Capítulo 1: Reunión (no) Planeada

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Habían transcurrido 3 días desde la invasión a Nueva York, Thor se había llevado a Loki a Asgard donde se decidiría el castigo apropiado para este, los vengadores habían aceptado pasar unos días en su torre más que nada porque Fury había solicitado que se quedaran antes de dejarlos partir.

En ese momento estaba en una junta con algunos de sus accionistas de IS, aunque con honestidad no estaba prestando ni la más mínima atención, en realidad miraba con interés su celular.

—¿Sucede algo señor Stark?

Tony despego su mirada del celular y noto el aparente interés de todos los presentes en su nula atención a lo que era la junta.

—No es nada, pueden continuar.

Fingió una de sus mejores sonrisas y vio como la junta se reanudaba por su parte se sentía decepcionado de saber que ni su padre o sus hermanos habían hecho el intento de llamarle, aunque claramente sabía que no les iba a contestar, en primera porque no deseaba preocuparlos y en segunda porque jamás podría mentirles no a ellos.

Era tan irónico los sentimientos contradictorios que experimentaba. Estaba dolido porque ninguno de los tres le había marcado a su vez estaba aliviado de saber que no le atosigaban con llamadas. Al final sabía que lo que pesaba más en su corazón era que ni siquiera su "tata" se había comunicado aunque a este si lo entendía por ciertas cuestiones estaba en Transilvania y quizás no este enterado de lo sucedido.

Al final todo su pensamiento giraba a que su familia no estaba interesado en lo que sucedió con él.


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La llegada a New York pasó sin incidentes, bueno sin contar a las mujeres y hombres que le coquetearon en el aeropuerto antes de subirse al avión.

—Johnny ya quita esa cara de molestia.

Lucifer caminaba rumbo a la salida donde sabía que una camioneta (cortesía de su hijo menor) les estaría esperando.

—No estoy molesto. —Respondió con total inexpresividad, aunque sabía que eso no funcionaba con su papá.

—¿Seguro? Entonces está bien. Pero espero que tu complejo de posesividad este en lo mínimo.

—Sabes que eso fue culpa de padre, además no es como si a ustedes no les gustara que padre y yo los mimáramos.

—No tengo la más mínima idea de lo que hablas.

—Por supuesto. —John solo sonrió ante las palabras de su papá.

Al llegar a la salida vieron a cierta persona conocida recargada en una camioneta, mostrándoles una enorme sonrisa.

—Tardaron.


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Todos sabían que Tony debido a su estatus tendría cientos de conocidos como empresarios o servidores públicos.

Pero en ese momento los vengadores miraban con suma atención a los 3 desconocidos que estaban sentados en la sala de la torre. Todos conversando con tranquilidad mientras tomaban una taza de lo que suponían era café.

Ni siquiera se explicaban como es que esos individuos pudieron haber ingresado, después de todo Anthony les había dicho que por el momento le había dado la orden a JARVIS de no permitir el acceso a ningún civil.

—¿Quiénes son ustedes?

Clint fue el primero en vocalizar su duda, los desconocidos detuvieron su plática y se dedicaron a observarles con suma atención.

—Te dije que Tones algún día empezaría a adoptar a mascotas sin hogar —Fue lo que expresó un hombre con una enorme sonrisa y singular acento británico.

—Bueno no podemos culparlo, tú lo hiciste con nosotros hace años. — Fue lo que un hombre con chaqueta de cuero respondió, aunque Natasha logró reconocer a este desconocido como John Wick, el asesino más peligroso que jamás se hubiera conocido.

—Decirnos mascotas está fuera de lugar hermano. —Expresó el último desconocido.

Los vengadores seguían sin comprender nada de lo que sucedía, de pronto apareció Tony quien había regresado de una junta, el castaño mantenía su atención en su celular esperando que alguno de sus familiares le llamara pero hasta esos momentos nada.

De pronto escucho algunos murmullos y dirigió su mirada hacia donde estaba el ruido, se sorprendió de ver a los demás vengadores en la sala y que estos estuvieran sin siquiera moverse. Pero su interrogante fue aclarada al ver a sus invitados inesperados.

—¿Papá? ¿Christian? ¿John? ¿Qué están haciendo aquí? —No pudo evitar sonar emocionado, incluso ignorando por un momento en la situación en la que se encontraban.

—Qué falta de modales, si Maze nos hubiera acompañado estaría tan decepcionada de ti. —espeto Lucifer al ver como su hijo no dejaba de mirarlos entre sorprendido y en shock.

—¿Que está pasando Tony? ¿Quiénes son ellos?

Las palabras de Steve lo sacaron de su shock y dirigió su mirada a sus compañeros de equipo y luego a su familia. Su papá mantenía una sonrisa llena de diversión en su rostro, John estaba tranquilo pero su postura denotaba que estaba listo para atacar en cualquier momento, por su parte Christian solo tomaba té ignorando todo a su alrededor.

El genio solo pudo suspirar, mientras pensaba la manera de explicarles que desde que tenía 12 años fue adoptado por el mismísimo Lucifer, como explicarle que ese ángel que consideran malo, lo salvo a él y a sus dos hermanos adoptivos.

Era evidente que sería una larga tarde, al menos estaba feliz de ver a su familia.

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