Capítulo treinta y nueve.

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-Espera-le sujeté del brazo antes de que bajara.

Me miró, intrigado.

-¿Qué vamos a decirle?-pregunté.

-¿A quién?-inquirió, confundido.

-A Sharon-dije, obvia.

-¿Por qué?-su ceño levemente fruncido me decía que no estaba fingiendo confusión.

-Por la hora a la que llegamos, por que estamos juntos, querrá explicaciones-intenté explicarle, desesperada, la culpa me estaba comiendo por dentro.

Shawn rió por lo bajo.

-Pues le diremos la verdad, ¿no?-dijo- Que salimos a la feria y que pasé a saludar a Gaspar.

-Pero…

-No hicimos nada malo, ______-me interrumpió, pero aun en la oscuridad de la noche pude ver el brillo ladino que sus ojos desprendían con persuasión. Y el tono de voz cínico que salía de sus labios carnosos.

Tuve que hacer un esfuerzo sobrenatural por no aproximarme a ellos, para acallar los ridículos latidos de mi corazón que podrían dejarme en evidencia. Tuve que obligarme a retener a la cordura para no contradecir a lo que él acababa de decir.

La oscuridad sólo me hacía desearlo más. Me hacía querer acercarme de una manera casi incontrolable. Pero la voz en mi cabeza mascullando el nombre de mi mejor amiga impidió todo tipo de incoherencia que mi mente pudo haber producido.

-_______-me llamó, haciendo que regresará al momento-. ¿Estás bien?-preguntó.

-Sí, yo… sí-tartamudeé.

-Bien-se bajó del auto y quise quitarle la oportunidad de ser caballeroso, porque todo aquello no ayudaba mucho en el asunto del enamoramiento absurdo en el que ahora estaba metida. Pero la puerta no abrió. Él rápidamente se encontró de mi lado y él mismo la abrió para ayudarme a bajar.

Subimos por las escaleras hasta el tercer piso y llegamos por fin al departamento. Shawn parecía relajado mas sin embargo yo seguía sintiéndome culpable.

Abrí la puerta con el corazón palpitante de desazón y visualicé por un momento cómo debía ser el mundo.

Jay se encontraba con Sharon y ambos miraron al instante hacía donde Shawn y yo, la expresión de cada uno era distinta, la de Sharon era un rostro inquieto, preocupado, sin duda; la de Jay estaba tranquila, serena. Me pregunté cuál sería la mía.

-¡Oh allí están!-exclamó Sharon y corrió a abrazarnos a Shawn y a mí.

Me quedé quieta, confundida.

-Bestia, ¿por qué no te llevaste tu celular?-me dijo- Shawn, ¿por qué no respondías el tuyo?-inquirió al interpelado.

Más que una amiga que se sintiera engañada o especulando alguna artimaña parecía madre preocupada como cuando sus hijos no llegan a casa y pasa de la media noche. Me sentí más culpable que antes.

-Lo siento, amor-dijo Shawn, y en la última palabra el corazón se me encogió adolorido-. Llevé a ______ a la feria, ¿recuerdas que me contaste que jamás había ido a una? Bueno, quise hacer algo realmente lindo por ella-me miró y me sonrió, pero con una de esas sonrisas que te dan los amigos: expansiva y sin rastro alguno que me hiciera confundir-. Y además, pasé a saludar a Gaspar, recuerda que hoy es su cumpleaños. Por cierto, te mandó saludos-se acercó a Sharon y besó su frente.

Capté la escena desde muy cerca y el corazón aun encogido en alguna parte de mi pecho, se sacudió violenta y dolorosamente. Sharon se tranquilizó.

-Pero debiste al menos avisarme, amor-musitó y se alzó en puntillas para besar a Shawn en los labios.

Ya no pude mirar más, bajé la cabeza y me retiré con rapidez hasta llegar a donde Jay estaba quien se encontraba también con la mirada gacha. Esa escena le lastimaba tanto como a mí.

-Pero, ¿te divertiste, ______?-me preguntó Sharon, con una sonrisa sincera cuando se hubo desocupado de los labios de su novio.

-Seguro, aunque casi muero arriba de una montaña rusa-dije, aparentando que todo estaba bien.

Sharon estalló en estruendosas risotadas y luego miró a Shawn.

-¿La hiciste subir a una montaña rusa? ¿Cómo lo lograste? Yo lo he intentado tantas veces y siempre me dice no-dijo, sorprendida y divertida.

Shawn se encogió de hombros.

-Supongo que tengo don de convencimiento-bromeó.

No estuve en desacuerdo con Shawn, aunque su definición de “don de convencimiento”

EL MANUAL DE LO PROHIBIDO.  »Shawn Mendes Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang