin?!.

Desde que conocieron a Suga, siempre actuaba de manera rara su espíritu y lo hacía actuar de manera rara a él.

—Que bueno que hayas entendido, te deje pasar tus faltas de respeto la otra vez porque aún tenía una cuenta pendiente contigo, pero ahora que vives aquí, debés ser respetuoso niño.

—L-Lo sé y lo lamentó... Hyung. —seguía con la mirada al suelo, esperando la orden del mayor. Suspiro lo más que pudo, no sabía qué hacer, le era difícil entender lo que estaba sucediendo.

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⏰ Laatst bijgewerkt: Mar 23, 2023 ⏰

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